Por Edu Casado
LeBron James, como buena estrella de la NBA, tiene sus cositas. No cabe duda de que es (con permiso de Mr. Stephen Curry) el mejor jugador del momento, pero esto también tiene su precio, sobre todo cuando se enfada.
La pasada madrugada, en el partido que enfrentó a su equipo, los Cleveland Cavaliers, y a los Atlanta Hawks, el de Akron protagonizó una de las imágenes más curiosas de lo que llevamos de temporada.
Pese a que iban ganando con una cómoda renta, tras un ataque que acabó con un mal pase, LeBron decidió, simplemente, salir de la cancha y sentarse en el banquillo, sin permiso de los árbitros.
Atlanta siguió jugando contra cuatro, hasta que los árbitros se dieron cuenta y detuvieron el partido (Atlanta acaba de anotar de tres, encima). Eso sí, una vez se le pasó el enfado, LeBron dejó alguna maravilla como esta jugada. Genio y figura:
Si de verdad piensas que LeBron James es el jugador del momento por encima de Curry, poco baloncesto has visto de la temporada pasada y de esta amigo. Solo tienes que ver estadísticas. Se te ve el plumero…
22 noviembre 2015 | 10:32 am