Coolture Club Coolture Club

Personas y cosas que molan, mucho

¿Por qué el siglo XXI no está molando?

El otro día leía en una imagen en Instagram, que desde el primer vuelo en avión de un ser humano hasta el primer vuelo espacial tripulado, sólo habían pasado 58 años, los que van de 1903 a 1961. La intención del mensaje era poner de manifiesto la grandeza de nuestra especie y nuestra capacidad para superar retos, supongo. Y lo cierto es que es un mensaje potente. Aún así, a mí me llevó a otro sitio. Me hizo pensar en que cuando yo era pequeño, en mi ingenuidad, quería ser astronauta. Ni futbolista, ni policía. Astronauta. Mis padres me seguían el rollo, me dejaban elucubrar y me decían que tenía que estudiar mucho, pero como se ha demostrado, mis posibilidades de éxito eran remotas.

Coches en Blade Runner

Los coches voladores de Blade Runner

Antes de tener ni 10 años, mi película preferida Blade Runner (aunque no entendía ni la mitad) me contaba que para 2019 habríamos colonizado planetas, tendríamos robots idénticos a nosotros comiéndose nuestros marrones y los coches volarían. Han oído, ¿verdad? Puñeteros coches voladores. Es más, en 2001: odisea del espacio, me dijeron que apenas estrenado el milenio, iríamos a Júpiter con poco más esfuerzo que el de alguien que va de Madrid a Lugo en el autobús de ALSA. Blade Runner se basa en un libro escrito en 1968 y 2001 en una novela corta más antigua, pero fue estrenada en ese mismo año. Un año antes de que Neil Armstrong pisara por primera vez la Luna. Con estos referentes pseudocientíficos crecí yo.

¡En los 80 soñábamos a lo grande! Todo era posible. Un enano de menos 10 años estaba legitimado a pensar que ÉL IBA A VIVIR TODO ESO.

2001 Una Odisea del Espacio

Pues lo de los viajes espaciales resultó que no era tan sencillo.

Según se acercaba el nuevo milenio, todo empezaba a oler a chamusquina de sueño quemado. La no tan maravillosa raza humana en toda su historia solo ha puesto a 12 de sus congéneres en la Luna, el último en 1972. No me hablen de sondas no tripuladas que sueltan sobre Marte coches de Meccano con paracaídas para que hagan fotos. Esto es patético al lado de un tío caminando por nuestro satélite. Si yo estoy frustrado por nuestra parálisis, no puedo ni imaginar lo que pensaría Neil Armstrong antes de morir en 2012. Estoy seguro de que sintió algo parecido al ver décadas con el botón del “futuro” en PAUSE.

Neil Armstrong en la luna

Neil Armstrong dando un paseito (GTRES)

Creo que solo con este argumento basta para demostrar que habíamos sobrevalorado al siglo XXI y que está quedando infinitamente por debajo de las expectativas que tenía alguien nacido en los 70. Si les pido que piensen en el gran avance que hemos vivido los de mi quinta y generaciones sucesivas, seguro que me hablarán de internet, móviles y tablets. ¿Dónde están mis naves espaciales viajando a la velocidad de la luz, mis planetas colonizados y mis robots? Adoro internet, me costaría tener que volver a vivir sin ella, pero no resiste la comparación con los coches voladores.

Los Supersónicos

Y resultó que el futuro no llegó ni al de Los Supersónicos

Tengo un hijo de 5 años al que si le preguntas qué quiere ser de mayor, te contesta “astronauta” sin dudarlo un segundo. Será algo genético. Yo le digo que eso es estupendo y que va a tener que estudiar mucho, pero dentro de mí, el niño de 5 años que fui entra en “modo mosqueo” y me grita que mejor que le recomiende probar suerte con el fútbol.

En el primer post de este su blog, les dije que les hablaría de personas y cosas que molan. Lamento haberme puesto hoy un poco metafísico para decirles que el siglo XXI no está molando como debiera. Nos quedan 8 décadas y pico para arreglarlo.

PD: Más Coolture Club en Facebook, Twitter e Instagram.

 

12 comentarios

  1. Dice ser el cerebro a veces duele

    ¿Por qué la Historia humana no mola?
    Si miramos a la Historia evolutiva humana, donde hay suerte de que ha evolucionado de sus ignorancias y mentiras hechas verdad, sea por interés o por miedo impuestas y mantenidas, podemos certificar, quien quiera, por supuesto, que el presente pocos seres lo viven con la intensidad que merece por parte de cualquier criatura. El ser humano posee un cerebro que lo confunde, lo atrofia, deforma la realidad qu ele circunda y es fácil que se pierda en el camino pensando que el pasado es presente proyectado, cuando no hay ni pasado ni futuro.
    Así pueden verse miedos heredados convertidos aún en positivo ejemplo. Tradiciones anquilosadas por temor a no sé qué o por simple normalismo y mantenimiento. Obsoletos procedimientos hechos luz de presente… LAs depresiones estarán al orden del día, la pérdida de identidades temporales, la relativización de los presentes, el paso del tiempo sin sustancia, el sometimiento a normas estúpidas irracionales, la desconfiguración de las sociedades. No sólo por el proceso de evolución en ciencia se desarrolla el intelecto. Si al intelecto intentamos aplicar conceptos de pasados heredados que son, racionalmente absurdos y sin sentido correcto para el desarrollo correcto humano, entonces se crea el bucle de impotencias y angustias vitales, de desencanto, de desapego al pensamiento por no ver crítica sustancia en él, adormecimiento de las cualidades, desazón… Un lodo sin alimento para las neuronas que piden otras realidades. Se verán entonces reflejos de evolución de tarde en tarde, golpes de impresión, y nuevamente caída al lecho de las más bordes singularidades, no sé, digo yo, tal vez sea otra cosa.
    Y para mayor desastre de retoman tiempos del pasado horroroso en series a las que se les aplica la moralina perfeccoinista de las buenas formas a partir del desarrollo conseguido en el presente.El ser humano va siendo víctima de sus propias torpezas.
    El cuerpo sigue como enemigo del alma, espíritu, mente… las desgracias necesitando e las sanaciones extraterráqueas… lo bueno recuperado de donde nunca fue bueno, sólo sometido a circunstancias de natural ignorancia… EL ser huamno no nació aprendido y la lástima es que tras tantos millones de años, siga creyendo ser año y señor de toda verdad, toda mentira y todo destino en desatino… ¿Es así? SI lo entiendes me lo explicas, resulta que me dio por escribir. Biii biii no soy un robot biii reCAPCHA biii

    24 abril 2015 | 12:07

  2. Dice ser No lloremos todavia

    Bueno pero tenemos a Wismichu, Auronplay, El rubius… Y un Fernando Alonso en el museo de cera de Madrid que lo peta.

    24 abril 2015 | 12:48

  3. Dice ser por supuesto

    No, no mola nada de por si. Pero ademas es decepcionante. Aquellos que soñaban se han subido en un deportivo, nos han dejado en la cuneta y han cambiado sueños por chalets en la playa y áticos en la ciudad.

    24 abril 2015 | 12:55

  4. Dice ser Sidra

    Entérate ya, las películas son películas y la realidad es otra cosa diferente.

    24 abril 2015 | 14:17

  5. Dice ser Asdf

    De acuerdo contigo pero creo hay que ser mas objetivo con este tema.

    Las expectativas no se han cumplido…pero qué expectativas?, creadas por quien?, desde hace cuanto?. Piensa en la historia de la humanidad y verás que cien años no son nada. Se llegará a eso y a más pero a lo mejor de una forma mas «lenta» con respecto a lo que los directores de películas imaginaban. Si hace 20 años nos hubiesen hablado de telefonía movil, fibra óptica o cura para muchos tipos de cancer no lo hubiéramos creido y ahora mira.

    Gracias a Dios siempre habrá niños que sueñen con ser astronautas, medicos o cientificos y se esfuercen en conseguirlo.

    24 abril 2015 | 14:23

  6. Dice ser Poncio

    Siempre quejándote nano, no te das cuenta de lo bonito que es este siglo maravilloso, ser positivo esta dentro de ti, de tu cuerpo enfermizo y quejumbroso, en tu espíritu extrasensorial luminoso, debes trabajar con el alma espiritual para poder cambiar esa negatividad corporal que te está afectando negativamente en tu vida, si tu espiritu desprende un karma negativo lo transmites a tus amigos y a tu pareja y la gente que te rodea también lo nota, te recomiendo terapia grupal y una infusión para una buena digestión y evacuación.

    24 abril 2015 | 15:27

  7. Dice ser Juan

    Comparto esa desazón, y ese sabor amargo y creo que simplemente no mola pq no es rentable que mole.
    Los grandes avances de la humanidad no se hicieron para ser rentables, se hicieron y luego algunos fueron rentables.
    Lo mismito que regreso al futuro.

    24 abril 2015 | 17:10

  8. Dice ser Contestataria

    Pues sí. Dónde quedó ese futuro brillante que nos prometía el nuevo siglo, cuando todo sería fácil. Todo ha continuado como estaba en el siglo XX o peor: no hemos llegado muy lejos, sigue habiendo guerras, enfermedades, pobreza, etc.

    24 abril 2015 | 18:15

  9. Dice ser Sicólogo Astral

    Y no hace falta irse al espacio para sentir la decepción del siglo 21: incluso se ha perdido el buen gusto haciendo cultura como la música o el cine.

    24 abril 2015 | 22:34

  10. Dice ser Sicólogo Astral

    Incluso en el siglo 21 ha vuelto la barbarie de decapitar y quemar a la gente viva como en el siglo 18.

    24 abril 2015 | 22:35

  11. Dice ser tutosaus

    Todo es relativo: peor empezaron todos los demás siglos, con guerras e invasiones en nuestros territorios. Ahora al menos nos quedan más lejos y de menor «intensidad».

    25 abril 2015 | 10:22

  12. Dice ser bettedavis

    Pues a mi me parece que eso de soñar con ser astronauta mola, claro que mola.

    Tres razonas por las que mola:
    1- Tiene que ver con el cielo, que está arriba y te hace sentir mejor, más grande, llegar más alto…
    2- Porque frente a otras, es una profesión altruista, «soy astronauta para descubrir cosas que ayudarán a la humanidad a conocer más cosas»
    3- Por aquello de que no te miras al ombligo, sino que piensas que no eres el centro del universo, nunca mejor dicho; puede haber otros mundos, más formas de vivir y ¿sí los/la hay mejores?

    Si todavía no somos todos astronautas o vamos en coches eléctricos, no pasa nada, ya llegaremos, pero mientras tanto la foto del espacio de ese disfraz absolutamente «molonudo» para un chaval de 5 años, puede alimentar muchos sueños.

    26 abril 2015 | 23:56

Los comentarios están cerrados.