La evolución de Pedro Sánchez en campaña, de la sonrisa perfecta al nerviosismo incontrolado

La campaña electoral es una situación emocionalmente intensa capaz de modificar a placer el comportamiento de los líderes políticos más estables y preparados. Las situaciones estresantes son capaces de alterar hasta las conductas o incluso rasgos de personalidad más arraigados. Vamos a ver por tanto cómo han evolucionado los cuatro principales aspirantes al gobierno, así como sus fortalezas y debilidades en base a su expresión no verbal.

El candidato a la presidencia del Gobierno por el PSOE, Pedro Sánchez, durante su intervención en el mitin que se ha celebrado esta noche en el Auditorio Príncipe de Asturias de Torremolinos, en Málaga. (EFE/Jorge Zapata)

Pedro Sánchez durante su intervención en el mitin que se celebró este jueves en Málaga. (EFE/Jorge Zapata)

Analizábamos hace unos días la capacidad del líder socialista para ejecutar recurridamente buenas sonrisas, su tendencia inicial era la de mostrar siempre un afecto positivo en todas sus intervenciones. Él es atractivo y lo sabe, ha utilizado esta herramienta para destacar sobre sus adversarios, siempre impoluto en el vestir, muecas seductoras en su rostro, gestos elegantes y acompasados con su comunicación… pero claro, todo tiene un contexto vital para analizar comportamiento no verbal y detectar posibles cambios.

Hemos visto cómo Pedro Sánchez muestra ademanes de seguridad y altivez, se considera intelectualmente superior a sus oponentes (justificado por sus constantes emociones de desprecio) pero ¿qué ocurría siempre en las encuestas de opinión sobre sus intervenciones? Siempre o casi siempre ha salido mal parado y este hecho puede ser el desencadenante para que empiece ya a torcer el gesto y hastiarse de considerarse superior y que la gente no lo vea así. Por tanto, se impacienta y se torna más agresivo en sus intervenciones, se pone nervioso y esto le hace descuidar las formas que al principio tan positivamente manejaba, su expresión no verbal es agresiva, va a por todas “de perdidos al río”.

Resumiendo, su fuerte es el atractivo, expresiones faciales positivas que le acercan y atraen hacia quiénes las observan, tono de voz grave y estable, y sobre todo, la conexión que establece con la gente de casa, su mirada atraviesa la pantalla, habla con convicción sin necesidad de consultar apuntes, evoca una seguridad pasmosa.

Su debilidad es la falta de naturalidad, su expresión corporal está encorsetada y ensayada y la espontaneidad es algo muy valorado por los ciudadanos. Podemos comprobar cómo a veces cambia hasta la voz según el entorno en el que se encuentre, esto provoca falta de confianza y percibir que tiene dos caras no creo que le beneficie entre sus votantes.

Como destaco siempre, todos ellos tienen luces y sombras en la gestión de su comunicación no verbal y el proceso de la campaña electoral además ha potenciado o matizado ciertos elementos que formaban parte de su estilo comunicativo. La suerte está echada, en el próximo post ya tendremos la imagen de un ganador (quizás más de uno) y la imagen de la derrota.

Pedro Sánchez este miércoles en un mitin del PSOE en Elche. (EFE/Morell)

Pedro Sánchez este miércoles en un mitin del PSOE en Elche. (EFE/Morell)

8 comentarios

  1. Dice ser vaguete

    Siento haberme equivocado con este señor, le tenia por menos de lo que es, me equivoque, es un gran candidato, me recuerda a algun presidente de eeuu de antaño, tiene clase, sabe hablar bien y decir las cosas claras.

    Entre las mujeres seguo que es un claro vencedor por su aspecto bien cuidado.

    El pesoe parece que tiende a renovarse, habra que ver, le deseo suerte.

    18 diciembre 2015 | 1:04 pm

  2. Dice ser TRULI

    pues a mi me parece un vende motos, no me creo nada de lo que dice, y me cansa su sonrisa eterna y sus gestos estudiados.

    18 diciembre 2015 | 7:56 pm

  3. Dice ser jajajaja

    ¿Estás de broma no? JAJAJAJA ¿EL PSOE RENOVARSE? ¿CON ESTE PAPANATAS? JAJAJAJA

    No me hagas reir hombre.

    Este «Elemento» fue miembro del consejo de BANKIA y CAJA MADRID EN EPOCA DE BLESA, y da asco oirlo hablar, como si fuera «El amigo de los trabajadores» «El socialista de toda la vida»…. como si el PSOE no hubiera gobernado en 20 años y resulta que gobernó AYER COMO quien dice: Y DEJO ESPAÑA LLENA DE DEUDAS, DE MIERDA Y DE BASURA, gracias al miserable de ZETAPEDO EL TRAIDOR.

    Hay que ser muy retrasado, mentalmente hablando, para pensar que con este ELEMENTO, el PSOE se está renovando.

    Aún me estoy retorciendo en el suelo de la risa.

    xD EN FIN

    18 diciembre 2015 | 9:00 pm

  4. Dice ser jajajaja

    Este que habla con tanta FIEREZA de los derechos de los trabajadores, estaba en el consejo de administración de BANKIA CAJA MADRID en ÉPOCA DE BLESA, cuando se ESTAFARON A esos que decide «DEFENDER TAN FIERAMENTE CON SUS PALABRAS»…. les estafaron los ahorros de toda una vida.

    La casta de la PSOE siempre chupando dinero del currante… Typical SPANISH xD

    18 diciembre 2015 | 9:03 pm

  5. Dice ser filo

    Mas talante que talento, aunque esta perdiendo las dos cosas! Un presidente con dos caras, no es lo que necesita este Pais!

    18 diciembre 2015 | 10:56 pm

  6. Dice ser Valledelkas

    Vaguete este tio este tío está muy bueno, vamos que hasta para echar un polvo pero no quiere decir que por su hermosura sea el candidato ideál o el más votado por las féminas ( en una encuesta probablemente sí). Disculpa pero tenemos cerebro y memoria. Saludos

    19 diciembre 2015 | 8:16 am

  7. Dice ser Rojazo

    Pues tiene mi voto,le ha dicho a Rajoy lo que yo le hubiera dicho,y no considero que indecente sea un insulto,por lo menos comparado con las perlas de Rajoy,Rivera o Iglesias.Veo claridad en su mensaje y sus idas,puede cumplir porque no a prometido fantasías,por eso Pedro President

    19 diciembre 2015 | 5:17 pm

  8. Dice ser Porquinho

    A mí me da hasta pena, parece rollo psicópata tipo Dexter, no parece tener realmente emociones, está indiferente O incómodo como mucho, y todo lo que hace es como una interpretación, pero no por engañar, creo, sino por transmitir lo que él cree que los demás esperarían de alguien en su lugar. Es extraño y muy forzado, en el final de campaña sobreactuado hasta el extremo.

    19 diciembre 2015 | 7:45 pm

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