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Se busca nombre para una agencia de noticias libres

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Acaba de nacer una agencia de noticias latinoamericana. Todavía no tiene nombre. No va a celebrar una fiesta de presentación pomposa. Tampoco va a invertir en campañas de marketing. Su apuesta es la colaboración, el trabajo en red. ¿Qué mejor marketing que abrir el proceso desde su nacimiento? La frase que se puede leer en su site es muy significativa:

“¿Si tuvieras que escoger un nombre potente y poético, preciso y aplicable para la Agencia, que funcione en español y portugués, cuál sería y por qué? ¡Deja tu propuesta al final de esta página! — ¡Gracias!”.

Cualquier persona puede enviar su propuesta de nombre de agencia en el site, en el hashtag de Twitter #ComunicaCulturas y en otras redes sociales. La agencia de información y comunicación, gestionada por la red de colectivos culturales de Latinoamérica del proyecto Juntos, publicará su contenido en español y portugués. “Nos pensamos desde el formato de la red. Concebimos un nuevo periodismo en red basado en la colaboración, la instantaneidad, la comunicación multimedia, multidireccional e interactiva”, afirman los colectivos que colaboran en el proceso de #ComunicaCultura.

#ComunicaCulturas apostará por trabajar un periodismo desapegado del imaginario de la “mesa de redacción”, un periodismo digital que no implica limitarse a la información que es accesible a través de la red. #ComunicaCultura busca construir puentes para el diálogo entre las más diversas experiencias de acción cultural en el continente.

#ComunicaCulturas tendrá licencia libre y dará voz a procesos de cultura viva, cultura libre, cultura abierta y cultura de red. Es un proyecto en el que participan Cultura Senda (Argentina-Venezuela), mARTdadero (Bolivia), CulturaPeru.org (Perú) o Fora do Eixo (Brasil), entre otros.

Deja tu sugerencia en el site: AgenciaCulturas Hashtag Twitter: #ComunicaCulturas

Innovación #copyleft y colectiva en los medios de España

Innovar en tiempos de crisis. Cambiar de piel. Reciclaje a ritmo forzado. Los medios de comunicación clásicos están en la mayor crisis de su historia. Sin embargo, siguen apostando, con muy pocas excepciones, por la misma fórmula. Intentan aplicar la lógica del papel al mundo digital, sin adaptar o buscar otro camino. Peor que eso: su única solución a la crisis es el despido masivo de trabajadores. El caso de El País, con sus 128 despidos, es el mayor ejemplo de lo que no se tiene que hacer para salvar a un medio que agoniza. La tecnología que salvará el periodismo se llama contenido, escribí hace unos meses en este blog. Cuando publiqué el Manifiesto PosPeriodístico, también en este blog, quería remover un poco los cimientos de la vieja guardia que asiste impávida al desmoronamiento de la prensa, especialmente del papel.

En el caso de los medios españoles la crisis es especialmente dolorosa. Doble crisis: de papel y económica. Sin embargo, en medio de la tormenta está sucediendo una espectacular revolución en el panorama informativo que no estoy viendo en otros lugares del planeta. El hundimiento de Público – que se quedó en un escuálido site con poca plantilla – dio pie a un buen puñado de proyectos. El #copyleft – licencia que permite la copia del contenido – se abre paso en bastantes cabeceras, algo casi inexistente en el resto del mundo. 20 Minutos, que usa Creative Commons y liberó la copia de su contenido hace ya una década, abrió el camino. Ahora, el periodismo español empieza a abandonar el copyright y abrirse a otras fórmulas.

Por otro lado, la situación española is different. En pocos lugares del planeta se cumple con mayor claridad aquello de la ‘autocomunicación de masas’ de la que habla el pensador Manuel Castells o el Nosotros, los medios, de Dan Gillmor. La sociedad está informando (y muy bien) desde las redes, blogs, plataformas, cooperativas, colectivos. La información unidirecional de los medios clásicos ha dado paso a una conversación: a la era de la comunicación. Por eso, he incluído en este inventario nuevas cabeceras pero también proyectos ciudadanos. El futuro del periodismo, de la comunicación, ya está aquí.

Eldiario.es. Sin lugar a dudas, el proyecto que más está innovando. Lanzado por Ignacio Escolar, primer director de Público, El Diario ya es una cabecera respetada. ¿Innovaciones? Muchas. La primera: utiliza la licencia Creative Commons más abierta de todas.Cualquier persona puede incluso vender su contenido y ganar dinero con ello. Han entendido que la monetización, en la era red, viene de otros rincones. Publicidad clásica, sí, pero también suscripciones, reputación, encuentros alrededor de la marca, acuerdos con ONGs… La redacción de El Diario es pequeña. Tampoco quieren redacciones en todas las regiones. Prefieren alianzas temáticas con otras entidades (en Ciencia y Tecnología con Esmateria, en cultura con el Hotel Kafka que realiza el Diario Kafka…) o regionales (en Galicia con praza.com, en Catalunya con diferentes colectivos, en Valencia con SOM…). Además, han entendido el concepto de commons marketing de Olmo Gálvez. Dividen riesgos y beneficios con sus diferentes aliados regionales y temáticos. Los subscriptores pueden dialogar con la redacción presencialmente y tienen ciertos privilegios (leer antes algunas noticias, por ejemplo). La zona de blogs es un bello paisaje donde encontrar algunas de las firmas más interesantes de España, además de fantásticos blogs colectivos, como Zona Crítica (donde yo escribo de vez en cuando), Interferencias, Colaboratorio, El cuaderno del MediaLab o Desalambre. También imprimirán una revista con contenido en profundidad y análisis.

EsMateria. Lanzado por Patricia Fernández de Lis, ex redactora jefe de Ciencias en Público, Esmateria es un medio especializado en ciencia y tecnología, con un saludable guiño a la cultura libre. Usa Creative Commons y su modelo también es innovador. Vale la pena leer su Quiénes somos.

MasPúblico / LaMarea.com. Una buena parte de los trabajadores que salieron del diario Público fundaron una cooperativa. MásPúblico ha informado desde un blog colectivo con rigor desde el primer día. El 21 de diciembre lanzan LaMarea.com, con espíritu cooperativo. Muy bonita la justificación que ellos mismos hacen del nombre del proyecto: «La palabra “marea” se usa a menudo como sinónimo de “marcha”, pero tiene otra esencia.Una marcha puede sonar algo marcial. Una marea es muy distinta, sugiere un movimiento progresivo y expansivo. Las mareas no tienen nada que ver con los tsunamis destructivos. Avisan de su llegada, pero nada las detiene. Crecen lenta, e incluso serenamente, pero con una fuerza imparable». Usará licencia Creative Commons.

Presentacion NUMEROS ROJOS from maite garrido on Vimeo.

Revista NúmerosRojos. Una revista financiada con crowd funding que ya ha lanzado 4 números. Excelente en contenido y diseño. Se definen como una revista de izquierdas. El proyecto que aporta reposo, análisis y contenido de calidad en un mundo gobernado por el exceso de información de última hora. Tuve el placer de colaborar en el primer número de la revista con el texto Un doble click para una nueva izquierda. La licencia es Creative Commons.

InfoLibre. El periodista Jesús Maraña, último director de Público antes de dejar de ser un medio impreso, acaba de anunciar el lanzamiento de InfoLibre para los primeros meses de 2013. Será un diario digital, InfoLibre, y una revista impresa mensual, TintaLibre. Su financiación será totalmente transparente y buscará una fórmula intermedia entre subscripciones y publicidad. Y prometen ser totalmente independientes. Vale la pena leer su presentación. Usará licencia Creative Commons.

Revista Mongolia. El nacimiento de esta revista satírica, que mezcla humor con periodismo de investigación, demuestra que el papel no está muerto. Todo lo contrario. Mezclando subscripciones con venta en quioscos han alcanzado la espectacular cifra de 40.000 ejemplares vendidos de cada número. Hasta The New York Times ha hablado de Mongolia.

Fix media. Con el lema ‘Arregla las noticias’, este site lanzado por Pau Llop, es una de las grandes novedades en el ámbito comunicacional de los últimos tiempos. Cualquier usuario puede mejorar noticias publicadas en medios. FixMedia abre la puerta a la inteligencia colectiva y al periodismo colaborativo. Disponen, incluso, de un plug in para colocar en cualquier web el icono de Fix Media. Fraguo su nacimiento gracias a la plataforma Goteo.orgcrowd funding for the commons.

Fotomovimiento. El Fotomovimiento fue puesto en marcha por un grupo de personas interesadas en la fotografía que se juntaron en la Plaza de Catalunya durante la acampada del 15M, en mayo de 2011. Su cobertura colaborativa y colectiva de la realidad es, simplemente, brillante. Y necesaria. Las fotografías que los medios nos se atreven a publicar las encontrarás en Fotomovimiento.org. Cuelgan su trabajo en galerías de Flickr con licencia Creative Commons. La imagen pertenece a la cobertura de la huelga general, donde la represión policial en Barcelona fue muy dura y apenas apareció en algunos medios.

Solidaritat i Comunicació. La cooperativa catalana de periodistas audiovisuales Solidaritat i comunicació, que nació para  “fomentar la cooperación y la solidaridad”está haciendo una gran cobertura de la crisis. Son los autores del vídeo que probó que los Mossos d’Esquadra son los responsables de que Ester Quintana perdiese un ojo a causa del impacto de una bola de goma y dejó en ridículo al conseller Felipe Puig. Vale la pena ver su canal propio de You Tube.

Yorokobu. Con el lema Take a walk on the slow side, Yorokobu nació como un blog de la mano de Brand&Roses. Creatividad, cultura, diseño, publicidad, mundo de código abierto. Contenido cocinado con cariño, frescura, apertura. Y rápidamente dio el salto al papel, un camino casi inédito en el mundo de la prensa. Sus contenidos, que tienen licencia Creative Commons, son una buena puerta de entrada al nuevo mundo de las redes, la innovación abierta y la cultura libre. También tengo el placer de colaborar con ellos.

People Witness. Este colectivo, del que ya he hablado en Código Abierto, se ha convertido en la mayor red de streamers del Estado español. Armados de teléfonos móviles con acceso a Internet, están poniendo en entredicho las versiones oficiales de políticos y policías. Sus coberturas audiovisuales en directo de manifiestaciones están siendo magistrales.

Agora Sol Radio. La radio que nació durante la Acampada Sol continúa viva. Y más que nunca. Emite online para todo el mundo. Su parrilla de programas no para de crecer.

TomaLatele.tv. Otra iniciativa del movimiento 15M digna de elogio. Coberturas de actualidad, programas, cortos. Más que recomendable. Un medio colectivo necesario.

Periódico15M. «Descarga este periódico, llévalo a la Asamblea de tu barrio, repártelo en tu trabajo o lugar de estudios, buzonea a tus vecinos… ¡¡IMPRIME-DISTRIBUYE-PARTICIPA!!». Con esta frase está resumido el espíritu de un periódico con que nació con vocación de papel, para explicar a la población más analógica lo que circula en las redes y no en los medios masivos.

 

Revista Orsai. + 10000 para el gigantesco Hernán Casciari, uno de los grandes defensores de Creative Commons. El escritor argentino, lanzando la revista Orsai, ha abierto un camino editorial simplemente genial. Periodismo de calidad, profundidad, textos narrativos. Y lo mejor de todo: un producto totalmente independiente que sobrevive gracias a los lectores. Su secreto: facilitar que cada lector sea distribuidor y pueda implicarse en el proyecto. Cualquier lector puede vender la revista y lucrarse (un poco) con ello.  El vídeo ‘Cómo acabar con el intermediario’ que antecede estas líneas se puede considerar un clásico del mundo en red. Un blog se convirtió en una revista. Una revista dará paso a una editorial en red. Un blog que ya se transformó en una pizzería – sí, abrieron una pizzería en Buenos Aires gracias a la colaboración de los lectores del blog- conectando personas alrededor de un sueño.

Líbero. Otro proyecto que nació de profesionales que salieron de la cabecera Público. Una peculiar publicación alrededor del fútbol, pero con un claro matiz literario. En sus páginas se puede encontrar cultura, relatos literarios, moda, estilo de vida. Un soplo de aire fresco en el abanico de revistas comerciales hechas por y para el mercado. También usa licencia Creative Commons.

Lainformacion.com. Esta cabecera nació en los primeros empujones de las crisis. Y a pesar de las críticas de que usa más robots que personas, me parece muy interesante. Ha conseguido métricas excelentes y muy buen desempeño en redes sociales. La mirada de La Informacion es propia, diferente y bastante rigurosa. Además, su sección de InfoGráficos es magnífica.

 

Reset from Reset on Vimeo.

The Reset Project. Un medio digital que tiene las cosas muy claras: «Existe una brecha entre la ciudadanía y el periodismo. Pero también un abismo, triste, entre el periodismo y los propios periodistas. Empecemos por ahí». Pretenden, de alguna manera, resetear el periodismo clásico y menear el inmobilismo provocado por la crisis. Su licencia también es copyleft. Y su energía camina, creo, en la dirección correcta. Otra bella frase de su site: «Estamos neutralizados ante una crisis de los medios, que no sólo es económica ni de modelo de negocio, SINO DE SENTIDO, VALENTÍA Y CREATIVIDAD».

Diagonal. Aunque Diagonal nació unos años antes de la crisis (en 2005), su modelo merece atención. Surgió de los colectivos sociales de Madrid. Apostó desde el inicio por licencias libres (Creative Commons). Sobrevive gracias a sus subscriptores. Trabajan en red. Y su modelo de profundidad, análisis, información rigurosa, se está abriendo un hueco en el panorama informativo. Haber tejido una comunidad es uno de sus secretos. Los productos Diagonal – camisetas, sudaderas, libros… – son una fuente complementaria al contenido. Desde el madrileño barrio de Lavapiés ya han lanzado ediciones locales en Andalucía, Aragón, Asturias y Galicia.

La Parada. La mutación de Vudeo.org. Se definen como una «comunidad que selecciona, analiza y reflexiona la actualidad con múltiples herramientas, para producir conjuntamente con un equipo de periodistas y productores un espacio televisivo de emisión online«. Con el grito de ‘enciende tu webcam’, La Parada está realizando periodismo de calidad, compartiendo proceso con la comunidad. Periodismo participativo en estado puro.

Via52. Un semanario digital que nació con un proceso de crowd funding en la plataforma Goteo.org. Está conformado por un grupo de profesionales del periodismo, el fotoperiodismo, la ilustración y la tecnología. Licencia copyleft. Licencia para copiar.

Alternativas económicas. Aunque usan copyright tienen espíritu cooperativo. Son una cooperativa, vaya. Se inspiran, según su site,  «en el modelo periodístico y societario que desde hace 32 años ha desarrollado la publicación francesa Alternatives Economiques« copyright.

#CómeteElPeriodismo: el #15M desnuda a los medios

 

Tras el éxito de la jornada colaborativa #CómeteLaCultura , la Asamblea Popular del Barrio de los Austrias del movimiento 15M de Madrid presenta su última irreverencia: la jornada #Cómete El periodismo, casquería y despiece de medios. El próximo domingo 17 de junio, el Colegio nuestra señora de la Paloma de Madrid (C/ Tabernillas 2, Metro Latina) se convertirá en un ágora abierta en la que se debatirá la situación de los medios de comunicación, sus intereses ocultos o el estado de los medios alternativos.

#Cómeteelperiodismo – aquí corto y pego el documento cocinado en red en un PiratePad – «surgió en una charla informal a los pocos días de haber terminado #Cómetelacultura. Alguien dijo por Twitter «ahora tenemos que hacer algo así pero con el periodismo. Y saltó la chispa. La idea era poder compartir con ciudadanos ciertos aspectos del mundo del periodismo que no son tan obvios para alguien que no trabaja en un medio».

Por eso, la asamblea ha organizado esta jornada, que cuenta con la siguiente programación:

11:30 – 13:00 h

Rafael Reig, escritor y colaborador de El Cultural (suplemento de ABC), dará la charla Ingredientes de los grupos mediáticos, en la que desmenuzará los intereses económicos y políticos de los grupos mediáticos.

13:00 – 14:30. Tendrá lugar la mesa redonda  ¿Cómo se ‘cocinan’ las noticias?, con la participación de  Javier Gallego “Crudo” (Radio 3-RNE), Fernando Olmeda (ex-editor informativos Tele 5), Virginia P. Alonso (subdirectora 20 Minutos) y Juanlu Sánchez (subdirector de eldiario.es y cofundador de Periodismo Humano).

4:30 – 16:00: COMIDA (en el #CómeteLaCultura se cocinó la primera paella Creative Commons, con receta improvisada y transcultural. Por eso, no te pierdas la comida).

16:00 – 17:30 h: En la mesa Nuevas recetas de periodismo participarán iniciativas tan frescas y variadas como AttacTomalaTele (iniciativa audiovisual del 15M), Periodico 15MGlobal Voices y Mongolia.

17:30 – 19:00 Durante el taller Cata de medio se incentivará la formación de grupos de análisis de noticias y la discusión entre los asistentes.

CIERRE:  Monólogo de Fito Vázquez “Periodismo: Almax, corazón y vida”

Acabo este post con otro pedazo del PiratePad cocinado en red en el que se intentaba explicar qué es #CómeteElPeriodismo: «Para entender la falta de independencia de los grandes medios, por ejemplo, es necesario conocer mínimamente el entramado de las empresas y los poderes económicos que los sustentan».

Mi web: bernardogutierrez.es Fundador de la red futuramedia.net En Twitter soy @bernardosampa

Un manifiesto posperiodístico

Para algunos, los periódicos de papel están marcados para morir. El estudio elaborado por Ross Dawson creó una línea del tiempo con la fecha exacta de fallecimiento de los diarios en cada país. En 2017 se extinguirá el último periódico en Estados Unidos. En 2031 no habrá diarios en Japón. En torno a 2040 no quedarán periódicos impresos en África. Para muchos, la comparación es inevitable: si desaparecen los periódicos muere el periodismo. Los agoreros aprovechan cada dato o informe para confirmar la crónica de una muerte anunciada. La prensa escrita es la industria que más decrece en Estados Unidos. Los medios se hunden en España: baja un 20% la facturación por publicidad. Sin papel no hay periodismo, piensan los que fabrican noticias como siempre lo hicieron.

Los augurios mortales contra los medios – o contra el periodismo-  vienen de lejos. El prestigioso pensador Jean Baudrillard, en su clásico Réquiem for the media, de 1972,  arremetía con el sistema de mass media unilateral y vertical. «Debemos entender la comunicación – escribía Baudrillard – como algo más que una simple transmisión-recepción del mensaje». Informar no es comunicar. Pero la mayoría de los medios de comunicación continuaron en la senda de la transmisión-recepción del mensaje en la era de Internet. El medio es el mensaje, como diría Marshall McLuhan. El papel / pantalla es todo. Substituye al mensaje.

En 2005, Bruce Sterling, uno de los escritor más influyentes del cyberpunk, observando la inercia del viejo régimen informativo escribió el Dead Media Manifiesto (manifiesto de los medios muertos), «una guía para los paleontólogos de los medios». Bruce (@bruces en Twitter) vislumbró entonces el suicidio de los medios: «Necesitamos un libro sobre los fallos de los medios, el colapso de los medios, un libro que detalle los horribles errores que debemos conocer para no repetirlos». Su manifiesto, en esencia, no era tan diferente al réquiem mediático de Baudrillard: «El verdadero medio es una transmisión inmediata, dada y recibida, hablada y respondida, móvil en el mismo espacio y tiempo, recíproca y antagonista».

Confieso que este post no existiría sin el texto Por un manifiesto posfotográfico de Joan Fontcuberta, en el que el artista catalán desguaza los cimientos de la vieja fotografía con fascinante naturalidad. Fontcuberta imagina cómo opera la «radical creación posfotográfica» en un mundo en el que «el artista se confunde con el curador, con el coleccionista, el docente, el historiador del arte, el teórico». Ya no se trata de producir obras, afirma, «sino de prescribir sentidos». Prevalece la circulación y gestión de la imagen, apunta, «sobre el contenido de la imagen». Tras varias relecturas del texto de Fontcuberta, tras más de quince años de profesión, cambié la palabra «periodista» en mi perfil en Twitter por «posperiodista». Y eso que tengo muy claro que el periodismo no va a morir. Nos encontramos ante una mutación semántica. La definición clásica de periodismo ya no sirve. Tal vez sobreviva, enriquecida, en una nueva definición de «posperiodismo». Un redefinición que describe otra realidad, otra práctica, otros hábitos. ¿Y cómo opera la radical creación del posperiodismo? Intentaré imaginar una especie de hardware posperiodístico en un decálogo abierto, remezclable y claramente mejorable colectivamente. Los siguientes puntos ya están colgados en un wikidocumento en PiratePad. Cualquiera puede rescribir este manifiesto posperiodístico.

1) La información pasa a ser un proceso compartido. Los productores de información incluyen a los lectores en la elaboración del contenido. Compartir en blogs, plataformas de vídeo o sites los detalles de cómo se ha elaborado un trabajo informativo es tan importante como el resultado final. El contenido llegará a ser un making of en tiempo real.

2) La definición de contenido evoluciona, crece, se amplia.Comentar una noticia, difundirla con un valor añadido (más contenido), remezclarla, es crear contenido. La adhesión (clickar en «Me gusta» en una red social) es otra nueva mutación del contenido. La edición pasa a considerarse una forma de autoría.

3) El posperiodista se confunde con el curator (comisario). Seleccionar el contenido relevante en la infoesfera de la sobreabundancia será una de sus principales tareas. Filtrar contenido será una de las labores del posperiodista.

4) Sobre el marco: tenemos que entender el posperiodismo como una estructura de código abierto en constante desarrollo. Nadie posee el periodismo. Cualquiera puede usarlo. Cualquiera puede mejorarlo. Cualquiera puede hackearlo.

5) La noticia – que no desaparecerá – deja de ser la unidad básica del posperiodismo. El flujo, un constante fluir de hechos, datos y declaraciones, pasa a ser la columna vertebral del posperiodismo. El fragmento pasa a ser la unidad mínima informativa. La información se convierte en un río compartido que incorpora fragmentos distribuidos elaborados por periodistas y lectores. El río convivirá con una estructura informativa descentralizada (archivo en beta) inspirada en la Wikipedia.  Algunos, camino insinuado por la P2P Foundation, preferirán añadir información al wikicuerpo de su marca que al río de flujos.

6) La información deja de ser un producto para ser una comunidad. En ocasiones, las comunidades girarán en torno al contenido generado por los posperiodistas. En otras, ellas mismas elaborarán su propio contenido. Los medios – con contenido propio o ajeno- pasan a ser una valiosa plataforma de interacciones.

7) La inmediatez pasa a ser considerada como un mero plug in o aplicación de algo mayor. Sin un sistema operativo, sin un gestor de contenidos, el plug in o aplicación informática es inservible. La inmediatez no es el epicentro del posperiodismo. La inteligencia colectiva de una ciudadanía armada de smart phones será el mejor aliado (y no enemigo) del posperiodismo para entender la inmediatez. Buena parte de las fuentes clásicas serán devoradas por esa inteligencia colectiva en tiempo real.

8) El posperiodismo prescribe sentidos a hechos ya conocidos. El lector descubrirá cada día menos noticias en las marcas informativas. Entenderá gracias a las marcas informativas, eso sí, los fragmentos ya conocidos. Por eso no basta con informar. No basta con comunicarse con los lectores. Explicar, analizar y contextualizar son características que se diluirán en todos los géneros narrativos.

9) Sobre la definición de relato: las historias se construyen con piezas de naturaleza diferente, con piezas superpuestas, con piezas moldeables. El relato adoptará nuevos e impredecibles formatos híbridos construidos con pedazos aparentemente inmezclables.

10) Sobre el eco del mensaje: prevalece la importancia de la circulación y de lo compartido. El mensaje será algo coral, distribuido, modificable, enriquecido y retroalimentado durante todo el ciclo de la comunicación. El eco – una nueva narración colectiva – se confundirá con el mensaje.

Mi web: bernardogutierrez.es Dirijo la consultora futuramedia.net En Twitter soy @bernardosampa