Sitges 2018
¿Tienen los movimientos de la danza contemporánea algo de atávico y diabólico? Para Suspiria desde luego que sí, y mucho. El italiano Luca Guadagnino se ha alejado del remake convencional para dar su propia relectura de ese giallo de referencia de 1977 de Dario Argento y con un acento marcadamente más feminista. Las expectativas estaban muy altas con Suspiria y… habrá que ir reduciéndolas.
Los más puristas o fans de Argento se van a encontrar con una propuesta muy distinta. Para empezar, nada queda de la fotografía y decorados inspirados en el expresionismo alemán y con un tratamiento del color llamativo con predominio del rojo intenso. La Suspiria de Guadagnino sigue su camino por un Berlín (en lugar de Friburgo) de a mediados de los 70 depresivo, con colores grisáceos y apagados, y unas estampas invernales impregnadas por la lluvia o la nieve. Y para los espectadores de multisala, pues, puro veneno. Puede ser de todo menos precisamente una película comercial.

( ®Diamond Films )