( ©Warner Bros )
El púgil cinematográfico más icónico y célebre del cine se niega a retirarse. Bueno, la edad le obliga a no seguir dando golpes encima del ring, más que nada, por los que pueda recibir más que dar. Pero, allí sigue, aguantando el tipo, ahora como entrenador. Y su pupilo es el hijo de quien fue su primer gran rival, Apollo Creed, encarnado por un joven negro bajo el pseudónimo de Adonis Johnson.
Sylvester Stallone vuelve a interpretar a Rocky por séptima vez, y Michael B. Jordan (visto en la más reciente adaptación de Los 4 fantásticos) es el descendiente de Creed que tiene algo, mucho, que decir en el cuadrilátero.
Creed, la película, se ha estrenado la pasada semana en los cines estadounidenses y, ¡sorpresa!, no solo no ha encajado los golpes igualmente duros de la crítica más sesuda sino que, lejos de ello, incluso la han alabado. «Creed es una refinada pieza de entretenimiento, delicadamente anticuada y vigorizante puesta al día», llega a ensalzar A.O. Scott en The New York Times.