Imagen microscópica de un ejemplar de piojo. / Alejandro del Mazo Vivar (FOTCIENCIA7)
Por Mar Gulis
Durante siglos, las únicas armas con las que hemos contado para protegernos de los piojos han sido bastante rudimentarias: lavarnos la cabeza, echarnos vinagre, cortarnos el pelo, despiojarnos unos a otros, etc. Hoy en día, además, tenemos a nuestra disposición un sinfín de fármacos y tratamientos insecticidas producidos en los laboratorios. Sin embargo, las tasas de infección siguen siendo elevadas -no es raro encontrar colegios en los que más del 20% de los niños sufren a estos molestos parásitos- y el método doméstico de buscar y quitar liendres y piojos de la cabeza de la persona infectada sigue siendo fundamental para eliminarlos.
¿Han perdido la ciencia y la tecnología la batalla contra los piojos? Digamos que, cuando menos, han sido incapaces de ganarla. La razón es que, con el tiempo, los piojos desarrollan resistencias a los insecticidas haciendo que la fórmula del champú o loción que unos años atrás resultaba infalible apenas surta efecto esta temporada.
En su libro Parasitismo (CSIC-Catarata), el biólogo Juan José Soler explica que el problema no son los productos en cuestión sino el uso poco continuado y desincronizado que hacemos de ellos. Pensemos en una persona que está siguiendo un tratamiento antipiojos. ¿Qué pasa si lo interrumpe antes de finalizarlo? Lo más probable es que en su cabeza todavía queden algunos molestos inquilinos, precisamente los más resistentes. En lugar de morir por el efecto de las siguientes dosis, esos piojos seguirán reproduciéndose, por lo que la población entera de piojos de su cabeza se habrá hecho mucho más fuerte. Si la persona retomara el tratamiento, éste sería ya inútil o solo daría resultado incrementando las dosis y la frecuencia iniciales.
Convencer a una persona de que siga el tratamiento hasta al final no es lo más complicado porque, como es obvio, nadie quiere pasarse el día rascándose la cabeza. Lo que resulta verdaderamente difícil y costoso es poner de acuerdo, por ejemplo, a todos los alumnos de un colegio y a sus familiares para que sigan el tratamiento al mismo tiempo. Esta sería la única forma de evitar que aparezcan mutantes resistentes porque, siguiendo con el ejemplo del colegio, cuando unos niños siguen el tratamiento y otros no, los piojos parcialmente resistentes saltan de la cabeza de los primeros a la de los segundos, donde logran sobrevivir y reproducirse… Para después volver a colonizar las cabezas de quienes sí siguieron el tratamiento.
Por suerte, los piojos son molestos pero, en general, no representan un riesgo grave para la salud. Las consecuencias de que la ciencia no gane esta batalla no parecen especialmente preocupantes… El verdadero riesgo es que, del mismo modo que los piojos se hacen más resistentes a los insecticidas, otro tipo de parásitos más dañinos, como algunas bacterias que nos causan infecciones, se hacen resistentes a los antibióticos. Investigadores de todo el mundo trabajan en la búsqueda de una nueva generación de estos medicamentos, pero mientras sus esfuerzos no produzcan el resultado esperado no queda más remedio que hacer un uso responsable de ellos.
Mi hija iba cuando iba a primaria cogió piojos un par de veces, y ahora con 15 años esta dando clases voluntarias de refuerzo a niños de P3…sera casualidad pero como es rubia hace poco notamos, como si de un Spiderman se tratara, un desagradable «visitante» que se asomaba por su cabello, solo de pensarlo tengo picores yo tambien! 🙁
http://lacasadelcomicduendeverde.blogspot.com.es/2014/05/la-violencia-tiene-muchas-caras-pero.html
Saludos
20 mayo 2014 | 10:46
Alcohol de farmacia rebajado un 20% con agua. Dejarlo actuar 15 minutos. El parásito muere deshidratado. Repetir la operación a la semana.
Si el niño es menor de diez años, rebajar con un 40% de agua.
Durante la época de contagio, prevención con colonia de baño (tipo nenuco) en el pelo cada mañana antes de ir al cole.
20 mayo 2014 | 13:19
Como especialista en pediculosis puedo decir que éste artículo es lo mejor y más veraz que me he encontrado en mucho tiempo sobre el tema de los piojos.
20 mayo 2014 | 13:40
Esencia de arbol de te, cuatro gotas con el champú cada vez que se laven la cabeza… y adios piojos para siempre… lo malo.. el olor
20 mayo 2014 | 13:57
Lo mejor hasta ahora ha sido el uso de Neositrín solo para matar los piojos vivos ( el famoso y caro tratamiento de OTC me los sacaba vivos tras hora y veinte dejado actuar en la cabeza) y luego paciencia y sacar uno a uno. Mucha paciencia, mirar cada mañana y cada tarde. Sacar liendres, sacar piojos. PACIENCIA Y PREVENCIÓN.
Mis hijas gemelas el año pasado por estas fechas tuvieron su primer ataque. Por partida doble, claro y en Junio otra vez!
Este año van con cocos al cole desde el mes de abril y que me digan lo que quieran.
Uso la esencia de arbol de te que dicen funciona… y rezar
20 mayo 2014 | 15:34
Soy mamá de dos niñas con tendencia a coger piojos, cada vez que este individuo llega a casa intentamos luchar contra ellos con todas las recomendaciones y remedios mágicos que nos llegan desde cualquier colaborador voluntario, y como dice la «mama experta»,…………….rezar, rezar mucho.
Este año la llegada de estos individuos a mi casa ha sido muy, muy, diferente, una mamá de la escuela me recomendó Piopelo, un centro donde te resuelven el problema, no sólo se encargan de todo si no que además son encantadoras, y si no que les pregunten a mis hijas, pensando en volver a contagiarse para volver a Piopelo.
Suerte chicas y os dejo su web http://www.piopelo.com
20 mayo 2014 | 17:20
«con el tiempo, los piojos desarrollan resistencias a los insecticidas»
Sería de agradecer que los estudiantes que sabéis de esto ofrecierais la información más fidedigna posible.
Es obvio que los piojos no se van volviendo resistentes mágicamente por que les echemos productos químicos. Ya hace mucho tiempo que la teoría ‘lamarckista’ de la evolución fue desmentida científicamente. Sin embargo, sus ideas siguen siendo bastante cercanas a los conocimientos generales de quienes no lo han estudiado.
Con esto me refiero a que sería mejor explicar que el hecho de que cada vez los piojos sean más resistentes es debido a la ‘selección natural’, es decir, que como en la población de piojos hay algunos que son resistentes y otros que no, el uso de estos productos hace que solo los resistentes sobrevivan y se reproduzcan, lo que a nuestro ojo parece una evolución progresiva de los piojos.
Espero respuesta por parte del autor.
20 mayo 2014 | 17:32
«En el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) nos gusta hacer ciencia y también compartirla»
Jajajajajajajajajajajajaj
Hacer ciencia un horda de fracasados que no hacen nada de nada???
Donde coño están los avances que habéis hecho? en ningún sitio, brillan por su ausencia.
Donde coño están los miles de millones de euros invertidos en investigación ??? en vuestras cuentas corrientes.
Solo soy una mafia de corruptos que se llevan el dinero sin aportar nada a la sociedad española.
Hay que ser muy sinvergüenza para además poner un blog que no aporta nada de nada.
Tenéis mi desprecio mas absoluto parásitos de la sociedad y de la ciencia
Yo no espero respuesta del autor, yo espero que devuelvan todos los miles de millones de euros que se han llevado por la cara y pidan perdón, pero como se como son de ladrones se que no lo harán.
20 mayo 2014 | 18:44
Los comentarios de «magiblot» y «joseh harnaez» son elocuentes de lo mal que esta la ciencia en España.
El primero no se ha enterado de nada y afirma que lo que dice el articulo no es cierto, para a continuación afirmar el justamente lo mismo. ¿Falta de comprensión de lectura?
El segundo es brillante, sencillamente brillante. Para alguien que cree vivir en el sigo XIII y que la ciencia es cosa de brujas. Y que eso de investigar «no sirve para nada»
20 mayo 2014 | 22:58
@josep
No me quejo de la veracidad del artículo, por supuesto que he leído atentamente el artículo antes de comentar.
El problema que he encontrado es que de la manera que lo explica el autor, se entiende una cosa muy diferente a la realidad (que es lo que he explicado), aunque luego la conclusión final es la misma.
Y sobre el comentario posterior al mío, he pensado lo mismo al leerlo.
20 mayo 2014 | 23:11
Mi compañia desarrolló un piojicida basado en el ajo. Creímos que en China sería furor. Pues bien. Los chinos no tienen piojos. Viejo supuesto: comen mucho ajo. Lo mismo los indúes, pero también comen mucho ajo. En realidad, la cuestión no está en la supervivencia del piojo, que sería algo así como exterminar los mosquitos, sino en los factores predisponentes para que un niño atraiga piojos y sus dos o tres hermanos no, o al revés. Al día de hoy, esto se desconoce en su causa. Se sospecha que algunas grasas en sangre, harían mas atractiva una cabeza que otra. El genoma del piojo, mostró que es muy parecido a una planta, y esto, sospechan, podría tener que ver con su capacidad adaptativa. Por el momento la cuestión sigue estando en esos factores predisponentes que están en el niño. Saludos
21 mayo 2014 | 03:17
Interesa DE VERDAD a los laboratorios erradicar los piojos ?
No es realmente un beta de oro el que estos sigan existiendo ?
Cabe la posibilidad de que se reproduzcan en «granjas» y luego los propaguen por los colegios ?
No es un abuso el precio que estos productos milagro tienen ?
Yo utilizo el insecticida ZZ que es barato y muy efectivo.
En pleno siglo XXI …………………..parece mentira …………….y creo que los chinches y otros «bichitos» de la posguerra han vuelto.
21 mayo 2014 | 11:58
Aqui se hace divulgacion. Ciertos comentarios dan escalofrios. Personajes incultos que no entiencen lo que es hacer investigacion. Para desesperar de la escuela «piojosa»
21 mayo 2014 | 12:11
que feo los piojos
24 mayo 2014 | 16:35
que feo
24 mayo 2014 | 16:36