Mil historias de sexo y unas poquitas de amor Mil historias de sexo y unas poquitas de amor

Mil historias de sexo y unas poquitas de amor

Entradas etiquetadas como ‘amor’

Amor sin sexo


… Te quiero y no tenemos que ser como todos, o sea, nadie, nadie en absoluto, nadie sabría lo que hemos hecho o no. Estaríamos juntos, viviríamos juntos y si tú quisieras, es decir, siempre que ocurriera, y por supuesto ocurriría, yo lo entendería, más que entenderlo, lo querría porque quiero que seas libre y feliz. Nunca estaría celosa, siempre que supiera que me quieres…

…Sólo quiero estar contigo, cuidarte, ser feliz contigo…

Es la oferta que le hace a su joven marido -se acaban de casar, en los primeros sesenta- una mujer muy enamorada, que acaba de protagonizar una escena terrible en su noche de bodas: se deja hacer, intentando contener su repulsión y cuando su marido se corre sobre ella -algo pronto por la emoción de la primera vez- ella pega un alarido de asco y zafándose de él coge lo primero que tiene a mano, la almohada, para quitarse compulsivamente el semen.

La propuesta es rechazada por el marido, que ni siquiera la contempla en ese momento tan negro, en el que se siente objeto de un fraude, porque ella lo ha engañado, y no le ha dicho antes que es frígida y tiene aversión al sexo. Y ahí se acaba la relación y, por supuesto, el matrimonio.

Es muchos años después cuando él, despojado del sentimiento negativo que aquello le produjo, piensa que la oferta no era tan mala.

Pasa en la novela Chesil Beach, de Ian McEwan, de la que ya os conté otro párrafo