Mil historias de sexo y unas poquitas de amor Mil historias de sexo y unas poquitas de amor

Mil historias de sexo y unas poquitas de amor

Archivo de abril, 2010

El sexo es nuestra recompensa

En las encuestas decimos que el sexo tiene mucha importancia en nuestras vidas, pero la mayoría no lo practica tanto como le gustaría porque la vida que llevamos no favorece nada este menester.

Según los sexólogos, de todas las actividades que el ser humano puede realizar, una de las que mayor sensación de bienestar produce en el mismo momento de su realización es el acto sexual.

Y que la actividad sexual, sola o en compañía, se desarrolla como un mecanismo de recompensa que utilizamos los humanos para sentirnos bien con nosotros mismos, según Francisca Molero, directora del Instituto de Sexología de Barcelona.

Además si se le añade el plano emotivo y sentimental que también entra en juego, ya no es simplemente una satisfacción física, sino que también lo es emocional.

Lo tiene todo en el papel, pero poco en la práctica. Porque para cobrar la recompensa al final del día, que es cuando la mayoría se plantearía hacerlo, por una simple cuestión de orden de vida, el estrés ha matado la pasión. Y cuando no es el estrés es el trabajo o su falta, el jefe, la hipoteca o la crisis. Y así no hay manera de obtener nuestro premio. Con el gustito que da.

Ya no se liga como antes

Internet se ha metido en nuestras vidas incluso para lo que necesita del tacto y el roce, que son las relaciones amorosas.

Las parejas que se conocen a través de la Red cada vez son más frecuentes y además van creciendo sus posibilidades de éxito, aunque los casos que conozco no han terminado resultando bien, quizá porque se tenía demasiada prisa -casi urgencia- por conocer a alguien, en el caso de una amiga mía.

Una investigación de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, señala que los sitios de Internet de online dating, como se los conoce, están desplazando a los lugares reales en lo referido a ligar y a relacionarse. Redes sociales como Facebook, Twitter y MySpace se han convertido en una poderosa herramienta que permite a millones de personas, buscándolo o no, conocer a posibles parejas.

Si antes uno se arreglaba para salir a relacionarse con el otro sexo y se sacaba todo el partido que sabía o podía, hoy, en pijama, sin ducharte y desde una pantallita puedes pelar la pava con otro que esté en la otra punta del mundo.

India es el país con más sitios de Internet para encontrar pareja, con unos 25 millones de personas suscritas a alguno de estos servicios.

Y Estados Unidos ostenta el récord con más éxito en dating: se estima que casi la mitad de las nuevas parejas se forman gracias a estas páginas, de las que hay unas 1.400, según la BBC.