Aunque cada vez lo hacen mejor, aún no las tienen todas consigo. Hay poquitos hombres que sepan qué ponerse a la primera, combinar su ropa y vestirse con ojo.
Yo prefiero a los que no llevan traje. Aunque sé que es el uniforme de trabajo de la mayoría, y que resuelve, por otra parte, muchas papeletas. Aunque para llevar un traje también hay que valer. Y saber. Y algunos están muy buenos así vestidos, pero a lo mejor es porque ellos ya tienen materia prima.
Si tienen que llevar traje, casi prefiero que no lleven corbata y que lleven uno o dos botones de la camisa desabrochados.
Yo tengo una amiga que se pirra por los que llevan traje. Claro que ella ha apuntado siempre muy alto y por las alturas lo llevan todos, porque detrás de un buen traje, hay mucho nivel, que es lo que busca ella en realidad.
Tampoco me gustan los clásicos ni los que llevan jersey de pico con camisa debajo. Esto reconozco que es una manía.
Mi amiga me dice que a mí me gustan los rockeros, los que se ponen vaqueros, cazadoras de cuero, camisas informales o jerseys sin camisa debajo, porque tienen un punto canalla, que dice que es lo que me va a mí. También me gustan los que van de sport, aunque según y cómo.
Ella cree que a la mayoría de las mujeres nos entra por los ojos un hombre según esté vestido y como no nos guste lo que lleva, no hay tu tía. Eso sin saber cómo van por dentro, que si lo supiéramos siempre, dice, nos llevaríamos un buen susto. Es una exagerada.
Prefiero los boxer, sólo esos. Hace un tiempo yo tenía una manía que me divertía mucho. Cuando asistía a una reunión, siempre me imaginaba de qué tipo llevarían los calzoncillos todos los hombres que estaban conmigo. Pero se quedaba en la imaginación, nunca le pregunté a ninguno cómo los llevaba.