Le quedan dos días para irse de vacaciones. A un largo viaje que le va a venir muy bien.
Es la primera vez que viaja así, sola, sin el que ha sido su hombre en los últimos 20 años y está expectante y curiosa; y con ganas de mucha marcha.
El viaje del verano pasado fue horrible para ella: su marido se lió con una chica del grupo y cuando llegaron a casa, él la dejó y se fue con la otra. Mi amiga sufrió mucho, durante el viaje y después, pero al final le ha venido bien, se ha hecho fuerte, se ha dado cuenta de que hay otra vida después de él y se ha dispuesto a vivirla.
A él el amorío le duró poco. A los dos meses ya estaba pidiendo a gritos volver a casa arrepentido y prometiendo todo lo que podía, el inmaduro.
No le sirvió, ella le dijo que no. Y no por venganza ni por despecho de mujer herida, sino porque ha entendido que después de lo mal que lo ha pasado, ahora está mejor así.
Le gusta mucho viajar y se ha buscado compañeros de aventura para irse muy lejos y disfrutar del recorrido y de su nuevo estatus, en el que ella es la que decide lo que quiere hacer.
(La foto es de Venezuela)
1. Encarar las circunstancias y decidir hablarlo con alquien en quien confías, y me encanta saber que esa persona es tu madre. Como padre que soy, es algo que me gustaría recibir de mi hijo.2. Por tener una madre (me limito a hablar de lo que cuentas) que deja a un lado los prejuicios y ofrece lo mejor de ella para que tu sexualidad sea lo más natural posible (como creo que lo está siendo).Os felicito a las dos.Un beso.
01 septiembre 2007 | 17:06