Ten amigas para esto. Le hago un favor -porque le hice un favor- y al cabo de los años acaba echándome en cara que le robé un novio. Ni se lo quité y ni siquiera fue su novio, pero así se escribe la historia.
Julia se fue una semana a un congreso a Londres y volvió con un «problema» -utilizo su misma expresión, que todavía me acuerdo-. Tuvo un conocimiento y varios polvos, y en el cuelgue se juraron amor por correspondencia mientras no pudieran tener otro encuentro.
Él le dió su dirección y ella le dió la mía, incluida mi identidad. 
De vuelta, me cuenta que le he prestado mi nombre y que voy a recibir cartas de amor, que son para ella -qué considerada-, pero que como es esposa y madre, no va a contestarlas, porque una cosa es tener un momento de debilidad y otra muy distinta es tener la debilidad por bandera.
Y así me vi contestando cartas de amor a un tipo que, en cada ocasión, me recordaba la suavidad de una piel -esto es lo más traducible- que no era la mía.
Lo que tuve que aprender para estar al nivel de su calentura, y aprendí, y me divertía muchísimo poder contestarle sin desmerecer a todas las guarradas que me decía a mí que quería hacer con mi amiga que en realidad era yo -¿o era al revés?, ¡qué follón! Y la otra, muy digna, sin querer saber nada.
En fin que la cosa, menos mal, no fue a mayores. Entre que yo me había echado un novio con el que practicaba ávidamente sus enseñanzas, y ya no le escribía tanto, y él, que supongo que se acabó aburriendo, terminé mi apasionada relación con un inglés al que ni conocía físicamente.
¡Qué pena que tiré las cartas! Con lo bien que me vendrían ahora en este blog.
¡Uau Chapi! Esto si que son orgasmos a la carta y lo demás es cuento. Sería un negocio redondo: Teleorgasmo (versión rapidilla de los orgasmos a la carta, pero con telegrama, que aunque anticuado sigue siendo más rápido). Ó Mejor aún: «Envía la palabra ORGASMO seguido de MONO, POLI ó REAL al 6969 y recibirás un SMS con un orgasmo también mono, poli ó real». ¿Qué te parece?
30 noviembre -0001 | 0:00
Me recuerda a Cyrano de Bergerac.Hace muchos años, una amiga me pidió exactamente lo mismo, no por tener ella pareja, sino por no saber qué decirle al veraniego noviete en cuestión ya que apenas habían hablado en quince días, tan sólo se habían limitado a retozar en la playa de día y de noche. Me puse manos a la obra y le escribí una sola carta y nos contestó enseguida asegurando que venía a Madrid en dos semanas (él era egipcio). Vino. Quedó con mi amiga, yo no aparecí a pesar de que ella se empeñaba en que hiciera de carabina y, al cabo de dos días, mi amiga le pidió que se marchara de nuevo a El Cairo ya que se había dado cuenta de que Marbella estaba muy bien para las aventuras pero no tanto Madrid ni octubre. No le cuadró al egipcio en absoluto. Mi amiga había supervisado la carta que yo había escrito y me la había cambiado casi por completo, por directa, por transparente, sin embargo no la hice caso ya que me encargué yo de enviar la carta. Puesto que yo era la responsable de la carta, no podía enviar un escrito de esa guisa. El pobre egipcio se estaría preguntando por qué una chica tan cálida, tan accesible, había estado luego en persona tan fría y distante. Me culpé de ese viaje del egipcio. Las cosas las debe hacer cada uno sin consultar a nadie, sin pedir ayuda a nadie. Y el pobre ni siquiera se quedó para conocer Madrid, se largó al día siguiente. Menos mal que convencí a mi padre y le llevamos al aeropuerto. Pobrecillo. Durante meses estuve pensando en escribirle y contarle el engaño. No me atreví. El verano siguiente, mi amiga conoció a un holandés. Cuando empezó a contarme lo bien que besaba, la interrumpí para suplicarla que no me pidiera nada. Se ofendió sobremanera y no volví a saber nada de ella. Creo que ahora anda por algún país eslavo pidiendo firmas para la retirada del elemento blanqueante que llevan los tampones. Por su bien que no pase por El Cairo. Por cierto, me encontré al cabo de unos cinco años con el egipcio en Cádiz. Ambos habíamos cambiado nuestro lugar de veraneo. Iba con su novia, encantadora. Ni me preguntó por mi amiga, lógicamente. Tan sólo me agradeció mi tarjeta por Navidad de aquel año y me rogó le excusara por no haber respondido nunca. Así lo hice.
30 noviembre -0001 | 0:00
¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?Amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño; y cada más tú, y cada vez más yo, sin rastro de nosotros… Sexo se llama el juego del placer, de la pasión, del morbo, del desenfreno, de las fantasías y las realidades, del pulso acelerado, desbocado, de la carne entregada a la lujuria, de dar y de recibir hasta saciar y quedar saciado… No es convienente confundirlos, aunque tampoco pasa nada por mezclarlos.
30 noviembre -0001 | 0:00
¡¡Hay que ver!! podemos llegar a hacer cosas por nuestras amigas/os, que jamas pensariamos eh?Lo peor es que despues, si las cosas salen mal, encima te echan las culpas….y te quedas sin «amiga»! Manda….Wbs!!Shel
30 noviembre -0001 | 0:00
As: por mejorar el inglés y por mantener alto el pabellón español, ja, ja, jaAhora tengo que ver cómo mejoro mi francés.
30 noviembre -0001 | 0:00
¿Que te decía el inglés en las cartas?’Oh my love, I want to fuck you every day and put my fucking fingers in your wet pussy…’Me imagino algo por el estilo.
28 marzo 2006 | 1:05
No creo. Seguro que le decía: «prepáurate, piqueña sorra, que aquí llega pakitou la chocolaterou!»Tó original él xDDDDD
28 marzo 2006 | 2:58
Pues yo no me imagino lo que le ponía en las cartas el guiri, pero de lo que sí estoy seguro es que el colega se mataba a macocas con las cartas que recibía de Chapi.Juas y es que hay que echarle imaginación a la cosa para cascársela a gusto.
28 marzo 2006 | 6:36
Uy, que pillina me sales Chapi… porque dos no bailan si uno no quiere, y si contestabas a las cartas es que en el fondo daban de sí, ¿no?;-)Excita un montón recibir/enviar correspondencia guarrilla -como dices tú- y luego cuando estás ya en marcha, buscar pareja y ponerle piel y carne a las palabras.Y también, por qué no decirlo, si no encuentras pareja en ese momento, o las misivas son de «alto voltaje»… una buena ración de autocomplacencia y ¡hala, a tener un día redondo!
28 marzo 2006 | 9:37
no me esperaba esto de ti darling
28 marzo 2006 | 10:04
Me parece muy bonito (para quien quiera prestarse a ello) ese intercambio de cartas en nombre de otra persona. Son cuanto menos curiosas las dos historias, la de Chapi y la de Concha. Sin embargo, no lo veo comparable con una relación entre dos personas quienes la distancia y diversas razones les impiden estar juntos más tiempo del que quisieran y deciden intercambiarse cartas. Esto fué lo que me ocurrió allá por el 87 (¡joder, el siglo pasado!). Fué un intercambio de cartas también muy interesante y bastante erótico, por cierto.Creo que puede ser otra forma de sexo a apuntar en la lista de las 365 que solicitaba Chapi hace un par de artículos.
28 marzo 2006 | 14:25
Las cartas de Concha tienen pinta de ser más intimistas y sentimentales. Hablan de transparencia y calidez.Las de Chapi estoy convencido de que eran subiditas de tono. Eso de «me tuve que poner a la altura de su calentura» dice mucho del contenido de esas misivas. :-)Creo que si fuese un amor de verano, preferiría las de Concha… pero si fuese un ligue estacional me inclinaría por las de Chapi.En fin, que tampoco puedo opinar más profundamente porque me falta información. Eso sí, quedo a vuestra disposición para cualquier intercambio 😉
28 marzo 2006 | 14:53
Amor no era, pero sexo tampoco. Tengo que confesar que a mí no me ponían sus cartas hasta el punto de lo que estais pensando, pero luego sí que aproveché sus explicaciones. Por lo que decía, creo que al inglés no le pasaba lo mismo que a mí.Negocio interesante el de teleorgasmo pero habría que introducir el politono, Jesús.
28 marzo 2006 | 19:25
Bueno, qué amigas tiene esta mujer, y qué vida, porque este de hoy es para nota. Aunque yo más bien creo que todos los post tienen algo de ella aunque se lo atribuya siempre a sus amigas. Como todos sus cuarentaytantos hayan sido así, le da para un blog, para un libro y para una enciclopedia.
28 marzo 2006 | 22:35
Bueno, creo que este tipo de cartas dan rienda suelta a ciertas fantasías. Las fantasías forman parte de la sexualidad. Nadie dice que vayan dirigidas a la persona a la que escribes (ni siquiera a la persona a la que quieres. No es imprescindible que sea así). Sólo son eso, fantasías. En cierto modo, no lo veo tan alejado del sexo y, por supuesto, no me parece nada mal. Al contrario.Desde luego, lo que no tiene precio es materializarlas con la persona a la que quieres ¿No crees?
28 marzo 2006 | 22:45
Quiero decir, Jesús, que yo no me lo tomaba como sexo, en respuesta a BDS que se refería, creo yo, al título del post y decía que era sexo y no amor. Yo intentaba explicar que tampoco para mí fue sexo por correspondencia, cosa que veo estupendamente, sino simplemente una diversión y un máster en prácticas amatorias.
28 marzo 2006 | 23:08
Estoy seguro que tu experiencia en concreto no fue sexo, pero no me negarás que la técnica no puede resultar interesante como para no incluirla en la lista de los 365 principales ¿no?.
29 marzo 2006 | 9:16
chapi, otra vez nos une (entre otras cosas) la casualidad. ayer y hoy también escribí algo relacionado a las cartas.me apasiona el tema de la comunicación entre dos personas que tal vez no se conocen tanto pero que se conocen mucho de alguna manera en la que no muchos conocen a estas personas. la escritura devela aspectos tal vez más privados que la oralidad y tal vez en eso se base el éxito de los blogs que no sólo comentan que han ido a la peluquería y les ha salido carísimo sino que también relatan deliciosamente historias de encuentros y desencuentros como la que vos acabás de escribirnos.cariños argentinos.
29 marzo 2006 | 12:08
En efecto Shelina, es uno de los riesgos de prestarse a ese tipo de cosas. En uno mismo está la decisión de aceptarlas ó no. Incluso puede ocurrir que alguien te lo pida, le digas que no y también te quedes sin «amig@». Es otra manera interesante de distinguir entre verdader@s amig@s y cualquier otra cosa.
29 marzo 2006 | 13:04
Cómo comprendo, Chapi, alguno de tús comerntarios-experiencias, porque esto no se improvisa.Asistí hace algún tiempo, a uno de estos ecuentros lúdicos, aunque se llamen congresos, a Madrid, yo soy de provincias.No conozco la capital, se celebraba en un colegio mayor situado cerca del tribunal constitucional, más al norte.El día no cuenta, ya se sabe de qué van estas cosas, aunque no se pase lista hay que estar presente o ponente.Las noches son otra cosa.Las habitaciones se desocupan unas y se pueblan otras. Suenan todo tipo de ruidos,jadeos, susurros, y hasta alaridos.Debieran declararse los concresos de interés nacional porque además de enriquecedores en conocimientos de todo tipo , son saludables.
29 marzo 2006 | 13:52
Yo no logro comprender cómo es que la mayoría del personal únicamente fornica por la noche. Con lo agradable que es fornicar salvajemente a la hora de comer, o a la hora de la siesta, o a media mañana. Especialmente en un día laborable. Podías escribir sobre eso, Chapi.
29 marzo 2006 | 17:05
Goliat: a mi me encanta cuando me despierto, por la mañana
29 marzo 2006 | 19:19
lo de las cartas lo hacias por mejorar el ingles?(con malicia) y el frances no lo mejoras?en cuanto a los congresos…. que pandilla de viciosones, solo hace falta ver a las profesionales rodeando el/los hoteles…y sobre el tema noche = sexo…. yo soy mas de tol dia, vamos que creo que no hay hora mala… y sobre lo de las mañanas chapi eso no tiene gracia ya que ahi si que no hay fallo, ni gatillo, ya ta preparada, hay que currarselo un pokito mujer…
30 marzo 2006 | 10:32
Uy Voyeur, como sigamos así, vamos a tener más que ver.Podemos hablarlo
30 marzo 2006 | 12:11
Jajajaja… Chapi, creo que el que debía tener el «pabellón» bien alto era él, leyendo tus cartas.
31 marzo 2006 | 13:06
Por cierto Chapi… ¿cómo piensas mejorar tu Francés?No te puedo ayudar con la «pronunciación» porque en esa lengua sólo soy «oyente»… aunque me encanta que me sorprendan a cualquier hora y me «hablen» en ella.Uy ¡qué calor empieza a hacer por aquí!;-)
31 marzo 2006 | 15:50
-patético-
03 abril 2006 | 10:21
Con tanto idioma, un@ se convierte en «políglota». Eso, para el sexo, es toda una ventaja. %}
03 abril 2006 | 10:52
Ya lo creo, estoy pensando apuntarme a clases de chino, que está de expansión.
03 abril 2006 | 22:48
Busco nobio que tengua entre 12y18 años
26 junio 2006 | 23:55
holaaaaaaaaa estas recibiendo todo eeeeeeeeeeeh
20 julio 2006 | 1:29