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Traviesas de ferrocarril fabricadas con plásticos y neumáticos reciclados

La empresa italiana Greenrail, con sede en Milán, fabrica traviesas de ferrocarril duraderos, utilizando una mezcla de residuos plásticos de origen urbano y de neumáticos al final de su vida útil. El próximo objetivo del fabricante será integrar los paneles solares a sus productos.

La empresa milanesa Greenrail, creada en 2012, fabrica traviesas de ferrocarril utilizando plásticos reciclados así como neumáticos fuera de uso para la fabricación de su covertura externa, según recoge en su boletín la Fundación para la Economía Circular.

Los productos Greenrail tienen mejor resistencia a la congelación y descongelación -señalan los responsables de esta empresa-, una vida más larga y reduce la vibración y los niveles de ruido generados por el tráfico ferroviario, en comparación con las traviesas estándar actuales en el sector.

Para un kilómetro de ferrocarril, se utilizan 35 toneladas de materiales reciclados, de los cuales, la mitad son neumáticos y la otra mitad plástico reciclado. La compañía italiana está desarrollando actualmente el programa solar Greenrail, que tiene como objetivo integrar paneles solares pequeños en los travesaños. Esta tecnología podría producir de 30 a 35 megavatios hora (MWh) de electricidad anuales, energía suficiente para alimentar a diez hogares al año, según el director de operaciones de Greenrail, Firas Buní.

Para su desarrollo, Greenrail cuenta con el apoyo financiero del programa marco de la Comisión Europea, Horizonte 2020, y de organizaciones como la Fundación para el Desarrollo Sostenible de Italia y la Fundación Politécnico de Milán.

‘Scalibur’, un proyecto para reducir el depósito de residuos en vertederos

Scalibur es un proyecto que promueve la recuperación de residuos orgánicos y su transformación en bioproductos de alto valor añadido, en el que trabaja el Instituto Tecnológico del Embalaje, Transporte y Logística (Itene) para impulsar el paso hacia una economía circular en Europa.

El proyecto, cuya propuesta fue aprobada por la Comisión Europea el pasado 8 de junio y deberá ser suscrito formalmente en los próximos meses antes de su puesta en marcha, será puesto en práctica entre 2018 y 2022 y recibirá financiación a través del programa marco de investigación e innovación de la UE, Horizonte 2020, según publica la Fundación para la Economía Circular.

Scalibur (Scalable technologies for bio-urban waste recovery: Tecnologías escalables para la recuperación de residuos biourbanos),  busca reducir la brecha entre la viabilidad tecnológica y las aplicaciones industriales en el campo de la valorización de residuos orgánicos urbanos y contribuir a reducir el depósito en vertederos y a la economía circular.

El proyecto está liderado por Itene con la participación de otros 20 socios de nueve países europeos: Alemania, Bélgica, Grecia, España, Irlanda, Italia, Países Bajos, República Checa y Suecia. Además de Itene, están el Ayuntamiento de Madrid, la Fundación Cener-Ciemat y las empresas Aqualia y Aeris Tecnologías Ambientales.

Esta iniciativa tomará como modelo la localidad de Lund, en Suecia, para transferir su experiencia en la recogida de residuos orgánicos a tres ciudades: Madrid (España), Albano Latino (Italia) y Kozani (Grecia).

Durante la implementación del proyecto se realizará un estudio sobre la calidad de la fracción orgánica de los residuos municipales y del fango de aguas residuales urbanas para incorporar sistemas y tecnologías innovadoras y obtener productos de alto valor basados en materias bio, como bioplásticos, biofertilizantes, biopesticidas y proteínas para alimentos y piensos.

Además, el biogás resultante tanto de los residuos sólidos como de las aguas residuales será transformado para obtener productos químicos básicos y bioplásticos como el PHBV.

Itene es un centro tecnológico de carácter privado que fomenta la investigación científica, el avance tecnológico y la promoción de la sostenibilidad en los ámbitos del envase y embalaje, logística, transporte y movilidad.

Reducción del IVA en los productos reutilizados para impulsar la economía circular

La Asociación  Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria (Aeress) ha pedido aplicar un IVA reducido o nulo en la venta de bienes de segunda mano de artículos que provengan de la preparación para la reutilización, como uno de los instrumentos económicos que ayudarían a implementar la economía circular. También considera otras medidas com, por ejemplo las deducciones fiscales, para promover especialmente la reutilización de productos.

Foto: Aeress.

Lo dice en un informe que ha realizado junto con el Centro Tecnológico LEITAT, que analiza las repercusiones económicas, sociales y ambientales de la exención de IVA para la venta de artículos de segunda mano provenientes de la preparación para la reutilización (textiles, voluminosos y residuos de aparatos eléctricos y electrónicos) de entidades de Economía Social, que trabajan con colectivos en riesgo de exclusión.

Para la elaboración de este estudio se ha analizado el impacto económico y social que tendría la aplicación de diferentes tipos de IVA (21%, 15%, 10%, 4% y 0%) a las ventas de productos de segunda mano, atendiendo a los objetivos de reutilización del Plan Estatal de Gestión de Residuos y al Plan de Acción de la Comisión Europea de Economía Circular.

Según este informe, la actividad de preparación para la reutilización en España supondría una disminución de ingresos para la Agencia Tributaria de 14,8 millones de euros al año en el caso más extremo de eliminación total del IVA. Una cantidad -dice- que apenas supone un 0,09% de lo que las Administraciones Públicas gastan actualmente en ayudas a la inversión y del conjunto de otros gastos en materia social analizados en el estudio, tales como servicios sociales y promoción social, apoyos a familias e instituciones sin ánimo de lucro.

Por el contrario, el impacto social que se prevé sobre la generación de empleo y empleo de inserción es muy positivo, ya que se estima que las actividades de preparación para la reutilización para 2020 podrían suponer la creación de 161.197 puestos de trabajo en España, como empleo directo, incluyendo puestos de trabajo cualificados y no cualificados, así como puestos de inserción (cercanos al 50%).

Además, establece que, aun habiendo planteado diferentes escenarios alternativos con diferentes tipos de IVA (15%, 10%, 4%), la opción de eliminar el IVA a estos productos que sean realizados por las entidades de economía social «se considera viable y con costes no significativos para los ingresos de la AEAT, frente a unos beneficios muy destacados sobre las políticas ambientales y sociales. El análisis demuestra la generación de impactos muy positivos tanto sobre la jerarquía de residuos como sobre la creación de empleo, generando además empleo de inserción social».

Se buscan ideas para hacer las ciudades más sostenibles

«Larga vida a los productos, ¿cómo alargar su vida para consumir de forma responsable?», es el lema del nuevo reto de Plantacción, un concurso de ideas organizado por UnLtd Spain, una aceleradora de empresas de impacto social, que este año se centra en el sector de las ciudades sostenibles.

Plantacción es una comunidad colaborativa en la que compartir ideas que puedan generar impacto social en los ámbitos de la salud, la agroindustria y las ciudades sostenibles.

En el año 2030, el 81% del consumo global tendrá lugar en las ciudades. La utilización actual de recursos, materiales y productos responde a un modelo de consumo lineal (tomamos de la naturaleza, fabricamos, usamos y tiramos) derivando en serios problemas medioambientales, económicos y sociales.

Imagen de UnLtd Spain.

Por eso,  UnLtd Spain apuesta por un consumo sostenible y por un uso eficiente de los recursos y en este reto busca ideas emprendedoras para alargar la vida de los productos, materiales y recursos, huyendo de la fórmula usar y tirar y reduciendo la generación de residuos en las ciudades, fomentando así una economía circular en vez de lineal.

Las personas interesadas en participar en el nuevo reto de Plantacción “Larga vida los productos, ¿cómo alargar su vida para consumir de forma responsable?”, ya pueden publicar sus ideas en la plataforma que estará operativa hasta el próximo 10 de septiembre de 2018.

Las iniciativas deben estar centradas en crear una economía más eficiente y sostenible que ayude a fomentar la economía circular y un consumo más responsable con el objetivo de crear ciudades y comunidades más sostenibles para todos.

Los usuarios pueden participar de diversas formas: subiendo una o varias ideas a la plataforma, votando las iniciativas de otros o interactuando para compartir y mejorar los diferentes proyectos.

A partir del 16 de octubre el jurado hará público el nombre del ganador o ganadora del concurso y su elección se realizará en base a tres criterios: el potencial de impacto social de la idea (45%); potencial de viabilidad económica (40%); y nivel de popularidad en la plataforma en base a los votos recibidos (15%).

Para inspirar a quienes quieran participar, los organizadores proponen algunas ideas: La recuperación de los recursos: recuperación de un producto al final de su ciclo de vida dándole un uso alternativo; la prolongación de la vida útil del producto: por medio de la reparación, actualización o remanufactura de productos, el uso compartido de productos; o la recomercialización de los productos.

La economía circular, una prioridad de los investigadores

La economía circular, el sistema de aprovechamiento de recursos donde prima la reducción, la reutilización y el reciclaje de los elementos, es desde hace años una prioridad para la Comisión Europea,  que  ha adoptado medidas para ayudar a las empresas y a los consumidores europeos en la transición a una economía más sólida y circular, donde se utilicen los recursos de modo más sostenible.

En esta línea, instituciones, universidades y empresas han introducido la economía circular como objetivo prioritario y fomentan estudios e investigaciones que cambien el «producir, usar y tirar» por el «reducir, reusar y reciclar».

Es el objetivo del  Programa de Generación de Ideas, una iniciativa para dotar de herramientas a investigadores y doctores en la creación de soluciones innovadoras en economía circular, que promueven la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y la Generalitat de Catalunya.

El proyecto Greene3D, que combina innovación y economía circular y que propone el desarrollo de material sostenible destinado a la impresión 3D a partir de residuos orgánicos y bioplástico, ha sido premiado en la 8ª edición del Programa de Generación de Ideas.

Este proyecto, realizado por Laura López Mir, doctora en física de Materiales, y Beatriz Espinosa Aquino, doctoranda en el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales de la UAB, ha obtenido los  2.500 euros del premio y seis meses de incubación en el edificio Eureka del Parc de Recerca de la UAB.

Greene3D  utiliza como residuo el hueso de aceituna, un recurso muy abundante y accesible en España. Actualmente, el hueso de aceituna ya se utiliza como biocombustible, como aditivo para cemento y cerámica o como filtro de metales pesados. Las dos investigadoras le añaden la ventaja de la fabricación a medida que ofrece la tecnología 3D. Entre las potenciales aplicaciones del material se encuentran la absorción de metales pesados, el filtrado de aire o las piezas industriales ligeras con propiedades de aislamiento acústico y térmico.

El segundo premio (1.500 euros y 6 meses de incubación en el edificio Eureka) ha sido para Cerclab, impulsado por Marta Santamaría, investigadora de la Universidad Politécnica de Barcelona, y Gerardo Ezequiel y Erica Volpini, socios fundadores de Semilla. Se trata de un laboratorio 4.0 que tiene el objetivo de aprovechar el plástico reciclado para crear nuevos productos de valor.

En el programa de Generación de Ideas se han desarrollado otros proyectos como:

Acurem: desarrolla un producto biológico que permite descontaminar acuíferos contaminados por compuestos organoclorados. El tratamiento que propone se basa en un consorcio natural altamente enriquecido con bacterias que pueden transformar compuestos tóxicos y cancerígenos como el tricloroetileno y diclorometano en compuestos inofensivos como el etileno y acetato.

BeWater: una planta de desalinizadora flotante descentralizada, que permite obtener agua potable a partir de agua del mar. Es una plataforma móvil situada en el mar cerca de la costa y alimentada por molinos eólicos que podrá abastecer las demandas de agua estacionales de las ciudades costeras.

Water Filter & Feathers: proyecto que amplía la vida útil de las plumas de aves de corral a través de un sistema de economía circular. Propone utilizar las plumas como filtros para limpiar las aguas residuales de la industria textil, permitiendo su reutilización dentro del proceso de fabricación.

ZIN: Se basa en la creación de una única red multilingüe de operadores de servicios de recursos humanos y de turismo de negocio que sea al máximo sostenible, responsable socialmente y de acuerdo con la economía circular.

Más economía circular para frenar las emisiones de CO2

El reciclado de plásticos y metales podría permitir a la Unión Europea (UE) neutralizar sus emisiones de CO2 para 2050, según se afirma en un nuevo estudio publicado por Material Economics.

El informe investiga cómo una economía más circular puede contribuir a reducir estas emisiones y señala que al aumentar la tasa de reciclado para los cuatro materiales más importantes en términos de emisiones (acero, plásticos, aluminio y cemento), la UE podría reducir sus emisiones industriales en más del 50%, dice el informe, publicado por la Fundación para la Economía Circular.

Imagen de la Fundación para la Economía Circular.

«Una economía más circular puede reducir las emisiones de la industria pesada en un escenario ambicioso, hasta 296 millones de toneladas anuales de CO2 en la UE para 2050, del total de 530 millones de toneladas (y unos 3,6 mil millones de toneladas anuales globales)».

A tenor de las estimaciones, se espera que la producción de materiales genere no menos de 900 mil millones de toneladas (gigatoneladas) de CO2 para finales de siglo si la tendencia actual persiste. «Para llevar esta cifra al volumen más manejable de las 600 gigatoneladas es esencial confiar más en la economía circular», dicen los autores del estudio, que afirman también que el potencial es enorme para los sectores del acero, aluminio y plástico, no tanto para el cemento, si estos materiales se reciclan de modo que se preserven sus cualidades.

El estudio indica que el 56% de los plásticos podrían reciclarse mecánicamente y que los procesos de diseño y desmontaje al final de su ciclo de vida deben cambiar para que el reciclado sea económicamente viable. Para el acero y el aluminio, la tasa de reciclado posible es del 70% y 50%, respectivamente.

Agua con valores sociales para desarrollar pueblos de África

Auara es  una empresa de agua mineral que invierte el 100% de sus dividendos en llevar agua potable a personas que no la tienen y que además fabrica sus botellas con un 100% de plástico reciclado R-Pet.

Más de 700 millones de personas en el mundo carecen de agua potable en su día a día y más de 1.000 niños mueren cada día por enfermedades derivadas de consumir agua en mal estado. Porque el agua es la base de la vida y su falta genera hambre, enfermedades, falta de higiene,
problemas de escolarización infantil…, esta empresa de carácter social está comprometida con varios proyectos que lleva a cabo en África.

Auara, que significa, en amahárico, idioma etíope, Tormenta de arena en el desierto, también está comprometida con el respeto al medio ambiente y lleva a cabo su compromiso envasando el agua en botellas fabricadas con materiales totalmente reciclados. De esta forma, se ha convertido en la primera marca de Europa y una de las primeras del mundo en fabricar botellas 100% recicladas.

La empresa ha conseguido reciclar 40.000 kilos de plástico, con lo que ha ahorrado 66.000 litros de petróleo. Además, el diseño de la botella está pensado para optimizar el transporte, ya que la base es cuadrada, por lo que en un pallet caben un 20% más de botellas de Aura que botellas tradicionales, una forma ingeniosa de optimizar los recursos de los procesos logísticos.

Todos sus proyectos sociales están basados en el agua, en el acceso al agua potable, en el saneamiento y en la agricultura para intentar reducir el hambre las efermedades y aumentar la escolarización de los niños, dar acceso a la higiene y a la sanidad y favorecer la independencia de las mujeres.

Sus objetivos hasta 2020 son asegurar el acceso a agua potable a 50.000 personas –ahora lo tienen 12.000 personas-, evitar el empleo de 10 millones de litros de petróleo en Pet, invertir 2,5 millones de euros en proyectos sociales, reutilizar el plástico de 90 millones de botellas y concienciar sobre la crisis del agua.

Auara es un agua mineral natural, de mineralización débil cuyo origen es el manantial Carrizal II, en la provincia de León. Su composición mineral posee unas características propias y estables que se conservan intactas, gracias al origen subterráneo del agua. El agua no está sometida a ningún tipo de tratamiento químico ni térmico y es totalmente natural.

Fuente: Ecocircular.

Prendas deportivas tintadas a partir de cáscaras de nueces

La empresa guipuzkoana Ternua, que elabora prendas de ropa para actividades al aire libre, continúa dando pasos en su carrera en favor de la sostenibilidad. Ahora ha presentado su proyecto de reutilización de cáscaras de nueces para elaborar tintes naturales. Una iniciativa que ha contado con el apoyo del Departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa y  la Asociación de la Sidra Natural de Gipuzkoa.

La idea surgió el año pasado cuando la empresa comenzó a investigar la posibilidad de introducir en sus prendas tintes naturales a partir de residuos agrícolas.

Edu Uribesalgo, director de Innovación de la marca, explica que querían buscar una alternativa para reducir el uso de químicos en sus prendas. «Sabíamos que se podía producir tinte natural partiendo de un desecho agrícola y pensamos en las cáscaras de nueces de las sidrerías. Hablamos con la Asociación de la Sidra Natural de Gipuzkoa y aceptaron colaborar. Nos pusimos manos a la obra, encontramos una empresa donde triturar las cáscaras en Tudela y contactamos con Archroma para valorar la posibilidad de que nos hicieran ese proceso químico de transformación de la cáscara en tinte natural. El resultado final son unas camisetas y sudaderas muy sostenibles«.

Son prendas hechas con algodón reciclado, proveniente de otras prendas ya en desuso, mezclado con poliéster reciclado de PET, y tintadas de forma natural.

Hasta el momento se han recogido 300 kilos de nueces con las que Ternua va a poder hacer hasta 10.000 prendas. La iniciativa es un ejemplo de economía circular y muestra la importancia de trabajar en red entre empresas, entidades y organismos públicos y privados de cara a minimizar el impacto de una actividad industrial en el medio ambiente.

Las prendas sostenibles, tintadas de forma natural a partir de las cáscaras de nueces recogidas en las sidrerías vascas, formarán parte de una colección cápsula dentro de la colección internacional de Ternua para la primavera verano de 2019.

Ternua diseña y elabora prendas deportivas y pertenece al European Outdoor Group, que incluye a las marcas de prendas para actividades al aire libre y montaña más importantes del mundo.

El 100% de su colección textil es PFC free y Commitment, que certifica que la prenda ha sido fabricada con materiales reciclados, biodegradables naturales, con algodón orgánico o con materiales certificados Bluesign. Para la próxima colección, el 28% de prendas se han elaborado con tejidos reciclados como moqueta, redes de pesca, botellas de plástico, pluma, posos de café, lana o cáscaras de nueces; el 61% lleva la certificación Bluesign y el 22,8% lleva tejidos orgánicos.

Sólo se recupera el 10% de la ropa que desechamos

La ropa usada es uno de los residuos con un porcentaje de valorización más alto, pero sólo se recupera un 10% de todas las prendas que los españoles desechamos anualmente, lo que significa que administraciones, organizaciones y ciudadanía debemos redoblar los esfuerzos para tener una mayor conciencia sobre la importancia de colocar el textil en el contenedor adecuado para que pueda tener una segunda vida.

Lo señala Humana, fundación que promueve la protección del medio ambiente y lleva a cabo proyectos de cooperación en distintos países de África Subsahariana, Sudamérica y Asia, para lo cual se sirve de la financiación que obtiene por la gestión de los residuos textiles que se generan en España.

La Unión Europea ha aprobado las directrices para que los Estados miembros impulsen los mecanismos que permitirán que los ayuntamientos, responsables de la gestión de residuos, contemplen siempre la recogida separada de ropa usada, que será obligatoria antes de 2025. Con ello, se potenciará el reciclaje y la reutilización de ropa y el calzado.

Esta fundación incide en la necesidad de convertir los residuos en recursos, como ha dicho en el Día Mundial del Reciclaje, que se acaba de celebrar. «Cada vez que se recicla y se reutiliza, se contribuye activamente a la protección del medio ambiente; se alarga la vida útil de los productos y, cuando esta finaliza, son reintroducidos en el mercado asumiendo la lógica de la economía circular; se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero que agravan el cambio climático y se crean puestos de trabajo en el llamado sector verde».

A finales de febrero, la UE decidió elevar del 44% al 55% el porcentaje de residuos municipales que deben reciclarse a partir de 2025, una medida enmarcada en un paquete de acciones para mejorar la gestión de residuos. «En España, apenas se recicla el 30% de los residuos que generamos, así que hay un largo camino por recorrer», señalan.

Diversos actores del sector de recuperadores y gestores de textil usado insisten en que sólo una de cada 10 prendas es recuperada por un gestor autorizado para su reutilización o reciclaje. Para llegar al 55% que impone Bruselas es necesario aplicar un conjunto de medidas que van desde la adopción de acciones legislativas hasta el aumento de la sensibilización y concienciación, pasando por el refuerzo de la transparencia en la trazabilidad del residuo, facilitando que la ciudadanía pueda depositar sus donaciones en el contenedor apropiado.

La decisión de la UE permitirá equiparar el residuo textil al vidrio, el papel o el plástico, fracciones a las que supera en posibilidades de valorización y según el Ministerio de Agricultura, la recogida separada es clave para cumplir con los objetivos de reciclaje y reutilización. El textil representa aproximadamente entre un 5% y un 6% de los residuos municipales.

Humana señala que nueve de cada diez prendas usadas son susceptibles de tener una segunda vida a través de la reutilización o el reciclaje y que pasar de un modelo de economía lineal a circular es imprescindible para la sostenibilidad de la industria de la moda y, por extensión, para el planeta.

Campaña #UnImpulsoRedondo para pedir la exención del IVA a productos de segunda mano

La Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y Solidaria (AERESS) ha puesto en marcha  la campaña #UnImpulsoRedondo para pedir a las administraciones públicas la exención del IVA a los productos de segunda mano que provienen de la preparación para la reutilización de entidades de economía social.

Para respaldar esta iniciativa, AERESS ha elaborado un estudio donde se ha cuantificado la repercusión sobre las Arcas del Estado de una posible exención del IVA frente a los notables beneficios que aportaría a la sociedad.

Imagen de AERESS.

La red AERESS representa hoy el mejor ejemplo del nuevo modelo de Economía Circular, gestionan más de 90.000 toneladas de residuos, principalmente textil, voluminosos y aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE). Todos los residuos que se someten a procesos de recuperación se vuelven a introducir nuevamente en el mercado mediante su venta en tiendas de segunda mano de la Red, evitando que más de 17.000 toneladas de residuos acaben en los vertederos.

El IVA que aporta a las arcas del Estado la venta de productos de segunda mano apenas supone un 0,02% del total que se recauda, cantidad que parece insignificante comparada a los importantes beneficios ambientales y sociales que reporta esta actividad, según los responsables de esta campaña.

Por el  contrario, con la venta de productos de segunda mano que han sido preparados para su reutilización se consigue alargar la vida útil de los productos, evitar la generación de residuos, la extracción de nuevas materias primas y se evita la emisión de C02 de a la atmósfera, más de 100.000 toneladas de C02 en el último ejercicio.

Además, añaden que el 48% del empleo que se genera en la Red proviene de colectivos en riesgo de exclusión, como personas inmigrantes y refugiadas, parados de larga duración, personas sin hogar, minorías étnicas o personas en procesos de rehabilitación.

Se estima que las actividades de preparación para la reutilización en el escenario 2020 podrían suponer la creación de 16.1197 puestos de trabajo en España, como empleo directo e incluyendo puestos de trabajo cualificados y no cualificados, así como puestos de inserción (cercanos al 50%).

Como conclusión, el estudio establece que, aun habiendo planteado diferentes escenarios alternativos con diferentes tipos de IVA (15%, 10%, 4%), la opción de eliminar el IVA a los productos procedentes de procesos de preparación para la reutilización, que sean realizados por las entidades de economía social, se considera viable y con costes no significativos sobre los ingresos de la AEAT, frente a unos beneficios muy destacados sobre las políticas ambientales y sociales.

El análisis demuestra la generación de impactos muy positivos tanto sobre la jerarquía de residuos como sobre la creación de empleo, generando además empleo de inserción social.

#UnImpulsoRedondo pretende ser un impulso a la Economía Circular, al consumo responsable, a la prevención de residuos y a la generación de empleo verde entre colectivos en riesgo de exclusión.