La televisión ha creado un mundo esquizofrénico en el que entre el individuo y lo global no hay nada. Alain Touraine

Entradas etiquetadas como ‘gominolas’

Redifusión: «Gominolas» y Aída Nízar

UNO

Anoche vi el segundo capítulo de «Gominolas» y lamento comunicaros que me temo que tenía razón: fue bastante mejor que el primero. Siento tener que deciros que me encantó ese guiñó tan «Hormigas blancas«, esas joyas de hemeroteca con perlas de Ana Rosa Quintana, Maradona, Felipe González o Aznar. Que me gusta muchísimo su humor, siempre al filo de la vergüenza ajena o el espanto. Os voy a confesar que «Gominolas» junto con «Cámera café» son los dos productos españoles de ficción que más me interesan. Y que puedo entender que vosotros penséis lo contrario. Pero es que hay algo en las historias, el tono, la narrativa y los personajes de esta serie que me conmueve. Aún no sé qué es.

DOS

Anoche Ferrán Monegal, el Grande, entrevistó en su programa de BTV a Aida Nízar. Y la supo llevar mejor que nadie, y a punto estuvo de hacerla soportable. Pero eso no es lo importante. Lo importante es el gran jitazo de esa lunática, cuando defendía vehementemente su actitud agresiva frente a otra ex Gran Hermana que sí había sido puta y acusaba a Aída de haber ejercido la misma profesión.

Escuchemos a Aída con Monegal:

Señor Ferrán, yo respeto muchísimo a las putas, pero lo que no consiento es que una puta de verdad diga que yo soy puta. Yo puedo ser muy puta en la cama, pero nunca he vendido mi cuerpo por dinero. Yo he regalado mi puterío. Por eso yo no tengo por qué cargar con ese San Bernardo

¡CARGAR CON ESE SAN BERNARDO!

JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

«Gominolas» en Cuatro

Acabo de ver «Gominolas» en la web de Cuatro (anoche no pude; estaba sentado a un metro del modisto Valentino, flipando con las cosas que se pueden hacer hoy en día con el maquillaje terracota y los tonos ceniza de un tinte), y me parece que el primer capítulo es bastante prometedor. En absoluto perfecto, pero sí un buen comienzo, una manera inteligente de presentarnos a los personajes, situarnos frente a sus fracasos y a lo que puede llegar a convertirse la serie a partir de la próxima semana.

Creo que «Gominolas» puede ser una de esas series que mejoran según van avanzando y creciendo, que si consigue pulir ese juego que establece de lo patético como espacio común para lo dramático y lo cómico puede llegar a ser excelente.

Me parece que el capítulo de anoche tuvo hallazgos, destellos, algunos momentos brillantes por parte de cada uno de los actores y que, al paso de las semanas, es probable que nos acabe dando lo mismo lo que fue el glorioso pasado de este grupo de infelices que acaban de reencontrarse, que el título ya ni nos importe (como pasó con «Siete vidas«, por ejemplo), y los guionistas y los protagonistas consigan hacer una buena serie triste que dé risa. Que son las que a mí me gustan.

Tanto como me gusta ver cómo se han cuidado los detalles de producción, incluso en elementos que aparecen segundos en pantalla, pero que son muy buenos:

Y una buena señal que me hace pensar que esto va en serio. Ojalá.