El Blog Solidario El Blog Solidario

Por aquí han pasado cooperantes de Ayuda en Acción, Cruz Roja, Ingeniería Sin Fronteras, Unicef, Médicos del Mundo, HelpAge, Fundación Vicente Ferrer, Médicos Sin Fronteras, PLAN
Internacional, Farmamundi, Amigos de Sierra
Leona, Sonrisas de Bombay y Arquitectura sin Fronteras.

Entradas etiquetadas como ‘hajipur’

Un lugar que es todo al mismo tiempo

Por Bárbara Camus (enfermera de Médicos Sin Fronteras en Hajipur, India)

Trabajamos de 8 a 5 en la oficina, en el hospital o en los centros de salud primaria de que os hablaba en mi anterior post. Nuestro equipo está formado por aproximadamente 70 personas, casi todos son colegas indios y somos sólo 3 “expats”*: una española, Miriam (doctora que coordina la parte médica), una suiza, Delphine (la coordinadora del proyecto), y una chilena (¡yo misma!). Aquí nos llaman las “Golden Ladies”.

En el último piso del mismo edificio de la oficina está nuestra casa. ¡Tenemos todo un piso para nosotras! Y a veces nos adueñamos de la azotea o la “Chillout Hajipur Terrace”, bautizada así por nosotras, donde comemos o proyectamos películas a la luz de las velas, los peces y las estrellas.

Al principio, lo que más me llamó la atención de este país y lo que más me costó fue adaptarme al calor (45° centígrados con 80% de humedad). No podía estar lejos de un ventilador o salir a la calle durante más de 10 minutos, todo el día transpirando y con la cara roja. Y lo peor es que tenemos que usar pantalón largo y camiseta con manga, porque no se pueden mostrar los hombros, ni los tobillos, ¡o sea que nos tenemos que abrigar para salir!

La contaminación acústica es increíble. ¡Les encanta tocar la bocina! Hasta en la parte de atrás de los camiones dice “horn please”**, todavía no entiendo si es para avisar de que van pasando o de que te van a adelantar, o de que te tienes que mover tú o de que no te tienes que mover… Además, dependiendo del mes, instalan altavoces por toda la ciudad para transmitir mantras durante tooodo el día y toooda la noche. Así que nos despertamos y nos acostamos escuchando las frases sagradas del hinduismo. Además, tenemos de vecina una mezquita, por lo que también nos invitan a rezar 5 veces al día el “salat”.

Pero si me preguntan ahora, no sé si me adapté o me acostumbré a andar toda pegoteada y transpirada; las bocinas, los mantras y el salat se han vuelto algo tan cotidiano que ya ni los escucho (menos mal, porque aquí los tapones para los oídos NO sirven). Definitivamente, el ser humano es un animal de adaptación… por suerte.

Al hospital nos vamos en bici, a veces tardamos 10 minutos y a veces más, ya que hay que esquivar todo tipo de obstáculos en la ruta: peatones, niños jugando, otras bicicletas, rickshaw, ottorickshaw, basura, camiones, tractores, buses con pasajeros hasta el techo, autos, vacas, búfalos, cabras, chanchos, perros ¡y hasta elefantes! Andar en bicicleta en la India no es solo un medio de transporte: es toda una aventura.

Aquí somos unas “celebrities”, cada vez que salimos a la calle, la gente se queda mirándonos o se reúnen alrededor nuestro, y no es que seamos unas top models, sino que les llama mucho la atención nuestro color de piel (“milkwhite”, o sea lechoso). Y cuando miras la televisión, te das cuenta que todas las cremas son para blanquear: es asombroso cómo la blancura es aquí sinónimo de belleza.

La vida en Hajipur es tranquila, si así lo quieres; y si no, simplemente sales a la calle. En la calle te encuentras con TODO, aquí la gente se baña, se lava los dientes, se peina, se afeita, se corta el pelo, duerme, trabaja, cocina, come y vive en la calle.

Y por esta razón la fotografía se ha convertido en mi hobby favorito, me he vuelto una adicta a las fotos en este país (o como decimos en el PPD, “I’m a freak of… photography”). Es que todo lo que miras, quisieras capturarlo, y por eso siempre ando con mi cámara en la cartera.

¿Nunca les ha pasado que no se puede describir un lugar porque es todo al mismo tiempo? Eso me pasa con este país, es que la India es una sobrecarga sensorial y una mezcla de colores, dioses, saris, mantras, niños, palmeras, motos, vacas, bocinas, basura, templos… en fin, una mezcla de todo y por eso me encanta…

Después de cuatro meses trabajando con Médicos Sin Fronteras en este increíble país, me doy cuenta que toda esta experiencia, es lejos mejor de lo que algún día había soñado… como dicen mis compañeras “¡no hay nada como la primera misión!…

—-

* Un “expat” es la abreviatura coloquial de “expatriado”, trabajador internacional. Los equipos de MSF en terreno están formados por personal internacional, como Bárbara, enviados al país donde se desarrolla la intervención, y por personal nacional, contratado localmente por la organización. En India, por ejemplo, MSF España contaba en 2011 con unos 150 trabajadores nacionales y 15 expatriados en sus proyectos de desnutrición (en Darbhanga) y kala azar (en Bihar).

** “Por favor, toque el cláxon”

—–

Puedes leer más sobre el trabajo de MSF en India de la mano de Luke Chapman, en este mismo Blog Solidario. Busca “Luke en Bihar”.

Fotos: Todas © Bárbara Camus.