El Blog Solidario El Blog Solidario

Por aquí han pasado cooperantes de Ayuda en Acción, Cruz Roja, Ingeniería Sin Fronteras, Unicef, Médicos del Mundo, HelpAge, Fundación Vicente Ferrer, Médicos Sin Fronteras, PLAN
Internacional, Farmamundi, Amigos de Sierra
Leona, Sonrisas de Bombay y Arquitectura sin Fronteras.

De miradas y olores

Por Patricia Lledó (Médicos Sin Fronteras, Sierra Leona)

Qué calor. El generador se apagó a las 6.55 a.m. y a las 7 a.m., cuando suena mi despertador, ya estoy empapada en sudor… 5 minutos sin ventilador y mi precario metabolismo europeo no lo resiste. “De chiste, qué niñata que soy”, pienso, mientras me ducho en la penumbra.

Llego al hospital y entro en mi pequeña parcela y reino privado, 23 camas de maternidad con el quirófano al final del mismo edificio. Como siempre, lo primero que me asalta es el olor. Es curioso, nunca he sido melindrosa para los olores, sólo que los diferencio y los almaceno en mi memoria con cierta facilidad y alarmante similitud con el loco de “El perfume”.

He trabajado en muchos países, desde Guatemala hasta Pakistán, Somalia, Zimbabue, Liberia… Y los hospitales de cada sitio tienen su olor. Éste queda almacenado y etiquetado como “Sierra Leoniense”, que es donde me encuentro ahora. No es un mal olor, quizás un poco bochornoso y muy “humano”, mezclado con el olor a cloro que usamos para desinfectar. Aquí se nota más que en otros hospitales, ya que, por ser este uno de los países donde hay epidemias de fiebre hemorrágica, somos incluso más estrictos que de costumbre con las medidas de higiene.

Veamos… A la derecha: 10 camas. A la izquierda: 10 camas. Al fondo, una habitación con tres camas “VIP” para los casos muy graves, y la sala de partos con tres mesas de parto. Al fondo, el enfermero anestesista me saluda desde la puerta del quirófano, dispuesto al maratón del día. Qué animado el tío, no le cae ni una gota de sudor ni en los momentos más agitados.

Pero volvamos… pues si va de olores lo primero, lo segundo va de miradas. Éstas no son especialmente características de Sierra Leona, pero sí denominador común de muchos sitios en los que he estado. Soy ginecóloga, así que normalmente, los lugares en los que MSF trabaja con maternidad son los de mayor mortalidad materna, a veces aderezados con un poquito de conflicto armado, o con un poquito de hambrunas y demás penalidades.

El hospital en el que trabajo sólo acepta casos complicados de pediatría y maternidad. Médicos Sin Fronteras lleva en el país desde 1995 y en este hospital desde el 2003. Ayudamos  -formamos al personal y proporcionamos material y medicamentos- a clínicas de primera asistencia llamadas en inglés «Bemonc» (Basic Emergency Obstetric Care, Atención Básica Obstétrica de Emergencia), en las que se atienden partos normales. En cuanto una mujer tiene alguna complicación, es trasladada por una de nuestras ambulancias al hospital, formando así una red de referencia por todo el distrito. Esa es la razón por la que aquí apenas atendemos partos normales. Casi nunca se ven nacimientos con bebé y madre sana… a alguno de los dos les suele pasar algo “malo”, como dicen mis enfermeras.

Por eso, en mi pase de visita de la mañana, no es fácil arrancar sonrisas pero sí muchas miradas. Madres cuyo niño murió dentro del útero antes de nacer y fueron referidas para parir aquí y tratarlas de posibles infecciones; partos obstruidos que quizás hagan una fístula y quedan admitidos largo tiempo; infecciones de todo tipo, muchos tras abortos inseguros realizados con medios caseros… Vamos, un circo de calamidades. Y esas miradas… llenas de … no sé cómo definirlo bien… es una rara mezcla de dolor, con un halo de petición de auxilio pero sin perdida de dignidad, con entereza, un toque de resignación y un tanto de miedo, y una gota de duda y otra de esperanza.

Pienso mientras atiendo a la primera paciente que es fácil quedar inmune a estas miradas. “Hacen doler”, y mucho… Supongo que el reto está en seguir viéndolas, no girar la cabeza, responder a la mirada y absorber el dolor, y a cambio dar un hálito de esperanza, o una palabra de consuelo o una sonrisa si se puede. Respondo miradas, corrijo tratamientos y reviso signos vitales, charlo con las más animadas, cada una me fuerza a recordar por qué estoy aquí y por qué hago lo que hago. Todos tenemos nuestro motorcito privado para trabajar por estos lares.

(Continuará)

___

Foto: Patricia Lledó impartiendo una formación a personal nacional en Sierra Leona (© MSF).

5 comentarios

  1. Dice ser ANTONIO LARROSA

    Me ha impresionado mucho este post tanto que no me atrevo a hacer publicidad del Dia de Larrosa y mi libro que se celebra en Cataluña cada año, creo que desde que escribi el primer libro y es que lo que para unos es negocio , para otros solo es dolor y esperaqnza en un mundo lleno de enfermedades y hambre. No sabe usted lo que admiro a las personas que lo dan todo por nada para socorrer a sus semejantes

    23 abril 2012 | 11:03

  2. Dice ser Fernando

    Los has expresado muy bien.Enhorabuena no ya por tu trabajo, sino por tu estilo de vida y tu generosidad.Gente como tú sóis imprescindibles.

    23 abril 2012 | 13:52

  3. Dice ser Cristina Bartolomé

    Gracias!!!! por hacernos, ver, oir, ‘oler’ … Sois ejemplo y motor para que muchos de nosotros nos pongamos también en marcha. Gracias!!!

    23 abril 2012 | 15:58

  4. Dice ser Mª Angeles Barrones Buzón

    Dedicar tu vida, tu tiempo, tu mirada , tu sudor … a la gente más desfavorecida de este mundo es la manera más especial de decir qué es lo importante …

    23 abril 2012 | 23:07

  5. Dice ser FELISA

    Mi más absoluta admiración por el trabajo que haces, por el entusiasmo y la sinceridad que transmites cuando nos «cuentas tus experiencias» y por dedicar parte de tu vida a ayudar a los que tanto necesitan de todos nosotros.
    Mi pequeña aportación a esta importante causa, no es más que un pequeño granito de arena, que espero se una a otros muchos, para así, entre todos, lograr ALGO muy grande: un mundo más justo (aunuque suene a tópico), donde nadie muera de hambre o de enfermedades ya curables en la mayor parte de nuestro maravilloso planeta.
    Eres afortunada por haber podido DESPERTAR a lo verdaderamente importante en nuestra vidas…..MUCHO ÁNIMO !!!!!!!!

    24 abril 2012 | 16:53

Los comentarios están cerrados.