Por Olivia Lowe (Pakistán, MSF)
10:15 a.m. Yasmin, la madre de la bebé nacida hace media hora, corre peligro. No ha expulsado la placenta y podría sufrir una fuerte hemorragia. Sufre otra complicación grave, un prolapso cervical, y podría desarrollar una infección uterina.
10:30 a.m. Yasmin ha empezado a sangrar. En el paritorio sólo estamos dos matronas y yo misma. Le ponemos una perfusión intravenosa de oxitocina y ergometrina para intentar detener la hemorragia, mantener estable la presión sanguínea y ayudarle a expulsar la placenta, así como antibióticos para prevenir infecciones. Tenemos que estabilizarla lo antes posible y trasladarla a un hospital en cuanto podamos. Mientras procedemos, una docena de pacientes y sus familiares nos miran en silencio mientras la clínica entera se paraliza.
“No tiene pulso, no tiene presión sanguínea”, grita una de las matronas. Vuelvo corriendo a la sala. Yasmina aún tiene algo de aliento, pero no responde y las vías respiratorias parecen no estar funcionando bien. Llamo a gritos al médico que está en la sala de al lado y cojo el oxígeno. ¿Está entrando en shock? Llegan dos médicos, le colocamos más vías intravenosas. La presión sanguínea de Yasmin es de 90/40, muy baja, pero un poco más alentadora que hace dos minutos. Seguimos con las perfusiones, pero fracasamos en nuestro segundo intento de sacarle la placenta.
Oigo a alguien decir algo que no entiendo en urdu, y una de las matronas abandona la sala. Y vuelve inmediatamente con un bebé envuelto en una manta. “¿De quién es este niño?”, me pregunto… lo entiendo de inmediato: acaba de producirse otro parto, en un coche fuera de la clínica. La matrona necesita oxitocina, para que la madre expulse la placenta. Llamamos a una tercera matrona que está realizando visitas a domicilio esta mañana, para que vuelva y nos ayude porque si una de mis compañeras tiene que marcharse con Yasmin al hospital, nos quedaremos sólo dos matronas mientras siguen llegando parturientas…
10:40 a.m. Yasmin ya no sangra tanto y su presión sanguínea ha subido a 110/60. Conseguimos taparla un poco y ponerle el velo, la colocamos en una camilla y la metemos en la ambulancia. Primero tenemos que tener el consentimiento del marido. Voy llamando al hospital y les informo de que Yasmin va de camino.
11 a.m. Estoy temblando, pero no es momento de pararse. Las actividades de la clínica continúan. Seguimos prescribiendo antibióticos porque muchas mujeres sufren infecciones del tracto urinario en esta época del año, en la que el ayuno por el ramadán les causa cierta deshidratación. Envío a una de las pacientes a otra clínica para que se someta a un ultrasonido, pues me comenta que lleva dos días sangrando.
Y de momento sólo tenemos a una mujer de parto. Se llama Noor Bibi, y lleva ya más de cinco embarazos. Está dilatando, y quiere que le demos oxitocina para acelerar el parto. En Pakistán, esta es una práctica ilegal, pero habitual, que se cobra cientos de vidas cada año, así que la animamos a caminar por la clínica y a beber algo de zumo.
(Continuará)
Madre mìa, còmo es posible que en el 2010 haya mujeres dando a luz en estas condiciones… y que haya que preocuparse por el velo y por pedir el consentimiento al marido para poder llevarlas a un hospital!!! Gracias por el trabajo que realizais!! Seguid informando de lo que ocurre…
05 noviembre 2010 | 17:28
Es muy triste lo que provoca la incultura: miles de embarazos con sus consecuentes partos sabiendo que no se va a poder tratar en condiciones ni a la madre ni al niño. Además, después hay que alimentar, EDUCAR y cuidar a esos niños. Sabemos que los padres no tienen dinero ni cultura suficiente para hacer eso y aun así tienen 5 o más hijos por familia.
Ahora, yo me tengo que sentir culpable por sus vidas miserables cuando a mí no me falta de nada, pero tampoco me puedo permitir lujos. Mientras tanto, los políticos, banqueros y empresarios multimillonarios y otros parásitos se dan una vida sin limitaciones. Y luego nos piden a los ciudadanos de a pie que demos nuestro dinero.
Lo primero, que se eduquen y tomen precauciones, que tengan menos hijos. Lo segundo, que los políticos de todo el mundo lo solucionen y dejen de hacernos sentirnos culpables a los don nadie que no podemos hacer nada. En ocasiones en mandado dinero a ONGs y sé que al final no llega nada.
05 noviembre 2010 | 17:34
que yo sepa,tiene bombas nucleares.no es esa tecnologia de, incultos.por lo que;el planteamiento social,dista mucho de,un sano razonar.si no hay planteamientos.si no hay mas que actos, mecanicos.si se rigen todavia, por lo que ancestros sin mas,es de normal,cuanto puedan decir.eso supongo sera poco y solo punta de lo habido.la civilizacion y la supuesta civilizacion.aunque palabras,tienen su significado.
05 noviembre 2010 | 17:38
Menos mal que todavía existen personas como vosotros. Sigo manteniendo un rayito de esperanza en el ser humano. Mucho ánimo desde Málaga.
05 noviembre 2010 | 17:48
India tiene, como otros paises, un ancla al cuello, que se llama Religión, fuera a parte de las superticiones de las masas. Hoy día hay un enorme porcentaje de gente educada, tratando de sacar esas masas de su pobreza fisica y mental, para ponerse frente al mundo occidental. Esto ocurre a una velocidad enorme para sus mentalidades pacifistas y religiosas, por lo que India se está poniendo en muchos aspectos, a la cabeza del globo. En contraste a esto, aun tienen treinta y ocho millones de viudas que, aunque años atrás habrían sido sacrificadas junto al marido muerto, hoy día, se las sigue encerrando en inmundos espacios para ellas, donde pierden, su personalidad, su identidad, y su vida en sí, siendo condenadas a la pobreza más mísera para toda la vida.
Asi que, lo de esta parturienta y otras, me parece «normal» en India.
06 noviembre 2010 | 03:13
Perdón, quise decir Pakistán, no India.
06 noviembre 2010 | 03:21