A veces los jefes se empeñan en que hablemos y hablemos para que no nos quedemos cortos, que indaguemos y busquemos un poquito más por aquí y por allá. Pero es que no se dan cuenta de que a veces, por mucho que quieran, no hay más. Y eso es lo que le pasó a esta compañera canaria.
Vale que al principio se trabuca, pero la segunda toma la borda. ¿Que es breve? Sí, correcto. Pero, ¿acaso no se la entiende?, ¿acaso la información es incompleta? Ella no vio necesario añadir más porque con cuatro palabras estaba todo dicho, y con esa dulzura, más todavía.
La investigación está ahí. La presentadora avanza la noticia y la reportera la remata: «Las expectativas son buenas y algunos hoteles han colgado su cartel de completo». ¿Algo más? Pues si quieres más, ves el vídeo. Leches, ¡es que lo queremos todo! El periodismo no es enrollarse.
PD: Davinia, que sepas que yo estoy contigo. La noticia era un truño que no había por dónde cogerla. La típica de todas las vacaciones. Creo que hiciste requetebién.
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