Entradas etiquetadas como ‘consejos’

El terrible error que la gente comete con bayetas y estropajos después de usarlos (y un truco infalible para arreglarlo)

El científico, Trond Møretrø, que ha estado trabajando en un instituto de investigación de alimentos de Noruega, afirma que las bacterias como la salmonela son propensas a crecer en estropajos y bayetas de cocina, ya que se utilizan todos los días y rara vez se secan.

Por esta razón es posible que descubras que al finalizar tus tareas domésticas, como la limpieza de la encimera o el cuarto de baño, estás haciendo más daño que bien. O_O ¡¡¡No puede ser!!! Lee el resto de la entrada »

Una ‘tiktoker’ propone lavar los vaqueros en el congelador para gastar menos agua


Karen Velazco, una diseñadora industrial mexicana, se ha hecho famosa en las redes sociales al colgar su tutorial sobre el ‘lavado’ de vaqueros en el frigorífico.

Después de notar que todos sus pantalones se rompían en el mismo sitio, por el roce y el uso, en poco más de un año, la joven se puso a buscar la solución para prolongar la vida de sus prendas de denim, según indica Todo digital. Lee el resto de la entrada »

Diez cosas cotidianas que hacemos mal sin darnos cuenta

patatasPara esos que se pelean con el frasco de espárragos. Para aquellos que terminan con un insoportable olor en las manos cada vez que pelan una cabeza de ajos. Para todos los inútiles como el que suscribe, diez consejos muy sencillos (tontos) que nos harán la vida mucho más fácil. ¡¡¡He visto la luz!!!

Cada vez que intento abrir un tarro de salchichas, mi muñeca lo paga. No aprendo. Creo que mis horas de gimnasio y mi poderoso brazo (mejor exagerar, que quedarse corto) van a poder con una mísera tapa de hojalata. ¡¡¡Craso error!!! El elemento inanimado siempre gana a mi escasa fuerza bruta (para qué engañarme). Por no pararme a pensar. Unos segundos hubieran bastado para jubilar la muñequera y dar paso a un mágico cuchillo. Lee el resto de la entrada »

Ideas descabelladas para celebrar el día de los enamorados

Sabéis que yo no soy #muyfan de San Valentín, quizás porque llevo en mi interior el espíritu (en modo vago) de Phineas Flynn y mientras Isabella canta «la ciudad del amor» yo estoy pensando en gente adicta a comer plásticoparecidos que no se parecensirenas que boicotean obras en Zimbabue… resumiendo… que soy un tipo difícil de llevar, como me dicen en la redacción mis jefes (que son todos, porque el becario, si algo tiene, son jefes: ¡¡todos te mandan!!).

No obstante, hoy quiero que se desquiten aquellos que se quedaron con un mal sabor de boca hace unos días cuando publicaba una serie de ideas y consejos para perder a tu pareja en San Valentín de la forma más eficiente posible, por lo que para ti, que estás enamorado y no quieres dejar a tu pareja, hoy llega la edición especial Un San Valentín becario (le pongo «becario» a cualquier cosa que hago, sí), patrocinado por Trolly que este mes va disfrazado de Cupido, como podéis ver.

Sin más dilación (una de esas frases que lees pero jamás oyes decir a nadie) y organizados de más pasteloso a más revolucionario os traigo cuatro ideas para pasar un día de los enamorados inolvidable… eso sí, no me hago responsable de lo que pueda pasar, ni para bien, ni para mal.

1. Una remezcla de canciones

Si lo tuyo es el amor tradicional, el de las canciones de Serrat junto a una hoguera, seguro que te gusta esta idea. Una remezcla de canciones románticas que algunos idolatrarán y otros denostarán. Si te gusta el algodón de azúcar y no te da miedo que se produzca un suicidio colectivo de osos amorosos, no te puedes perder el vídeo de Fredde Gredde, que poco a poco está petándola en YouTube mezclando un montón de canciones románticas en casi siete minutos. Yo le encuentro cierto encanto (a la mezcla), aunque si la escuchas muchas veces seguro que terminas pidiendo que Álex Ubago y Conchita se casen el uno con el otro.

2. Una noche perfecta

Ya nos vamos conociendo (si eres nuevo en el blog me presento: «Hola, soy Bec y escribo de tonterías cinco días a la semana, a veces incluso más»), de modo que no os extrañará que la segunda propuesta que os traiga sea un efecto mariposa (que dirían en El Hormiguero) del estilo «pasar una página del periódico mientras desayunas». Requiere cierta preparación (bueno, cierta… requiere un currazo de la hostia una dedicación concienzuda) y solo lo recomiendo si crees que esa noche vas a pillar seguro. Es decir, no lo hagas en una primera cita porque quizás tú te veas como el protagonista de Numb3rs, pero él o ella te verán como el profesor Frink. En cualquier caso, echa un vistazo por si te vale.

3. Una noche para tres

Si estás harto de que todos los aniversarios y fechas especiales sean iguales, dale un vuelco a tu vida y apuesta por una noche diferente. En Reino Unido, una empresa ofrece para este día tan especial la genial oferta «noche para tres»: por 475 euros puedes pasar una noche en un hotel de lujo con desayuno para ti y tus dos parejas (la mayoría nos volvemos locos para encontrar una… imagínate dos), según recoge la prensa británica.

El desayuno te lo llevan a la cama y hay una cama tamaño gigante decorada con pétalos de rosas en la que puedes beber champán y comer chocolate hasta que a uno de los tres le dé una indigestión o se emborrache de modo que solo queden dos y hagan todo más fácil. Ahora bien, si tenéis pareja y lo proponéis recordad que puede que vosotros imaginéis una noche espectacular rodeados de dos personas increíbles… y lo más probable es que la terminéis pasando solos viendo el horóscopo de Esperanza Gracia.

4. Divorcio exprés en el Caribe

Como última opción, muchachos… puede que la cosa haya salido mal, realmente mal. Imaginad que habéis empezado el día con una boda a todo tren, pero diez minutos después os queréis divorciar. Estas cosas pasan, ¿eh? Que si «tu madre me mira mal», que si «la tarta no es la que yo quería», que si «me has pisado en pleno baile»… bueno, cosas que pasan. No obstante, si tenéis 5.300 euros a mano y ganas de pasar una luna de miel exprés que acabe en divorcio exprés tengo el paquete vacacional ideal para vosotros.

Según leo la prensa británica, tú y tu pareja podéis volar a la Republica Dominicana y, tan solo un día después de la boda, os divorciáis en diez minutejos. Después podéis volver a casa o quedaros en la isla, ya que estáis, disfrutando de vuestra recién estrenada separación. ¿Qué os incluye el paquete? Bueno, en ese dinero están los vuelos, el alojamiento y el papeleo y, aunque está pensado especialmente para los británicos (allí no tienen aún divorcio exprés, por lo que parece), puede ser una idea también para los españoles, porque aunque ahora podemos divorciarnos ante notario, no podemos hacerlo al día siguiente de la boda y eso, quieras o no, termina siendo un inconveniente. Ahora bien, si lo que te diga el juez allí no te vale aquí a mí no me culpes, ya sabes que yo no quiero responsabilidades.

PD: ¿Tenéis algo pensado vosotros? Bueno, ya me contáis cómo os salen los planes.

No interesa tener una prima así


BecConsejo: Sí, aunque te peines hacia atrás la gente nota que te estás quedando calvo

Antes de empezar, gracias al joven ejecutivo que viajaba en la línea 6 del metro de Madrid este martes a eso de las 22.00 horas. El BecConsejo se lo debo a él.

Ahora sí, al lío. Ya os decía el otro día, en el post de las suegras: la serie de humor que tenemos (Hoy puede ser un gran día) no para de hacerme pensar. Resulta que ahora ha llegado una prima buenorra a pasar unos días con la familia y yo pienso… ¿interesa tener una prima así?

Como habéis leído el titular del post (espero), ya sabéis cuál es mi opinión. Rotundamente no. Es un quebradero de cabeza innecesario, pero por numerosas razones que ahora mismo os cuento:

Primero. Porque es lo suficientemente guapa y la has visto lo suficientemente poco como para que no te importe el parentesco y te quieras lanzar a la yugular.

Segundo. Porque aunque a ti el parentesco no te importa, a ella sí. Ella sólo piensa en que eres un primo estupendo, muy atento, que estás pendiente de ella, y que por qué va a importar que se pasee de cualquier manera por la casa… ¡Si sois primos!

Tercero. Porque salir de fiesta con ella es un auténtico suplicio. No paras de ver a moscardones que se acercan a darle la brasa, todos aquellos tipos que un día normal desprecias y que ese día desprecias el doble. «¿Cómo es posible que te guste el tonto ése?», le preguntas. «No sé… es que es tan mono…» te dice ella. ¿Mono? Mono es Peter, y no el capullo ése.

Cuarto. Porque hasta tus amigos te empiezan a dar asco cuando hablan de ella. «Qué guapa tu prima…», «pues es muy simpática…», eso obviando que siempre hay algún gañán que olvida que al fin y al cabo es de tu familia y te dice: «Pues yo me la…» (¿llevaba al parque?).

Y quinto. Porque al final lo único bueno que trae todo esto es poder decir a la gente que tienes una prima que está buena es guapa, algo que, para qué engañarnos, es un botín escaso.

Aunque claro, como decíamos antiguamente en Twitter, #Podriaserpeor. Si además de tener una prima tan guapa, tú eres Miguelín.

PD: Primas a un lado, supongo que es mi obligación comunicaros que podéis votar por vuestro personaje favorito para que responda a vuestras preguntas en un encuentro digital.

PD2: No digáis que no os lo dije.

Hoy hace un año…

Anímate, Vilches

Britney siembra la locura otra vez

La caída de Alaska

– Envía el post:

Bookmark and Share

Truco para saber qué piensan de ti

Hay un truco para saber qué piensan de ti, pero no todos pueden llevarlo a cabo. Se trata de hacer algo público desde el anonimato, como mi blog… y ser un poco estúpido. Son requisitos que, te guste o no, acaban siendo indispensables.

Yo lo conseguí, pero el resultado no me gustó. El sábado estuve cenando con mi amiga Ángeles, asidua lectora de ’20 minutos’, que no de mi blog. En plan listillo le metí el calzador a ver qué opinaba con una pregunta bastante sutil: «¿Te gustan nuestros blogs?». «Bueno, de vez en cuando leo alguno, pero el que más me gusta es el de la madre reciente«, me dijo.

Me alegré por la autora del blog agraciado, pero evidentemente quedé insatisfecho. Insistí:

Becario: «¿Pero no lees ningún blog más? No sé, otro que te llame la atención…»

Ángeles: «Pues no lo sé, no me acuerdo.»

Becario: ¿Pero no te acuerdas de ninguno? Me interesa por saber los gustos de la gente y eso, para tenerlo en cuenta… Por curiosidad.

Ángeles: «Yo qué sé… El otro día leí una cosa del Íván de Operación Triunfo, una tontería grandísima que no tenía ningún setido». (Un post mío, vaya)

Becario: «Ah, sí, el blog del becario, conozco al autor, ¿has visto más cosas?

Ángeles: «Ese tío está un poco loco, ¿no?»

Becario: «Bueno, hace un blog cutre… pero esa es la gracia. El blog nació de los comentarios de los lectores que siempre decían «becario» cuando había un error…»

Ángeles: «Es muy cutre».

No había forma de que dijese algo positivo del blog. No le gustaba y punto. Al final confesé y, al contrario de lo que muchos estáis pensando, no varió su dicurso. Ni siquiera un «pues tampoco está tan mal» o un reconfortante «no te preocupes».

Estuve casi toda la noche sin pegar ojo. Ahora que todo parecía ir bien… Y encima otro amigo me pregunta al día siguiente que «quién es el pesao que tiene el blog ese infernal». Tragué y dije: «Uno del periódico».

PD: Pensaba que con algún monólogo como el del autobús (absolutamente verdadero), la cultura becaria, los vídeos de mis compañeros y algunas cosas más había mejorado… pero creo que he vuelto a fracasar. ¿Qué me aconsejas?

PD2: Gracias a Ángeles (una amiga estupenda y mejor esposa y madre -un beso para Pedro y la pequeña Nerea-) por su sincera opinión, y a mi otro amigo… no sé si perdonarle, que lo dijo con mucha rabia, y eso no me gustó.

Los consejos de ‘Está Pasando’

A estas alturas de la película no voy a decir que soy fan de ‘Está Pasando’, pero sí reconozco que siento aprecio por aquellas personas comprometidas con la causa, como es el caso de Emilio Pineda.

El presentador de los tirantes, un referente del panorama periodístico actual de nuestro país, ha hecho un hueco en su apretada agenda para dar una serie de consejos a los que estamos empezando, como por ejemplo «intentar tomar nota de todo aunque no se esté trabajando, ver más allá de la simple noticia, tener constancia y, sobre todo, mucha visión».

No sé si voy a ser capaz de hacer todo eso, porque al final siempre acabo apuntando las cosas en la servilleta de los macarrones. Visión, lo que se entiende por visión, tampoco tengo. Ver más allá, lo que todos entendemos por ver más allá, es decir, ruptura de conceptos, pues tampoco sé, la verdad. Lo que sí tengo es la constancia suficiente como para seguir con el este blog aunque me quede sin ideas. Estáis de suerte amigos.

PD: ¿Sabes de dónde viene su corte de pelo? Cuando curraba en Madrid Directo se hizo una M y una D durante un reportaje, pero le dio tanta cosa salir así a la calle que se rapó entero.

PD2: Y tú, ¿tienes algún consejo para mí?

Lo que yo leo: la vuelta del gato pródigo y la pierna ortopédica perdida

He de reconoceros que me encanta la información internacional. Siempre insisto en la redacción: «no os preocupéis, yo me encargo de la actualidad internacional» les digo a mis jefes. No me hacen ni caso. Ellos se empeñan en hablar de Sarkozy y de Obama y se olvidan de lo realmente importante. Pero aquí estoy yo para poneros al día.

Porque seguramente no sabéis que George ha vuelto a casa. Tranquilos… no hablo de Bush. Hablo del gato George, que llevaba deambulando 13 años por las calles de un pueblo californiano.

La última vez que sus dueños lo vieron fue en 1995 y ahora, gracias a un microchip que llevaba el minino y a la colaboración de un vecino que lo encontró cerca de su barrio, la familia se ha reunido otra vez; eso sí, con George ligeramente más delgado (ha perdido la mitad de su peso, porque como en casa no se come en ningún sitio).

EL BECARIO INFORMA: ¡Ah! Una cosa antes de que se me olvide. Es posible que llevéis varios días buscando esa pierna ortopédica que siempre extraviáis. Pues quizás esté en el ‘Sacacorchos’ del parque de atracciones Alton Towers, donde los empleados de la limpieza han encontrado una que nadie reclama.

Si finalmente hacéis el viaje al Reino Unido en balde porque la pierna resulta que no es la vuestra, intentad convencer a los responsables del parque para que os den el anillo de compromiso extraviado, o alguno de los 604 relojes hallados en la atracción.

Os advierto: como no os deis prisa, cuando lleguéis a reclamar sólo os vais a poder quedar con algún zapato feo y gastado. Y ya me diréis para que queréis eso…

-> Es tu turno: Mándame tus fotomontajes, tus vídeos raros (propios o de YouTube), tus parecidos razonables… cualquier cosa que te haga gracia y quieras que publique, a elblogdelbecario@gmail.com o en la sección «contacto»