Rubito apareció bajo un coche, llorando. Y tuvo suerte. Podría haber pasado por allí cualquier persona con prisa, una sin ganas de complicarse la vida o, peor aún, alguno de esos gamberros malvados que disfrutan del sufrimiento ajeno.
Tuvo suerte porque pasó una persona que decidió rescatarlo, a la que le sorprendió lo extremadamente sociable que era, a la que no le importó asumir esa pequeña responsabilidad que se cruzó en su camino y que logró encontrar una casa de acogida para él y ahora está buscándole un hogar.
Mucha suerte, efectivamente.
¿Tú qué hubieras hecho?
Ahora busca hogar, y por buen carácter que tenga, no lo tiene fácil. Son seis meses. Aunque aún es un cachorro ya no es una de esas bolitas peludas de dos o tres meses que enamoran a la gente.
La etapa de cachorro de los gatos dura muy poco, menos que en los perros. Concluida, sus posibilidades de ser adoptado se desploman. Y se adoptan menos gatos adultos que perros en la misma situación.
Absurdo. Adoptar un animal ya crecido, pero o gato, tiene muchas ventajas.
Esperemos que este pequeño rubio fuerce su buena suerte y encuentre ese hogar que merece.
Rubito, como le hemos llamado, tiene solo 6 meses. Es muy cariñoso, siempre busca mimos y estar en compañía, es todo un profesional del ronroneo, es muy juguetón y muy salao (ver video 2) . No entendemos cómo aún nadie ha preguntado por él, ¡es un gatito 10!
Tiene los mejor de las etapas de un gato: aún es un cachorro juguetón, trasto y patoso. Pero con 6 meses ya sabe usar su arenero, comer solito y se queda muy bien solito en casa.
Puede convivir perfectamente con otros gatos y con perros. Se entrega con contrato de adopción, chip y vacunas. Está en Madrid.
Contacto: perrigatossinfronteras@gmail.com 670959688