Salvando los caracoles de Bermudas por los cuernos

De las 12 especies endémicas de caracoles terrestres de Bermudas que han existido sobre la faz de la Tierra sólo dos han sobrevivido hasta nuestro tiempo. Sin embargo la introducción de caracoles invasores pronto hizo que estas especies también se extinguieran. Afortunadamente, no del todo.

Caracol mayor de Bermudas (Poecilozonites bermudensis) (Gerardo García)

La peor amenaza para un caracol es otro caracol

La introducción de caracoles predadores fue en el pasado un mecanismo habitual para eliminar a otros caracoles invasores. Pero el resultado no solía ser el deseado: los caracoles preferían alimentarse de las especies locales de estos gasterópodos en vez de las invasoras, que sabían defenderse mejor y eran más grandes. Así, este intento fallido de control biológico de caracoles invasores causó la extinción masiva de los caracoles endémicos de múltiples islas alrededor del mundo.

El caracol lobo (Euglandina rosea) es una especie que se alimenta de otros caracoles. Esta especie se introdujo en Bermudas para intentar erradicar a otra especie invasora. (Wikimedia Commons / Dylan Parker)

Bermudas vivió una debacle de este tipo entre sus caracoles. En este caso se introdujo un caracol carnívoro para erradicar a otra especie invasora que provocaba estragos en los cultivos. Y no, la cosa no salió bien. Este nuevo caracol predador fue reduciendo las poblaciones de los caracoles endémicos hasta causar su extinción, y todo en menos de 20 años.

Salvados por deshechos de plástico y aire acondicionado

Tras más de 40 años desaparecido, en 2014, un pequeño grupo de caracoles endémicos fueron descubiertos en un patio rodeado por cuatro edificios, en pleno centro de la ciudad de Hamilton. Esta ubicación podría no ser el lugar más adecuado para los caracoles, pero las paredes que rodeaban al patio habían conformado una fortaleza infranqueable para los caracoles invasores. La combinación de bolsas de plástico y los desagües de los aires acondicionados ofrecieron un entorno suficientemente húmedo y cubierto de algas para que estos resilientes moradores sobrevivieran. ¡Podría ser la primera vez que el plástico salva a una especie!

Patio donde se encontró la última población de caracol mayor de las Bermudas. (Mark Outerbridge)

El Arca de Noe de los caracoles

El redescubrimiento de esta especie activó rápidamente un equipo de rescate. No tardaron en colocarles en un avión para trasladarles a su nuevo hogar temporal en Inglaterra. Allí dos instituciones inglesas se encargan de su protección y reproducción.

El doctor Gerardo García es uno de los artífices de este peculiar Arca de Noe para caracoles. Como conservador de ectotermos (reptiles, anfibios, invertebrados y peces) del Zoo de Chester, se encargó de su importación a las instalaciones de cría en el zoo donde, en tan solo tres años, han conseguido criar más de 38,000 caracoles. Muchos de ellos ya han sido devueltos a su archipiélago natal dentro de un ambicioso programa de reintroducción.

Los caracoles criados en el Zoo de Chester durante la liberación en Bermudas. (Gerardo García)

Hoy Gerardo me cuenta que algunas poblaciones reintroducidas no solo se han reproducido  ya en la naturaleza si no que también han expandido su area de distribución de manera significativa.

«La estrategia a seguir es continuar con la monitorización, pero iremos mas allá, queremos introducir otra especie más sensible en areas donde el caracol mayor se esté adaptando favorablemente»

Caracol de Bermudas con localizador fluorescente para facilitar su seguimiento. (Gerardo García)

El menor también fue rescatado

El caracol mayor de Bermudas no ha sido la única especie salvada. Pocos años antes, el caracol menor de Bermudas también fue rescatado tras hallarse algunos ejemplares aislados. Los diminutos caracoles fueron enviados a la Sociedad Zoológica de Londres para su conservación y reproducción. Esta especie más pequeña vive cerca de sus primos los caracoles mayores.

Liberación de los diminutos caracoles menores de Bermudas. (Kristiina Ovaska)

Hoy ambos caracoles, mayor y menor, empiezan a colonizar su distribución original.

«Este año se enviará otro grupo criado en el Zoo de Chester y a primeros del 2022 se harán muestreos completos de las poblaciones para desarrollar un plan a largo plazo de la especie.»

Lugar de liberación de los caracoles en Bermudas. (Kristiina Ovaska)

En una isla solo cabe un caracol

La clave para el éxito de este programa es la eliminación de las amenazas de estos gasterópodos, especialmente los caracoles invasores. Se ha optado por reintroducirlos en islas e islotes del archipiélago libres de esos temidos intrusos porque erradicar su presencia es imposible. Y no vamos a usar otro caracol para intentarlo… ya hemos aprendido las consecuencias.

Caracoles reintroducidos en Bermudas. (Kristiina Ovaska)

57.000 ballenas en un río y 17.000 ciudadanos para estudiarlas

Cada verano en estas fechas miles de belugas migran desde el ártico hasta el Rio Churchill en Canadá. Buscan comida fácil, un lugar seguro para sus crías y las condiciones necesarias para iniciar su proceso de muda. Un equipo de investigadores hace un seguimiento diario y exhaustivo que todos podemos ver en directo desde nuestras casas y también contribuir al estudio de estos cetáceos, gracias a cámaras de alta definición que permiten retransmitir en directo a través de internet.

La ballena blanca, tambien conocida como beluga (Javier Yaya Tur)

Los canarios del mar

Las belugas son animales altamente sociables que viven en grupos muy numerosos y se comunican entre ellos con múltiples sonidos que incluyen clics, gruñidos, chillidos y silbidos en varios tonos. Este repertorio de canto les ha hecho valerse el sobrenombre de canarios de mar por el parecido de su llamada con el de estas pequeñas aves cantoras. Escuchar una manada de ballenas blancas es un espectáculo impresionante que pone de manifiesto su conexión social. Este lenguaje se transmite de generación en generación por lo que las crías deben aprenderlo de sus padres durante los 20 meses que dura su formación antes de ser independientes. A través de Explore.org, y sólo durante estos días, podemos escuchar esos sonidos en directo. Una experiencia hipnótica.

Una ballena pequeña pero muy avanzada y resistente

Con poco más de cuatro metros de largo y una tonelada y media de peso, las belugas están entre las ballenas más pequeñas, pero su tamaño no está reñido con los mayores avances «biotecnológicos». Entre ellos, un ecolocalizador similar a un radar que les permite encontrar presas con facilidad en uno de los ecosistemas más inhóspitos del planeta, el océano Ártico. A lo largo de la evolución las belugas han perdido la aleta dorsal, lo que les permite nadar bajo el hielo con facilidad. Su ecolocalizador también les permite encontrar orificios en el hielo fundamentales para poder salir a respirar. Además, una gruesa capa de grasa de 10 cm les proporciona el aislamiento adecuado para soportar las bajas temperaturas. Con todas sus adaptaciones al medio extremo, no es de extrañar que la peor amenaza actual para esta especie sea la falta de hielo.

Una manada de ballenas se acercan a la cámara subacuática del barco científico de PBI para curiosear (Explore.org)

Apoyar la investigación de las belugas desde el sofá

Las belugas han sido perseguidas históricamente por su grasa y carne, sin embargo hoy su mayor amenaza es el cambio climático que está alterando su ecosistema. Para controlar los cambios de la población y para valorar ese nuevo escenario, los científicos realizan un seguimiento en lanchas especialmente equipadas con tecnología de seguimiento radar, micrófonos (hidrófonos) y cámaras de alta definición. Gracias a estos recursos todos podemos convertirnos en voluntarios del proyecto de seguimiento de belugas. Es tan sencillo como ver las retransmisiones en directo de las cámaras de Polar Bears International a través de Explore.org y realizar capturas de pantalla donde se puedan identificar los distintos ejemplares.

Varias belugas persiguen la lancha científica de PBI (Explore.org)

Además, a través del proyecto Beluga Bits podemos introducir datos de los animales que reconozcamos en imágenes que hayan tomado otros usuarios. De esta manera ayudamos a los científicos a clasificar las fotos que sirven para identificar la población y monitorizar su estado de salud y conservación. Hoy ya hay más de 17,000 voluntarios que han procesado cerca de un millón de imágenes. Toda esta información esta sirviendo para determinar la estructura social y la historia natural de las belugas que visitan el río Churchill en el norte de Manitoba, Canadá.

El jueves día 15 de Julio es el día del Hielo Ártico, un día para pensar en nuestras Belugas. El hielo sirve como acondicionador de aire de la Tierra, ayudando a mantener nuestro planeta fresco. Lo que significa que el hielo marino no solo es importante para las belugas y los osos polares, es importante para todos nosotros. No dejes que se funda. ¡Difúndelo!

#ArcticSeaIceDay!

Proyecto Beluga Bits (Zooniverse Project)

El Saiga, el antílope con mascarilla incorporada se recupera en la Gran estepa

Los enormes ojos y los cuernos translúcidos no son los atributos más destacables del saiga. Lo primero que llama la atención de este antílope críticamente amenazado es su nariz prolongada y abultada que parece un error de la evolución. De hecho, los científicos tardaron en averiguar su utilidad y hoy en día todavía no están claras todas sus funciones.

Un saiga macho con algo de su pelaje de invierno. Kazajistán. (FZS/ Daniel Rosengren)

Mascarilla integrada

Lo que sí está comprobado es que esa cuasi-trompa funciona como un avanzado filtro de partículas que permite al saiga permanecer unido a la manada incluso durante la estación seca, cuando el polvo que se levanta durante su migración de más de mil kilómetros sería insoportable sin esa «mascarilla». Además este gran hocico dispone de una cámara de aire que hace las funciones de calefacción para el invierno y ventilación durante el verano, una climatización fundamental para sobrevivir en la estepa euroasiática, donde el clima es de los más extremos del planeta con temperaturas que van de los -40º en invierno a los 40º en verano.

Saiga en Kazajitán. (Navinder Singh)

Pero ahí no quedan las utilidades de su enorme nariz, tal vez la más cómica sea su capacidad de producir extraños ruidos durante la danza de cortejo: los machos sacuden la cabeza de un lado al otro creando un sonido parecido al de los mofletes del San Bernardo cuando se sacuden las babas.

Las hembras de Saiga suelen dar a luz a dos crías que se independizan en pocos meses. (FZS / Daniel Rosengren)

Montaña rusa de extinción

Desde el siglo XX el saiga ha sufrido diversos eventos catastróficos que han reducido su número hasta rozar la extinción en varias ocasiones. A principios del siglo XX la caza indiscriminada recortó la población de varios millones a sólo mil animales. Durante la era soviética recibieron protección y se recuperaron hasta llegar a cerca de los dos millones de animales, pero una vez más se eliminaron las restricciones de caza en los 50 y se volvió a perder un tercio de la población en la siguiente década. A principios de los 90 con la escisión de la Unión Soviética, las fronteras se abrieron y comenzó una nueva y oscura amenaza, la demanda de la medicina tradicional china. Ésta otorga propiedades terapéuticas a los cuernos de saiga, aunque sin ninguna validez científica.

Ejemplos de productos de cuerno de antílope saiga incautados por el gobierno de Hong Kong. (Wikipedia commons)

Esta nueva amenaza generó un desequilibrio en las poblaciones que perdieron la mayoría de los machos adultos (los animales que poseen cornamenta) llegando a rozar el colapso reproductivo. En 2003 sólo quedaban 21.000 ejemplares en Kazajistán y el saiga se convirtió en uno de los antílopes más amenazados del planeta. Desde entonces ha habido una combinación de esfuerzos de conservación exitosos y caídas catastróficas debido al furtivismo y diversas epidemias. La última gran caída ocurrió en 2015 cuando una enfermedad bacteriana vinculada al cambio climático acabó con 200,000 ejemplares en una sola semana.

Recuperación vertiginosa

En la actualidad el 97% de los saigas viven en Kazajistán y su población se ha triplicado desde que empezó la pandemia gracias a la reducción del furtivismo y a las acciones de conservación. Los nuevos datos de su crecimiento poblacional hacen pronosticar una recuperación de la especie. Sin embargo, hoy la Asociación para la Conservación de la Biodiversidad de Kazajistán (ACBK), Fauna & Flora Internacional (FFI) y la Sociedad Zoológica de Frankfurt no bajan la guardia y continúan trabajo duro para devolver al saiga a su estado original como principal ungulado del Serengueti euroasiático, porque con el saiga nunca se sabe cuando pueden venir curvas.

Un ternero de saiga recién nacido durante el pesado, Kazajistán. (FZS / Daniel Rosengren)

Suelta de un ternero de Saiga después de tomar medidas y marcarlo. Cerca del Santuario Natural Andasaiskiy (Zakaznik), Kazajistán. (Daniel Rosengren)

Jonathan es el animal terrestre más viejo de la tierra y es gay

Un potente gemido se oye en los alrededores de la casa del gobernador de Santa Elena. Cada domingo por la mañana Jonathan practica el acto sexual con su pareja. Y no es nada discreto, el sexo entre tortugas gigantes es bastante escandaloso, se podría comparar al mugido de una vaca.

La tortuga gigante Jonathan. (Foto de Luke McKernan)

Las tortugas gigantes son los animales terrestres más longevos que existen y de todos ellos Jonathan es el más viejo: Tiene casi 190 años, lo que le convierte en el animal terrestre mas viejo del planeta. Vive en la isla de Santa Elena en medio del océano Atlántico. Realmente pertenece a una especie originaria de las islas Seychelles, ubicadas en el océano Índico y todavía hoy en día es un misterio como llegó hasta esta isla en el siglo XIX. Se cree que un barco que portaba estos animales como sustento pudo haber parado en la isla en su travesía a las Américas, y que este animal fuese rescatado para formar pareja con una hembra solitaria que vivía en la isla. Esto ocurrió en el año 1886 pero Jonathan nunca consiguió reproducirse con esta hembra que falleció en 1918. Jonathan permaneció solo hasta 1969 cuando llegó una nueva pareja a la isla. Pero una vez más, Jonathan no parecía interesado en ella.

Jonathan con otra tortuga en 1886. (Wikipedia Commons)

Apareció el primer amor

En 1991 el cónsul francés regaló un nuevo ejemplar al gobernador de Santa Elena llamada Frederika para que hiciera compañía a Jonathan. Esta vez sí, a la tierna edad de 150 años, Jonathan había encontrado el amor y comenzó una relación sentimental con actos sexuales cada domingo. Sin embargo, Frederika nunca llegó a criar. 30 años más tarde se descubrió que Frederika era en realidad Frederik, un macho. Jonathan había evitado a las hembras durante toda su vida y había establecido una relación estable y muy duradera con un macho.

La Tortuga Jonathan en el jardín de su mansión en Santa Elena. (Wikimedia Commons)

Exuberancia biológica

La homosexualidad se ha observado en gran cantidad de especies animales tanto en cautividad como en su medio natural: desde marmotas hasta primates, pasando por aves de diversas especies e incluso elefantes. Sorprendentemente se ha demostrado la existencia de vinculación homosexual de por vida en especies que no mantienen vínculos heterosexuales tan largos. Por lo tanto la orientación sexual de los animales no sólo está vinculada a la reproducción: según Bruce Bagemihl la diversidad de comportamientos que se encuentran en la naturaleza responden a la exuberancia biológica, donde los comportamientos homosexuales son una parte intrínseca y no funcional de los animales, que se desarrolla de manera natural en la mayoría de las especies.

Moneda de cinco peniques de San Elena con la tortuga Jonathan engravada. (Wikipedia commons)

Hoy Jonathan sigue vivo y se ha convertido en un símbolo de resiliencia. Con 190 años es el animal terrestre más viejo sobre la tierra y ahora disfruta de su jubilación junto a la pareja que él escogió. Faltaría más.

¡Feliz semana del Orgullo!

Marmotas muy despiertas y conectadas

En lo alto de la montaña se oye un chillido agudo e intermitente. La presencia de un ave rapaz sobrevolando la zona ha activado el complejo sistema de alarma de las marmotas. Estos mamíferos sociables han elaborado una defensa altamente eficaz. Un animal actúa como vigía y permanece siempre alerta y conectado a los demás a través de sus vocalizaciones. Así toda la familia puede comer con tranquilidad y sin temor a los depredadores.

Una marmota alpina lanza una llamada de alarma. (Foto de Borja Reh)

El desafío del invierno en los Alpes

El fin de la primavera es el mejor período para observar marmotas en su medio natural en los Alpes franceses. Estos roedores alpinos pasan la mitad de su vida bajo tierra en nidos protegidos de las gélidas temperaturas de las altas montañas en las que viven. Durante los seis meses de hibernación deben reducir su actividad al mínimo para sobrevivir a semejantes condiciones. Su metabolismo se ralentiza hasta llegar a los cinco latidos y una única respiración por minuto. Con todo pierden un 40% de su peso corporal durante ese duro proceso.

Una marmota alpina en lo alto de una roca vigila que el entorno sea seguro. (Foto de Borja Reh)

Lo contrario a la operación bikini

En junio las praderas alpinas están verdes y floridas y las marmotas se dedican a comer de manera frenética. Su objetivo es el contrario al que persigue la operación bikini, duplicar el peso en solo cuatro meses para poder hacer frente a la crianza y sobrevivir a una nueva hibernación. Se trata de una carrera a contrarreloj en la que el trabajo en equipo es crucial, no pueden perder tiempo en amenazas poco serias. Este hecho se vuelve evidente en el parque nacional Mercantour en los Alpes franceses, donde las marmotas viven sin temor al ser humano y se puede observar su vida privada de cerca. Ahí he podido fotografiarlas sin que se quejen por mi presencia.

La marmota modelo posa durante una sesión fotográfica. (Foto de Borja Reh)

Un atractivo natural

Mucha gente se acerca a este enclave para encontrarse con estos peludos anfitriones y disfrutar del paisaje montañoso. Las marmotas demuestran que un ecosistema bien mantenido hace florecer entornos salvajes que atrae a amantes de la naturaleza, un turismo cada vez más demandado e importante para el desarrollo y sostenibilidad de los parajes alpinos, que han ido perdiendo sus medios de subsistencia y se están quedando sin opciones más allá de los deportes de invierno.

Una niño observa a una marmota de cerca en los Alpes franceses. (Foto de Borja Reh)

En España también se pueden encontrar marmotas, más concretamente en los Pirineos. Aunque se extinguieron durante la última glaciación, los cazadores franceses introdujeron este animal en los Pirineos franceses durante la década de los 40 del siglo pasado y no tardaron en colonizar toda la cordillera pirenaica donde existen mas de 10,000 ejemplares. Hoy sus gritos de alarma se pueden escuchar allí para todo el que quiera conectar con ellas.

Los demonios son imprescindibles para restaurar la naturaleza en Australia

El demonio de Tasmania y el tigre de Tasmania tienen nombres engañosos, en realidad la mayoría de los miembros de estas especies vivían en Australia continental, pero se extinguieron por la presión del ser humano y los dingos. Australia ha sufrido una de las tasas de extinción más altas del planeta desde la colonización europea, principalmente por la introducción de depredadores invasores que desplazan a la fauna local. Un 10% de sus mamíferos se han extinguido, o lo que es lo mismo, una de cada tres extinciones de mamíferos en el mundo ha ocurrido en Australia en los últimos 400 años. Tasmania albergó los últimos tilacinos que desgraciadamente se extinguieron por la acción del hombre, haciendo desaparecer esta especie para siempre.

Retrato de un demonio de Tasmania. (Foto de Aussie Ark)

Retrato de un demonio de Tasmania. (Foto de Aussie Ark)

La extinción de una sola especie siempre acarrea consecuencias importantes. En el caso de Australia las extinciones en cadena han causado una modificación del entorno natural. Australia ya ha perdido un tercio de su vegetación nativa. Ahora los incendios son más virulentos ya que la vegetación actual es menos resistente a los incendios forestales periódicos que ocurren en el país. En 2019 estos incendios acabaron con más de 1,000 millones de animales y destruyeron bastas areas de hábitat crítico para especies amenazadas. Un ciclo que sólo puede empeorar.

Para frenar esta espiral de extinciones y destrucción de hábitat, re:wild está iniciando un ambicioso programa de restauración ecológica cuyo objetivo es devolver los hábitats a su estado original antes de la entrada de humanos y especies invasoras. Para ello es preciso reintroducir a las especies responsables de modelar el ecosistema. El demonio de Tasmania es una de las más importantes para desempeñar este trabajo. Tras la extinción del tigre de Tasmania el demonio se ha convertido en el carnívoro marsupial más grande que existe. Sobre él recae ahora la responsabilidad de controlar al resto de especies e impedir que los gatos y zorros invasores se conviertan en los únicos predadores supervivientes.

Recreación de un tilacino (Por Tim Bertelink)

Recreación de un tilacino (Por Tim Bertelink)

Pero los demonios de Tasmania se enfrentan a su particular guerra contra la extinción. Son víctimas de una forma particular de cáncer transmisible que ha diezmado sus poblaciones en un 80% arrastrándolos a un futuro oscuro. Hasta que se descubra un vacuna para su enfermedad, su única esperanza reside en la cría selectiva y posterior liberación en santuarios libres de la enfermedad y de otras amenazas como los dingos y los incendios forestales.

Liberación de demonios de Tasmania (Foto de Aussie Ark)

Liberación de demonios de Tasmania (Foto de Aussie Ark)

El santuario de Aussie Ark se encuentra al norte de Sydney y es el lugar escogido para este proyecto. Aquí, Chris Hemsworth y Elsa Pataky se encargaron de liberar a los primeros demonios de Tasmania el año pasado. Ahora esos ejemplares liberados han criado consiguiendo que este marsupial vuelva a nacer libre en Australia continental tras cientos, posiblemente miles de años.

Demonios de Tasmania caminando libres por Australia (Foto de Aussie Ark)

Demonios de Tasmania caminando libres por Australia (Foto de Aussie Ark)

La fauna australiana necesitaría una inversión anual de 1,000 millones de € al año para recuperar a sus especies amenazadas. Este gasto podría parecer enorme, pero se convierte en la mejor inversión a largo plazo dadas las catástrofes recientes vinculadas al desequilibrio ecológico causado por el hombre y que han originado costes cuatro veces mayores sólo en 2020. 1,000 millones de € al año de inversión en recuperación de especies tampoco sería una locura teniendo en cuenta que se estima que los australianos gastan el doble anualmente en el mantenimiento de sus gatos, la especie invasora más dañina.

Los lagartos también comen con las manos

Puncak siempre ha tenido una personalidad arrolladora. Lejos de la timidez de la mayoría de sus allegados, él está permanentemente buscando nuevos desafíos y se mantiene ajeno a la presencia de los científicos que estudian su comportamiento en el Zoo de Singapur donde reside. Este animal cada día da muestra de un repertorio de comportamientos e instintos que aportan gran valor a nuestro conocimiento sobre la especie, razón por la que muchos biólogos quieren observarle de cerca. Pero hay una cualidad que convierte a Puncak en un animal extraordinario no sólo para los científicos pero también para el público en general: el uso de sus manos.

Puncak el varano esmeralda. (foto de David Tan / Wildlife Reserves Singapore)

Atraídos por las manos

Los humanos sentimos una atracción especial por los animales que utilizan las manos, a fin de cuentas, nosotros dependemos de ellas para casi todo lo que hacemos. No es coincidencia que los grandes éxitos de la fauna salvaje, los animales que reciben nuestra atención, sean el oso panda, el koala o el gorila. Todos ellos son capaces de utilizar sus manos hábilmente para alimentarse y acicalarse. De hecho, existen otros animales considerados menos mainstream pero cuyo comportamiento nos fascina igualmente precisamente por el uso de sus extremidades, por ejemplo, los mapaches cuando lavan la fruta en una charca, los loros cuando manejan frutos con la pata, o el talentoso uso de los dedos del Aye-aye para buscar insectos en los orificios de los árboles.

Un recurso poco habitual

Puncak no es un mamífero ni un ave, es un varano esmeralda. El uso de las manos en reptiles es muy raro (en serpientes es ausente por razones obvias), por eso este animal genera tanto interés. Gracias a ejemplares como Puncak, se ha descubierto la alimentación asistida con las manos en esta especie de lagartos. Estos animales utilizan una técnica bastante sofisticada para localizar y atrapar presas que se encuentran escondidas en los agujeros de los troncos. El varano esmeralda utiliza sus patas delanteras como si fueran un rastrillo: introduce su fina mano en el agujero y abre sus dedos que poseen afiladas garras para atrapar a los pequeños artrópodos e insectos que componen su dieta.

Este lagarto originario de Nueva Guinea reside en las copas de los árboles que se encuentran en la selva tropical de esta enorme isla. Al desarrollar toda su vida en lugares inaccesibles su comportamiento natural es completamente desconocido para los científicos y debe ser estudiado en condiciones controladas.

¿Por qué necesitamos conocer su comportamiento?

El varano esmeralda no está catalogado como especie amenazada, su única amenaza según la UICN es el comercio internacional de mascotas que, a priori, no supone un descenso de la población preocupante. Sin embargo, la falta de datos sobre su estado salvaje, unido a la conocida alta tasa de deforestación de Nueva Guinea nos debería alertar sobre un futuro difícil para la especie. Conociendo mejor sus hábitos y necesidades podemos implementar acciones enfocadas a proteger a los congéneres de Puncak en su medio.

Una pareja de varano esmeralda copulando frente a la atenta mirada de los niños. (Foto de Hakeemulislam Osman)

Referencias

Mendyk, Robert W. and Hans-Georg Horn. 2011. «Skilled forelimb movements and extractive foraging in the arboreal monitor lizard Varanus beccarii (Doria, 1874)». Herpetological Review 42 (3): 343-349

Kane, Daniel. 2019 «Play behaviour by captive tree monitors, Varanus macraei and Varanus prasinus», Herpetological Bulletin, n.o Issue Number 149, Autumn 2019, pp. 28-31, doi: 10.33256/hb149.2831.

Los pájaros bobos no son idiotas, viven en el paraíso

El pájaro bobo cae en picado desde 40 metros de altura golpeando el agua a una velocidad de 100 kilómetros por hora. Parecería una temeridad que sólo un animal tonto y sin cerebro podría ejecutar, pero en realidad su sesera está bien protegida con una región frontal fuerte y unos sacos aéreos para que no sufra daños ante el brutal impacto y la presión bajo el agua. Su diseño hidrodinámico le permite bucear ágilmente hasta los 25 metros de profundidad para capturar a los peces que componen su dieta.

Secuencia de inmersión de un piquero durante la caza. (Fotos: Borja Reh)

La estrategia de caza de los piqueros de patas azules (su otro nombre más digno) es un espectáculo natural que se puede observar de cerca en uno de los teatros naturales más importantes del mundo, el parque nacional de Galápagos.

Como en una peli de Disney

En 2015 tuve la oportunidad de observar a estas maravillosas aves muy de cerca. Aquel día la playa de Cerro Brujo en la isla de San Cristóbal estaba desierta y una pareja de piqueros cazaba cerca de la orilla. Realizaban vuelos muy cortos, no se elevaban más de cinco metros sobre el mar, y al zambullirse en el agua realizaban un buceo poco profundo. En ese momento me metí en el agua y entendí porqué los locales los llaman pájaros bobos. La pareja siguió actuando totalmente ajena a mi presencia. En una ocasión uno de ellos llegó a chocar con mi pierna, ¡era como si no existiera! Entonces volví a la orilla para coger la GoPro y pude filmar este momento.

De camino al hotel, todavía con el shock de haber vivido una experiencia tan increíble, apareció una hembra adulta en el camino. Se hallaba en lo alto de una pequeña duna. Me acerqué para observarla y al igual que los anteriores, no parecía preocupada por mi presencia, me sentí como si fuera el protagonista de una peli de Disney.

Un piquero en lo alto de una duna se muestra totalmente ajeno a mi presencia. (Foto: Cecilia Encinas)

A los pocos días viajamos a Isabela y nos dirigimos a ‘Los Túneles’, uno de los famosos lugares de anidamiento de piqueros. Era la época de cortejo y puesta por lo que esperaba encontrar un entorno hostil de aves amenazantes protegiendo su territorio. Nada más lejos de la realidad, una vez más los piqueros demostraban un pasotismo insultante. Hecho que nos permitió observar su vida privada de cerca, un lujo.

Cortejo de piqueros de patas azules. (Foto: Cecilia Encinas)

Cantos, bailes y reverencias

El cortejo de los piqueros es espectacular. Combina una danza lenta en la que elevan sus vistosas patas azules, con unos cantos singulares mientras despliegan las alas y hacen una reverencia.

Apostando por la protección de Galápagos

Este es sólo un ejemplo de los encuentros que tienen lugar en Galápagos, donde más del 50% de las especies son endémicas, o lo que es lo mismo, existen cerca de 2.000 especies de animales que no viven en ningún otro lugar del planeta. Galápagos es un enclave privilegiado para los amantes de la naturaleza y uno de los entornos salvajes más valiosos de la tierra. Esto no sólo lo pienso yo, también ha sido la conclusión de Leonardo DiCaprio tras su última visita al archipiélago ecuatoriano. DiCaprio ha decidido apostar por la protección y restauración de estas islas donando 35 millones de euros, y cediendo temporalmente sus cuentas de Instagram y Twitter a una investigadora para promover la conservación de este paraíso.

DiCaprio dice que los héroes ambientales existen y están entre nosotros trabajando día a día para salvar estos lugares tan valiosos. “Ahora todos debemos estar a la altura del desafío y unirnos a ellos», afirma el famoso actor y activista ambiental.

Los esfuerzos de conservación apoyados por DiCaprio y la plataforma Re:wild permitirán que los piqueros sigan viviendo ajenos a las amenazas en uno de los últimos paraísos del planeta.

Piquero de patas azules. (Foto: Piqsels)

Si quieres colaborar con el proyecto de restauración y conservación de Galápagos puedes hacerlo a través de la plataforma Re:wild, también puedes difundir su gran labor en redes sociales.

Cortejo de piqueros de patas azules. (Foto: Piqsels)

Referencias

Arañas más valiosas que zafiros

De las más de mil especies de tarántulas que existen, no me costo escoger mi favorita. Primero porque este animal viste una espectacular coloración azul, un color raro en la naturaleza. Y segundo por su nombre científico Poecilotheria metallica: el nombre significa “Bestia salvaje moteada” y el apellido es la banda más importante de heavy-metal de todos los tiempos, si se me permite. Pero lo que acabó de convencerme fue la precaria situación en la que su especie se encontraba en estado salvaje y la necesidad de protección que se vuelve tan complicada para animales peludos, pero de los que no generan ternura.

La tarántula zafiro metálica (Poecilotheria metallica) tiene una coloración espectacular. (Foto de Guy Degrande)

La tarántula que viaja en tren 

La historia que rodea el descubrimiento de la Poecilotheria metallica o tarántula zafiro metálica es apasionante. Un único ejemplar apareció en Gooty (India) en 1899 pero no se volvió a encontrar otro hasta 2003 a pesar de las múltiples expediciones que se llevaron a cabo para localizar más animales. Tardaron más de cien años en localizar su hábitat ya que éste se encontraba a más de 100 kilómetros de distancia de donde se encontró la primera. La razón era muy sencilla, el primer animal no se encontraba en su zona de distribución, había viajado en tren hasta allí. El ferrocarril que transportaba madera desde los bosques de los Ghats del Este portaba este inesperado pasajero.

La postura defensiva de la tarántula metálica es bastante clara. Las patas delanteras levantadas mostrando los vivos colores azul y amarillo, los quelíceros en movimiento y emitiendo un sonido parecido a un bufido. (Foto de Guy Degrande)

Precisamente el ferrocarril que transportaba madera fue una de las mayores amenazas para esta especie. La tala indiscriminada y extracción clandestina de los arboles más maduros del bosque estaban acabando con sus hogares.

Más valoradas que los zafiros 

La pérdida de hábitat no fue la última amenaza. Una vez descubierto el área donde se encontraba esta especie se puso en marcha la maquinaria del comercio ilegal de mascotas. A alguno le sorprenderá que pueda existir demanda de estos animales como mascotas, pero la realidad es que el tráfico es una de las mayores amenazas para muchas especies de arácnidos, incluida nuestra tarántula metálica. Y es que una tarántula tan colorida como un zafiro y tan rara de encontrar, se había convertido en el cáliz sagrado para los aficionados a las tarántulas. Así que no tardaron en aparecer en el mercado online a la par que desaparecían en su medio.

La tarántula metálica vive en los agujeros de los troncos de grandes árboles. La deforestación y la pérdida de los árboles más grandes es una de las mayores amenazas para esta especie. (Foto de Michael Haunold)

“Uno de los mayores obstáculos para contrarrestar el comercio ilegal e insostenible de vida silvestre es la falta de conciencia generalizada y aterradora entre los aficionados en general,” me comenta el Dr. Chris Shepherd, “la gente no es consciente de la escala masiva del comercio.”

Chris es posiblemente la persona que mejor conoce la problemática del tráfico de especies en Asia, ha trabajado durante más de 25 años como director regional para Traffic y ahora ha fundado su propia organización para luchar por las especies menos emblemáticas, que como hemos visto con las “metallicas,” también sufren de esta lacra.

El Dr. Shepherd afirma que muchos dueños de mascotas desconocen la amenaza que supone el comercio de animales exóticos como mascotas para gran cantidad de especies. Prueba de ello es que todavía existen muchas especies que se comercializan legalmente a pesar de estar muy amenazadas, independientemente del impacto dañino en muchas poblaciones silvestres. La razón es que estas especies «desvalidas» no han recibido la atención necesaria para garantizar que existan regulaciones para prevenir la sobreexplotación.

Un problema de márquetin 

Chris comenta que el problema inicial en torno al comercio de mascotas exóticas es el acceso a la información que afecta las decisiones en el momento de la compra. Se puede decir que el marketing pro-tenencia es mucho más efectivo que el pro-responsabilidad. La oferta en internet y sobre todo en redes sociales es enorme y el discurso convincente, al final una foto sosteniendo un animal es siempre más atractiva que un discurso paternalista. Sin embargo, se necesita mucho trabajo para concienciar a la gente de los efectos de la demanda sobre ciertas especies cuya extracción de su medio es frecuente, ilegal en muchos casos, e insostenible en la mayoría.

La solución está en nuestras manos

Los amantes de los animales debemos ser conscientes del horrible impacto que tiene la adquisición de vida silvestre sin conocimiento. Debemos hacer los deberes: aprender sobre las especies que se están considerando como mascotas y tomar la decisión correcta. También es nuestro deber amplificar este mensaje contándolo a otros, informando de casos de comercio ilegal a las autoridades y apoyando la ética y los esfuerzos de conservación.

El Dr. Shepherd concluye que no debemos mirar hacia otro lado, cuando se compran animales exóticos como mascotas, se está apoyando la caza furtiva, el tráfico y el crimen organizado. Está en nuestras manos cambiar el mensaje.

Ayuda a Monitor Conservation Research Society a continuar sus labores de investigación para frenar el comercio que también amenaza a especies poco emblemáticas, como las tarántulas zafiro metálicas, pero que igualmente necesitan nuestra ayuda.

Tarántula zafiro metálica. (Foto de Guy Degrande)

REFERENCIAS

  • M. B. Guptha, N. V. S. Prasad, P. V. C. Rao, y S. Kishore, «Rediscovery of the Critically Endangered Tarantula Poecilotheria metallica Pocock, 1899 from Seshachalam Biosphere Reserve, Eastern Ghats, Andhra Pradesh, India», p. 4, 2014.
  • M. B. Guptha, P. V. Rao, y N. V. Prasad, «Occurrence of Poecilotheria Metallica Pocock, 1899 from Seshachalam Hills, Eastern Ghats, Andhra Pradesh, India.», Universal Journal of Environmental Research & Technology, vol. 3, n.o 1, 2013.
  • K. Raman, S. Vimalraj, B. M. Krishnakumar, N. Balachandran, y A. Tomar, «Range extension of the Gooty Tarantula Poecilotheria metallica (Araneae: Theraphosidae) in the Eastern Ghats of Tamil Nadu, India», J. Threat. Taxa, vol. 11, n.o 10, pp. 14373-14376, ago. 2019, doi: 10.11609/jott.5266.11.10.14373-14376.

De la famosa isla Tortuga de los piratas a isla Gran Caimán y santuario de las últimas iguanas azules

Hoy es el primer día internacional de la iguana azul, considerada la iguana más rara del planeta, y no por su color sino porque en 2001 quedaban menos de 25 ejemplares en Gran Caimán, su isla natal. Hoy celebramos su espectacular recuperación como un hito del optimismo en conservación al tiempo que miramos con cautela su protección. A fin de cuentas, Gran Caimán tiene fama de perder a sus reptiles más famosos.

Iguana azul de Gran Caimán. (Foto: Blue Iguana Conservation)

El nombre maldito

En 1503, cuando Cristóbal Colón piso la isla por primera vez, decidió llamarla Isla Tortuga por la gran cantidad de tortugas que había en sus aguas. Estas tortugas sirvieron como alimento a los piratas del Caribe durante las siguientes décadas. Incluso el infame bucanero Barbanegra frecuentaba la isla para aprovisionarse. La alta resistencia de las tortugas las convertía en un alimento fresco que mantenían con vida en la bodega del barco cuando viajaban. Este consumo hizo que las tortugas no tardaran mucho en desaparecer de la isla y el nombre quedó obsoleto. Debían encontrar un nuevo nombre y se decidió optar por los siguientes animales más comunes: los cocodrilos. Así, la isla se bautizó con el nombre actual en honor a estos enormes reptiles. Curiosamente los cocodrilos tampoco tardaron en extinguirse. Parecía que el nombre se convertía en una maldición, así que no lo volvieron a cambiar, por si acaso.

¿Paraíso?

Gran Caimán tiene una extensión más pequeña que la isla del Hierro, pero su reducido tamaño no le impide ser un gigante de las finanzas. Aquí tienen base de operaciones más de 100,000 compañías y 600 bancos gracias a los beneficios fiscales, o lo que es lo mismo, ¡500 compañías por kilómetro cuadrado de isla! Pero Gran Caimán no es sólo un paraíso fiscal, también es un paraíso turístico. Más de dos millones de viajeros  visitan este lugar buscando relajarse en sus playas paradisíacas y bucear en sus aguas cristalinas.

Gran Caimán ofrece playas paradisiacas con aguas cristalinas. (Foto: Luke Harding)

Por supuesto el rápido desarrollo económico y turístico de la isla acabó con muchos animales y casi acaba con las iguanas azules. Fue necesaria una intervención de rescate sin precedentes. “Pasamos de 25 individuos en 2001, a liberar el ejemplar número 1,000 en 2018, consiguiendo que la especie pasara a un nivel menor de amenaza” comenta Luke Harding, director de operaciones de la Blue Iguana Conservation, la organización responsable de la conservación de esta especie en Gran Caimán.

Luke Harding sostiene un ejemplar durante una charla educativa. (Foto: Blue Iguana Conservation)

No podemos bajar la guardia

Aunque el número de iguanas liberadas ha sido extraordinario, hay evidencias que demuestran una tasa reducida de adaptación al medio salvaje. Esto es debido en parte a que las mismas amenazas que lanzaron a las iguanas azules al borde de la extinción en el pasado siguen presentes ahora y lo que es peor, han aparecido otras como especies invasoras y una nueva enfermedad emergente. Luke afirma que la especie sigue y seguirá dependiendo de la cría y liberación hasta que se reduzcan estas amenazas y se establezcan suficientes poblaciones estables.

Apostando por un ecoturismo de conservación

Un reciente estudio ha confirmado un incremento exponencial de los nidos de tortugas marinas en las islas caimán desde 2008. Estas tortugas junto con las rayas marinas son un gran atractivo para el turismo internacional de naturaleza. Este turismo también ofrece oportunidades positivas para la conservación de las iguanas. Aunque verlas en libertad es prácticamente imposible, el centro de cría está abierto al público y es el lugar ideal para los que quieran conocer a estos animales y colaborar en su conservación. Una razón más para visitar la isla. A mí, personalmente, me convence.

Centro de cría en Gran Caimán. (Foto: Blue Iguana Conservation)

Su color es único, su personalidad fascinante

Aunque los reptiles no suelen ocupar un lugar destacado en la percepción pública de un grupo de animales hermoso, todo el mundo se gira al ver un lagarto azul y no causa el temor habitual de este grupo de animales. Sin embargo, Luke me dice que lo más interesante es la variedad de comportamientos y su personalidad que los hacen carismáticos y agradables para cualquiera. “Nuestro objetivo es que en los próximos cinco años la iguana azul se convierta en la especie bandera de Gran Caimán” concluye Luke.

En cualquier caso, esperemos que la isla nunca se llame Isla Iguana Azul, por el bien de su conservación.

Si quieres colaborar en este proyecto, puedes hacer un donativo o apadrinar una iguana azul y cuando vayas a Gran Caimán no olvides visitar el centro.