Empezando por mí. Yo podría ser un claro ejemplo. Es verdad que no soy catalana, pero sí aficionada al fútbol y, en concreto, hincha del FC Barcelona. No lo niego. Y es que el Barça como equipo mueve fronteras y no solo tiene afición dentro de Cataluña. Es más, estoy completamente segura de que los catalanes ocupan una mínima parte del total, aunque hagan más ruido. De hecho, muchos de los que conozco simpatizan más con el Real Madrid y esto les aseguro que no es pura casualidad.
La mayoría de los seguidores culés son de Asia, América, buena parte de Europa o del resto de España. Por este preciso motivo, no comprendo que, como entidad, el club azulgrana apoye el referéndum separatista ilegal de este domingo. También es verdad que, individualmente, cada uno está en todo su derecho de decir lo que quiera. He ahí la libertad de expresión.
Que Piqué quiere votar, que lo intente. Que Bartomeu quiere que Cataluña sea un país, que lo proponga… Pero, por favor, que no involucren en este acto (recalco lo de ilegal) a un club que representa, no solo a catalanes, sino también a españoles, chinos, argentinos, rusos y, si me apuran, hasta a portugueses. ¿Qué les interesa al resto del mundo que ellos quieran ser independientes? Nada. Y, entonces, ¿ tendría que afectarles? No, pero sí, les afecta.
Por ejemplo en que, por mucho que lo desmientan, en caso de que Cataluña se separe de España, el FC Barcelona pudiera salir de la Liga. Y no solo de la Liga española, también de la Champions y de todas las otras competiciones en las que ahora destaca como uno de los candidatos al título. No me cabe la más mínima duda de que si su club (nuestro club) deja de ser un referente a nivel mundial, dejará de tener los seguidores que tiene. Pues esto, señores, también aporta dinero (y prestigio) a su (todavía) comunidad autónoma.
Si, una vez independientes, no sale de ninguna de estas competiciones también estoy segura de que no será gracias a sus directivos, sino a sus jugadores. Muchos de ellos no están en el Barça por su nivel de catalanismo. Es más, la mayoría no son ni catalanes. Y a la hora de elegir si jugar en una liga catalana o en la española… ¿Ustedes qué creen que decidirían? Pues eso.
¿Se imaginan al actual Barça sin Messi, Rakitic, Iniesta, Luis Suárez o incluso… Ernesto Valverde? Y es que de los 24 jugadores que están ahora en la primera plantilla, 18 no son catalanes por lo que lo más lógico sería que se fuesen del club, aunque podrían no hacerlo.
Será difícil entender una competición sin el Barça. Es más, sin duda, sería aburrida. Y sería difícil ver a un Barça fuera de la Liga igual de competitivo. Por lo que, el hecho de que el fútbol y la política se cojan de la mano podría no ser una buena idea para este deporte, los futbolistas y los aficionados. Pero claro, una gran idea para la política porque, ya saben, el fútbol mueve montañas (y hasta puede separar países).