Sé que suena un poco cursi, pero es la verdad. Ricky Gervais ha conseguido con su nueva serie After Life (Netflix) emocionarme hasta la médula y, al mismo tiempo, hacerme lanzar unas cuantas sonoras carcajadas.
La historia de un hombre que, tras la muerte de su esposa, no encuentra sentido a la vida y debe hallarlo para seguir adelante es, quizás, una premisa que a priori suena a algo visto/leído mil veces.
Sin embargo, como he comentado en otras ocasiones, los temas como la muerte o el amor son universales y lo que los hace especiales es el tratamiento de cada autor.
En esta ocasión, Gervais incluye referencias a trabajos anteriores (Derek), con el mismo tono agridulce y un corrosivo humor negro, pero con una madurez espiritual que denota una profunda reflexión sobre el tema.
Así, condensada en seis episodios a los que no les sobra nada, After Life se configura en un canto a la vida que celebra la importancia que tienen nuestras acciones sobre nuestro entorno más cercano y la capacidad del ser humano para superar las adversidades gracias a la amistad, generosidad y altruismo.
La existencia, dice Gervais, es algo tan precioso y fugaz que no podemos desperdiciarlo, y de nosotros, en gran medida, depende ser feliz pese a los golpes de la fortuna.
After Life es una serie que solo puede haber hecho una persona que ha sufrido y ha logrado salir del pozo.
La vida y las relaciones hasta en los entornos más sencillos (en este caso un humilde periódico local) y las conversaciones con extraños en el cementerio —maravillosa la presencia de Penelope Wilton, Isobel en Downton Abbey— pueden constituir momentos enriquecedores.
Con la muerte de mi madre este verano, tras una larga enfermedad, me he sentido muy cercana esta historia. Yo también —como casi todos a lo largo de la vida— me he enfrentado a la amargura de la existencia.
Y justo porque estoy en proceso de superarlo creo que esta serie puede servir como un chute de optimismo vital. No os la perdáis. Es una serie profunda y maravillosa que os hará reflexionar.
He visto los dos primeros episodios y me ha gustado, a pesar que los personajes bordes, que culpan al mundo de todas sus desgracias, al estilo de House, no me terminan de gustar, este tiene algo que engancha. Seguiré viendola.
14 marzo 2019 | 09:48
Yo la vi entera del tirón y es buenisima
18 marzo 2019 | 03:16