Cuando la estrenaron, mi timeline de Twitter se volvió loco. Todo eran alusiones a Paquita Salas, a lo grande que era y las risas que se habían echado. Debo confesar que vi el primer episodio en la plataforma Flooxer y no me pareció nada del otro mundo, aparte del trabajo de Brays Efe. Fue cuando la estrenaron en Netflix que pensé: “Vamos a darle otra oportunidad, que mi timeline es sabio”. Y entonces me enamoré perdidamente de Paquita, de su capacidad para levantarse cada vez que se caía, de los kebabs en pijama y, por supuesto, de los torreznos con gintonic de Larios, que he incorporado a mi dieta.
Paquita Salas posee algo fundamental de lo que carece la mayoría de series españolas: tiene corazón. Paquita es una petarda y todos lo sabemos, pero también es leal, sincera y, sobre todo, muy humana. Su capacidad para autoconvencerse de que PS Mana(J)ement es lo más de lo más, al mismo tiempo que la abandonan sus actrices a poco que tengan fama, configuran un personaje enternecedor en su patetismo, divertido en su soberbia y encantador en su arrojo y candidez.
Paquita, al fin y al cabo, es una buenaza (y una antigua). La forma de la que viste —parece mi abuela—, sus expresiones gárrulas —actriz 360°— pero, sobre todo, su capacidad de recuperarse tras los palos de la vida y ser fiel a sus amigos la convierten en un personaje inolvidable que no sería igual sin el excelente trabajo de Efe. Los matices de su actuación —gracioso sin ser histriónico—, sin amaneramientos y con un profundo respeto por el personaje que representa consigue una de las actuaciones del año.
Ahora que estoy viendo a los Javis en Operación Triunfo puedo entender de dónde sale la magia: se nota que son buenas personas, y tan sentimentales como su creación. Las referencias de dónde beben saltan a la vista: la forma de hablar a la cámara del primer episodio, con un tono cuasi documental, recuerda a Modern Family, pero con un toque gamberro y underground. Y el humor patético e incómodo nos trae reminiscencias de Gervais y Larry David.
Si tengo que elegir un episodio me quedo con “Hasta Navarrete”, que posee ese tono castizo que tan bien conocemos y que nos hace sonreír en todo momento, y con una de las escenas más tiernas: la del niño con síndrome de Down transexual bailando con la peluca, aunque el momento Pajares no le va a la zaga.
Por su humor autorreferencial («el chiquito de Física y Química»), por sus diálogos que merece una sesión en vivo tipo The Rocky Horror Picture Show y, sobre todo, por la ternura que desprende, Paquita Salas es una de las mejores series que he visto este año. Estoy como loca por ver la segunda temporada.
Nota en Mis Puntuaciones
Ya sabéis que he escrito un par de libros que esperan ansiosos que les echéis un ojo. Las series de mi vida, donde hablo de series como The Wire, Los Soprano, Mad Men o Breaking Bad.
Si crees que es una de las mejores series de este año es por que no debes de tener ningún criterio ni conocimientos de dirección cinematográfica o guion. Ponte a ver Twin Peaks El Regreso y aprende un poco. 20 minutos a ver si empezamos a emplear a personas preparadas.
29 diciembre 2017 | 09:44
Te recomiendo que veas Paquita Salas. A lo mejor así empiezas el año con un poco más de alegría en el cuerpo y menos acritud, Varon.
29 diciembre 2017 | 09:55
También te recomiendo una de hace unos años que tiene segunda temporada, la de Ignatius Farray: El fin de la comedia.
29 diciembre 2017 | 11:47
La he visto y me gusta mucho. Otra serie española a reivindicar, Series Serias ☺
29 diciembre 2017 | 12:25
«Ahora que estoy viendo a los Javis en Operación Triunfo puedo entender de dónde sale la magia»
Esta frase te define a la perfección. Soberana tontería.
Estoy con Varo, ponte a ver y recomendar cosas buenas y deja de ver series pastiche y programas de televisión que fabrican el mismo artista de pop fácil y simplón una y otra vez, una y otra vez… Así nos va.
29 diciembre 2017 | 13:14
Alfonso, tienes que abrazar la revolución sexual. A lo mejor así se te pasa la mala leche ^^
29 diciembre 2017 | 14:32
¿hay que ver paquita Salas para abrazar la revolución sexual?….No hay mala leche Cecilia, hay ignorancia por tu parte pero eso no es delito. Si eres aficionada a Operación Triunfo es normal que no tengas ni idea. Este es el país donde la se valora más la bazofia que el talento (Véase el éxito de OT, del reggaeton o de despacito)
Como consejo, si vas de experta en el tema series, no veas OT ni series españolas cómicas que plagian a sitcoms norteamericanas. Vete al cine a ver la nueva de Woody Allen o como dicen Varon ponte a ver Twin Peaks. Lo se, te exige un esfuerzo extra y en este país no estamos acostumbrados pero de verdad que merece la pena el esfuerzo y además así podrás hablar con propiedad.
29 diciembre 2017 | 14:45
Veo que no vas a seguir mis consejos. Pues ala a ver el programa de las Kardashian, una obra maestra también… 😉
29 diciembre 2017 | 15:00
A mí también me encantó. Y aquí he de puntualizar que a mí la comedia me cuesta mucho (por no decir directamente que soy una hater). Es muy divertida y está bien hecha. Cuando está a punto de traspasar la delgada línea del patetismo siempre hay un giro hacia la ternura que la salva.
Y tú sigue así, comentando series sesudas y otras ligeras. ¡Que en la diversidad está la gracia de la vida!
Abajo el «seriesmansplaining» (L.M.)
Saludos!
29 diciembre 2017 | 17:58
Varón y Alfonso, qué suerte tenemos de que compartáis vuestra sabiduría con el común de los (ignorantes) mortales como yo.
Sólo dos sugerencias:
1.- Investigad cómo se gestó este proyecto de Paquita Salas, no os vendría mal
2.- Afortunadamente no todos tenemos los mismos gustos, no creo que sea necesario insultar a nadie por intentar descubrir una serie a otras personas, y cuando algo ha sido un éxito como ha ocurrido con Paquita, será por algo, ¿no? Ah, calla, que es que todos somos ignorantes, se me olvidaba.
Feliz sábado a todos
PD: Varón, creo que los Javis saben más de guión que tú de escribir comentarios… De nada 😉
30 diciembre 2017 | 12:57
Me meo e Isa: GRACIAS. Lo de seriesmansplaining viene al pelo! Me meo, me alegra ver que se valora mi trabajo y que no todo el mundo comenta con una actitud desagradable y condescendiente. Un saludo y que tengáis una gran entrada de año 🙂
31 diciembre 2017 | 12:18