Una historia que atrapa, que mientras la ves no te deja respirar, suele ser suficiente para hacernos pasar un buen rato frente a la tele, aunque adolezca de algunos defectos como un argumento un poco «culebronesco» o una banda sonora de telefilme. Así es Liar, la miniserie de seis episodios coproducida por la cadena inglesa ITV y Sundance TV, y protagonizada por Joanne Froggatt (Anna en Downton Abbey), un thriller resultón para esos días en los que quieres olvidarte del mundo.
Vaya por delante que lo mejor de Liar es su protagonista. Los ingleses van a la cabeza en la escritura de personajes femeninos reales, y Laura Nielson lo es. Una mujer no demasiado atractiva, hosca y con mirada de loca, pero también inteligente y decidida, cuyo perfil consigue el propósito de la serie: hacer dudar al espectador sobre quién es el mentiroso. Como antagonista, Andrew Earlham (Ioan Gruffudd), un perfecto caballero, apuesto como el príncipe azul y con dentadura de semental. Encima cirujano de éxito. ¿Quién es el hipócrita? ¿A quién deberíamos creer?
A esto juega Liar: a manipularnos con nuestros propios prejuicios. Como generadora de dudas, Liar es una serie espléndida (pese a su musiquilla efectista) pero que, sin embargo, pierde fuerza cuando se desvela el principal conflicto para navegar en aguas irregulares hasta su anticlimática conclusión.
Como reclamo especial, las magníficas marismas del río Blackwater en Tollesbury (Essex), donde la protagonista practica piragüismo, con algunos planos aéreos de gran belleza. La miniserie se puede ver en HBO España.
Nota en Mis Puntuaciones
Ya sabéis que he escrito un par de libros que esperan ansiosos que les echéis un ojo. Las series de mi vida, donde hablo de series como The Wire, Los Soprano, Mad Men o Breaking Bad.
O, si lo preferís, fantasía oscura. Deseos, obsesiones, viajes en el tiempo y un lugar más allá del tiempo y del espacio llamado Araneida,