Algo tenía que hacer. Al principio y mientras duró, no lo niego, funcionó a la perfección. Pablo era tan maleducado y desobediente que al ordenarle algo, nunca obedecía y de puro mal llevado, hacía exactamente lo contrario. Al decirle que hiciera tal cosa, para él, significaba lo opuesto casi literalmente. Susana fue la primera en usar la psicología inversa. «¡Nunca limpies tu cuarto!», gritó mi mujer con voz de enojada y al día siguiente, la pieza de nuestro hijo amaneció mejor que si la hubiese limpiado ella. «No comas verduras», «no hagas la tarea», «no te cepilles los dientes» y «jugá al fútbol en el comedor», fueron solo algunas de las muchas órdenes y consejos que dieron resultado. Habíamos logrado que Pablo, al querer portarse mal, terminara portándose bien; pero finalmente tuve que intervenir. Cuando Susana lo mandó a meter los dedos en el enchufe me pareció una verdadera exageración.
Con las mujeres pasa igual , si dicen que no , que no, es que si, que si
29 marzo 2011 | 10:57
Antes aún te leia algo, antonio larrosa, ahora ya se me han quitado las ganas…. que tonto pareces en ese comentario, que pena…
29 marzo 2011 | 11:34
Cuanta razón tienes Antonio.
29 marzo 2011 | 11:51
La psicología inversa se utiliza cuando ya no tienes más remedio, de lo contrario, el/la cabezón/a se acostumbra y ya no surte efecto. Por supuesto, eso no vale para cabezones inteligentes como mi hijo, que sabía perfectamente cuando yo lo intentaba, y aunque era muy pequeño me miraba con esos ojos entornados y malvados, pensando «A mí me la va a pegar esta, como si no la conociera…»
29 marzo 2011 | 12:35
Les pasa a los niños….y a veces a los adultos también.
La sicología inversa funciona y muy bien.
Si le dices a alguien no hagas esto o no mires esto, estás tentándolo para hacerlo.
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29 marzo 2011 | 12:37
me parto con el primer comentario..jajaja
muy bueno antoniolarrosa
29 marzo 2011 | 13:03
Osea que el niño es varoncito. Pues facilmente manipulable, como todos y un poco tonto si sigue metiendo los dedos en el enchufe.
29 marzo 2011 | 13:11
Cuando Susana lo mandó a meter los dedos en el enchufe me pareció una verdadera exageración.
jejejejejejeje
Si. Un poco…
jejejejejej
Muy bueno ;)))
S2
29 marzo 2011 | 13:44
Aaaaaaahhhhhhhhhh!!!!! Ahora entiendo todo! Siento que me has sacado un peso de encima.
O sea que no es cierto cuando me dice que no me quiere, que no lo busque, que se hartó de mí.Es mentira que odiaba que me apareciera en la oficina dos otres veces por día para llevarle algo de comida (las comidas caseras son mejores, y él es tan alérgico, tan débil, tan delicado),es mentira también que no le gustaba que lo llevara y lo buscara del trabajo, que me apareciera de sorpresa!!! cuando salía con sus amigos (sabía que me extraniaba, es que no puede estar sin mí, lo sabía, lo sabía).
Tampoco es verdad que le molestaba que lo ayudara a vestirse (es un poco torpe), que le diera sus 10 dosis de viataminas diarias, que le haya hecho ver lo perniciosa que era la influencia de su familia en nuestra vida, que haya tapizado las paredes de nuestra casa con decenas de retratos nuestors abrazados pintados por mi……
Me siento tan feliz…….voy a buscarlo, debe estar en su nueva casa.Por las dudas llevo una mordaza y unas cuerdas, asi le puedo explicar más tranquilamente cómo son las cosas……
29 marzo 2011 | 16:09
En esto quien tiene experiencia
es el que en su vida tropezó
con una o un uno de los de; no, no y no.
que le agotó la paciencia
y con el tiempo aprendió.
Que para obtener un sí
debes de exigir un no.
Y el uno, o la una como es,
el espíritu de la contradicción.
Cuando le pidas un sí,
siempre te dará un no,
y cuando le pidas un no,
es cuando te dará el sí.
Más durará poco tiempo
pronto aprenden y ves un día,
que aunque le trates de engañar,
hacen todo lo contario,
de aquello que tu deseas
y solo, por fastidiar.
Si te lo hace un infante,
o bien un adolescente
pueda ser, hasta gracioso.
Pero si un adulto lo hace,
que además es tu pareja,
solo hay dos soluciones:
O te haces el tonto y aguantas
o, le dices a dios y la dejas,
igual que con las lentejas.
29 marzo 2011 | 16:10
Pues me parece una pésima manera de educar.
Aunque los resultados que obtengas son los deseados.
Lo que demuestra es que ese Pablo es tonto y tiene menos luces y la cabeza más dura que un melón.
Igualito, igualito hacen las mujeres con Larrosa.
jejejejejeje.
29 marzo 2011 | 17:34
Jajaja, los críso son increíbles…y como siempre, de todo tenemos la culpa las madres.
29 marzo 2011 | 20:03
No me digas que mis ancestros emigraron por alguna razón y no volvieron nunca más. No me digas esa razón no me la digas mas.
29 marzo 2011 | 20:15
Hola Xulita! Vi tarde tu saludo de los otros días!
29 marzo 2011 | 21:32
Se te añoraba. 😉
Un beso Penélope.
29 marzo 2011 | 21:47
Deberiamos decir que esto es un chiste o alguien podria pensar que esto funciona,
Si fuera tan facil reconducir a los adolescentes, los psicologos no tendriamos trabajo
02 abril 2011 | 21:16
Qué divertido!
20 abril 2011 | 21:29