El silencio del bosque —sonido propio del viento que cae sobre las copas de los árboles— oculta las intenciones del depredador quien asecha detrás del tronco de un pino añejado sobre el que habitan varios pájaros cantores. La cabeza se asoma para espiar mientras la cuerda se tensa y la madera del arco rechina, haciendo parar las orejas del ciervo que no alcanza a reaccionar y segundos después cae sobre los pastos secos del bosque. Un hilo de sangre escapa desde la herida de muerte en el cogote de la víctima, manchando la gramilla dorada sobre la que yace el cuerpo. La sangre tibia, roja, un poco espesa, pinta las manos asesinas que intentan cuerear la presa cuando una segunda flecha atraviesa el cuello del cazador. Un hilo de sangre escapa desde la herida de muerte en la garganta de la nueva víctima mientras el ciervo termina de ser cuereado.
El cazador cazado. Y el silencio de la muerte en el bosque.
Carla
http://www.lasbolaschinas.com
21 junio 2010 | 08:35
Duro…pero verdadero.
De depredadores esta el mundo lleno infelizmente.
El hombre como siempre llevandose todo por delante incluso a si mismo
21 junio 2010 | 12:06
mmm interesante si me importara.
http://eltostadero.blogspot.com/
21 junio 2010 | 18:39
No hay mayor depredador que el ser humano.
21 junio 2010 | 18:40
Viajamos hacia el sol escuchando canciones de sal corriendo por las venas.
Atrás dejamos el mañana que frotándose las manos nos aguarda en forma de lunes heroinómano con voz de banquero…
…no pasa nada…
Sin problema alguno, inconscientes y descerebrados nos enfrentaremos a nuestros gigantes,
felices Quijotes, creyéndonos héroes,
ignorantes marionetas que se desprenden de sus hilos buscando el sol.
21 junio 2010 | 19:26
Solo se me ocurre una cosa y es hablar del gran escritor Miguel Delibes, que escribió «Diario de un cazador»
Y aunque ha sido denostado por esta aficiíon suya, yo que lo tuve muy cerca, y mi padre cuando estaba en Valladolid, hace la tira de años, puedo decir que es, bueno era más ecologista que la cantidad de tarados que actualmente están en cualquier sarao, en fin manifestación de estas que se montan un puñado de incultos y que no tienen ni idea del ambiente rural y lo que es el campo, este d3 todos los días.
Bueno, Walt, que no es malo ser cazador.
Claro que fíjate tu , si enfrente tuyo tienes a quien sabes que hace que el astado seas tú, la flecha se dispara sola.
Lo digo por experiencia, si hace años tengo un arco tensado, una flecha,mejor dos, y en mi punto de tiro,,,,, no habría dudado. desde luego. Es que la cornamenta pesa lo suyo
22 junio 2010 | 02:55
Hey Carlos, me gustó mucho la atmósfera.
Marisa, nadie dice que es malo ser cazador. O bien sí es malo, pero todo depende de la presa que caza el cazador.
25 junio 2010 | 19:50
Walter.
Lee a El no galardonado premio nóbel Miguel Delibes, si es que no le has leído, y después entenderás que quise decir, al manifestar que un cazador mantine mejor el medio ambiente y el ecologismo que la cantidad de gilliprogres existente en la acualidad que hacen que en mi tierra ocurra estas cosas.
http://www.salamanca24horas.com/noticias/el-lobo-hace-estragos-hoy-en-la-cabana-ovina-de-sobradillo-ante-la-mirada-de-los-pastores-28853.html
26 junio 2010 | 02:28