Archivo de octubre, 2022

Disfraces de Halloween

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

Tengo un amigo

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

 

Históricas LTB: Coccinelle

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#MujeresTrans

Nació en París, el 23 de agosto de 1931 con el nombre Jacques Charles Dufresnoy. En 1958 se sometió en Casablanca, Marruecos, a una intervención quirúrgica realizada por Georges Burou, en la que se le practicó una vaginoplastia, haciéndose universalmente famosa. No fue la primera transexual en operarse pero sí la primera reconocida en el mundo entero, debido a sus trabajo como artista. Antes de la operación estuvo en la  artillería del ejército francés.

Comenzó sus actuaciones con  el nombre artístico de Jacqueline-Charlotte Dufresnoy para cambiarlo más tarde por el seudónimo que la hizo popular, Coccinelle. Debutó en 1953 en Chez Madame Arthur, célebre cabaret parisino, con una canción de Danielle Darrieux extraída de la película Premier rendez-vous.

Fundó la asociación Dévenir Femme (para ayudar a las personas que desean someterse a una cirugía de reasignación genital  ) y  participó en el nacimiento del Caritig (Centre d’Aide, de Recherche et d’Information sur la Transsexualité et l’Identité de Genre). Grabó discos y participó en películas francesas de fama incipiente, como Nuit d’Europe, Interpol Attaque y Les Dons Juans sur la côte d’Azur, en Los viciosos (1962) de Argentina, dirigida por Enrique Carreras, con Graciela Borges y Jorge Salcedo.​ También filmó con Pedro Olea la película Días de viejo color (1968). Personalidades de la época en Francia, como Edith Piaf, compartieron escenario con ella, quien llegó a actuar en el Olympia de Paris y en El Casino.

En julio de 1982 llegó a Argentina. Allí, Canal 7 Buenos Aires la contrató en exclusiva. También trabajó en Teatro de Revistas (varieté de humor) junto a grandes cómicos, como Dringue Farías. Contó su experiencia vital en Coccinelle por Coccinelle .

En España causó gran impacto a mediados de los 60, actuando en Pasapoga, una conocida sala de fiestas de la Gran Vía madrileña. Todas las noches llenaba el local y agotaba las localidades. Cuentan que, cuando finalizaba el espectáculo, se hacía un gran silencio. No había aplausos, pues el público quedaba mudo tras la actuación. Era un ejemplo de la conmoción que causó en España.

Se casó primero con un joven de nombre Francis, provocando un gran escándalo en la opinión pública, ya que no era habitual ver una mujer transexual casarse de blanco y además con su padre llevándola al altar. Más tarde en el escenario, conoce al que será su segundo marido, el paraguayo Mario.

Murió en Marsella, el 9 de octubre de 2006 a la edad de 75 años.

Lesbianismo para principiantas – Bivalbo

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

 

Mi hermosa lavandería

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

 

Considerada por la crítica una de las películas más brillantes de Stephen Frears, Mi hermosa lavandería ( My beautiful laundrette, Reino Unido, 1985), cuenta la historia de Omar (Gordon Warnecke) un joven inglés de origen paquistaní, que comienza a dirigir la lavandería de su tío (Saeed Jaffrey) con ayuda de una antiguo compañero de clase, Johnny  (Daniel Day-Lewis), un joven punk inglés. Omar y Johnny pasan de ser amigos a ser amantes, entablando una relación que escandalizará a su entorno.

El film es un fresco sobre la vida de la comunidad asiática en el Londres de la época Thacher. La inmigración, el racismo, la desigualdad social, el tráfico de drogas y los ataques de la ultraderecha, son los temas que, junto a la homosexualidad, aborda la película.

La diferencia racial entre los protagonistas plantea una cuestión interesante. La familia de Omar se encuentra en una disyuntiva y es que aunque son inmigrantes, han conseguido prosperar dentro del barrio y actúan igual que los ingleses de clase alta, sin un ápice de solidaridad ni empatía, incluso tienen comportamientos mafiosos. En este país todo se encuetra al alcance de la mano, solo hay que aprender a ordeñar el sistema, afirma Nasser, tío de Omar,  soy un hombre de negocios profesional, no un paquistaní profesional, añadiría.

El tercer largometraje de Frears, es un film de bajo presupuesto. Rodado en tres semanas en 16 mm, estaba pensado para la televisión. Su buena acogida en el Festival de Cine de Edimburgo posibilitó que se hiciera en 35 mm. Fue uno de los mayores éxitos de crítica y público en Reino Unido durante 1986.

Kueishi, hijo de paquistaní e inglesa nacido en Londres, firma con esta película su primer guión. Un debut exitoso ya que fue nominado al Óscar en su categoría, también al Bafta. Recibió el premio de la Sociedad Nacional de Críticos de Cine de Estados Unidos.

Con esta cinta, Daniel Day Lewis se dio a conocer internacionalmente. Después vendrían otros grandes éxitos del actor británico, ganador de tres premos Óscar como mejor actor por sus excepcionales interpretaciones en Mi pie izquierdo (1989), Pozos de ambición (2007) y Lincoln (2012).

Mi hermosa lavandería está considerada como la primera película LGTBI del Reino Unido. Las escenas más memorables del film tienen que ver con la pareja protagonista y sobre todo , con la destacada interpretación de Daniel Day-Lewis que construye un personaje muy atractivo.

Reseñable es que en esta cinta, rompe con la costumbre de los finales trágicos para las parejas del mismo sexo a los que el celuloide es tan aficionado.

Estereotipos- Palabras relacionadas

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

Literatura lésbica con Gloria Fortún y Elena Flores

Por Tamara Gámez Ramos, de @AltramuzEditorial

 

«Puede que ni siquiera sea digna de que Cat entre en mi casa. Pero una palabra suya bastará para sanarme». Así finalizaba el primer libro “lésbico” que me leí. Curiosamente, el único final literal que recuerdo de todos los libros que he podido leer antes y después de este. Puede ser que el mantra eclesiástico me hiciera mella (que seguro), pero también lo hizo aquel libro en el que por primera vez me zambullía en un relato superior a tres párrafos, con la clandestinidad de una portada y un título que anunciaban un texto que pudiera ir de cualquier cosa, pero que iba de mí: una pringada enamorada de su amiga hetero (¡Aleluya!).

Por aquel entonces en muchas casas existía la colección de libros del periódico El Mundo. Una mezcla curiosa entre clásicos y contemporáneos, ya que era una selección de las mejores novelas del siglo XX, con un formato tal que así: mitad de la portada de una paleta que definía perfectamente la época y otros menesteres (imagina los colores menos llamativos del universo), y una imagen jeroglífica con la misión de describir las palabras del título.

No sé cuánto tiempo llevaría la compilación en mi casa antes de que yo la descubriera, ya que su función era meramente la de decoración de unos estantes lacados en tono marrón oscuro (con los que iban fantásticos los tonos de los libros, por cierto). Por ese entonces yo empezaba a devorar todo lo lectoramente comestible a mi paso, así fue cómo les encontré otra utilidad y me topé accidentalmente con mi primera historia lésbica. Aún no había salido del armario, pero tenía claro el llamado, y Beatriz y los cuerpos celestes me vino a confirmar algo que no necesitaba confirmación.

El tiempo no ha pasado desapercibido ni por mí ni por el manuscrito. Casi 20 años después, soy más Cat que Beatriz (a Dios gracias-que ya que nos ponemos echamos el rezo entero-) y la autora se ha convertido en la evidencia perfecta del debate «¿se puede separar a la obra de la artista?»

Pero hay algo que sigue perenne en el tiempo: mi definición de este libro lésbico entrecomillado. Y es que he aquí un kit de la cuestión con muchos interrogantes: ¿Qué es la literatura lésbica? ¿Puede una persona no lesbiana escribir literatura lésbica? ¿La literatura lésbica es, por definición, feminista? Y, para rizar el rizo: ¿Por qué es necesaria esta “etiqueta”?

Como una extraña humana de hoy en día a la que no le gusta ni concibe opinar de todo, me fui a la fuente para contestar todas esas y más cuestiones. Y no había duda de que un buen lugar de emanación literaria y lésbica eran las obras de Elena Flores y Gloria Fortún.

Gloria Fortún es escritora, poeta, traductora y activista feminista. Creadora de la comunidad y taller literario Las Peligrosas, donde comparte toda su pasión por la escritura con otras mujeres. Autora del poemario Todas mis palabras son azores salvajes (Dos Bigotes, 2021). La escritura de Gloria es un impacto directo en todo lo que palpita en el cuerpo, porque «amor a medias, nunca» pero literatura a medias tampoco. Trascendidos los géneros literarios y las normas, bucea en la libertad total con las letras que ordena para nuestro placer y su antojo en Roja Catedral, su primera novela o «poema largo con partes narrativas y partes en verso». Ha participado en compilaciones como Barbarismos queer y otras esdrújulas (Bellaterra, 2017), y es traductora de obras feministas imprescindibles como Cómo acabar con la escritura de las mujeres de Joanna Russ (Dos Bigotes, 2018) o «Amigas». Relatos de amor entre mujeres, del siglo XVIII al XX (Dos Bigotes, 2020), en la que selecciona y traduce los textos junto con Eva Gallud.

Elena Flores es filóloga, poeta y activista LGBT. Autora de Redes (La Calle, 2018), Tránsito (Flores Raras, 2019) y Cábala: Amor (La Calle, 2016), uno de los pocos poemarios que, inyectados en valentía y verso libre, ponen en diálogo la religión y el homoerotismo. Su participación en Locas y Perversas (Egales, 2020) la confirman como una de las voces jóvenes más estimulantes de la narrativa lésbica en Castellano. Aunando sus dos pasiones confesables, Elena es parte de la creación y organización de la II Feria del libro LGBT de Málaga (como integrante de Andalucía Diversidad), a partir de la que surge esta entrevista en la que ambas autoras participan.

Ambas habéis formado parte de una mesa redonda titulada Literatura y activismo: una mirada lesbofeminista del arte de crear. ¿Qué es para vosotras el lesbofeminismo?

EF: Para mí lesbofeminismo es la lucha necesaria que ejercemos las mujeres lesbianas dentro del feminismo que a todas nos acoge. Creo, asimismo, que el lesbofeminismo es parte del inicio de todo, ya que la necesidad de liberarse del yugo masculino era imprescindible para aquellas que, por cuestiones de orientación sexual, no querían tener que mantener relaciones con hombres en ningún caso.

GF: El lesbofeminismo es un movimiento activista y cultural y un modo de vida mediante el cual las mujeres centran sus energías, su deseo y su atención en otras mujeres, sin compararse ni medirse con los hombres.

¿Por qué es importante incluir una mirada lesbofeminista en la comprensión y creación artística?

EF: Creo que nos merecemos que haya contenido cultural que nos represente porque el arte es la forma de expresión más libre, donde nadie te juzga y todas las personas del mundo tienen su propio espacio. ¿Por qué nosotras no íbamos a tenerlo? Y, sobre todo, ¿por qué no íbamos a utilizarlo para reivindicar? Al fin y al cabo, el hecho de que el feminismo lesbiano se transforme en arte solo es un proceso natural para luchar contra la doble invisibilidad que sufrimos las mujeres sáficas.

GF: Porque el canon supuestamente universal del arte y la literatura no es sino un registro de opciones que hicieron quienes tuvieron el privilegio de elegir, que fueron los hombres blancos y heterosexuales. Por tanto, a las mujeres lesbianas nos han robado nuestra historia, nuestro arte, nuestra literatura. Esa mirada es un intento por recuperar los silencios del canon.

¿Cuál es la representación de las mujeres lesbianas que se ha venido realizando en la literatura?

EF: La literatura lésbica es, quizás, una de las más abundantes. Si es cierto que las primeras representaciones de mujeres lesbianas en los libros fueron escritas por hombres. Yo siempre digo que hay que evidenciar cómo en La Celestina ya hay una escena lésbica que se incluye con una normalidad anodina para la época, de ahí en adelante, solo hace falta indagar, porque hay toda una serie de personajes que nos dejan claro que la homosexualidad femenina es más común de lo que nos habían hecho creer.

GF: En la literatura siempre ha habido representación lesbiana, aunque a veces no se ha leído como tal. Leemos bajo determinados parámetros, como el heterosexual. Junto con Eva Gallud, traduje un libro titulado “Amigas” en el que rescatamos relatos animando a leerlos, por primera vez, desde parámetros lésbicos. Es una experiencia extraordinaria.
¿Hay algún cambio respecto a lo anterior en la actualidad?

EF: Por supuesto, ahora no hay que ir mirando con lupa las interpretaciones posibles. Las estanterías de las librerías acogen la literatura lésbica con cierta normalidad. Es verdad que no deja de ocurrir que es más fácil encontrar literatura gay que literatura lésbica, pero ambos ya hemos superado el que se escondan nuestros libros en el fondo del depósito de las bibliotecas y librerías dentro de la sección prohibida.

GF: Afortunadamente, hay muchas más escritoras lesbianas visibles y más personajes de mujeres abiertamente lesbianas.

¿Cuál crees que es la visibilidad de las mujeres escritoras en la actualidad? ¿y de las escritoras lesbianas?

E.F: Aunque sé que la cosa ha mejorado enormemente, sigo pensando que nos queda mucho por conseguir. Quiero creer que esta evolución hacia la visibilidad plena seguirá el camino que está teniendo y que, cada vez más, el arte feminista y el arte lésbico irán más allá de nuestros propios circuitos.

GF: Todavía tenemos mucho camino que recorrer porque sigue vigente ese canon «universal» del que te hablaba antes. Para ser realmente visibles necesitamos desmantelar ese canon y crear otro diferente cuyas pautas no hayan sido marcadas por los mismos de siempre.

¿Cuáles han sido tus referentes lésbicos en tu proceso creativo?

EF: Sé que es muy típico, pero para la poesía, Safo de Lesbos y Gloria Fuertes. Aun así, siempre reconozco que para mí ha sido muy importante el círculo de autoras con las que me he ido relacionando a lo largo de estos años. Son compañeras y amigas, las leo y me emocionan y, en cierta manera, configuro muchas de mis ideas en base a las suyas. Por eso siempre que me preguntan me gusta hablar de Prado G. Velázquez, Mila Martínez, Martha Lovera o Eva Baltasar, que están publicando en estos momentos, pero ya pueden ser consideradas grandes escritoras lesbianas que cumplen el papel de referentes en nuestros días.

GF: Te digo unas cuantas escritoras, aunque hay tantas… Gloria Fuertes, Elena Fortún, Jeanette Winterson, Audre Lorde, Adrienne Rich, Esther Tusquets…

¿Cómo influye tu identidad en tu proceso creativo?

EF: Mi identidad en el proceso creativo lo es todo. La poesía es la escritura del yo, por lo tanto, todo lo que viva, sienta y padezca va a estar reflejado en los versos. Más aún si estoy hablando de amor o activismo, que es lo que más trato en mis libros. Muestro siempre lo que soy, porque no puedo mostrarme de otra manera y el proceso creativo se hace de acuerdo con mi identidad como persona LGBT.

GF: La falta de referentes, pues nos los han usurpado, hace tortuosos el camino creativo de las mujeres, aún más si somos lesbianas. Pero qué delicia al mismo tiempo resulta tener todavía todo por contar.

¿En qué momento comenzaste a ser activista lesbofeminista dentro del mundo de la cultura?

EF: Desde el primer momento. Cuando saqué mi primer libro sobre homoerotismo y Biblia fue toda una declaración de intenciones, ya que no había otra opción que ser activista. Para mí es algo esencial, ya que escribo sobre mis preocupaciones y mis sentimientos, de modo que, aunque son subjetivos, creo que representan bastante bien la agenda que se está llevando a cabo desde los diferentes movimientos sociales en los que actúo, no solo como escritora, sino como activista a pie de calle.

GF: Desde que me comprometí con mi escritura y me presenté siempre ante la página en blanco para poner en el mundo lo que solo yo puedo poner.

¿Por qué comenzó este activismo?

EF: Para mí fue un proceso natural. Siempre he tenido un espíritu muy crítico con lo que me rodeaba y nunca he sabido callarme. Me gusta la idea de poder cambiar el mundo granito a granito, y el activismo es la forma en la que las personas que no tenemos poder podemos generar los cambios que esperamos. Por eso empezó y por eso aún sigo hoy aquí. Me gusta la idea de que la Cultura puede cambiar el mundo.

GF: Porque una vez encuentras a las tuyas, y te unes, e imaginas en comunidad nuevas formas de vivir, ya no hay vuelta atrás. 

Selma Laguerlöf

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#Mujereslesbianas

 

Selma fue la primera mujer en obtener Premio Nobel de Literatura. Lagerlöf nació en la localidad sueca de Marbacka en 1858. Descendiente de pastores, su familia atravesó muchos apuros económicos.
De niña sufrió displasia de cadera por lo que llevó una vida sedentaria. Esta circunstancia alimentó su afición a la lectura.

A los 10 años comenzó a interesarse por las obras de H.C. Andersen, los Hermanos Grimm y Alexandre Dumas . En la adolescencia, leyó a William Shakespeare, Lord Byron y Johann Wolfgang von Goethe.

Inició su carrera literaria a los 12 años con un extenso poema sobre Mårbacka Tres años más tarde la enviaron a Estocolmo a terminar sus estudios . Ya en esa época Selma tenía claro que no le interesaban las tareas domésticas. Ella misma contaba: además de ser torpe en la cocina y peor en el bordado.

La mala situación económica de su familia hizo que Selma comprendiera que tenía que aprender una profesión para vivir. Se decantó por la docencia , pero no encontró la manera de financiar su aprendizaje. Gracias a un préstamo que le consiguió su hermano Johan, pudo comenzar los estudios en Estocolmo . Primero estudió en el Liceo Sjöberg para Señoritas y al año siguiente ingresaría en el Real Seminario Superior para Estudios Docentes, una universidad para jóvenes damas con talento. Selma era mayor que sus compañeras y esta circunstancia hizo que la consideraran más madura. Además se hizo popular entre las demás alumnas por sus sonetos y poemas.

Fue maestra en Landskrona durante diez años. Su vida como docente se fue desarrollando junto a su afición literaria. Las alumnas de Selma estaban cautivadas por sus amenas lecciones. En esa época se dedicó también a escribir artículos para el periódico y la iglesia locales.

Sophie Adlersparre, destacada figura del movimiento feminista sueco la invitó a visitarla después de leer sus sonetos. Adlesparre la animaría a cultivar su prosa.

Por esa época ganó un concurso organizado por el periódico cultural Idún. Dos años después escribiría La saga de Gösta Berling. Esta novela en un principio no llamó la atención del público, por lo que Selma pensó que su carrera literaria no prosperaría. Lo cierto es que el crítico literario Georges Brandes escribió una brillante reseña de la obra en el periódico Politiken, avivando un gran interés entre los lectores de Dinamarca. Esto marcaría el comienzo de una nueva etapa en la vida de Selma Lagerlof.

Sus avances en la literatura hicieron que en 1895 abandonase la enseñanza para dedicarse en exclusiva a la escritura.

La escritora creció escuchando los relatos de su abuela, una mezcla de elementos cristianos y paganos. Estos cuentos tendrían gran influencia en el hacer literario de Selma como demuestra El cuento de Gösta Berling.

Después de un viaje por Egipto  escribió Jerusalén: en Dalecarlia (Jerusalem: i Dalarne) (1901) y Jerusalén: en la Tierra Santa (Jerusalem: i det heliga landet) (1902). Estas obras convirtieron a Selma en la novelista sueca más leída y respetada.

El gran éxito de Lagerlöf hizo que el rey  Oscar II de Suecia y Noruega y la Academia Sueca decidieran apoyar a Selma para que viviese desahogadamente y así pudiera dedicarse en exclusiva a escribir. Esta ayuda propició que la novelista establecerse en Falun, donde pasaría la mayor parte de su vida.

En 1894, Selma conoció a la que sería su pareja, la también escritora Sophie Elkan. Otra amante de Selma fue la maestra y sufragista Valborg Ohlander

Selma Lagerlöf ocupó sus últimos años en ayudar a escritores y pensadores a esconderse de la persecución nazi . Los esfuerzos de aquellos años mermarían su salud. La escritora falleció a los 81 años de un ataque masivo al corazón.

Lagerlöf fue la primera doctora sueca honoris causa de filosofía , recibió el premio Nobel en 1909 e ingresó en la Academia sueca en 1914.

En la entrega del premio Nobel a Selma, el presidente de la Academia, Claes Annerstedt destacó el retrato totalmente original de la vida campesina, la pureza de su dicción, la claridad de la expresión y la bella musicalidad que son características de todos sus escritos. La grandeza de su arte consiste precisamente en su habilidad para utilizar tanto su corazón como su genio para lograr el peculiar y original carácter y las actitudes de sus personajes, en los cuales todos nosotros nos reconocemos.

Aproximación al chemsex en España 2021, por Apoyo Positivo

Por Apoyo Positivo

 

Desde Imagina Más y Apoyo Positivo lanzan esta nueva edición del estudio «Aproximación al Chemsex en España», que realizaron en 2016, para dimensionar hasta dónde está calando la problemática del chemsex, y del uso sexualizado de drogas, especialmente entre hombres gais, bisexuales, otros hombres que tienen sexo con hombres, y otras identidades que puedan estar haciendo esta práctica.

Escuchar y conocer la realidad de las personas que practican chemsex, o uso sexualizado de drogas ya sea puntual o habitualmente, nos permite diseñar respuestas comunitarias que cubran las necesidades y problemáticas que está ocasionando este fenómeno en la salud de muchas personas, y en el conjunto de nuestro colectivo.
Un problema como el chemsex debe ser abordado entre toda la comunidad, y participando en esta encuesta, y / o en su difusión, puedes formar parte de esa respuesta comunitaria.
La encuesta se llevó a cabo los primeros meses del año 2021 y aquí se puede descargar el estudio con los resultados.

APROXIMACIÓN AL CHEMSEX 2O21: Encuesta sobre hábitos sexuales y consumo de drogas en España entre hombres GBHSH (pulsa para descargar)

El chemsex o sesión en España, se ha convertido en un problema de salud pública debido a sus riesgos asociados. Esta práctica se ha relacionado en los últimos años con el uso intencional de sustancias psicoactivas para facilitar, mantener y/o mejorar la experiencia sexual. Aunque el uso de drogas y su asociación con contextos sexuales es conocido desde hace décadas, los cambios en el patrón de consumo han relacionado el chemsex principalmente con hombres gays, bisexuales y otros hombres que tienen sexo con hombres (GBHSH). El documento de consenso del 2o European ChemSex Forum, define el chemsex como “un tipo particular de práctica de consumo sexualizado de sustancias, entre hombres gays, bisexuales, otros HSH, y personas trans y no binarias que participan en la ‘cultura de sexo casual o sin compromiso’ gay”.

Esta práctica, a menudo, tiene como objetivos aumentar la excitación y las experiencias sexuales intensas, así como manejar la inhibición y la falta de confianza para realizar determinadas prácticas sexuales. El uso de sustancias para mejorar la experiencia sexual puede conducir a conductas sexuales de riesgo y, con ello, a un mayor riesgo de contraer infecciones de transmisión sexual (ITS), incluido el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH). Además, el chemsex también podría estar asociado con riesgos para la salud mental como la depresión y la ansiedad. Este fenómeno también es conocido como “Party and Play” (abreviado como “PnP”), “intensive sex party”, «4/20», «chill outs», y en España “sesión”, “chuches”, “vicio”, “guarrichill”, o “chill”.

Aunque muchos GBHSH perciben el uso de drogas en el ámbito sexual como un comportamiento común y normalizado, el grado y frecuencia del consumo de sustancias psicoactivas antes y/o durante las sesiones de sexo varía ampliamente entre los GBHSH. La prevalencia del chemsex presenta grandes diferencias entre los distintos estudios, oscilando entre el 4% y el 94%. Probablemente las estimaciones de prevalencia varíen tanto debido al método de reclutamiento, el perfil de los usuarios entrevistados y la elección de las sustancias utilizadas para el chemsex.

(Extracto del informe: Íncera D., Gámez M., Ibarguchi L., García A., Zaro I., Alonso A. Aproximación al Chemsex en España 2021: Encuesta sobre hábitos sexuales y consumo de drogas en España entre hombre GBHSH». Madrid: Apoyo Madrid: Apoyo Positivo e Imagina Más; 2022)

Algunas conclusiones
● El consumo de sustancias con fines sexuales supone un problema de salud pública que afecta principalmente a GBHSH. Este es uno de los escasos estudios realizados hasta la fecha que analiza la incidencia del consumo de drogas con fines sexuales en una amplia muestra de GBHSH que practican chemsex residentes en España. Los resultados de este estudio expanden la investigación previa de la Aproximación al Chemsex en España del año 2016, mostrando datos actualizados sobre variables demográficas, sustancias, métodos de prevención, hábitos sexuales, ITS, y resultados de s alud mental entre GBHSH que practican chemsex.

● Algunas características asociadas al chemsex han hecho de esta práctica un fenómeno particularmente asociado a GBHSH. Entre estas, encontramos el papel de las redes sociales de geolocalización, los lugares donde se llevan a cabo estos encuentros, y las motivaciones que subyacen al chemsex. Este estudio muestra la importancia de las redes sociales de Internet, siendo el método de contacto preferido de los participantes para contactar con otras personas para practicar chemsex.

● En cuanto al VIH, una amplia mayoría refirieron haberse realizado la prueba en algún momento, de los que cuatro de cada diez señalaron haber sido diagnosticados por el VIH. La mayoría tomaban el tratamiento retroviral, eran indetectables, y no tenían olvidos en el tratamiento. Casi un tercio de los encuestados refirió haberse realizado la prueba hace 3-12 meses, mientras que un 16,6% indicaron que se la hicieron hace más de un año.

Estos datos indican la importancia de crear conciencia sobre el chemsex como un problema de salud pública en GBHSH. Resulta necesario diseñar programas de identificación, educación y prevención específicos que reduzcan la incidencia de las consecuencias más indeseables del chemsex en GBHSH, independientemente de su orientación sexual. Concretamente, la intervención debería focalizarse en proporcionar información y conocimientos para la prevención de ITS y otras complicaciones para la salud física y psicológica, además de promover un abordaje centrado en las necesidades de quienes hacen chemsex, como la abstinencia y la minimización de riesgos y daños. Por último, es necesario favorecer una evaluación integral de los resultados de salud física y mental por parte de equipos multidisciplinares formados y especializados en la idiosincrasia de este fenómeno. La coordinación de estos equipos con entidades no gubernamentales especializadas en salud sexual supondría una valiosa asociación para promover el cuidado y la salud de los GBHSH que practican chemsex en España.

En nuestra guía de Instagram puedes encontrar una serie de vídeos que hemos preparado para saberlo todo sobre el #Chemsex Te explicamos desde qué es Chemsex, el principal motivo por el que se consume y cómo puedes ayudar a alguien que tiene un uso problemático con las drogas en entornos sexuales.

Homofobia interiorizada

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)