Archivo de diciembre, 2019

Instrucciones de uso para entrar en el 2020

Por Boti García Rodrigo (@btcpd ), activista LGTBI

Foto: Phil Roeder

Se nos acaba el año. Otro, uno nuevo, empezará el día en que arranquemos la última hoja del calendario, la última de las 365 que lo han compuesto. Ya está a la vuelta de la esquina del tiempo el sonido del reloj que, entre voces, brindis y deseos cerrará el año que nos deja, para dar  bienvenida y  relevo  -¡ay!-  al siguiente.

Mas, antes de que llegue ese momento parece adecuado refrescar algunas instrucciones y aventurar algún consejo para la ocasión.  Recordemos que no hay que confundir los cuartos con las campanadas: en primer lugar sonarán los cuartos y luego, tan,tan,tan,tan, arrancarán las campanadas que serán, como acostumbran, doce, de solemne sonido y ritmo acompasado. Lee el resto de la entrada »

Diario de dos papás: “mi hija, hijo o hije” (página 2)

Cada domingo Juan Andrés Teno (@jateno_), periodista y activista LGTBI especializado en Diversidad Familiar, escribe este Diario de dos papás. Estamos en la página 2.

Foto: Claudia Heidelberger

Soy un hombre, soy gay, estoy casado, tengo un hijo, próximamente seré padre de nuevo y tengo miedo. No esa clase de miedo que te paraliza y te embota el brillo de los ojos, no el miedo que te hace huir para refugiarte en el cálido confort de tu trinchera. No, no es ese miedo. Tengo miedo del dolor ajeno, del daño causado a quien no puede defenderse, de las lágrimas de pesadumbre que se amasan en los ojos de quien no comprende la maldad ajena. Tengo miedo de algunas personas, tengo miedo de ti.

Escribo desde la más absoluta libertad personal y del mismo modo que lo haría si estas páginas no fueran a ser leídas jamás por nadie, con esa desvergüenza torera que te impulsa a ser sincero más allá de lo políticamente correcto, más allá de lo que es conveniente a mi imagen pública, más allá de lo que debiera. Lee el resto de la entrada »

¿Quién teme a lo queer? – Navidad, imanes y fantasmas

Por Victor Mora (@Victor_Mora_G ‏)

Si quieres mandar preguntas o comentarios a Víctor Mora puedes escribir DM o de forma anónima a: https://curiouscat.me/Victor_Mora_G

 

Una vez al año todos estos discursos – de la religión, del Estado, del capital, de la ideología, del ámbito privado, de los discursos de poder y de la legitimidad – coinciden armoniosamente dando lugar a un monolito que algunos contemplamos con tristeza.

Eve Kosofsky Sedwick.

 

Edith Massey Christmas card collection. 12. Baltimore or Less

 

  • Me voy – dije una vez, sin querer hacerlo.
  • No, por favor – respondió -. No signifiques “el que se va.”

Ojalá pudiera, pensé, significar ahora mismo algo tan sencillo como “el que se queda.” Pero no podía, o sí, pero no lo hice. La fuerza de un discurso preexistente me alejaba. Porque a veces no es posible habitar el texto que deseamos, ni quedarnos siquiera en la línea que compartimos con otros semas, contigo entonces.

Porque no siempre significamos lo que queremos significar. No creo, de hecho, que lo consigamos nunca.

¿Por qué nos alejamos?

Hay veces que la fuerza cultural, la inercia poderosa de la estructura que preexiste a nuestros cuerpos y que los distribuye formalmente en el espacio nos aleja, como se repelen dos imanes de polos iguales. A veces el contacto se hace imposible, incluso cuando ha sido intenso antes, incluso cuando no podemos explicarnos porqué. Lee el resto de la entrada »

¡Felices fiestas!

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

Y la culpa no era mía – II

Por Laura Ramírez Martín ()

 

‘El violador eres tú’ en boca de miles de mujeres de todas las edades frente al Estadio Nacional de Chile, el 4 de diciembre de 2019 #LasTesisSenior


 
Son abuelas, madres e hijas chilenas. Primero escúchalas.

Luego trae a tu memoria a tu abuela. Ahora ubícala en su juventud en el contexto en que vivía. Si eres chileno, argentino, colombiano, nicaragüense, etcétera, tu abuela vivió una dictadura patriarcal. Huy, y si eres español también.

Hazte a la idea, entonces, de que tu abuela tuvo que vivir bajo el mandato primero de su padre y después de su marido. Hazte a la idea, entonces, de que si al marido o al padre le daba la gana podía joderle la vida a su hija o su mujer. En muchos sentidos. Si le daba la gana. Porque sencillamente tenía el poder.

Piensa en tu madre ahora. Y piensa que su educación y su vida, también en dictadura, estaba basada en obedecer, atender, quitarse de en medio y ponerse al servicio y las órdenes del hombre. Del abuelo, padre, hermano. Cura, boticario, maestro. Y la mujer ahí, mirándolos y sin mirarse. Lee el resto de la entrada »

Y la culpa no era mía – I

Por Laura Ramírez Martín ()

Coreografía de ‘Un violador en tu camino’ en Bilbao.ECUADOR ETXEA

Hace unos días sostuve varias conversaciones con amigos sobre el vídeo viralizado de ‘El violador eres tú’ y un artículo defendiendo el derecho de las mujeres a la ira.

Parece ser que en el vídeo no queda claro quién es el violador. Tampoco está claro por qué se tapan los ojos. Y surgen cuestiones como que si los hombres pueden participar de la danza, si los hombres no son también víctimas del machismo, si no pueden amar también ellos a las mujeres como pueda hacerlo otra mujer… si hay mujeres machistas (esta nunca falta)… también oigo que por ese camino no conseguiremos nada.

Son hombres que quiero y me quieren. Y no es siempre, no son todos, pero me pasa a menudo ante cualquier expresión alrededor del feminismo que noto, para empezar, una tendencia a la defensa y a la alusión. Hay diferentes grados, claro. Luego por ahí he visto que la red se ha llenado de ataques frontales por cegueras endémicas y mucho reduccionismo simplista y retrógrado. Parece que va haciendo falta un teléfono como el de los cabreados con Greta Thunberg. Un número al que llamar para hombres (y mujeres, que sí, que también hay mujeres) enfadiscados con el feminismo. El efecto espejo no tiene desperdicio. Lee el resto de la entrada »

Diario de dos papás: «estamos embarazados» (página 1)

Cada domingo Juan Andrés Teno (@jateno_), periodista y activista LGTBI especializado en Diversidad Familiar, escribe este Diario de dos papás. Empezamos por la página 1.

Foto: ryanhsuh31

A sólo unos días de celebrar las fiestas de Navidad ya podemos decir que estamos embarazos. Están todos los trámites finalizados y comienza la segunda fase de la espera para poder convertirnos de nuevo en padres. Tras nueve años de nuestra primera incursión en la crianza ya estamos preparados poder recibir en nuestra casa a un nuevo integrante de la familia que, sin duda,  alterará el orden establecido y duplicará las risas, los llantos y todo aquello que, por suerte, acarrea el ejercicio de la parentalidad.

No, no sabemos su sexo, hasta que sea una realidad no descubriremos si nuestro hijo tendrá un hermanito o una hermanita. Más allá de las predilecciones personales por una u otra posibilidad, es algo que, en realidad, carece de importancia.

Sigue sin ser fácil afrontar la paternidad en caso de dos hombres gais. Los prejuicios siguen estando a flor de piel: la sociedad sigue buscando con desespero la presencia de una mujer, que es la que verdaderamente está preparada para las tareas de crianza; continúan en pie y con más fuerza que nunca quienes dudan de que dos personas del mismo sexo puedan tener hijas o hijos; habrá que reabrir el lento y laborioso trabajo para que en su futuro colegio aborden con naturalidad la diversidad familiar… Lee el resto de la entrada »

La dignidad humana colectiva de las personas LGTBI

Por Charo Alises (@viborillapicara)

 

En la imagen, a la derecha, Mykola, líder del grupo neonazi pilla-pilla que ha sido condenado a 5 años de cárcel.

La comisión de un delito de odio no solo afecta a la víctima sino que constituye una agresión a la dignidad humana del colectivo al que la víctima pertenece.

El Tribunal Constitucional en su Sentencia 714/1991 de 11 de noviembre, reconoce la dignidad humana colectiva:

El odio y el desprecio a todo un pueblo a una etnia (a cualquier pueblo o a cualquier etnia), resulta incompatible con el respeto a la dignidad humana, que solo se cumple si se atribuye por igual a todo hombre, a toda etnia, a todos los pueblos.

Por lo mismo, el derecho al honor de los miembros de un pueblo o etnia, en cuanto protege y expresa el sentimiento a su propia dignidad, resulta, sin duda, lesionado cuando se ofende y se desprecia genéricamente a todo un pueblo o raza cualesquiera que sean.

El artículo 22.4 del Código Penal establece la agravación de la pena cuando se comete  por motivos racistas antisemitas, religiosos o creencias de la víctima, la etnia, la raza o nación a la que pertenezca, su sexo, su orientación sexual, razones de género,  enfermedad que padezca o discapacidad. Esta agravante tiene su fundamento en  las situaciones objetivas de especial vulnerabilidad que presentan  algunos colectivos y que les hace merecedores de una específica protección

La  reciente Sentencia  429/2019 de  10 de diciembre, dictada por el Juzgado Nº 2 de Granollers, reconoce la dignidad humana colectiva de las personas LGTBI. Esta  resolución condena a seis de los miembros de un grupo llamado Pilla-Pilla a penas que oscilan entre los nueve meses y los cinco años y medio  de cárcel, por humillar públicamente a hombres homosexuales, a los que citaban a través de un chat gay para dispensarles un trato vejatorio que grababan en video. La sentencia dictamina:

Se hace preciso constatar la existencia de un plus delictivo por el cual es preciso que la sociedad, en su conjunto, se conmueva ante lo discriminatorio de la situación porque en el delito concurre, además de la situación descrita en la tipicidad, un plus que afecta a la tolerancia, que afecta a la convivencia pacífica, haciendo que la situación fáctica del delito conlleve además una conmoción social sobre el contenido de respeto y de quebranto de la necesaria tolerancia. De esta manera, el hecho no sólo perturba a la víctima, sino también  al conjunto de la sociedad puesto que el hecho, además, pone de manifiesto un problema de convivencia por la discriminación en la que se basa.    

En este caso, por primera vez, se han unido la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB), la Fundación Triángulo y Movimiento contra la Intolerancia para ejercer la acusación popular en defensa de la dignidad humana colectiva de las personas LGTBI.

Bolleras tensionando los espacios

Por Ana Murillo (@anamurilloa), bollera, feminista y activista LGTB

Foto: Ángel Leranoz (EHGAM) | Archivo MALEANTES

Ocurre de nuevo. Me pregunto y pregunto a mis compañeras bolleras: ¿creéis que es casualidad que, cuando vais de la mano por la calle con otra mujer, alguien se choque contra vosotras? El número de veces que me ha pasado es lo suficientemente significativo y llamativo como para pensar que no es producto del azar o de la torpeza de unos y otras.

En ese choque, en ese cuerpo ajeno que se abalanza contra nuestro cuerpo y en nuestro gesto extrañado de apartarnos o retroceder, se concentra toda la violencia heteropatriarcal que nuestros cuerpos bolleros absorben y normalizan por ocupar un espacio público que parece no pertenecernos. Nos lo han hecho saber de formas muy diversas a lo largo de nuestra historia. Desde las miradas de desaprobación a las agresiones verbales, físicas y sexuales, pasando por el aislamiento y la negación de nuestros derechos, en cada uno de los lugares que hemos querido habitar y que hemos querido reivindicar también como propios.  Lee el resto de la entrada »

La política de familia en Andalucía es en singular

Por Juan Andrés Teno (@jateno_), periodista y activista LGTBI especializado en Diversidad Familiar

Foto: EFE/José Manuel Vidal

Andalucía tiene el extraño privilegio de ser el primer territorio del estado en el que se ha experimentado el tripartito de las derechas para desarrollar una labor conjunta de gobierno. El Partido Popular y Ciudadanos formaban gobierno gracias al acuerdo de legislatura con Vox, que imponía una serie de condicionantes para posibilitar un gobierno de coalición entre las que destacan el punto 13, que avanzaba la posibilidad de implantación del pin parental en educación y que después ha sido ratificado por los tres partidos en el acuerdo presupuestario de este año, y el punto 18 que pedía la creación de una Consejería de Familia. Ambos se están cumpliendo.

Cuando se forma el Gobierno Andaluz y el Partido Popular y Ciudadanos se reparten las consejerías hubo un movimiento que alertó a la ciudadanía sobre las intenciones que se estaban urdiendo desde Génova. La Consejería de Asuntos Sociales quedaba en manos de Ciudadanos, pero el Partido Popular le arrebataba las políticas de familias, que pasó a ser de su competencia, incluyéndose en la Consejería de Sanidad, que pasó a denominarse de Sanidad y Familias. De este modo, los populares podían atender la exigencias que sobre esta materia les venía imponiendo la extrema derecha y que resultan letales para el concepto de diversidad familiar. Lee el resto de la entrada »