Por Charo Alises (@viborillapicara)

Carátula de la película ‘Media hora más contigo’ (Desserts Heart)
Le di la vuelta a la carátula para leer el argumento y flipé: una profesora de literatura que va a un pueblo a tramitar su divorcio y conoce a una joven lesbiana y después de blablabla… se lían. Esto último –lo del lío– era lo que más me interesó a mí, la verdad sea dicha. Yo, hasta ese momento, no había visto jamás una película con un argumento tan fantástico. Total, que feliz y contenta con mi hallazgo cinematográfico, cogí la peli dispuesta a alquilarla, no sin antes elegir otra película al azar- así sin escaneo ni nada- porque me daba mucha vergüenza llegar al mostrador únicamente con esa peli tan fantástica. Pensé, astutamente, que en entre el mogollón de las dos películas, se notaría menos que me llevaba una de dos mujeres que terminaban acostándose. Llegué al mostrador y le di a la chica que allí atendía las pelis para alquilar. Ella muy amable, mira la peli fantástica y luego me mira a mí para decirme en tono maternal: esa película no te va a gustar; ¡mierda!, pensé yo. Al final me dio tanta vergüenza que la dejé en el mostrador y me llevé solo la otra, la que había utilizados para disimular.
Después de ese episodio, pasaría un tiempo antes de que tuviese mi primera relación con una mujer.
Ha llovido mucho desde entonces y, aunque parezca una tontería, a veces pienso que, quizás, viendo aquella película esa tarde -cuando solo tenía diecisiete años-, podría haber aclarado antes mis sentimientos y mis deseos. A las personas LGTB, muchas veces, nos resulta complicado encontrar referentes con los que identificarnos. La mayor parte de las imágenes que vemos, de los textos que leemos y de la música que escuchamos nos trasmiten afectos y deseos que nos son ajenos.
Por eso, son tan importantes para el colectivo de lesbianas, gais, bisexuales y trans (LGTB) los libros, las películas, las series de televisión y otras producciones culturales que, de forma específica, cuentan nuestras historias, reflejan nuestras vivencias, nuestros deseos y nuestra sexualidad. No menos importante es, además, que en las series generalistas de televisión y en cualquier tipo de película o libro, tengamos representación. Personas LGBT habitamos en todos los espacios de la sociedad, también en los espacios de ficción, debemos estar presentes.
Por cierto, una tarde de verano, cuando ya me habían caído treinta y nueve primaveras, por fin vi Media hora más contigo.
Esta peli es de las primeras que vi en la que había una relación total de dos mujeres y que no termina mal , claro.. ya sabemos como terminan las pelis de lesbianas (mal) . La verdad que me encantó y aún hoy me gusta tanto el tono cincuentero como la interpretación de Vivian.
La primera pelicula con una relación que vi fué una llamada Personal Best, y como siempre la echaban en la 2 que es una mina de peliculas interesantisimas.La peli es malilla pero ese tipo de pelis se veían con cuenta gotas.
Un saludo. 🙂
25 julio 2016 | 22:27
[…] «Por eso, son tan importantes para el colectivo de lesbianas, gais, bisexuales y trans (LGTB) los libros, las películas, las series de televisión y otras producciones culturales que, de forma específica, cuentan nuestras historias, reflejan nuestras vivencias, nuestros deseos y nuestra sexualidad. No menos importante es, además, que en las series generalistas de televisión y en cualquier tipo de película o libro, tengamos representación. Personas LGBT habitamos en todos los espacios de la sociedad, también en los espacios de ficción, debemos estar presentes.»
Claro que sí, Alises!! #VisibilizarEduca #EducarSensibiliza #SensibilizarHumaniza
26 julio 2016 | 11:31