Charo Alises (@viborillapicara) nos trae una de las novedades del Festival de Málaga de Cine Español: la incorporación de una mirada arcoíris.
“Yo solo fui un señor que nació pobre en Málaga, trabajó toda su vida y le gustaron los hombres. Y ahí se acaban todos los símbolos”.
De esta forma se definía Miguel de Molina, artista, homosexual, valiente y visible. En un tiempo -el de la dictadura franquista- muy peligroso para la diferencia, Miguel de Molina desafió al poder, a las leyes represoras y a las convenciones retrógradas de su época. Pagó un precio muy alto por su visibilidad insolente: fue torturado y obligado al exilio. Esta vida de artista transgresor y activista singular, es motivo más que suficiente, para que el recién creado Premio LGTB del Festival de Málaga de Cine Español lleve su nombre.
Con este galardón, el Festival de Málaga fija su mirada en la diversidad sexual y de género. Otros importantes certámenes cinematográficos, dentro y fuera de nuestras fronteras, también conceden un espacio a la creación audiovisual LGTB. El Festival Internacional de Cine de Berlín entrega, en cada edición, el Premio Teddy a películas de temática gay, lésbica, bisexual y transgénero. El Festival de San Sebastián, otorga anualmente el Premio Sebastiane, que reconoce a la película que refleje de un modo más adecuado, los valores y la realidad de las personas lesbianas, gais, bisexuales y transexuales. Desde 2014, el Festival de Cine Europeo de Sevilla concede el Premio Ocaña a la mejor película LGTB.
El Premio Miguel de Molina es una iniciativa de las entidades Arco Irís y Ojalá de Málaga, y cuenta con el apoyo inestimable del grupo local de Málaga de Amnistía Internacional, organización siempre comprometida con la defensa de los derechos humanos de las personas LGTBI.
Esta distinción pretende incentivar la producción cinematográfica LGTB en España. Se persigue, que las películas que abordan la diversidad sexual y de género en nuestro país tengan difusión más allá del público LGTB, dándole relevancia en los medios de comunicación generalistas. No hay que olvidar la importancia del cine como medio para visibilizar y normalizar la realidad de las personas lesbianas, gais, bisexuales y transgénero. El séptimo arte es, además, un potente instrumento para reivindicar la igualdad y denunciar la discriminación y la vulneración de derechos por motivo de orientación sexual e identidad de género.
El Premio Miguel de Molina consta de tres categorías: un premio honorífico, un premio a la mejor producción audiovisual joven y el premio a la mejor película LGTB. El pasado 16 de abril, dentro de las actividades previas al Festival, se entregaron el Premio Honorífico que recayó sobre el director malagueño Ramón Salazar, y el Premio a la Mejor Producción Audiovisual Joven que fue para el cortometraje “Lesbiana ya no es una palabra tabú”. Mañana, 26 de abril, tendrá lugar la gala de entrega del Premio Miguel de Molina a la Mejor Película LGTB. Este galardón aporta una mirada arcoiris al Festival de Málaga de Cine Español.
Hay que tener comprensión resignación y paciencia en todo . A los tipos raros que nos gustan las mujeres no nos queda otra.
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25 abril 2015 | 14:08