Señor presidente electo Trump,
Le escribo desde el estupor lejano de quien desde España no comprende aún qué han visto sus compatriotas en usted para votarle en masa. En forma y contenido, es usted la antítesis del ideal de lo que considero como un líder necesario. En cualquier caso, no queda otra que aceptar su victoria y desear que en el Despacho Oval demuestre que bajo su mata de cabello rubia hay más empatía, sensibilidad y sesera de la que ha exhibido durante la campaña electoral y gran parte de su vida. Si no, nos esperan cuatro años demasiado largos.
Sin embargo, no soy quien para darle consejos sobre política a alguien que ha logrado vencer unas elecciones en el país más poderoso del mundo (de momento). Humildemente solo quiero recomendarle la lectura de un libro. Creo que le interesará: escuchándole desde hace meses he percibido que México y sus ciudadanos es un tema que le obsesiona de un modo un tanto enfermizo. Bien, la historia que le voy a recomendar trata, precisamente, sobre la guerra que su país mantuvo contra su vecino del sur, ambas jóvenes naciones por entonces, a mediados del siglo XIX. Lee el resto de la entrada »