Antes de empezar, dos verdades como un templo: una casa sin plantas no es un hogar y… quien tiene un amigo, tiene un tesoro. Y este tesoro es nuestro Master and Commander de los jardines, Eugenio Martín, que me ha ayudado a escribir el post para que no se os escape cómo lo hacen los auténticos profesionales.
¿Y por qué lo he llamado 5+5? Pues porque me gusta el suspense… así que voy a presentaros los primeros 5 trucos hoy, y mañana miércoles os revelaré los otros 5 en la continuación de este post.
¿Preparados?
Para empezar, un poco de sentido común: el principio básico de todo buen jardinero es saber elegir qué plantas son las que mejor se adaptan a nuestras condiciones ambientales. ¿Verdad que no os esforzaríais en poner palmeras en Burgos? Exacto: elegid, a ser posible, aquellas especies que sean autóctonas de la zona donde os encontréis, pues con toda seguridad serán las plantas que nos darán menos problemas.
Si además queremos relajarnos y disfrutar de nuestro rincón verde sin ser esclavos de él, deberemos consultar antes qué especies requieren menos atenciones y servicios, como el riego y el abono.
A continuación tenéis una decena de consejos para mantener nuestras plantas sanas y sin plagas:
- Solución 1 – Prevención
El primer paso para evitar plagas es mantener nuestras plantas en unas buenas condiciones de temperatura, humedad y poda. Esto disminuye el riesgo de ataques.
- Solución 2 – Limpieza
Seguro que muchos no sabíais esto, pero es importante limpiar bien las tijeras de podar con agua y jabón antes de utilizarlas. Esto ayuda a prevenir la transmisión de enfermedades de una planta a otra (ya veis, al final no somos tan distintos, la fauna y la flora…).
- Solución 3 – Variedad
Mantener una flora variada dificulta la extensión de la plaga, evitando que pase de una planta a otra. Cada planta tiene su invasor específico, y esto limita su extensión y tratamientos, facilitándonos de esta forma el control.
- Solución 4 – Barreras
Las barreras físicas pueden evitar que ciertos animales de gran apetito se den un festín con tus plantas. Un simple círculo de ceniza puede evitar que caracoles y babosas invadan tus macetas (así es, amigos: ¡los caracoles son grandes devotos de la ley antitabaco!). Otro truco sencillísimo: una cinta común empapada en aceite y atada alrededor del tronco evita que las hormigas suban por él. ¡Ponédselo difícil al hormiguero!
- Solución 5 – Aliados
Los depredadores naturales de las plagas pueden sernos de gran ayuda a la hora de proteger nuestros jardines o macetas. Las aves insectívoras, lagartijas, geckos, arañas y mariquitas pueden ayudarnos en esta labor. Atraerlos y que se vuelvan habituales de nuestro jardín es muy sencillo, únicamente debemos instalar algunos elementos que nosotros mismos podemos construir reciclando botellas, cajas o cualquier cosa que se nos ocurra. Me refiero a utensilios como cajas-nido, comederos, pequeños montones de tierra y puntos de agua.
Caramba Eugenio… ¡empiezo a verte como un auténtico domador de los elementos!
Bueno, basta de selva por hoy. En el próximo post os enseñaré a crear pócimas mágicas (100% naturales) para ayudar a vuestras queridas plantas a resultar invencibles ante los bichos…
¿Intrigados? ¡Pues hasta el próximo programa, amiguitos, y no olviden supervitaminarse y mineralizaaaarsee!