Un cuento corriente Un cuento corriente

Se llama a la Economía (más aún en estos tiempos de crisis) la "ciencia lúgubre". Aquí trato de mostrar que además es una de nuestras mejores herramientas para lograr un mundo mejor

Archivo de enero, 2014

¿Volverá a actuar el BCE? El mercado se va preparando para que sí

Vuelven los tiempos revueltos para el euro. El pasado 9 de enero, el presidente del BCE, Mario Draghi, dejó claro a los mercados que la institución dirigida por él aplicaría «todos los instrumentos disponibles» para garantizar la estabilidad no solo de la inflación, sino del propio mercado monetario. Y es que entonces ya se aventuraba tormenta en los mercados interbancarios, y la opción de Draghi, como en otras ocasiones, ha sido mandar un mensaje «preventivo» contundente.

BCE

BCE

No se equivocaba. Los mercados llevan semanas registrando perturbaciones y un incremento de las tasas a las que unos bancos se prestan a otros en el corto plazo. Lo explica bien aquí el The Wall Street Journal, que constata no solo un aumento de los tipos de referencia (el conocido como Eonia) sino la demanda de liquidez disponible en el Banco Central Europeo.

No es una buena señal que las entidades dejen de prestarse unas a otras y tengan que recurrir al BCE para obtener la la liquidez necesaria con la que operar. Así, son numerosos los bancos europeos que anticipan ya la puesta en marcha de otra operación masiva de facilidades de liquidez (las llamadas LTRO) por parte del organismo presidido por Mario Draghi.

El banco escandinavo Nordea recuerda en este reciente informe que los efectos de las dos LTRO llevadas a cabo durante la crisis tienen ahora un horizonte para finalizar en menos de un año. ¿Toca por tanto poner en marcha otra?

«La cuestión de una respuesta por parte del BCE a la inestabilidad del mercado monetario ha vuelto a la superficie», sostienen a su vez los analistas de Credit Agricole, para quienes, en caso de un empeoramiento de las condiciones del mercado, Draghi debería anunciar un programa de LTRO «a tipo fijo y con una madurez más corta que tres años», anticipan. Veremos, porque a buen seguro que el BCE volverá a demostrar que es capaz de sorprender, positivamente, al mercado.

¿El problema es la Sicav, o el movimiento de capitales sin control por todo el mundo?

Ayer publicaba un artículo contando detalles sobre cómo Caja Madrid, durante la presidencia de Miguel Blesa, gestionaba y atraía a las grandes fortunas (y sus Sicav). Como bien me recordaron, y aunque yo no decía lo contrario, es cierto que mediar para atraer y retener a esos grandes patrimonios es parte del trabajo diario de un presidente de una gran entidad financiera.

Dinero

Dinero

No digo que cometiera ningún delito atrayendo Sicav a Caja Madrid; lo que me interesa es mostrar cómo funciona el sistema mediante el cual las grandes fortunas logran mantener sus patrimonios y sus rentas en España sin pagar las tasas impositivas que sí nos vemos obligados a pagar el resto de ciudadanos. Las Sicav, gestionadas en la práctica como una sociedad personal (o familiar), permiten entre otras cosas diferir infinitamente el pago de impuestos, o pedir un crédito millonario (libre de cualquier tributo) con la garantía de la propia sociedad de inversión (teóricamente) colectiva. Es un instrumento, en definitiva, que más allá de su famoso tipo impositivo del 1% ofrece todo tipo de facilidades para mantener un elitista nivel de vida sin pagar impuestos por ello.

Ahora bien, tal como me comentaba ayer un catedrático de Economía, hay que ser plénamente conscientes de que España, por si sola, no puede (ni debe) abolir las Sicav, ni aumentarles la fiscalidad, ya que una medida unilateral en este sentido supondría, dicen, una retirada masiva de estas sociedades y una fuga de capitales hacia aquellos países en los que sí se cuidaran los grandes patrimonios al gusto de sus dueños. No podemos permitirnos prescindir de estos patrimonios ya que, aunque no tributen, sí que incrementan la capacidad inversora de España. Dejarlos marchar a otras latitudes sería un error que descapitalizaría al país y beneficiaría a los competidores. Y es que, en el actual sistema económico mundial, los más libres son los capitales, que pueden moverse prácticamente a su antojo.

Y es este precisamente el problema de fondo que explica la baja tributación de los más ricos: En un mundo globalizado, con libertad de circulación y con todas las herramientas de asesoría a su disposición, los grandes patrimonios lo tienen muy fácil para escoger el destino donde custodiar sus ahorros y rentas. Sin un acuerdo a escala internacional, o como mínimo europea, tendremos que seguir lidiando con las Sicav como un mal menor. Otro tema sería que a los supervisores les diera por investigar las irregularidades de buena parte de estas sociedades «colectivas».

Dudas sobre el test de estrés a la banca europea: ¿Faltan 50.000 o 767.000 millones?

A finales del año pasado se detallaron las características que tendrá el llamado Asset Quality Review, el test de resistencia a la banca europea que llevará a cabo el BCE en colaboración con consultoras internacionales como condición previa a la puesta en marcha del sistema único de supervisión y la unión bancaria europea. Poco a poco se van conociendo detalles sobre cómo y con qué criterios se realizarán los test, pero aún se mantienen serias dudas, que tienen mosqueados tanto a los bancos como a los inversores y analistas internacionales.

Hay, por ejemplo, dudas sobre cómo se aplicarán los repartos de cargas (las pérdidas obligadas) a los inversores de deuda no garantizada en caso de que haya que recapitalizar a una entidad financiera. Tal como señala el servicio de estudios del BBVA en un reciente informe, «no hay unanimidad entre las autoridades sobre cómo afrontar los posibles déficit de capital». Este es un asunto clave, ya que en caso de una unión bancaria han de quedar fijadas unas mismas reglas de recapitalización para todos los bancos, con el fin de jugar todos con las mismas reglas.

BCE

BCE

La reciente normativa de solvencia aprobada por el Banco de España en consonancia con las autoridades europeas marca un límite mínimo de capital de máxima calidad (CET1)  del 4,5% a partir de 2016. Sin embargo, los test de estrés que realizará el BCE exigirán a las entidades un colchón adicional, por lo que tendrán que tener un capital mínimo del 8% para no ser forzados a recapitalizarse (con nuevas acciones en el mercado, con ayudas públicas o imponiendo pérdidas a inversores).

Más dudas despiertan las posibles ayudas públicas concretas que necesitarán las entidades financieras. Tal como señala este documentadísimo artículo publicado en Voxeu, y según sus cálculos teóricos, los sectores financieros de Bélgica, Chipre y Grecia, por lo menos, precisarán de inyecciones de capital público. Sobre el resto de países, incluyendo a España, hay dudas acerca de si las recapitalizaciones se podrán culminar sin auxilio público o no. Actualmente la banca española, según este estudio, está entre las más capitalizadas del entorno europeo, y solo presentaría un gran déficit de capital si los créditos morosos tuvieran que cubrirse al 100% (esta decisión aún no está tomada).

Según los cálculos efectuados por los autores de este estudio, el déficit de capital acumulado por las entidades financieras europeas, dependiendo de los criterios que finalmente se fijen, oscilará entre los 82.000 y los 767.000 millones de euros (España, según estas cuentas, requeriría entre unos 53.000 y 91.000 millones). Unos cálculos similares maneja el think tank Bruegel en su último informe al respecto, en el que calcula unas necesidades de entre 50.000 y 600.000 millones de euros para el conjunto de Europa. Estas oscilaciones tan grandes no hacen sino mantener la desconfianza en el sistema financiero europeo en su conjunto, y por extensión en la sostenibilidad de las cuentas públicas y el euro mismo. Lo inquietante es que serán las propia reglas del BCE las que marcarán que las necesidades de los bancos sean mayores o menores, y siguen si aclarar las exigencias que impondrán.

La autoridad bancaria europea tiene ahora que jugar con un puñado de variables, todas importantes: Hay que mandar una señal clara a los mercados, en el sentido de que las pruebas de resistencia serán muy exigentes y eliminarán cualquier duda sobre el sistema financiero. Por otro lado, tiene que intentar preservar la estabilidad del sector, y no llevarse por delante las finanzas de los países miembro, por lo que las exigencias de capital tendrán que ser lo más ajustadas posibles. Como ven, la ecuación es muy complicada, porque hay un grave riesgo de pasarse de largo o quedarse cortos. Y en ambas circunstancias, el problema de la banca europea no se resolverá.

¿Hay una burbuja inmobiliaria en Alemania? Echando un vistazo a los datos, diría que sí…

En España sabemos —muy a nuestro pesar— alguna que otra cosa sobre cómo se gestan, se desarrollan y finalmente se vienen abajo las burbujas inmobiliarias. Y es que el proceso de sobrevaloración de los activos ligados al ladrillo aún lo estamos sufriendo (nadie sabe cuándo se detendrá la caída), con un mercado de la construcción y la vivienda prácticamente paralizados. Tanto que a pesar de las caídas de precios cercanas al 50% aquí casi nadie compra pisos si no es pagando a tocateja o si no es extranjero.

Promoción inmobiliaria

Promoción inmobiliaria

La burbuja inmobiliaria en España, auspiciada por la llegada masiva de capitales y ciudadanos extranjeros, los bajos tipos de interés y el ciclo económico alcista, acabó por provocar tras su pinchazo una de las mayores crisis económicas que se recuerdan, y que a buen seguro dejará marcada a nuestra generación. Las enseñanzas de la crisis, de las cuales no estoy muy seguro que hayan aprendido los propios españoles [¿Cuántos esperan que cuando la crisis acabe todo vuelva a ser como antes?] tampoco parecen haber llegado a Alemania, que está viviendo actualmente su propia burbuja del ladrillo.

Tal como constata este breve informe del servicio de estudios de Deutsche Bank, los precios de la vivienda en Alemania superaron, de media, el 6%, muy por encima del nivel de crecimiento de la economía germana. «De las 125 principales ciudades, en 12 se superó incluso el 10%«, señala este estudio, que a su vez reconoce que el calentamiento de los precios se mantendrá en 2014, debido a los bajos niveles de paro, la llegada de inmigrantes y los bajos tipos de interés (¿les suena?). Por si fuera poco, y a pesar de que el precio lleva ya cuatro años ininterrumpidos de escalada, desde Deutsche aseguran que aún hay margen para que suba mucho más, ya que el ratio capacidad de compra/precio de los alemanes está por encima de la media europea.

No hemos aprendido nada, y eso que el propio Bundesbank ya advirtió el pasado mes de octubre, siquiera tímidamente, que era posible que se estuviera registrado una «sobrevaloración de la propiedad residencial en las ciudades alemanas». En los últimos tres años, según el BuBa, el precio medio creció anualmente por encima del 8%, tal como consta en este informe. El banco central alemán recuerda mucho en algunas de sus consideraciones al Banco de España, cuando allá por 2005 y 2006 aseguraba que no veía riesgo macroeconómico en aquellos incrementos de precios.

No quiero ser un agorero ni aguar la fiesta de nadie, pero a veces parece que no aprendemos de los errores de otros. Si los alemanes creen que han encontrado la fórmula de la Coca-Cola para evitar las consecuencias de una burbuja del ladrillo, estaré encantado de verlo. Pero me genera muchas dudas…

Sin una cierta igualdad económica y de oportunidades, ¿es posible la democracia?

Este fin de semana lo he pasado en mi ciudad natal, una población mediana, norteña, y que acostumbraba a tener un nivel de vida (en general) relativamente alto, sobre todo con una cierta cohesión social (sin grandes diferencias entre barrios y estratos sociales). No era un cuento de hadas, pero no estaba nada mal.

Persona mendigando en la calle.

Persona mendigando en la calle.

En esta última visita, Gijón (mi ciudad), ya no me pareció la ciudad tranquila, predecible y cohesionada de otras veces. En el corto trayecto desde la casa de mis suegros —15 minutos a pie— hasta la casa de mis padres conté a más de una docena de personas pidiendo en la calle. Como si de un plus de legitimidad a la hora de mendigar se tratase, estas desafortunadas personas mencionaban, casi todas, en sus carteles, que eran españolas. Siempre ha habido desigualdad en la sociedad española, en mayor o menor grado, y he sido muy consciente del daño que iba produciendo la crisis económica en el tejido social, pero una imagen como la de este pasado domingo, con tal cantidad de gente en problemas, es la primera vez que la percibo.

Hoy, por contra, nos desayunamos con un informe de Intermón Oxfam en el que calculan que los 20 españoles más ricos tienen un patrimonio equivalente al 20% más pobre de la población. Cuesta imaginarlo, pero hay ciudadanos en España que son más ricos que millones de otros conciudadanos. No seré yo quien niegue la capacidad de progresar a los empresarios exitosos e innovadores, pero a ojos de cualquiera estas diferencias de riqueza provocan sonrrojo mientras la bolsa de pobreza no hace sino aumentar.

Este estudio, del que no conozco detalles en profundidad (cuál ha sido su metodología, por ejemplo), sí que abunda en el mismo diagnóstico que otras estadísticas e informes recientes. Hace apenas una semana conocíamos que la brecha salarial había aumentado durante la crisis, haciendo más ricos a los ricos, y empobreciendo a la clase media. Y es que los salarios medios han encadenado por primera vez en la historia un año seguido de caídas. Y si los salarios se han deteriorado, más crítica es aún la situación de los parados de larga duración, tal como me comentaba la semana pasada el profesor de Economía Marcel Jansen. En este contexto, las soluciones de las autoridades y los organismos internacionales pasan por congelar el salario mínimo o imponer recortes adicionales en los sueldos de hasta un 10%. Sobre el tema, no os perdáis este post, de hace unos meses, en el blog de Pablo R. Suanzes.

Si bien pretender una igualdad total de los ciudadanos, aparte de un imposible, es una aspiración con tintes totalitarios, creo que los poderes públicos en una democracia no pueden obviar en ningún momento que la igualdad ante la ley y de oportunidades es un bien casi esencial de la democracia. Y la crisis se está llevando este principio por delante. Sin una sociedad mínimamente cohesionada, si no hay un suelo mínimo a partir del que no se puede caer, la efectividad del sistema demócratico liberal se resquebraja. Los que deberían ser ciudadanos de pleno derecho (partícipes del sistema, corresponsables) pasan a ser otra cosa, en los márgenes del mismo.

Los mejores blogs de Economía en España (III): Los de periodistas

Con un poco de retraso, y para empezar lo mejor posible el año, publico la última entrega de los que yo creo que son los mejores blogs de Economía escritos en España. Hemos hablado en los dos anteriores post de aquellos escritos por colectivos y los escritos por profesionales «no periodistas». En esta ocasión nombraré los que estimo mejores de entre mis compañeros de profesión.

PC

PC

Si alguna ventaja tienen los blogs escritos por plumillas es que suelen (digo «suelen» porque hay de todo) estar contados de una forma más llana. La Economía, como cualquier otra ciencia, está repleta de conceptos y jerga complejos, y en ocasiones se agradece la capacidad de los periodistas de rebajarlos a la altura de la calle, para que todo el mundo pueda entenderlo (consejo a blogueros: una buena forma de saber si estamos explicando un asunto complicado es preguntarnos «¿Esto lo entendería mi abuela?). La elección, como siempre, ha sido difícil, porque hay por suerte muchos blogs interesantes, y es probable que me haya olvidado alguno que otro. En ese caso, no se me enfaden, editaré posteriormente el post y añadiré posibles olvidos. Ahí va mi lista:

  • Lealtad, 1, de Nuño Rodrigo: Este periodista del diario Cinco Días, especialista en mercados y economía financiera, lleva años esforzándose (y consiguiendo) explicar qué cosas están ocurriendo en las múltiples crisis que han venido a coincidir en esta que llamamos «crisis económica». Con un estilo ameno y casi siempre una característica firma musical, Nuño se ha ganado a pulso un hueco entre los blogueros de Economía que todos debemos seguir.
  • ContraOpa, de Carlos Segovia: El blog del que creo, sinceramente, es uno de los periodistas de Economía con mejores fuentes informativas de España. Precisamente ahí esta el valor de este blog, ya que es en este formato donde puede añadir ese punto de análisis y opinión que los artículos de investigación periodística no tienen, por su propia forma de ser. Un blog sin pelos en la lengua, y donde las collejas (merecidas) a los enemigos del comercio son la norma, no la excepción.
  • El valor del dinero, de Miquel Roig: Otro de los imprescindibles. El ahora corresponsal de Expansión en Bruselas, aparte de saber muchísimo de Economía, tiene la capacidad en sus artículos de encontrar un punto de vista peculiar, logra darles una vuelta de tuerca que siempre los hace interesantes. Especialmente recomendable fue su guía práctica sobre qué hacer si se ha invertido en participaciones preferentes. En una blogosfera en la que todos escribimos de lo mismo en tiempo real, eso tiene muchos mérito.
  • La banca gana, de Michela Romani: También periodista en Expansión, Michela está especializada en información bancaria y financiera. Su experiencia y sus grandes contactos en el sector hacen que el blog aúne tanto el análisis (muy importante para saber desbrozar la información importante) como las fuentes, siempre huidizas en este mundillo. En este mismo diario también era muy interesante el Diario de un corredor de fondos, de Jorge Zuloaga, pero creo que lo ha abandonado desde hace más de un año.
  • Economismo, de Alicia González: En este blog la autora, más que exponer su opinión personal, lo que hace es «moderar» debates entre expertos. Austeridad, expansión monetaria, recapitalización de la banca, bitcoin… basándose en su extensa agenda de economistas y académicos, los post de Economismo consiguen mostrar enfoques diversos y casi siempre interesantes de la realidad económica.
  • Valor añadido, de S. McCoy: El blog del director general de El Confidencial. Poco más hace falta decir: información en muchas ocasiones exclusiva, contactos off the record del más alto nivel, análisis poco frecuente… Puedes estar más o menos de acuerdo con su visión de la realidad, pero es un blog que a cualquier lector interesado en la Economía le puede interesar.
  • Con lupa, de Jesús Cacho: Otro tanto de lo mismo: El blog del director de VozPopuli, uno de esos periodistas veteranos con experiencia en mil batallas, con contactos en los más altos niveles y a los que no asusta tratar temas, por muy espinosos que sean.
  • Maventrap, de Pablo R. Suanzes: Enlaces, enlaces y más enlaces. La actividad académica y de las redes sociales es capaz de generar infinidad de documentos y contenidos interesantes, pero bucear en ellos es una tarea en la práctica imposible. Hay demasiado. Pero en su blog personal, este periodista de la sección de Economía de El Mundo publica semanalmente excelentes selecciones de enlaces (sobre un tema concreto, o no) para publicaciones en español, inglés, italiano… Los que no lo conozcáis no debéis perderos sus #Lecturasdedomingo, con reportajes, historias, gráficos, entrevistas… Las suele dar en un primer momento en Twitter, pero luego las recopila aquí. No os arrepentiréis.
  • La UE, del revés, de Bernardo de Miguel: Corresponsal de Cinco Días en Bruselas, De Miguel aúna en su blog varias virtudes: Por un lado aporta un extenso conocimiento de la economía y la política comunitarias (es uno de los mejores periodistas allí, con unas excelentes fuentes, y se nota), y por otro alcanza una capacidad de análisis que no es habitual entre los colegas de profesión. Ha sido un testigo de excepción de toda esta crisis económica y del euro, y os invito a comprobarlo leyendo su bitácora.
  • No doy crédito, de John Müller (entre otros): Blog escrito por casi toda la sección de Economía de El Mundo. Al igual que ContraOpa, el valor de este blog, en mi opinión, está en el análisis crítico que periodistas tan informados como estos puedan hacer de la actualidad. La información está restringida y tiene muchas cláusulas, pero la opinión es más libre, y un formato como el de una bitácora es perfecto para mezclar una y otra.