Por Núria Serra
Quiero reflejar mi malestar con la Seguridad Social con respecto a la fertilidad.
Me considero una persona joven (tengo 29 años). Hace un tiempo que mi marido y yo queremos formar una familia y parece que por motivos de la naturaleza no es posible.
No es normal que en un país en el que cada vez hay menos niños y que la población envejece por momentos, no se den más facilidades para traer al mundo nuevas generaciones. Ya no me refiero a que te den una subvención por tener un hijo, simplemente al hecho de que si tienes problemas para concebir, el médico te dé una solución.
Llevo pagando mi Seguridad Social desde que empecé a trabajar con 18 años y jamás he tenido que realizarme ninguna operación y creo que es justo que como mínimo consiga que me hagan unas pruebas de fertilidad, que al fin y al cabo yo pago esos sueldos, y no tenga que irme como muchas de mis amistades y conocidos a la sanidad privada.
Ojalá cambien las cosas y las personas como yo y mi marido tengamos más oportunidades de hacer algo tan bonito como crear una vida.