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Entradas etiquetadas como ‘perdidas’

El taxi y la regulación antiUber

Por José Antonio Villacorta

Señora Milagros Avedillo, lo primero agradecer que se hable del sector del taxi, aunque para mal. Es un sector muy peculiar y desconocido por gran parte del público. Dudo mucho que el sector del taxi le cueste 304 millones a los consumidores, esas cifras las tendrá que explicar y justificar, da para muy malas interpretaciones, y los consumidores podrían hasta llegar a pensar que ellos mismos son los que están pagando las licencias y no es así.

Un taxi (Radio Taxi).

Un taxi (Radio Taxi).

Usted habla de millones como si tal cosa, pudiendo dar la voz de alarma sobre este sector como una de las causas de las pérdidas millonarias en tema de transporte público. Hay que tener mucho cuidado con lo que se dice y cómo se dice porque todo el mundo no es economista y se presta a muchísimas confusiones. Me gustaría que prestara más atención sobre las pérdidas que ocasiona BiciMAD o el mismísimo autobús Airport Express, que no solamente nos hace mucho daño al sector, sino que se está pagando los billetes por debajo de su coste, y eso sí sale del bolsillo de los consumidores.

Le voy a contar la ganga que es ser titular de una licencia de taxi en Madrid y los pagos a los que tengo que hacer frente mensualmente y anualmente:

* 897 Préstamo de la licencia

* 291 Recibo de autónomos

* 350 Préstamo personal inicial

* 174 Otro préstamo personal para hacer frente a los comienzos sin ingresos

* 450 Combustible

* 451 Vehículo nuevo para realizar el servicio (el antiguo con 400.000 kms murió)

Lo que hace un total de 2.613 euros mensuales.

Todo esto sin contar las averías del vehículo, mantenimiento, golpes y paros del vehículo (no hay coche de sustitución) y como no, las multas a las que debemos hacer frente, que también pagamos como todos.

A todo esto el seguro anual, 1.200 euros, declaraciones de IVA trimestrales y regularizaciones anuales, revista anual donde se nos chequea que llevamos toda la documentación en regla, ITV anual de taxímetro y vehículo, gastos de gestoría, necesaria teniendo en cuenta la de controles que pasamos y la de papeles que movemos, aunque no lo parezca.

Bueno ya tenemos todos los gastos más o menos sobre la mesa, ahora nos falta trabajar un poco como usted dice, entre 14 y 16 horas diarias, siete días a la semana de lunes a domingo, para poder hacer frente a todo esto, unas 80 horas semanales digamos, sin contar que pueden ser fiestas o de noche, que en algunos empleos se valorarían más económicamente. ¿Qué le parece? ¿Sigue pensando que somos unos privilegiados?

Los temas de Uber y Cabify son muy buenas opciones, la competencia siempre ha sido buena en cualquier sector que se use. Tengo formación en Comercio y Marketing y hasta ahí llego, pero siempre y cuando la competencia no sea desleal, que todos utilicen los mismos medios para trabajar, las mismas obligaciones y entonces, solo entonces podremos mejorar el sector para todos, también para el consumidor, pero a mí se me regulan las tarifas, los horarios, los días de descanso, las vacaciones, el precio de la licencia….. No jugamos con las mismas armas, le puedo asegurar que los taxis atendemos ya perfectamente la demanda existente, 15.723 licencias en Madrid, con emisoras competentes como Radio Teléfono Taxi, Tele Taxi, La Gremial, y las App existentes como Hailo y MyTaxi, hasta sobramos. Váyase a un aeropuerto, me da igual la terminal que sea, la espera para cargar es de dos horas y media como poco, puede llegar a ser hasta de 4 horas, yo sé de lo que hablo.

Yo no he realizado una inversión, me he comprado mi puesto de trabajo, sencillamente, no tengo ni idea si el precio que he pagado por ello será equivalente al que recibiré cuando me retire, o tal vez ya estén en cero euros porque la Comunidad Europea entonces habrá liberalizado el sector, siendo los taxistas unos dinosaurios en vía de extinción, no lo sé. Que sepa que por cada venta de licencia la hacienda pública se embolsa más del 21%, no está mal. ¿Entonces quién se aprovecha de quién?

En cuanto a la especulación, si yo vendiera no sería una venta, sería una transmisión, por el motivo que sea, en 2 años mínimo no me sería posible adquirir otra, es de las pocas cosas que creo yo que están bien hechas, evitando así la especulación pura y dura.

Me gustaría que ustedes, los economistas que tanto entienden de economía general, tuviesen en cuenta que la economía de un país empieza aquí abajo; por los que estamos sobre la tierra con la dura tarea de tener que seguir oyendo sandeces. El sector del taxi no está más protegido que Urgangarín o que Rodrigo Rato, no; intentamos sobrevivir a los megas negocios, mega empresas como Cabify y Uber que por tener dinero se piensan que lo pueden comprar todo.

Ahí está la clave, hay muchos intereses económicos y grandes nombres detrás de todo esto que lo pueden comprar todo y con dinero quieren hundir un sector humilde y trabajador como es el nuestro: el Taxi de Madrid.

Humanos contra tecnología

Por María José Viz Blanco

Imagen promocional de la tecnología LiFi (PURE LIFI).

Imagen promocional de la tecnología LiFi (PURE LIFI).

Necesitamos de la tecnología para prácticamente todo en este siglo XXI en el que vivimos. Pero, cuando la máquina falla… ¿es posible encontrar soluciones?

El factor humano parece quedar relegado ante la preponderancia de lo tecnológico, aunque, paradójicamente, haya sido el propio hombre quien la haya creado para hacer la vida más fácil de sus congéneres.

Si pensamos en un coche de los que acaban de salir a la venta, sea cual sea la gama, podemos ver que tienen la mayoría de sus funciones automatizadas. Cuando todo funciona, es maravilloso, pero cuando falla alguno de esos mecanismos, manualmente no se puede conseguir que funcione prácticamente nada. Y quien dice coches dice, por ejemplo, las persianas eléctricas en nuestros hogares que, si tenemos la mala suerte de que se vaya la luz, sin haberlas subido seguimos estando a oscuras, en pleno día.
Más importancia tienen los fallos en maquinarias industriales que suponen un parón en la cadena de producción y grandes pérdidas económicas.
Es necesaria e imprescindible la mecanización en determinadas tareas y ámbitos, pero todo ello no tiene sentido sin la mano de personas físicas que sepan, por un lado, sacarles el máximo partido y, por otro, solventar posibles anomalías. No existe, pues, enfrentamiento, sino una necesidad mutua.  Estamos todos en el mismo barco, con un objetivo común: hacer la vida más cómoda y fácil.

Los días de lluvia

Por María José Viz
Lluvia.

Un hombre camina bajo la lluvia. (EFE)

Llueve. Me gusta mirar, escondida tras las cortinas, la caída constante de la lluvia. Aquí estoy a salvo, pienso. De pronto me imagino saliendo a la calle y chapoteando, como si fuese una niña, en alguno de esos inmensos charcos que se han formado. ¡Sería divertido! Pero mi sentido de la responsabilidad me impide hacerlo. Ya soy mayor para esas cosas. Me quedaré en casa compadeciéndome de los que intentan desplazarse, con el viento en su contra, empapados hasta los tuétanos.


Pasan las horas, y sigue lloviendo. Tras comer, leer, bailar, escribir, volver a comer, escuchar la radio, ver TV… me vienen a la mente los que han perdido sus cosechas -aquel río que hace un mes estaba casi seco de repente se ha desbordado con furia y violencia-, los que tienen inundado su garaje, los que han cogido una pulmonía, los que ven anegarse su local de negocio -que constituía su único sustento-, los que viven en la calle, los que trabajan a la intemperie; los que, a causa de la maldita lluvia, sufren un grave accidente de tráfico, los que se quedan con lo puesto y saben, mucho antes de solicitarla, que no van a recibir ningún tipo de ayuda… Es en ese momento, cuando noto que también llueve dentro de mi cómodo hogar. Las lágrimas comienzan a brotar de mis ojos, se me está mojando el alma, de pura impotencia y frustración, por no poder hacer absolutamente nada para evitar tanta desgracia.

Juan Lanzas no es Miguel Blesa

Por Francisco Javier España Moscoso

Y podríamos establecer la misma analogía entre el juez Elpidio José Silva Pacheco y la jueza Mercedes Alaya. A saber:

Demos un breve repaso a los procedimientos de ambos jueces. Por un lado, la jueza Alaya mantiene las imputaciones basándose en: primero; las declaraciones del chófer del que fuera director general de Trabajo de la Junta de Andalucía, que en un alarde auto inculpatorio, dijo que era cocainómano y que compraba la droga con el dinero de los ERE. Segundo: un camello que corrobora lo dicho por este. Tercero: un mensajero que vende al mejor postor y en este caso al periódico de la conspiración del 11-M que Juan Lanzas le daba sobres llenos de dinero que llevaba a un bar cercano a las instituciones de la Junta, sin dar más detalles. Cuarto: en el rastreo del dinero, aparecen solo 80.000€ en la casa de Juan Lanzas, alias “el conseguidor”.

Blesa y LanzasPor otro lado, el juez Elpidio José Silva, está llevando dos procedimientos contra Miguel Blesa; uno relativo al crédito de 26,6 millones concedido a las empresas de Gerardo Díaz Ferrán sin las garantías necesarias y otro proceso abierto por la ruinosa compra por parte de Caja Madrid del banco City National Bank de Florida, que ya ha dejado unas pérdidas de 500 millones al banco; pero resulta que la cosa no se queda ahí porque parece que hay algún correo electrónico que habla de que en la operación sobran 100 millones y está claro que el deber del juez es rastrear dicho sobrante.

Tenemos la costumbre de ensalzar la actitud combativa de ciertos jueces en el desarrollo de su trabajo, pero es notorio que la norma se rompe cuando el justiciable pertenece a esa casta que podríamos calificar como la de “los intocables”, y de ahí que ciertos fiscales actúen como abogados defensores, o que se intente amedrentar a los jueces con la querella por prevaricación.

Y es que ni Juan Lanzas es Miguel Blesa ni Elpidio José Silva es Mercedes Alaya.

 

Cuesta mucho ser banquero

Por Fermín Espinosa Romero

Los acabo de ver por televisión, saliendo de la Audiencia Nacional, uno tras otro. El juez había citado a los tres principales directores de banco porque se habían reunido dos días, uno de ellos domingo, con el ministro De Guindos, antes que estallara el caso Bankia, su competidor. banqueros250El juez los citó solo como testigos, para tomarles declaración, pero en la puerta del juzgado se agolpaban muchos ciudadanos, de una edad media muy superior a la que suele verse en las manifestaciones, reclamando el dinero de que habían perdido de sus pensiones, hipotecas, acciones preferentes y otros productos bancarios. Sus gritos e insultos son irreproducibles; el más suave sería “La banca, al banquillo”. ¡Pobres banqueros! Cuesta mucho serlo. Hace falta, digo yo, no ya sólo tener, sino también ser de una pasta especial para aguantar todo eso. Yo creo que no lo soportaría.

El 11-M y las dos Españas

Por José Recio Rosa

Me resulta algo increíble que la conmemoración por las pérdidas de familiares en aquel 11-M, en los trenes atacados por fanáticos (de la índole que fueran), a tantos años de aquellos penosos sucesos aún haga que se reaviven las diferencias entre los españoles, solo por causas políticas y sea verdad que existen dos Españas (a la derecha y a la izquierda, políticamente hablando). Qué desastre de personas y personalidades, que demuestran tener nada de sentido común, decencia y ética para no poner a un lado las diferencias de ideas y hacer un recuerdo limpio de aquellos inocentes que cayeron vilmente en esa masacre sin sentido. Y ahora que digo ‘inocentes’ verán ustedes, personas y personalidades, que los caídos eran eso, inocentes y ajenos a los politiqueos manoseados por vulgares criminales.

11-M (dos)Por tanto, considero que esta celebración triste, por las pérdidas de unos familiares queridos, debería hacerse en conjunto, olvidando hipócritas razones políticas. A nadie de las familias afectadas les interesan los argumentos ofrecidos por los distintos partidos, a nadie le importa si hay cosas por descubrir o cosas aclaradas. Todos habéis demostrado tener la cabeza como leños, que solo sirven para que sean arrojadas al fuego en estos días fríos, como aquel fatídico 11-M. Mi hija no cogió el tren ese día, lo perdió, si no yo sería uno más a conmemorar tamaña fechoría. De haber sido así, una de las víctimas de ese terrorismo absurdo, me hubiese encargado de reprochar a gritos a los dos bandos que tan torpemente han realizado, por separado, estos homenajes.

Si cae Iberia, nos estrellamos todos

Por Lorena Fernandez Arias

Con motivo de FITUR 2013, Iberia decide presentar una nueva y moderna flota de ocho aviones “para no perder Latinoamérica”. Pero ¡si hace un mes han anunciado que eliminan varias de sus rutas más importantes como La Habana o Santo Domingo! Perfecto señores Vázquez y Sánchez-Lozano. Les ha salido la jugada redonda: aprovechan la mayor feria de turismo de nuestro país para anunciar a bombo y platillo que sus aviones van a llevar pantallas táctiles hasta en el retrete, si me apura (¡qué divertido oiga, qué derroche!) pero no dicen nada de cómo se va a ver afectado el turismo de nuestro país con los recortes de las líneas que ya han anunciado que van a hacer y con las que seguirán desapareciendo.

Y es que yo, como española y como empresaria del sector de la hostelería, vivo preocupada por lo que va a pasar en nuestro país cuando Iberia haya sido totalmente desmantelada.

Iberia

Hay expertos que ya están cifrando en 300.000 personas que se verán indirectamente afectadas por la desaparición de la Iberia que hoy conocemos. ¿Y no va a hacer nada el Gobierno? ¿El Príncipe Felipe y Doña Leticia, como buenos representantes de la marca España, no le dieron un tirón de orejas al Sr. Vázquez cuando les presentó las pantallitas táctiles de los nuevos ocho aviones?

Que está bien renovar flota, sobre todo si son motores más eficientes y que suponen un gran ahorro de combustible, que también me preocupa el medioambiente, pero sobre todo creo que estos directivos deberían invertir en aumentar la producción de Iberia y no en cargarse las rutas de los principales destinos turísticos.

Muchos españoles, entre los que me encuentro, dependemos mucho más de lo que creemos de las decisiones que están tomando estos directivos de Iberia, que parecen más interesados en destruir el tejido económico que rodea a Iberia (se me escapa con qué intención) que en aumentarlo generando riquezas. Soy una de esas empresarias que, a corto plazo, ve peligrar lo poco o mucho que ha conseguido crear a lo largo de grandes años de esfuerzo.

Si cae Iberia, se estrella España.

¿Cuál es el precio de una huelga?

Por Agustín Hernández de la Torre

Cada vez que se convocan huelgas y especialmente cuando pueden suponer la paralización del sector privado se hacen desde la patronal, las cúpulas empresariales e incluso desde los gobiernos, declaraciones sobre el impacto en términos económicos. Así, se da el dato sobre las pérdidas ocasionadas y el coste que en general supone el ejercicio de este derecho del trabajador. Sin embargo, nada se dice del precio que se paga por el mismo: cada trabajador que libremente (por supuesto) decide secundarla deja de percibir su salario por ese día en los términos que establece la ley.

Quizá se deberían hacer públicas las cifras del ahorro en ese sentido. Puede que no sea proporcional a la reducción de ingresos producida, pero tampoco son exactamente pérdidas las reducciones del beneficio en base a las que se amparan las empresas para plantear ERE, despidos, y alteraciones de las relaciones laborales permitidas por unas regulaciones aprobadas sin sensibilidad en el ámbito del trabajo y contra las que precisamente se lleva a cabo la protesta.