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Carta a los padres que animan a sus hijos desde la grada: inculquemos el respeto por los árbitros

Por Joan Sánchez

Es a veces increíble ver el comportamiento de las madres y padres cuando ven jugar al fútbol a sus hijos de seis o siete años. Les inculcan una serie de ideas equivocadas como que la persona que dirige el encuentro (árbitro/a) es nefasto porque no pita como ellos lo ven, porque no toca el silbato cada vez que la pelota sale del terreno de juego —tampoco hace falta pitarlo todo, se evita que se pongan nerviosos los/as niños/as—, ya que los que juegan saben la mayoría de las veces hacia dónde se debe sacar.

Un colegiado muestra una cartulina amarilla durante un partido de fútbol. (EFE)

Un colegiado muestra una cartulina amarilla durante un partido de fútbol. (EFE)

Sí, todos nos podemos equivocar, incluso sus hijos jugando, pero eso es diferente. Inculquemos a nuestros/as hijos/as que el deporte, todo deporte, se basa en la competitividad pero sin dañar a nadie, jugando limpio, respetando a esa persona que está en el campo dirigiendo el encuentro.

Al contrario, a la gente que hay en la grada y todo el entorno deportivo, poneos en el lugar del árbitro/a. ¿Habéis pitado alguna vez? Yo sí lo he hecho bastantes veces y os reto a que lo hagáis. Hagamos que el jugar sea algo divertido para todos, inculquemos tal como se esta promocionando aquí. ¡Juego limpio!

10 comentarios

  1. Dice ser Toni Perelló

    Estoy totalmente de acuerdo. Es más, también pido respeto para los entrenadores y para el equipo contrario. El deporte ha de inculcar valores positivos, de respeto y fair play. Hay que animar, divertirse, disfrutar y animar. Puede que no nos guste el entrenador de nuestro hijo, pero es el entrenador y si no te gusta como lo hace, haz tu de entrenador. Como se comenta en el artículo intenta hacer de árbitro y ya verás. Y por último, olvidémonos de los insultos, de la violencia y seamos educadores, no forzemos a nuestros hijos a conseguir nuestro sueño. Dejemos que disfruten y que aprendan. No los obliguemos, ni critiquemos. Nuestros hijos necesitan nuestro apoyo y sobretodo necesitan respetarse a si mismos respetando a los demás. Educar y no insultar. Enseñar y amar. El deporte es deporte, pero también escuela. ¿que quieres que aprenda de ti tu hijo?

    24 abril 2015 | 23:32

  2. Dice ser Joan Sánchez

    Hola Toni, muchas gracias por tu apoyo y también amplio lo por ti comentado, a ver si recuperamos la deportividad que existía antes, el amigismo y buen estar de todas las persona incluyendo a los padres y aficionados que van a todo tipo de campo, tanto sea amater o profesional, ya sea en campo de Fútbol, de Baloncesto, de Rugby, de Tenis, y es muy larga la lista de todos los campos y deportes.

    25 abril 2015 | 20:18

  3. Dice ser Paco

    Estuve viviendo en Irlanda. Allí apunté a mi hija de 11 años a jugar al fútbol en un club local, del pueblo en que vivíamos. Me gustó el hecho de que para ser admitida yo debía firmar un papel en el que me comprometía a no chillar, insultar o dar mal ejemplo en los partidos y/o entrenamientos, a no increpar a entrenadores, árbitros o adversarios, y a no intervenir de modo alguno en el transcurso del juego. Se me solicitaba enseñar a mi hija que un deporte es fair play y que la competición era sólo parte del juego, que el respeto y la educación estaban por encima de los resultados y que todos somos humanos y podemos equivocarnos. Esto era por escrito y bajo amenaza de expulsar a mi hija si infringía alguno de los preceptos anteriormente indicados. En los dos años que estuvo jugando jamás oí un sólo insulto en los partidos por parte de padres o acompañantes, jamás una palabra contra el juego, y siempre se trataba de educar los valores positivos del juego.

    Ahora vivo en España. Todo eso quedó atrás. Muy atrás.

    26 abril 2015 | 12:42

  4. Dice ser Carlos Navarro

    Ayer vi una imagen durante el partido en Barcelona en la que un niño de corta edad insultaba verbal y gestualmente a los jugadores del equipo rival. Me produjo una sensación de violencia extrema y absoluta pena a la vez que vergüenza de que esa imagen trascienda. Debería plantearse una reflexión y que tal vez no todo vale, que la libertad de expresión es maravillosa pero no puede invadir la libertad ni el respeto del otro. Y que la infancia es el momento de inculcar valores, siendo el deporte un ámbito ideal para ello. Ayudemos a los niños a que entiendan esto y no engendremos violencia gratuita…

    26 abril 2015 | 12:52

  5. Dice ser ANGELO

    Todos los comentarios anteriores, me dejan perplejo, tengo dos nietos uno juega en campo y otro en sala, me quedo maravillado cuando los jugadores antes de empezar se estrechan las manos entre ellos y el arbitro. Cuando empieza el juego tengo que ocupar otro lugar lejos de las familias por que tanto padres como madres de uno y otro equipo, demuestran el poco civismo (si digo CIVISMO), por el vocabulario que emplean me siento avergonzado de tal comportamiento. Tengo 76 años y no me asusta, practicamente nada, pero sobretodo, las madres parece que les esten destrozando a sus niños (y lo que más respeto en mi vida son a las sufridoras mujeres, pero si quieren seguir que las traten como damas por favor cambien el vocabulario de carretero que algunas usan. Otro si¡ en uno de los encuentros que no pude asistir cuando llego mi nieto a casa venia llorando, por el Sr. papa de un contrarío le habia pegado al salir del vestidor. Suerte tuve de no estar presente, pues quizas hoy todavia esstaria cumpliendo algún castigo

    26 abril 2015 | 17:12

  6. Dice ser Manuel Recio

    Mi hija juega en un equipo femenino en Llerona(un pequeño municipio de Les Franqueses del Valles)y los padres del equipo respetamos y somos respetados con los otros padres y los colegiados a pesar de que puedan tener fallos a favor y en contra,no como otros padres de otros equipos que a veces pensamos en cómo pueden tener esos «valores»para con sus hijos y colegiados.Lo único que han de hacer nuestros hijos es divertirse y los padres animar con todas nuestras fuerzas!!!

    26 abril 2015 | 17:43

  7. Dice ser Rama

    Viviendo en paletolandia que se puede esperar….aun recuerdo la noticia de un arbitro de 15 años agredido por el garrulo de turno que estaba viendo a su hijo jugar.

    En Europa se ríen de nosotros y con razón.

    Completamente de acuerdo con los comentarios anteriores.

    26 abril 2015 | 21:57

  8. En el año 2010 ya se encontró la forma de reducir los insultos a los árbitros, pero la falta de financiación hizo que se quedara en una mera investigación.
    http://www.redalyc.org/pdf/654/65423606004.pdf

    «Proyecto de Mediación arbitral. Socialización en el fútbol base».

    27 abril 2015 | 12:10

  9. Dice ser Joan Sánchez

    Estoy de acuerdo con todos vosotros, y creo que se debería encontrar una solución positiva para todos, ya sea firmando antes que nada un compromiso de buen comportamiento o alguna cosa similar, yo siempre e intentando inculcar a mis niñas un buen comportamiento tanto dentro como fuera del terreno de juego, respetemos y nos respetaran, disfrutaremos mas de esos momentos de juego o competición, demos unos valores positivos, tanto a nuestros niños como a los de los demás.

    27 abril 2015 | 13:25

  10. Dice ser Jesús

    Hola, yo sólamente doy gracias por haber tenido únicamente una hija, y que no la guste el fútbol. Vergüenza ajena me da haber asistido a partidos de fútbol de mis sobrinos y haber tenido que aguantar los inaguantables exabruptos de los papaitos de los nenes Creo que el problema base de este páis son los cimientos, es decir, la educación. Mientras eso no cambie, y tienen qe pasar varias generaciones y mucho trabajo por delante para que así sea, España continuará en caída libre. Joan, estoy totalmente de acuerdo con tu artículo.

    27 abril 2015 | 14:11

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