Por Ángel Alonso Pachón
¿Se fue el Ébola? ¿Se acabó el secuestro de niñas en Nigeria? ¿Dónde están los cristianos perseguidos? ¿Dónde los niños de la guerra? ¿Dónde la hambruna de África? ¿Dónde los niños obreros sin años? No, los hemos silenciados por falta de rentabilidad.
Lloremos todos, cristianos, musulmanes, judíos, los de izquierdas, los de derechas, comunistas o capitalistas; lloremos todos por nuestros silencios interesados y pidamos perdón al hambre, a la enfermedad, a la pobreza, a los perseguidos, a los degollados, a los secuestrados, a los niños sin futuro, a todos porque nos hemos acostumbrados a silenciar el mundo: La ética no es rentable.