Por Francisco Javier España Moscoso
Un policía vigila en el tejado de la sinagoga tras el ataque contra una sinagoga en Jerusalén (Israel) el martes 18 de noviembre de 2014.
Sin suponer o insinuar nada, la realidad de los hechos solo me lleva por el camino de la sospecha.
¿Por qué cada vez que la comunidad internacional intenta mediar a favor del reconocimiento del Estado palestino, acaece un brutal atentado?, a lo que añado, ¿A quién favorece esta situación?
Haciendo una retrospectiva podemos comprobar el no tan casual paralelismo temporal entre los atentados y las diferentes conferencias de paz, desde el intento de Madrid en 1991, pasando por los Acuerdos de Oslo firmados entre Isaac Rabín y Yasser Arafat el 13 de septiembre de 1993 hasta la última iniciativa por reconocer o no al Estado palestino por parte de España, algo que se pone cuesta arriba tras lo sucedido en Jerusalén.
Dicho esto no es arriesgado sacar conclusiones, dado que aquí alguien o algo se está empeñando en utilizar la barbarie contra la esperanza de millones de palestinos e israelitas.
Ahora más que nunca deberíamos tomar nota de la determinación de Suecia al reconocer al Estado palestino y hacer lo propio, para dejar una clara advertencia a aquellos que intentan minar la paz con una guerra sucia que se alarga demasiado.
¿A los vendedores de armas?
18 noviembre 2014 | 19:05
¿A los fabricantes de armas?
18 noviembre 2014 | 19:06
Yo creo que a los gobernantes de los bancos.
Clica sobre mi nombre
18 noviembre 2014 | 19:11
Es mas que nada que por los dos bandos son unos radicales religiosos, a cual el peor.
Hasta que tanto los judios como los palestinos no reciban una educacion laica, no hay nada que hacer. Salen locos perdidos, unos porque creen que son los propietarios del cielo, y los otros porque alli encontraran sus 100 virgenes.
18 noviembre 2014 | 19:59
«algo que se pone cuesta arriba tras lo sucedido en Jerusalén».
Esa afirmación no es cierta. El reconocimiento de Palestina no va a depender de lo sucedido en Jerusalén.
El resto, muy bonito aunque se tira la piedra y se esconde la mano. No vale con sugerir quién o quiénes se benefician. Digámoslo claramente y punto -en este país hay libertad de expresión-.
18 noviembre 2014 | 20:32
los atentados terroristas los cometen los palestinos asi que se conoce que les debe beneficiar en algo a los palestinos, quizás la respuesta israelí les viene bien para exacerbar su victimismo ante el planeta por lo que a los palestinos no les conviene que haya paz y que el mundo se olvide de ellos.
18 noviembre 2014 | 20:55
Pablitocoletas, has dado en el clavo. La gente opina sin conocer en profundidad sobre el asunto, tan sólo reiteran ese victimismo que inhalamos como opio a través de los medios de comunicación.
Que Hamás y su estado del terror ponga al frente a los propios palestinos en los atentados contra Israel le viene fenomenal para hacer crecer esa fama de víctimas ante el resto del mundo. Reconocer en estos momentos a Palestina como Estado es defender a Hamás y seguir instándole a que siga cometiendo esas barbaries contra los israelitas sin que medie ningún tipo de negociación con Israel, pues nunca ha sido esa su intención.
Reconocer como estado a Palestina, es reconocer a Hamás y su política de rechazo a Israel (nunca ha pretendido ni pretende reconocerlo) estamos dando un espaldarazo a Israel, pero esto no le interesa ni a los medios, ni a los intereses económicos ni políticos de los gobernantes mundiales.
¡A seguir fumando opio!…Así nos va.
18 noviembre 2014 | 22:16
Es evidente que no se conoce bien la historia de estos dos pueblos, y como muestra están vuestros comentarios.
El pueblo Israelí, para aquel que no lo sepa, apunto estuvo de perder una guerra contra los estados árabes (Siria, Egipto, Cisjordania) y fueron atacados por tres frentes simultáneamente.
Y digo a punto, porque finalmente lograron resistir (contra todo pronóstico) porque estos tres frentes se fueron desinflando por varias razones (falta de acuerdo entre los atacantes, el vigor de las tropas israelís, etc..)
Terminada esa guerra y con el recién nacido pueblo Israelí en marcha países como EEUU y otros de la unión europea lo vieron como el fabuloso muro de contención antimusulmana que ahora es.
El pueblo palestino (que ni es pueblo ni lo ha sido ni lo será jamás) no es más que peón de esta cruel guerra entre las facciones cristianas y musulmanas, y está siendo usado como excusa para seguir vertiendo odio y sangre de ambos bandos.
Es muy probable que si los Palestinos se desligasen de Hamas el estado Israelita acabara por aceptarlos, pero han sido tantas las afrentas, han caído tantos padres, abuelos, hermanos, hijos bajo el fuego Israelita que ningún Palestino tendera la mano a ningún Israelita.
Y si, es muy penoso ver como niños Palestinos caen ante las bombas de Israel, es cruel e innecesario. Cruel porque ningún niño debería morir por ninguna razón, innecesario porque el poder de Israel ya es tal que podrían neutralizar de una manera más efectiva a los comandos de Hamas (ojo, no los llamo terroristas porque si yo estuviera en su piel haría exactamente lo mismo).
Así que por una parte tenemos al orgulloso pueblo Israelí que defiende con uñas y dientes aquello que creen que es suyo y por otro a un pueblo que lleva oprimido tanto tiempo que solo tiene odio hacia su opresor.
Difícil tarea será que alguien consiga la paz en esas tierras sin perjudicar a uno u otro bando.
Sin acritud si os sentís ofendidos.
20 noviembre 2014 | 17:52