Solo un capítulo más Solo un capítulo más

Siempre busco la manera de acabar una serie cuanto antes... para ponerme a ver otra.

Archivo de la categoría ‘Criminal Justice’

De Niro por Gandolfini en Criminal Justice: no, gracias

La muerte de James Gandolfini tuvo consecuencias inesperadas para el mundo televisivo. Tanto que iba a producir una miniserie en su cadena fetiche, la HBO, en la que también iba a tener un rol importante. La ínclita es Criminal Justice, adaptación de una ficción original emitida por la BBC en 2008 sobre un chaval que acaba en casa de una chica desconocida con la que se acuesta y se droga.

GandolfiniA la mañana siguiente, se despierta y se la encuentra muerta a puñaladas. Él no sabe qué narices ha ocurrido, ya que la resaca y el mono no le permiten recordar nada de lo que pasó horas antes. La situación le vale una acusación por asesinato, de la que le defenderá un abogado penalista que iba a estar encarnado por Gandolfini durante los siete episodios que está previsto que abarque la historia. Ese letrado será ahora Robert de Niro, que como ya ha confirmado la propia cadena se incorpora al rodaje para hacer el papel destinado al Soprano.

Todo esto ocurre en el marco del Upper West Side neoyorquino, espacio de fastuosidad y muy propicio para cualquier historia criminal que se precie. Y ya si cuenta con la marca HBO resulta apetecible de forma indefectible. Pero si se te cae el que tiraría del carro tienes un problema muy serio. Reemplazarle por alguien de un peso similar no iba a ser fácil. En este caso no valía un casting, ya que lo que necesitas es una bestia interpretativa. Con cualquier decisión, aunque seas la mismísima Home Box Office, te van a caer por todas partes porque el que ha fallecido es insuperable.

Y entonces eliges a Robert de Niro. Un histórico. Antiguo Corleone. Ganador del Oscar. Responsable de papeles antológicos. Pero que es pasado. Siendo pragmáticos, estás cambiando a un italo-americano por otro. El fallo es que pasas de un actor excelso a otro que ha llevado su carrera por unos derroteros nada favorables para él mismo. Caviar por sucedáneo. Que no, vamos.

Robert1

De Niro ya no es el de El Padrino, Toro Salvaje o Taxi Driver. Es el que se presta a hacer el ridículo en filmes como Grudge Match, un escarnio en el que comparte pantalla con Sylvester Stallone. Aquí ambos son boxeadores retirados que 30 años atrás se enfrentaron en un combate. Y que ahora, tras volver a encontrarse, deciden repetir su famosa pelea de hace tres décadas. Tampoco es el que años atrás nos encantó a todos en Casino o Goodfellas y ahora ha pasado a filmes (buenísimos) como El lado bueno de las cosas, donde no me encajaba en absoluto y por la que le acabaron nominando al Oscar. Supongo que por pleitesía, ya que hasta Bradley Cooper se lo come.

Robert

Lo que le ocurre a De Niro es igual a lo que le pasa a Al Pacino, que tampoco ha estado muy acertado en los papeles que ha elegido en los últimos años. O al menos el último bueno que le recuerdo es en The Insider. Si no me creéis es que no habéis visto vergüenzas como 88 minutos. En algunos momentos he pensado en que todo responde a una especie de síndrome Corleone, ya que los dos protagonizaron las cintas de Francis Ford Coppola; pero me niego a llamarlo así por respeto a Marlon Brando.

Sé que es muy osado atreverse a poner a caer de un burro a alguien que fue un genio. Pero ahí está la cuestión: ya no lo es. Si estuviésemos hablando de una miniserie que iba a protagonizar él desde el principio, pues muy bien. A lo mejor estábamos ante un resurgir, por otra parte inesperado.

No me creo que Robert de Niro vaya a hacer un papelón inaudito. La decepción que han supuesto en estos años tanto él como Pacino por su penoso criterio llevan a no confiar más en que puedan recordar a los de años atrás. Y menos aún por Gandolfini, que hizo pocas cosas tras Los Soprano, pero supo elegirlas.

Amar a James Gandolfini es una necesidad si te gustan las series. Y desconfiar de Robert de Niro también lo es si te consideras exigente y con algo de criterio. Menos mal que para viejos que envejecen bien en el cine tenemos a Jack Nicholson y Clint Eastwood.