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Siempre busco la manera de acabar una serie cuanto antes... para ponerme a ver otra.

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Los mejores momentos de las series en 2013

  AVISO: Spoilers en todo el post

Siempre hay momentos que se nos quedan grabados. Ya sea porque su impacto es obvio o porque a nosotros nos calan de forma inexplicable, esas escenas o situaciones nos marcan y son las que destacamos cuando nos preguntan por un determinado asunto. En las series son habituales. Son experiencias personalísimas de cada uno. Lo que a él en un capítulo le ha jodido el día, a ella no le ha parecido ni destacable, y viceversa. La que sigue es la lista de las escenas que me chocaron, me hicieron reír o llorar, o las que simplemente son tan buenas que merecen una mención. Si vosotros tenéis otras, por favor, compartidlas en los comentarios. Lo vuelvo a avisar: SPOILERS a mogollón.

El tiroteo en el colegio de Utopia

Por lo que significa y el momento en el que se emitió puede que sea la secuencia más atrevida de todo el año. La serie de Channel 4 se emitió a principios de año, apenas dos meses después del tiroteo en la escuela de Newton en la que murieron varios niños y adultos. En EEUU ni se esperaban que en las islas británicas fuesen a emitir algo que ellos, con sus remilgos, jamás habrían emitido. Utopia no escatima en mostrar sangre con el rojo más fuerte posible. Lo mismo ocurre con las escenas violentas, más presentes conforme pasan los episodios. Que la pantalla nos muestre como Arby le vuela los sesos a alguien en primer plano y luego nos deje escuchar los gritos y los tiros que se producen en las distintas estancias de la escuela solo pueden hacerlo unas pocas. Y ésta es una de ellas.

El asesinato de Andrea en Breaking Bad

La mejor serie de 2013 se marchó con ocho capítulos inolvidables e históricos por la calidad patente que se ofrecía en cada segundo. Como es normal, el impacto y el “qué coño acaba de pasar” fueron constantes durante la tanda de despedida tan maravillosa que se marcó Vince Gilligan. Podría elegir muchos más de Breaking Bad, pero me quedo con este: cuando Todd asesina a Andrea de un tiro a bocajarro para obligar a Jesse a seguir haciendo metanfetamina en condiciones de esclavitud. Me quedé helado. Incluso se me escapó la lágrima, porque el llanto de Pinkman me destrozó. El tío Jack dejaba claro que no le importaba hacer lo que fuese para conseguir lo que quería.

La muerte de Hershel en The Walking Dead

Los zombis no han tenido una media temporada memorable que se diga, pero los acontecimientos del último episodio hasta su regreso en febrero tendrán mucha repercusión para su futuro. El asesinato de Hershel a manos del gobernador, y a espadazos, es muy importante para el devenir de la historia. Y fue completamente inesperado. Al menos The Walking Dead nos ha demostrado que aún tiene cierta capacidad de sorpresa.

La última media hora de Boardwalk Empire

En los episodios finales de temporada de la ficción de la mafia en los años 20 de la HBO siempre pasa algo. Realmente, en todos los capítulos existe un momento que te supera o te encanta, pero esto ocurre especialmente en las season finale. En los 30 minutos del episodio 12 de este año pasaron muchas cosas que a mí, y supongo que no seré el único, me frustraron a la par que aumentaron mi devoción por Boardwalk Empire. La muerte accidental de la hija de Chalky White fue uno de ellos.

Pero lo mejor, por triste, fue la despedida de Richard Harrow. Fue una montaña rusa de sensaciones por cómo la presentaron: de la felicidad al estar con su familia, al cabreo extremo cuando nos muestran que está muerto. Fue acojonante.

El final de Fringe

En 2013 se marchó una de las mejores series de ciencia ficción que han existido. Y lo hizo de la mejor forma posible: cerrando las tramas pendientes, evocando una vez más los valores que la han hecho destacar, y con espectacularidad por medio de un experimento que ponía el broche a la historia. Fueron cinco temporadas llenas de altibajos, pero eso no impidió que las tramas de Fringe fuesen entretenidas y muy interesantes. Sus interpretaciones, como la de John Noble, estaban más que logradas, y siempre te permitía aprender algo. Y encima era original. Estos tres minutos son una delicia.

La identidad de la madre en Cómo conocí a vuestra madre

Casi nueve años. Nueve. Me ha dado tiempo a sacarme bachillerato, acabar una carrera, y estar en varios medios. Y nunca he faltado a la cita semanal entre septiembre y mayo para ver si de refilón adivinaba quién era la madre de los hijos de Ted Mosby. Finalmente todas las pistas eran ciertas: el paraguas amarillo, la compañera de piso, la guitarra, el grupo que tocaba en la boda de Robin y Barney… Lo que nunca nos anticiparon de ninguna manera era su cara. Y así llegó a nuestras vidas Cristin Milioti, más conocida como «la madre», ya que en la serie aún no nos han dicho cómo se llama. He de reconocer que al principio Milioti me parecía poca cosa para las expectativas que teníamos ante tanto misterio. Pero con el tiempo he rectificado, como es normal, ya que ha estado estupenda a la vez que graciosa en todos los capítulos en los que ha aparecido hasta ahora. Quedan unos meses de Cómo conocí a vuestra madre, que se está despidiendo con una gran temporada. Aquí una entrevista que concedió hace poco tiempo.

La ¿muerte? de Brody en Homeland

Soy de los que tengo claro que Nicholas Brody ha pasado a la historia de la televisión como un héroe-villano fiambre. Pero por los comentarios en los posts sobre Homeland, los de las redes sociales, así como las teorías que circulan por distintos medios especializados, me he planteado si dudar sobre si realmente murió en el último episodio de la tercera temporada. Que si el nudo no era corredizo, que lo que vimos fue un ahorcamiento falso, que al que subió la grúa era otro tipo y no Brody… En cualquier caso, esto supone un punto de inflexión y el entierro definitivo de una serie que durante sus doce capítulos de este año se encargó por sí sola de cavar su tumba. Insisto en que nadie necesita una cuarta temporada.

La boda roja de Juego de Tronos

Los que habíamos leído el libro sabíamos lo que iba a pasar. Pero no cómo se iba a trasladar a la pantalla. Y la adaptación de esta masacre fue magnífica. Para los que no tenían ni idea por no haber leído Tormenta de Espadas fue un trauma todo lo que ocurrió en la boda entre una Frey y un Tully. Los vídeos de las reacciones de la gente ante esos minutos de sangre y asesinatos son representativos de la cara que se nos quedó a todos. Porque aun conociendo de antemano qué ocurriría, también flipé.

La terapia para Sheldon en The Big Bang Theory

De todos los momentos desternillantes que nos han regalado nuestros frikis favoritos durante los años que llevan en emisión, este es uno de mis preferidos junto a la persecución en la piscina de bolas. El contexto de ésta escena de TBBT es sencillo: Sheldon tiene la necesidad imperiosa de finalizar todo. No puede dejar nada a medias. Y Amy quiere educarle para que no sea tan obsesivo y pueda dejar las cosas a medias (a ella no la deja ni así, porque ni le da por empezar). Otra más de una pareja atípica que solo sabe hacernos reír.

El llanto de Michael Sheen en Masters of SexMasters

No se me ocurre nada peor para unos padres que perder un hijo por culpa de un aborto espontáneo. Si eso no te afecta es que eres un maldito robot y estás muerto por dentro. Afortunadamente, William Masters no lo estaba. Lo parecía, por su actitud y la personalidad huraña que nos muestra Michael Sheen en Masters of Sex. Pero cuando asume que ha perdido al bebé que espera con su esposa Libby explota. Aunque no quiera que le miren. La llorera desgarradora de Masters al final del quinto episodio de la serie es de las que no se olvida. No he encontrado el vídeo, pero los que la hayáis visto me entenderéis.

La muerte de Tara en Sons of Anarchy

Como es habitual, cada temporada de los moteros de Charming mueren varios de los personajes secundarios y alguno de los protagonistas. Esta sexta temporada puede ser la que haya batido el récord de decesos. Y eso que no estaba fácil, ya que en las anteriores caían como moscas y cada dos por tres quien menos te esperabas que iba a desaparecer. El año pasado fue la muerte de Opie la que nos apesadumbró a todos. En este 2013 de SOA, la más impactante ha sido sin duda la de Tara. La brutalidad de la secuencia ha provocado que la marcha de Clay haya quedado en segundo plano.

Los últimos minutos de Orange is the New BlackOrange

La muerte de Pennsatucky a manos de Piper nos dejó helados a todos. Ni lo vimos venir. Y, sobre todo, nos quedamos con la deliciosa intriga de no saber qué va a pasar ahora con la protagonista de Orange is the New Black¿La condenarán a más años? ¿Podrá ocultar lo que ha hecho? ¿La cubrirán? Hasta el verano de 2014 no sabremos la respuesta. La espera será larga.

La pelea entre Hood y el boxeador en Banshee

Un boxeador que maltrata a las chicas con las que se acuesta. Y un falso sheriff que quiere detenerle y darle una lección. Aunque tenga que enfrentarse a él puños mediante. Esta escena solo se puede definir como realista. No puedo añadir nada más. Hay que verla y punto.

Las mejores series de 2013 según los expertos españoles

Toda lista de preferencias con el foco en 2013 responde a los gustos personales de aquel que la realiza. Lo avisé en mis dos rankings particulares, el de las 10 mejores del año y el de las 10 series de estreno que a mi juicio más han destacado. Dado que siempre estoy dispuesto a ampliar miras y a dar cabida a todo aquello que os pueda servir para descubrir más ficciones que ver, he invitado a unos amigos a llenar este espacio para que os ofrezcan sus preferencias. De esta manera os recomiendan lo que les ha encandilado más y os cuenten por qué. Como es normal, ellos han optado por algunas que yo no tuve en tanta consideración o no he visto. Más que nada porque saben más que yo. Al fin y al cabo, lo mejor es tener variedad.

Miriam Lagoa – En Terra de Series

Breaking Bad. Estamos demasiado acostumbrados a series que se cierran con una final que no está a la altura. Vince Gilligan y su equipo culminaron una historia perfectamente diseñada durante cinco años a través de algunos de los mejores capítulos de toda la serie. Se resume con una palabra: Ozymandias.Breaking3

The Good Wife. Otro caso excepcional, el de una serie que no ha dejado de crecer desde la primera temporada y que está rayando la perfección en su quinta temporada.

Dates. La gran sorpresa del verano y la demostración de que no se necesitan grandes presupuestos para convertir en original una historia que no lo es tanto.

Masters of SexUna serie que lleva la palabra sexo en el título y luego es capaz de dejarlo en un segundo plano para hablar de amor y relaciones personales.  El complemento perfecto son sus actores, principales y secundarios, a los que deberíamos cansarnos de verlos nominados los próximos meses

Justified. Una serie que no es lo que parece y encima me da la sensación de que se vende fatal La cuarta temporada ha sido casi tan buena con la segunda , una de las mejores del 2011,  gracias a una historia principal que ha vuelto a ser la excusa para seguir indagando en el complejo mundo del condado de Harlan.

Natalia Marcos – Quinta Temporada (El País)

Breaking BadLos ocho últimos capítulos, con unos actores en estado de gracia y guiones que no daban un respiro, pusieron el broche perfecto a una serie que venía pidiendo paso en el Olimpo de las series y lo ha ganado por méritos propios.

The Good WifeEl final de la cuarta temporada y el comienzo de la quinta es de lo mejor que se ha podido ver en televisión este año. Es la serie que nunca decepciona, y que tras un capítulo grandísimo te da un episodio enorme.BRon

Masters of SexGran estreno de 2013 que huye del morbo que podría generar el tema que trata para centrarse en unos personajes magistralmente interpretados.

Bron BroenSi la primera temporada de la serie ya fue muy buena, la segunda es todavía mejor. La pareja formada por Saga y Martin es una de las mejores de la televisión actual. La espera de la tercera temporada se va a hacer muy larga.

Orange is the New Black2013 ha sido un año con muy buenas series de estreno. No es solo la historia de una cárcel de mujeres. Es una de las revelaciones del año por sus grandes personajes y por el enganche que provocan sus guiones.

Jaime DomínguezTV Spoiler Alert 

The OfficeA pesar de haber sido explotada hasta el hastío, la novena y última temporada de The Office consiguió que nos reconciliáramos con los empleados de Dunder Mifflin, quienes se despidieron por todo lo alto con un emotivo final que indudablemente obliga a incluirla entre lo mejor del año.Good

Breaking BadLa serie del año por excelencia se coloca en el podio de las series más épicas de la historia tras habernos ofrecido una recta final que dejó al espectador sin respiración. Su final, ya una leyenda, nos ofreció toda la paz que le podíamos pedir a la serie, no sin saldar antes las cuentas que tenía pendientes con sus personajes así como con su público.

Orange is the New BlackLa sorpresa del verano que dejó a la crítica y al público encandilados se ha convertido en todo un referente para el seriéfilo. De la creadora de Weeds, la serie de Netflix consigue convertir una prisión de mujeres en el happy place más adictivo que podemos recordar.

The Good WifeComo el buen vino, el procedimental legal de la CBS no solo se saldó con una cuarta temporada brillante, sino que consiguió dar un giro de 360º para dejar a todos sus espectadores boquiabiertos con andadura en su quinta temporada. Deliciosa, atrevida y elegante; un placer que disfrutamos solo unos pocos. 

Ja’mie: Private School GirlDel atrevido Chris Lilley, esta comedia australiana que aún a día de hoy sigue dando de qué hablar no es apta para todos los paladares, pero seguramente conseguirá sorprender a más de uno con su particular visión del mundo ‘teen’ y una idea que, cómo negarlo, es ‘so quiche’ que es imposible no apreciarla.

Mar Guerrero – Series a la parrilla

The Good Wife. Normalmente una serie de network en su quinta temporada y 100 episodios a sus espaldas tiende a estar más enganchada a la máquina de respirar que dando guerra por sí sola, pero lo que han hecho los King aquí es superlativo. No sólo los guiones siguen sacando petróleo de unos personajes que parecen inagotables, sino que continuan situaciones y temas de complejidad considerable con un arte pasmoso. Para levantarse y aplaudir mientras te cargas el bol de palomitas, así de claro.

Jorah

Orange is The New Black.  Creo que nadie iba con expectativa alguna con ella y resultó ser la revelación de este año. Engancha la idea y un reparto poco visto con mujeres de todas las formas y colores. Te olvidas de que son unas delincuentes en la cárcel y ves a gente con sus problemas. Además, la serie es una fuente muy peligrosa de onliners para partirse. Mención especial merece Laura Prepon que ha dejado to’ loco a gran parte del público con su personaje. En definitiva, chapó por Jenji Kohan y Netflix.

Game of Thrones. La tercera entrega ha devuelto a la serie toda la fuerza que se perdió en la segunda temporada. Había parado de leer los libros, así que el momento de la Boda Roja me pilló completamente por sorpresa. Se nota que, por fin, han entrado en materia, concentrándose en las tramas que importan, y no han decepcionado. Espero con ganas los nuevos episodios… Y muertes si las hay.

Dates

DatesParece mentira que la séptima temporada de Skins, de lo peor de año, y esto provengan del mismo creador, pero así estamos… Tírame un drama intimista que te lo agarro al vuelo. Los nuevos capítulos se te pasan volando. Gran parte de la culpa es de los diálogos, y también del choque de personalidades de los emparejamientos que vas viendo y, por supuesto, lo marciano de algunas situaciones. Me gustaría ver cómo sigue tratando la vida al camionero David.

Orphan Black. En esta serie no es tanto el qué como el quién. Como serie de sci-fi ligera es entrenidísima, pero aquí la salsa la pone Tatiana Maslany. En serio, es monstruoso lo que hace esta actriz  interpretando a hasta, ¿cuántos? Siete clones diferentes. Tan sólo por ver el festival que monta ella sola, vale la pena. Y tiene que ganar el Globo de Oro.

José Manuel RomeroCadena SER

Breaking Bad. Su tanda final de ocho capítulos demostró por qué está ya en el olimpo de las mejores series de la historia. La caída de Heisenberg, el sufrimiento de Jesse, la angustia de Skyler, la determinación de Hank… No vamos a poder olvidar fácilmente a una ficción que nunca se ha traicionado y que siempre podrá presumir de la coherencia de sus guiones, de elaborar una historia redonda, sin fisuras. Solo por Ozymandias deber ser la serie del año. Confirmó ser la obra de arte que esperábamos.

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Orange is the New Black. El soplo de aire fresco que necesitábamos. Cuando mejor se hablaba de Netflix por House of Cards y empezaban a llegar las nominaciones a premios, la plataforma online nos sorprendió en verano con el que ha sido su gran estreno. El enfoque de la narración, la mezcla de géneros y la historia de Piper Chapman fue algo nuevo entre tantas ficciones recicladas y la palpante falta de ideas. Buscaba sorprender y lo ha conseguido.

The Good Wife. La serie que nunca defrauda. Ha cumplido 100 capítulos y sigue ahí, sin mostrar signos de cansancio. Su ritmo, sus guiones, su legión de actores secundarios y la maestría para desarrollar casos semanales han hecho que entierre esa coletilla de ‘la mejor serie de la televisión en abierto’. La última parte de su cuarta temporada y el arranque de la quinta la sitúan cara a cara con las mejores ficciones de la televisión por cable.

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Bron Broen. En este top cinco del año es obligatorio incluir alguna serie que no venga de EEUU. Entre Dates y Bron Broen he optado finalmente por la solvencia de la segunda. Parecía muy difícil después de la excelente primera temporada y el remake USA (y francobritánico), que Saga y Martin volvieran a engancharnos con un nuevo caso policial, pero lo han conseguido. No tanto por la historia en sí, sino por la evolución de dos personajes en constante construcción y crecimiento. Un premio al mejor dúo policial de los últimos tiempos.

Masters of Sex. La serie que cumplió las expectativas. La relación de Will y Virginia y las investigaciones de Masters and Johnson nos han seducido desde el primer minuto. Al igual que Orange is the New Black, su magia viene de mostrar algo nuevo y sumamente cuidado. La mezcla de tramas, la complejidad de mostrar unas mentes atormentadas y la elegancia a la hora de tratar el sexo han hecho que estos primeros 12 capítulos nos hayan sabido a poco.

Las diez mejores series de 2013

Nos hemos pasado el año rajando de lo malo que había sido este 2013 para la ficción. Luego te pones a hacer memoria y a repasar lo que hemos visto en estos 12 meses… Y resulta que el año no ha sido tan malo. Han sido pocas las que han destacado y han venido para quedarse, pero todas de gran calidad. Lo mismo se puede decir de las que ya estaban, que con la excepción de Homeland han mejorado en sus nuevas temporadas. Que quede claro que esta lista refleja mi experiencia propia: solo está lo que he visto. Responde a mis gustos. El número implica que se queden fuera muchas otras que se lo merecerían. Y por supuesto, se puede disentir. También en los puestos: aquí podéis votar las que os parezcan mejores según vuestras preferencias. Vamos allá.

10. Juego de TronosGame

Tengo que reconocer que he dudado mucho entre ésta y Mad Men, que ha tenido una temporada colosal. The Rains of Castamere ha inclinado la balanza en favor de la criatura de George R.R. Martin. Aun estando sobre aviso de lo que iba a pasar por haber leído el libro, no pude evitar el impacto de ese noveno capítulo de temporada. Era inevitable flipar por lo que veía. El resto de episodios han estado a la altura de la gran serie que es. La seguirán ignorando en todos los premios seriéfilos, seguro. Pero puede que sea la que más seguidores tenga en todo el mundo en la actualidad, y eso no se paga con premios. Para los que no hayáis hojeado Tormenta de Espadas, el libro de Canción de Hielo y Fuego en el que están basadas la tercera y cuarta temporada, un aviso: la entrega de 2014 va a ser todavía mejor.

9. Dates Dates

Ha sido la auténtica novedad del año. Jamás habíamos visto algo parecido. Y por eso es de las 10 mejores del año. Bryan Elsley se ha lucido con esta idea de desconocidos que quedan tras conocerse por Internet y que tienen una cita rocambolesca. Las historias de los personajes están muy logradas, y en todas ellas confluyen el drama mundano nada alejado de la realidad. Que nos parezca tan real es culpa de su reparto, encabezado por una Oona Chaplin espectacular y que aquí demuestra que puede hacer lo que le dé la gana (además de confirmar que el futuro es suyo). Nueve episodios de algo más de 20 minutos que hay que ver sí o sí.

8. House of CardsHouse

Echábamos en falta una serie política que se sumergiese en las entrañas de la alta política estadounidense (Scandal no vale, esa es una broma). El argumento de la serie de Netflix es insuperable, con tramas intrigantes a la vez que adictivas. Por no hablar de que la calidad está hasta en el iluminador. El aroma de Hollywood está impregnado en sus 13 episodios, bien sea por David Fincher o por el papel protagonista de Kevin Spacey. Este último, con el regalo que le hacen los guionistas de romper la ‘cuarta pared‘, es el narrador perfecto para una ficción que en apariencia es complicada. Obviamente, no resulta así para nada. Aunque a veces no se pillen algunas conversaciones. Ésto nos ha permitido aprender más de la vida de los congresistas de EEUU y de cómo se llevan a cabo proyectos legislativos. En febrero más.

7. HannibalHannibal

Mi predilección por el doctor Lecter ha pesado, claro está. Por algo es el personaje de ficción al que le debo mi rechazo a las películas de miedo y mi aversión completa al gore de cualquier tipo. Pero Bryan Fuller ha planteado la historia del psiquiatra caníbal desde la majestuosidad y la distinción, una óptica que a la vez corresponde a los rasgos de su protagonista. Hannibal es lóbrega, agobiante y sobrecogedora. Incluso acojona en algún momento. Por eso es tan buena. También es cierto que se queda corta, ya que se emite en un canal en abierto. Si la cogiese una cadena de cable veríamos otra serie, mucho más explícita, y con un Mads Mikkelsen más aterrador. Ahora mismo está perfecta. Pero si se atreviese a más sería incluso mejor. Aspectos a pulir también tiene: Will Graham (Hugh Dancy) es insoportable, por ejemplo.

6. The Big Bang Theorytbbt

Es de las pocas que me hace reír en la actualidad. Estoy convencido de que muchas otras lo harán cuando las vea, pero es que es mi favorita del género. Que esté aquí responde al buen año efectivo que ha tenido: su sexta temporada fue genial, y los 11 capítulos que lleva la séptima son un no parar de carcajadas en la mayoría de minutos. Sheldon Cooper (Jim Parsons) nos alegra los días a todos con sus ocurrencias. Y ya no es el único: el resto de personajes no para de crecer en potencia. Todos son desternillantes, desde Penny (Kaley Cuoco) y su ignorancia, pasando por Howard (Simon Helberg) y su desastroso papel como marido, a Raj (Kunal Nayyar) y su soledad afeminada. Los rumores apuntan a que TBBT podría renovar tres años, alcanzando 10 temporadas. Yo digo sí.

5. UtopiaUtopia

Es la hostia. Tiene todos los ingredientes para enganchar desde el principio: violencia, acción y una trama inédita. Pero lo que realmente atrapa son sus misterios. En sus seis capítulos nunca se podía anticipar qué iba a ocurrir o cómo iban a salir los personajes del atolladero. La incógnita sobre la identidad de Mr. Rabbit, destapada en los últimos minutos, permite a Utopia entrar en ese club selecto de series con giros inesperados y tramas ocultas que ni nos esperamos. Su valentía a la hora de ofrecer una matanza en un colegio o escenas explícitas forman parte del cuadro de aciertos. Y su estética. Hay que ser fan por narices de los colores de los escenarios. Hasta la sangre es bonita.

4. Orange is the New BlackOrange

Quizá sea la obligatoria de 2013. Ha sido de la que más se ha hablado, y con razón. Jenji Kohan ha triunfado con su cárcel de mujeres inspirada en la historia de Piper Kerman. Y no es para menos: el reparto es genial, las tramas muy interesantes, y su trasfondo de denuncia social es un aspecto poco común en la ficción estadounidense. Tampoco es que andásemos muy sobrados de humor negro en las series que ya conocíamos. Ese vacío lo ha ocupado Orange is the New Black, y puede que sea suyo por muchos años. Aunque puede que no estén todas las que lo han hecho posible: ya veremos si Laura Prepon (Alex) se anima a seguir formando parte de esta tragicomedia. Sigo pensando en el final, sí. Los que la hayáis visto lo entenderéis.

3. Boardwalk Empireb4

No comprendo por qué, entre mis círculos, son mayoría los que no la ven. No me cabe en la cabeza. Y menos aún después de esta última temporada. Es una de las tres (las otras dos las primeras) que me destrozó en algún momento, gracias a su facilidad para empaparte de su trama y sentir como sus personajes. Su retrato de la génesis de ‘clase’ mafiosa que atemorizó y se apropió de Estados Unidos durante décadas no puede ser más fidedigno. Basta con leer algún libro para cerciorarse de que en el 90% del tiempo que duran sus episodios ofrece tramas completamente reales. Os podéis fijar en la tragedia que le toca vivir a Al Capone, por ejemplo. Boardwalk Empire no es Los Soprano, pero ocupa su lugar de forma más que digna. Su reparto es estupendo, y tiene la habilidad de sorprender con cada temporada.

2. Sons of AnarchySons

Sería la mejor de no ser por el acontecimiento seriéfilo del año. En cualquier caso, el próximo año será el suyo sin duda. Los moteros de Samcro que salieron de la imaginación de Kurt Sutter se despedirán el próximo año tras siete temporadas. Y como aperitivo a su adiós, nos han dejado 13 episodios indescriptibles en este 2013. Lo mejor, o lo peor, ha estado en su final, uno de los más impactantes del año por sus muertes, las consecuencias que conllevan para el resto de personajes, y por dejarte con ganas de que llegue otro capítulo. Su acción es distinta, y Sutter es un auténtico genio para facilitar la confluencia de más de 20 tramas distintas en una sola temporada. Porque nadie se pierde con todas las cosas que pasan en Sons of Anarchy, más bien al contrario. Algo que ya pasaba en The Shield, que destacaba por su ritmo endiablado. Virtud que ahora han heredado Jax Teller (Charlie Hunnam) y sus muchachos.

1. Breaking Bad Breaking

Sería un insulto no considerarla la mejor del año. Ya no como muestra de pleitesía por su despedida, sino porque solo se la puede definir de una manera: grandiosa. La serie que reinventó el drama de acción, gracias a sus planteamientos discrepantes con lo establecido, se fue en septiembre dejándonos a todos huérfanos. Se iba una de las mejores ficciones de la historia, y una de las que estará seguro en la lista de las que marcaron esta década. Walter White (Bryan Cranston) y Jesse Pinkman (Aaron Paul) son dos personajes irrepetibles que se han sumado a esa lista de grandes parejas en cualquier disciplina, como la de Karl Malone y John Stockton en el baloncesto. Sus mejores momentos no solo han estado al final, pero los últimos ocho episodios sí han acaparado la mayoría. A mí, personalmente, la ejecución de un personaje (porque no tiene otro nombre) para obligar a uno de los protagonistas a seguir haciendo metanfetamina me impactó especialmente. No se me va a olvidar en la vida. Su legado es inconmensurable. Y si una serie te ha marcado de esa manera es porque tiene más poder del que imaginas. Gracias por existir.

El documental sobre el auténtico Walter White que pudo inspirar Breaking Bad

Walter White existió. El narcotraficante que creaba la mejor metanfetamina del mercado no es solo un ser ficticio de Breaking Bad. Aunque su centro de operaciones estuvo en Alabama, no en Alburquerque. VICE ha encontrado a este hombre que comparte nombre con el personaje que interpretó Bryan Cranston en la serie de Vince Gilligan y ha realizado un documental sobre su vida. Y las similitudes entre ambos son palmarias. Una historia muy curiosa sobre un criminal que, indirectamente, es conocido en todo el mundo y que inspiró de forma accidental una de las mejores series que han existido. El documental está en inglés.

El final ‘alternativo’ de Breaking Bad

Por la red circula un final alternativo de Breaking BadUn cierre opcional a una de las mejores series de la historia en el que Walter White (Bryan Cranston) pasa a ser otro personaje mítico de la televisión. Y mejor no destripo más. Este broche a la ficción, que camina entre lo estrambótico y lo cómico, quizá os recuerde al de otra serie española. Aunque realmente está basado en el final de otra histórica comedia estadounidense.

Siete semanas y una vida con Walter White y Breaking Bad

Spoilers para dar y regalar. Avisados estáis 🙂

Comencé a ver Breaking Bad el 13 de agosto, hace apenas dos meses. Carezco de razón (o excusa) para no haber empezado a verla mucho antes. Simplemente no se puede ver todo lo que a uno le gustaría. Pero he de decir que no era de las que más me llamaba la atención. Sabía por supuesto que la veía un gran número de gente, que se había instalado un hype indescriptible porque se iban a emitir los ocho últimos capítulos, y que había voces que afirmaban con rotundidad que se marchaba la “mejor serie de la historia”. Esto último es lo que me suele echar atrás con algunas ficciones, ya que he llegado a leer que la mejor comedia actual es New Girl. Sin embargo, a Walter White (Bryan Cranston) era necesario darle una oportunidad. Y menos mal que lo hice. Acabé de verla el miércoles pasado. Y fue perfecta. Breaking2

Haberla visto tan seguida me ha privado de disfrutarla más. No he tenido que estar con la tensión del cliffhanger semanal, ya que finalizaba un capítulo y me ponía a ver otro. Y otro. Y luego uno más. Aunque al principio no fue así: su primera temporada, de siete episodios, no es ninguna maravilla. Es interesante, está claro, porque la idea y los personajes no se parecen en nada a lo que hemos visto antes. Pero es floja, por culpa del síndrome Padrino que ya expliqué una vez. Y es que las siguientes entregan son tan espectaculares que te hacen reflexionar sobre qué pasaba en la primera.

Breaking4Porque lo que está claro es que hay una evolución de un género completamente distinto a otro. Y es que parece que Vince Gilligan pretendía hacer al principio una tragicomedia; una especie de parodia sobre el mundo de las drogas al que accede un profesor mohíno en busca de dinero por culpa de una enfermedad incurable. Porque al principio parece de coña: son dos inútiles jugando a ser narcos y que fabrican metanfetamina. Algo que no es tal en la segunda temporada, ya que se vuelve seria. Incluso adusta. Sin tener nada que ver con su carta de presentación de 2008.

Es cuando pasa a ser una drama de acción en el que no hay tanto de esto último. No hay tiros, persecuciones, peleas o luchas contra el reloj. Es decir, falta el ritmo que se le presupondría a algo en lo que prime todo lo anterior. Pero no le hace falta. Tener una cadencia determinada está bien, pero la calma y la pausa es lo que diferencian a una serie entretenida de una genialidad absoluta. Y eso es Breaking Bad: lenta en su segunda entrega, pero con todos los argumentos del mundo para justificar el serlo. Algo que remató la aparición de Gus Fring (Giancarlo Esposito), que imprime ese tono profesional y pausado que la hace única y diferente.

No le menciono en el post, Pero RJ Mitte lo hace genial.

No le menciono en el post, Pero RJ Mitte lo hace genial.

Esta reinvención del género de acción es majestuosa en la tercera entrega (el capítulo del tiroteo a Hank es la hostia, directamente), donde Walter y Jesse Pinkman (Aaron Paul) se profesionalizan gracias al auspicio del narco que, bajo una de las ideas más geniales que he visto a unos guionistas, resulta que es dueño de una cadena de restaurantes de comida rápida. De verdad, ese detalle me enamoró. Y donde Skyler White (Anna Gunn) adquiere, al fin, la importancia necesaria para sacar toda la fuerza que tiene su personaje. Quizá sea aquí cuando empieza a generar animadversión entre el personal, como ella misma admitió en el New York Times.

De Walter a Heisenberg

Es aquí también cuando empieza la transformación del profesor de química. La génesis de una persona que abraza el mal de forma consciente y que se siente cómodo con ello, como relató el maestro Enrique Vila-Matas hace unos días. Alguien que no duda en revelar a su mujer qué hace para ganar dinero. Ya no importan los demás, como reconoce él mismo en el último episodio. Todo lo que hacía era por él y su propia ambición. Y si hay que quitar a gente de en medio, se hace.Brekaing5

“I’m the one who knocks”, le dice a Skyler cuando ésta le pregunta si está en peligro. Por eso no duda en cargarse a dos camellos que han matado un niño para salvar a Jesse. O en ordenar la muerte de su compañero de laboratorio para salvar su pellejo, y el de su exalumno. Ya no es Walt. Es Heisenberg, el creador de la metanfetamina azul de 99% de pureza. Este final de tercera temporada es uno de los que me habría gustado saborear y que por verla corriendo no he podido hacerlo. Habría molado quedarse con la intriga con un cliffhanger así.

Breaking8Y es que no tardé ni un minuto desde el final de la tercera en comenzar la cuarta temporada. Necesitaba saber que iba a pasar. Esto no paraba de mejorar. Y así fue: otra maravilla televisiva. Aquí es cuando vemos al Walter maquiavélico, que ya te demuestra que es frío y con un carácter desabrido para los negocios que en nada recuerda al de los inicios. Al que sabes que algo le tiene que pasar, ya que se ha librado hasta ahora de todo. Es en esta entrega cuando el ritmo, eso que decíamos antes que no tenía pero que tampoco le hacía falta, aparece. Y de qué manera. Que un episodio sea vertiginoso es un logro; lo que se hace aquí es una obra maestra.

Una característica palpable en los tres últimos capítulos de la temporada, con momentos para enmarcar y situaciones que ya empiezan a convencerte de que está reinventando la ficción televisiva. La autodestrucción (otra vez) de Jesse marca una parte, que le sirve a Aaron Paul para justificar los Emmy que ha ganado y para exigir el otro que debería ganar el próximo año. La sed de venganza de Walter por sentirse ninguneado por Gus hace el resto. Y eso le lleva a enloquecer en algún momento.

Es en el capítulo número 11, después de que Skyler le diga que le ha dado el dinero a Ted para que pague su deuda con Hacienda, cuando algo salta en su cabeza. Empieza a llorar. Pero luego se ríe de una forma aterradora. Que acojona tanto como los payasos asesinos del cine (al menos a mí, que tengo coulrofobia). Y ya es imposible creerse que este hombre que ha decidido ser un villano sienta que un niño enferme. Ya cuando descubres que ha sido él mismo el que le ha envenenado por uno de sus objetivos, lo entiendes. Pero antes tampoco demuestra empatía alguna con la situación del pobre crío. Es lo mismo que pasó con Jane, a la que dejó morir sin intentar hacer nada para salvarla. Algo que le restregará bien fuerte a Jesse en su momento.Breaking7

Antes de llegar a la quinta temporada, lo único que se le podría achacar a Breaking Bad es que algunos de sus momentos son predecibles un minuto antes. Pasa con la muerte del hombre de Gus en el primer episodio de la cuarta, por poner un ejemplo. Y con unos pocos más en las cuatro entregas. En la quinta todo cambia. Ya no te puedes esperar nada. Los giros son totalmente inesperados y demasiados bruscos como para anticiparlos. Es cuando descubres que todavía es más imposible separarse de ella, y que casi la necesitas en vena.

Un cierre impecable

Breaking3La última remesa de capítulos dividida en dos entregas distintas de ocho y ocho es la de la radicalización absoluta de la serie. El hilo a seguir es completamente distinto al de las anteriores entregas. Y creo que nadie podría haberlo hecho tan bien como Vince Gilligan. Todo porque se da una situación peculiar, que es la de la incorporación de una trama mafiosa y asesina que antes no había tenido tanto impacto (amén de los gemelos de la tercera temporada, que tenían un objetivo claro). De esto tiene culpa la banda nazi del tío Jack y Todd, que aparenta ser un imberbe cuando realmente es un temible y despiadado. O fijáos en su expresión cuando mata a la exnovia de Jesse. Sin inmutarse. Una interpretación casi perfecta, pero aún muy lejos de las de Paul y Cranston, está claro.Breaking6

Aquí cada capítulo es mejor que el anterior. Pasa de todo a cada minuto. La alianza con Mike, el negocio independiente de Heisenberg y Jesse, y la persecución de la DEA contra todos los que formaban parte del engranaje de Gus… La forma en la que está contado es magistral. Y para mejorarlo se incorpora un personaje tan odioso como Lydia, que pone ese contrapunto de wannabe mafiosa remilgada que sacia su miedo intentando que otros maten a los que ya no le interesan.

Breaking1La muerte de Mike quizá sea el punto de inflexión para la segunda parte de la temporada final. Es lo que rompe y permite otro argumento completamente distinto. Una evolución más. Y así es cuando Hank descubre todo y quiere acabar con Walt. A su conversación de enfrentamiento, uno de los momentos a destacar, se suma el asesinato masivo en las cárceles a los esbirros de Gus por parte de los sicarios del tío Jack. Una excelencia recogida en los cuatro últimos episodios, que deberían estudiarse en las escuelas de guión como el ejemplo a seguir de cualquiera que quiera dedicarse a escribir ficción. No pueden pasar más cosas en algo menos de cuatro horas de duración. Ajustes de cuentas, asesinatos, torturas, esclavismo, huidas, regresos, persecuciones… Hay de todo. Es espectacular.

Breaking9

El final es simplemente perfecto. No se le puede pedir más. La manera en la que se despide Walter White, que muere matando, marca un antes y un después para todos los que vemos series. Ese disparo al tío Jack, exactamente igual a lo que él hizo con Hank antes, lo dice todo. Y minutos antes, al finalizar su venganza contra los que le ningunearon y se hicieron ricos por su trabajo usándoles como asidero para su familia, se cierra el resto. Con Jesse libre tras pagar por sus pecados.

Breaking Bad y Walter H. White han entrado directamente al Olimpo de las maravillas de esta temática que supieron sobrevivir a sí mismas y despedirse a lo grande y encandilando a todos los que la hemos seguido. Algo que hizo The Shield y que seguramente hará Sons of Anarchy. Ahora es cuando me arrepiento de no haberla seguido semana a semana. Y ni un spin-off de Saul Goodman me va a llenar este vacío. Creo que como poco necesito una camiseta de Heisenberg para homenajearle.

Breaking Bad y Modern Family triunfan en unos Emmy muy repartidos

Una ceremonia aburrida recuperada al final por el gozo general que generó la victoria de Breaking Bad. Ese podría ser el resumen de la gala de los Emmy 2013, donde la serie de Vince Gilligan se ha sentado en el trono de mejor drama tras superar a Homeland. La ficción de AMC ha contado con otra buena noticia de la noche: el premio a Anna Gunn como mejor secundaria dramática.

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Unas categorías individuales donde Homeland ha visto salvada su honra gracias a Claire Danes, que repite como mejor actriz de drama, y a su guionista Henry Bromell, mejor guión por el episodio Q&A. Aún así, los espías de Showtime han tenido que hincar la rodilla ante la metanfetamina de Heisenberg, que provoca un fácil presagio entre todos los seguidores de los Emmy. Vamos, que el año que viene arrasará en su despedida tras el final definitivo de su quinta temporada. Aunque hoy salga cuasi derrotada con tan solo dos estatuillas.

Todo lo anterior estaba entre las quinielas posibles, ya que son series que cuentan con el respaldo de crítica y público. Pero lo que nadie esperaba ni por asomo era la victoria de Jeff Daniels como actor de drama por The Newsroom. El monólogo del episodio piloto de la serie que se marca ha propiciado que Will McAvoy se cargue, atención, a Bryan Cranston, Damian Lewis, Jon Hamm o Kevin Spacey. Esta noticia inexplicable ha animado una gala aburrida donde Neil Patrick Harris no ha explotado su talento musical, lo que ha restado grandes momentos y ritmo al desarrollo del show. La guinda habría sido una victoria de Kerry Washington como mejor actriz, pero la cordura ha perdurado.

El secundario masculino ha recaído en Bobby Cannavale, que realiza una interpretación soberbia en Boardwalk Empire. Durante la gala, nadie hizo referencia al capítulo final de Dexter, emitido esta madrugada en EE UU. Y es que a nadie le interesa ya el asesino en serie. La cruz del segmento ha sido para House of Cards, que tras su enérgico desembarco en las nominaciones solo ha recibido la mejor dirección dramática para David Fincher. Aquí otra culpable del desastre en las porras.

En comedia, Modern Family se ha resarcido con el Emmy a la mejor serie de los varapalos en categorías individuales. Y es que ninguno de sus actores ha repetido los éxitos de años atrás. A saber, los actores principal y secundario ganadores han sido Jim Parsons (The Big Bang Theory) por tercer año consecutivo y Tony Hale (Veep), mientras que Julia Louis-Dreyfus (Veep) y Merritt Wever (Nurse Jackie) han vencido en las mismas respectivamente. Esta última, con uno de los discursos más peculiares de la historia para agradecer el premio: «Thank you. Sorry, I gotta go. Bye».

La ficción de ABC abre así la puerta a una posible derrota el próximo año, ya que el desgaste empieza a ser palpable. Una victoria pírrica que no augura nada bueno para sus intereses. Pero ni con esta mala salud frente al jurado ha logrado 30 Rock superarla para llevarse el reconocimiento a mejor comedia en su despedida; se ha tenido que conformar con el de mejor guión de comedia para Tina Fey y Tracey Wigfield.

Las miniseries han estado acaparadas por Behind the Candelabra, que se ha alzado con las estatuillas a mejor ficción, actor para Michael Douglas y director para Steven Soderbergh. La mayor damnificada por el triunfo del biopic del pianista Liberace ha sido American Horror Story: Asylum, que ha visto como solo James Cromwell les auxiliaba con su galardón al secundario más destacado. Entre las féminas, Laura Linney ha tenido su adiós deseado al ser considerada como la mejor principal, y Ellen Burstyn ha rascado para Political Animals el trofeo como secundaria.

Aun con una gala tediosa con números pobres (lo mejor han sido las pinceladas de Kevin Spacey, Amy Poehler y Tina fey) y con el sueño acumulado tras 21 horas sin dormir, he logrado soportar unos Emmy que han resultado muy repartidos, amén del gran nivel que presentaban por los nombres en liza. Donde Mad Men Game of Thrones han vuelto a ser ninguneadas. Por la que Louis CK seguirá dándose cabezazos contra la pared mientras se pregunta «¿qué de hacer?». En los se ha recordado a Cory Monteith y James Gandolfini. Para los que deseo y espero que el próximo año estén imprimidos de ritmo con el fin de evitar los bostezos que estoy soltando ahora. Al menos Christina Hendricks y Sofía Vergara han acertado en sus vestidos (no words).

Y como sé que no leeréis mi tocho anterior y pasaréis directamente al palmarés, aquí lo tenéis.

DRAMAS

Mejor drama

  • House of Cards
  • Breaking Bad
  • Downton Abbey
  • Game of Thrones
  • Homeland
  • Mad Men

Mejor actriz

  • Vera Farmiga, Bates Motel
  • Connie Britton, Nashville
  • Claire Danes, Homeland
  • Michelle Dockery, Downton Abbey
  • Robin Wright, House of Cards
  • Elisabeth Moss, Mad Men
  • Kerry Washington, Scandal

Mejor actor

  • Kevin Spacey, House of Cards
  • Bryan Cranston, Breaking Bad
  • Jeff Daniels, The Newsroom
  • Hugh Bonneville, Downton Abbey
  • Damien Lewis, Homeland
  • Jon Hamm, Mad Men

Mejor actriz secundaria

  • Anna Gunn, Breaking Bad
  • Maggie Smith, Downton Abbey
  • Emilia Clarke, Game of Thrones
  • Morena Baccarin, Homeland
  • Christine Baranski, The Good Wife
  • Christina Hendricks, Mad Men

Mejor actor secundario

  • Aaron Paul, Breaking Bad
  • Bobby Cannavale, Boardwalk Empire
  • Jonathan Banks, Breaking Bad
  • Jim Carter, Downton Abbey
  • Peter Dinklage, Game of Thrones
  • Mandy Patinkin, Homeland

Mejor guión

  • Breaking Bad, «Dead Fright», George Mastras
  • Breaking Bad, «Say My Name», Thomas Schnauz
  • Downton Abbey, «Episode 4», Julian Fellowes
  • Game of Thrones, «The Rains of Castamere», Benioff & Weiss
  • Homeland, «Q&A», Henry Bromell

Mejor dirección

  • Boardwalk Empire, «Margate Sands», Tim Van Patten
  • Breaking Bad, «Gliding Over All», Michelle MacLaren
  • Downton Abbey, «Episode 4», Jeremy Webb
  • Homeland, «Q&A», Leslie Linka Glatter
  • House of Cards, «Episode 1», David Fincher

 

COMEDIAS

Mejor serie cómica

  • 30 Rock
  • The Big Bang Theory
  • Girls
  • Louie
  • Modern Family
  • Veep

Mejor actriz en una serie cómica

  • Lena Dunham, Girls
  • Laura Dern, Enlightened
  • Edie Falco, Nurse Jackie
  • Amy Poehler, Parks and Recreation
  • Tina Fey, 30 Rock
  • Julia Louis-Dreyfus, Veep

Mejor actor en una serie cómica

  • Jim Parsons, The Big Bang Theory
  • Jason Bateman, Arrested Development
  • Don Cheadle, House of Lies
  • Louis C.K., Louie
  • Alec Baldwin, 30 Rock
  • Matt LeBlanc, Episodes

Mejor actriz de reparto en una serie cómica

  • Mayim Bialik, The Big Bang Theory
  • Jane Lynch, Glee
  • Julie Bowen, Modern Family
  • Jane Krakowski, 30 Rock
  • Merritt Wever, Nurse Jackie
  • Anna Chlumsky, Veep

Mejor actor de reparto

  • Adam Driver, Girls
  • Ed O’Neill, Modern Family
  • Jesse Tyler Ferguson, Modern Family
  • Ty Burell, Modern Family
  • Max Greenfield, New Girl
  • Tony Hale, Veep

Mejor guión en una serie cómica

  • 30 Rock, «Hogcock!», Jack Burditt y Robert Carlock
  • 30 Rock, «Last Lunch», Tina Fey y Tracey Wingfield
  • Episodes, «Episode 209», David Crane y Jeffrey Klarik
  • Louie, «Daddy’s Girlfriend (Part 1)», Louis C.K. y Pamela Adlon
  • The Office, «Finale», Greg Daniels

Mejor dirección en una serie cómica

  • 30 Rock, «Hogcock! / Last Lunch», Beth McCarthy-Miller
  • Girls, «On All Fours», Lena Dunham
  • Glee, «Diva», Paris Barclay
  • Louie, «New Year’s Eve», Louis C.K.
  • Modern Family, «Arrested», Gail Mancuso

MINISERIES

Mejor miniserie

  • American Horror Story: Asylum
  • Behind the Candelabra
  • The Bible
  • Phil Spector
  • Political Animals
  • Top of the Lake

Mejor actriz

  • Jessica Lange, American Horror Story: Asylum
  • Laura Linney, The Big C: Hereafter
  • Helen Mirren, Phil Spector
  • Sigourney Weaver, Political Animals
  • Elisabeth Moss, Top of the Lake

Mejor actor

  • Michael Douglas, Behind the Candelabra
  • Matt Damon, Behind the Candelabra
  • Toby Jones, The Girl
  • Benedict Cumberbatch, Parade’s End
  • Al Pacino, Phil Spector

Mejor actriz secundaria

  • Ellen Burstyn, Political Animals
  • Charlotte Rampling, Restless
  • Sarah Paulson, American Horror Story
  • Alfre Woodward, Steel Magnolias
  • Imelda Staunton, The Girl

Mejor actor secundario

  • James Cromwell, American Horror Story
  • Zachary Quinto, American Horror Story
  • Scott Bakula, Behind the Candelabra
  • John Benjamin Hickey, The Big C: Hereafter
  • Peter Mullan, Top of the Lake

Los Emmy, en directo: Jeff Daniels revienta la ceremonia al ganar como mejor actor de drama

5.17. Hasta aquí los Emmy 2013. En un rato, la crónica. Aunque la del año que viene podría escribirla también: Breaking Bad arrasará. Gracias a todos.

5.15. Como resumen final, podemos decir que Homeland ha sido destronada, con Claire Danes salvando su honra como mejor actriz dramática. Todo en una gala donde Jeff Daniels ha roto todas las quinielas y se ha alzado como el mejor actor de drama. En comedia, Jim Parsons y Julia Louis-Dreyfus han repetido como los mejores en comedia, mientras que Behind the Candelabra ha acaparado los premios de miniseries, incluido Michael Douglas como mejor actor.

5.11. Parecía que la serie de Vince Gilligan tendría que esperar al próximo año para hacerse con el preciado galardón. Pero el jurado ha sabido reconocer la gran calidad de una serie que ha cambiado la televisión por completo.

5.10. ¡Breaking Bad, mejor drama!

5.09. Y el drama…

5.07. Sin sorpresas en la categoría. Veep podría haber sido la sorpresa, pero la serie de ABC sigue teniendo mucho peso en estos premios.

5.06. ¡Modern Family, mejor comedia!

5.05. Will Ferrell presentará el Emmy a mejor comedia.

5.03. La CBS debe estar cobrando bien los anuncios. Porque son muchos y hay cada dos por tres.

5.01. Noche aciaga para American Horror Story: Asylum. La película de Steven Soderbergh ha sido demasiado para Ryan la ficción de Ryan Murphy.

5.00. ¡Behind The Candelabra, mejor miniserie!

4.57. ¡Michael Douglas mejor actor de miniserie por Behind the Candelabra! Lo esperado.

4.56. Salen Bryan Cranston y Claire Danes para presentar dos premios.

4.49. ¡Ellen Burstyn mejor actriz secundaria de drama por Political Animals!

4.47. ¡Steven Soderbergh mejor director de miniserie por Behind the Candelabra!

4.39. Momento de recuerdo para los televisivos que han fallecido en el último año.

4.37. Premio merecidísimo para Cromwell. De los mejores de Asylum. 

4.36. ¡James Cromwell, mejor actor secundario de miniserie por American Horror Story!

4.35. Abi Morgan logra el premio al mejor guión de miniserie por The Hour.

4.33. Lo ha dicho Neil Patrick Harris: todas las porras han fallado. Por culpa de Jeff Daniels, añado.

4.27. Corto, pero maravilloso recuerdo de Edie Falco a su compañero Tony Soprano.

4.25. Tras varios premios de variedades, vamos con el homenaje a Gandolfini.

4.18. Espectacular coreografía que usa de fondo musical las sintonías de grandes series.

4.16. Nuevo número musical de Neil Patrick Harris.

4.10. Podéis ir sacando los pañuelos: Edie Falco homenajeará a James Gandolfini. Muchos momentos compartidos en Los Soprano.

4.08. Don Roy King, mejor dirección de variedades por Saturday Night Live. Lleva ganando desde 2010 de forma consecutiva.

4.05. The Colbert Report gana el Emmy al mejor programa de variedades.

4.00. David Fincher se alza con el premio a mejor director de drama por House of Cards.

3.56. Segundo Emmy consecutivo de la protagonista de la serie de espías de Showtime. La locura de la gala ha remitido. Al menos por ahora.

3.55. ¡Claire Danes mejor actriz de drama por Homeland!

3.52. Jeff Daniels se ha cargado también a Kevin Spacey y Jon Hamm. De coña.

3.50. Aviso de que estoy asumiendo que The Newsroom tiene serias opciones como mejor serie de drama. Llamadme loco. Si Kerry Washington gana como mejor actriz de drama, todo puede pasar.

3.45. Podréis contarle a vuestros nietos que visteis a Jeff Daniels ganarle un Emmy a Bryan Cranston y Damian Lewis.

3.43. La gala se ha salido de madre. Ni Jeff Daniels contaba consigo mismo para ganar como mejor actor de drama. Los comentarios ante este ganador inesperado en Twitter no tienen desperdicio.

3.40. ¡Jeff Daniels mejor actor de drama por The Newsroom! ¡SORPRESÓN!

3.37. ¡Bobby Cannavale mejor actor secundario de drama por Boardwalk Empire!

3.33. Se aproxima el momento de conocer al mejor actor de drama. Muy atentos.

3.30. The Voice, mejor reality. Circulando, que esto no nos interesa.

3.28. Gran número musical de NPH, al que se sumaron Nathan Fillion (Castle) y Sarah Silverman.

3.25. Al fin, ¡el número musical de Neil Patrick Harris! A cantar y bailar todo el mundo.

3.23. Anuncios, anuncios, y anuncios. Aún quedan todos los premios gordos de la noche.

3.17. Homenaje en los Emmy a Cory Monteith. Jane Lynch es la encargada del panegírico.

3.15. ¡Anna Gunn mejor actriz secundaria de drama por Breaking Bad!

3.13. ¡El mejor guión de drama es para Q&A, escrito por Henry Brommel para Homeland!

3.11. Mientras esperamos a que continúe la gala, aquí tenéis el monólogo inicial de Neil Patrick Harris.

3.09. El próximo premio será el de mejor actriz secundaria de drama.

3.08. Jessica Lange merecía el Emmy. Sobre todo por estos dos minutos.

3.06. El jurado sí premia en esta ocasión a una intérprete de una serie que se despide. Pero muchos estarán descontentos con que Jessica Lange no se haya llevado el premio.

3.05. ¡Laura Linney mejor actriz de miniserie por The Big C!

3.03. Corramos un tupido velo y sigamos con la mejor actriz de miniserie.

3.01. Una actuación de Elton John que vale por aprovechar para ir al baño. En serio.

2.58. Elton John elogia a Liberace, del que asegura que fue un precursor en la lucha de los gays por la igualdad. Ahora, interpreta una de sus canciones.

2.56. Al escenario Michael Douglas y Matt Damon, protagonistas y nominados por Behind the candelabra. Elton John va a hacer un homenaje a Liberace, el pianista en el que está basada su película.

2.53. El discurso de Merritt Wever, en una imagen.

2.51. Las posibilidades de reconocimiento a 30 Rock se reducen al Emmy a la mejor comedia. Pero no parece probable.

2.49. Se emociona Jim Parsons al recoger el Emmy, y su compañera en The Big Bang Theory Kaley Cuoco le imita desde su asiento.

2.47. ¡Jim Parsons mejor actor de comedia! ¡Otra vez!

2.46. Jimmy Kimmel y Sofía Vergara presentan los candidatos a mejor actor de comedia.

2.44. Mejor dirección de comedia para Gail Mancuso, por Modern Family.

2.43. Esto… el vestido de Melissa Leo… en fin.

2.39. La primera que repite victoria del año pasado es la protagonista de Veep. Un premio que le entregaron el barbudo Jon Hamm y Alec Baldwin.

2.37. ¡Julia Louis-Dreyfus mejor actriz de comedia!

2.34. Lo malo de la victoria de Merritt Wever es que nos hemos quedado sin ver a Sofía Vergara. Así va hoy la latinoamericana.

2.31. Robin Williams está en el escenario. Los años también pasan por él.

2.28. Zoey y Emily Deschanel presentan el Emmy a mejor actor secundario de comedia, que va para… ¡Tony Hale, por Veep!

2.26. ¡Mejor guión de comedia para 30 Rock! Tina Fey y Tracey Wigfield recogieron el premio.

2.23. La primera sorpresa de la noche puede ser un presagio de lo que será la gala. Atentos a Kerry Washington y Bobby Cannavale.

2.21. Wever no se creía que había ganado. Ni medio minuto ha estado en el escenario, donde ha dado las gracias.

2.19. ¡Gana Merritt Wever (Nurse Jackie)!

2.18. Tremendas Fey y Poehler en el opening. Graciosísimas. Presentarán el primer premio: mejor actriz secundaria de comedia.

2.15. Están trolleando a Harris en su opening. También Kevin Spacey, con sus miradas a cámara típicas de House of cards.

2.13. Saltan al escenario Jimmy Kimmel, Jane Lynch y Jimmy Fallon, los tres anteriores presentadores de la ceremonia. Parece que harán algún número con el conductor actual.

2.11. El actor de How i met your mother ya ha hecho la broma típica: «Orange is the New Black, or Orange is the new african american».

2.07. Neil Patrick Harris saltándose el número musical y haciendo un recorrido por escenas de las nominadas. Esperemos que pronto empiece su actuación.

2.04. Empieza la gala.

1.47. Kerry Washington (Scandal), la sorpresa con la que todos especulan y con la que muchos nos retiraríamos de escribir sobre series si gana como mejor actriz de drama.

1.43. La barba de Jon Hamm está generando uno de los debates de la noche.

1.40. Tras Hendricks, ha aparecido Sofía Vergara. La latinoamericana, que luce como nadie un vestido ajustado, luchará por el Emmy a mejor actriz secundaria de comedia.

1.34. Ha llegado Christina Hendricks a la alfombra roja. La actriz de Mad Men, nominada a mejor secundaria de drama, está espectacular.

 

1.30. A esta hora ya han pasado la mayoría de estrellas televisivas por la alfombra roja. Entre ellos, hemos podido ver a Damian Lewis, Kit Harrington, January Jones, Morena Baccarin o Jon Hamm.

Me dispongo a vencer al sueño lógico y posterior a una jornada intensiva de trabajo para contar los Emmy y comentarlos con vosotros. Podéis participar en los comentarios del blog, o a través de Twitter, donde soy @jtravieso. Una ceremonia donde los nominados son de un gran nivel, y en la que nada está decidido de antemano. Homeland30 Rock, Modern Family Behind the Candelabra, o actores como Anna Gunn, Kevin Spacey, Lena Dunham o Michael Douglas son algunos de los favoritos a alzarse como ganadores de la noche.

Camino a los Emmy: las apuestas

Quedan solo unas horas para que empiece la mayor parafernalia anual seriéfila de la historia. El fasto y el boato de los Emmy acapararán la atención desde las 02.00 horas de la madrugada del domingo al lunes en España. Los vestidos y trajes valorados en decenas de miles de dólares realizarán su paseo de rigor por la alfombra roja gracias a las estrellas televisivas que se los enfunden. Los nominados declararán antes de la ceremonia estar muy nerviosos, a la vez que «cualquiera de mis compañeros merece el premio». Y cuando Neil Patrick-Harris inicie la gala, esa inquietud del exterior ya nublará las mentes de todos los presentes en el recinto mientras se van sucediendo las victorias y derrotas.

A los que estamos alejados de todo ese mundillo de glamour, talento y ostentación, solo nos quedan las cábalas. Nuestras apuestas personales de corazón, lo que la cabeza nos dice qué pasará, o las sorpresas que barruntamos. Por ello, y dado que mis preferencias durante esta semana han quedado claras en mis (nada) exiguos análisis, es hora de que expertos de verdad en esto de las series hagan sus vaticinios. Compañeros de blogs especializados y medios, todos ellos con más conocimientos que yo, han tenido la amabilidad de responder a un pequeño cuestionario sobre los premios de esta noche. Todas sus respuestas son muy interesantes, así como sus  disquisiciones. Espero que os resulte útil y os dé ideas sobre qué tenéis que ver o no.

Las preguntas

1. ¿Está el nivel de los Emmy de este año mucho más alto que en anteriores ediciones?

2. ¿Quiénes son tus favoritos entre los actores de drama y comedia?

3. ¿Y entre las series de las mismas categorías? ¿Por qué?

4. La llegada de Netflix a los premios, ¿qué supone para la industria en sí?

5. ¿Cuáles son los mejores guiones nominados a tu juicio?

6. En cuanto a las miniseries, ¿qué serie y actores creen que merecen y/o se llevarán los galardones?

7. ¿Echas de menos a alguna ficción o actor? ¿O a varios?

Natalia Marcos (Quinta Temporada, El País)

1. Yo creo que ya hace unos años que el nivel está muy alto. Este año, si tuviera que votar, hay tres series entre las que no sabría por cuál decidirme. Cualquiera de ellas será justa vencedora. Puede pasar cualquier cosa.

2. Es diferente lo que creo que pasará y lo que me gustaría que pasara. Creo que en actor de drama ganará Kevin Spacey, pero me gustaría que lo hiciera Damian Lewis o Bryan Cranston. Actriz de drama creo y quiero que gane Claire Danes (espero que eso de que puede ganar Kerry Washington sea una broma sin gracia que nos están gastando…). De los secundarios, voto por Mandy Patinkin y Anna Gunn. En comedia, en protagonistas me gustaría que ganaran Louis C.K. y Julia Louis-Dreyfus, aunque creo que ganará Lena Dunham. Y en secundarios, mi voto va para Ty Burrell y Mayim Bialik.

3. En drama, podría pasar cualquier cosa entre Breaking Bad, Homeland y House of cards. Pero mi corazón (y, solo en parte, mi cabeza) está con Homeland.  En cuanto a comedia, me parecería fantástico que ganara 30 Rock como homenaje en el año de su despedida. Peggyted

4. Más que su llegada a los premios, yo diría que su entrada en el mundo de la producción de series ha supuesto un toque de atención al resto de cadenas para que se den cuenta de que la forma de consumir series ha cambiado, que el espectador quiere ver productos de calidad cuando quiere y como quiere. Estar presente en los premios solo es una consecuencia de hacer las cosas bien.

5. En drama, de nuevo estoy entre Breaking Bad y su ‘Say my name’ y Homeland con ‘Q&A’, aunque en el capítulo de Homeland lo que más destaca son las interpretaciones.  En comedia, me encantaría que premiaran el final de The Office, que se merecen un pequeño homenaje y fue un buen final.

6. Creo que American horror story: Asylum se llevará el premio, y que Jessica Lange también recogerá el Emmy. En actor de miniserie/película, Michael Douglas ganará fijo; para mí, es el premio más seguro de toda la noche. En los secundarios podría pasar cualquier cosa.

7. Me duele la ausencia de The Good Wife, que tuvo una segunda parte de temporada fantástica. Y no entiendo que no esté entre las nominadas Julianna Margulies. También echo de falta nominaciones para The Americans, e incluso para Mads Mikkelsen por su Hannibal. Y, aunque no las sigo, el olvido en los premios de Shameless y Justified ya es más que habitual. Entre las actrices, tampoco me habría parecido mal que estuviera Tatiana Maslany (Orphan Black).

Miriam Lagoa (En Terra de Series)

1. Se mantiene e incluso diría que sube un poco en las categorías de drama, gracias a las series de las cadenas de cable. En las de comedias llevan años estancados y sorprenden algunas elecciones en las tvmovies (Political Animals, The Bible) que parecen escogidas casi por descarte

2. Te diré los que me gustaría que ganaran: actores de drama, Bryan Cranston y Elisabeth Moss; secundarios de drama: Mandy Patinkin y Christine Baranski; actores de comedia: Louis C.K y Amy Poehler; secundarios de comedia: Tony Hale y Jane Krakowski.

Jessica3. Drama: Breaking Bad porque aunque compite por los ocho capítulos del año pasado son los suficientemente buenos para que la consideremos la mejor serie que se emite actualmente en Estados Unidos: por desarrollo de personajes, los diferentes niveles de lectura de sus guiones y el cuidado a los detalles En comedia: 30 Rock. Sería un bonito homenaje pero si gana el premio será por méritos propios. Se ha despedido con una temporada final a la altura de sus mejores años. Una comedia de televisión sobre la televisión, la echaré mucho de menos.

4. Supone un cambio de modelo y pide un cambio de mentalidad en la industria. Las series no se producen y no se consumen como antes. Permite también la fragmentación de la audiencia y por tanto la posibilidad de hacer ser más atrevidas que no tienen la obligación de gustar a todo el mundo.

5. Mejor guión de drama: Q&A (Homeland); en comedia, Hogcock (30 Rock)

6. A pesar de todo el revuelo, creo que lo mejor de Behind the candelabra son sus actores (como película me parece un poco floja) por lo que mi premio sería para American Horror Story: Asylum. En cuanto a los actores, Michael Douglas y Jessica Lange, mientras que los secundarios serían James Cromwell y Sarah Paulson.

7. Hice un post con mis 10 olvidos de los Emmy. Los mayores serían: Emmy Rossum (mejor actriz por Shameless), Walton Goggins (mejor secundario por Justified), Michael Cudlitz (mejor secundario por Southland) y Parks and Recreation como mejor comedia.

José Manuel Romero (La Script, Cadena SER)

1. Es una falsa apariencia. En algunas categorías sí, en otras no. Viendo el listado general de nominados no creo que haya mucho más nivel que el año pasado. Aunque nos hayamos acostumbrando, el trasvase de actores del cine a la televisión sigue llamando la atención. Y este año, el hecho de que estén nominados Michael Douglas, Matt Damon, Helen Mirren, Al Pacino, Kevin Spacey, Vera Farmiga… crea esa sensación de mayor nivel.

2. En el apartado femenino de drama, creo que nadie está al nivel de Claire Danes. Si no gana, será la sorpresa de la noche. En interpretaciones masculinas, quiero que gane Bryan Cranston, pero ganará Kevin Spacey. Entre los secundarios, espero que sea el año de Anna Gunn y Bobby Cannavale. En comedia, ojalá ganen Louis CK y Tina Fey, pero lo veo muy difícil. Siempre es una categoría en la que hay sorpresa, y no descarto que sea Laura Dern. Entre los secundarios, dominará Modern Family. Apuesto por la pareja Ty Burrell y Julie Bowen.

3. En drama, la lucha creo que está entre Homeland y House of cards. Quiero que gane la primera porque, pese a todas las críticas, la segunda temporada me pareció espectacular, y puede ser su último año. Tengo la impresión de que ha tocado techo. El problema es que House of cards es un producto hecho para que le guste mucho a los académicos. Entre las comedias, dudo que alguien le arrebate el trono a Modern Family. Si no gana, espero que Girls o Louie se lleven el galardón porque son ficciones con un sello propio, con mucha personalidad, y la comedia en EEUU necesita regenerarse. Gyp

4. Supone una pequeña revolución. Las networks no tienen series nominadas a mejor drama y una plataforma online sí. Es un paso adelante muy interesante pero tampoco nos engañemos. Netflix está porque están David Fincher y Kevin Spacey. Si el año que viene está nominada Orange is the new black, sí podremos decir que la producción propia de una plataforma online es competitiva para la Academia.

5. Lo primero, es una vergüenza para Mad Men que este año no tenga guión nominado. Mi favorito es ‘Q&A’, el quinto capítulo de Homeland, uno de los mejores del año con ese interrogatorio entre Carrie y Brody. Además, fue escrito por el fallecido Henry Bromell, y los premios-homenaje siempre son del gusto de la Academia. Si no ganara, apuesto por  ‘The Rains of Castamere’ por su impacto y momento cumbre de la temporada de Juego de Tronos. Puede ser el único premio que recoja la serie de HBO. En comedia, echo mucho de menos que no esté entre los nominados ‘One Man’s Trash’ de Girls. Y creo que en este apartado va a funcionar también el premio-homenaje por despedida. Uno de los dos capítulos finales de 30 Rock  (‘Hogcock!’ o ‘Last Lunch’) merece ganar para despedir por todo lo alto a la serie.

6. En miniseries, tengo y hay pocas dudas. Behind the candelabra va a arrasar. Se llevará el premio a Mejor Miniserie y Michael Douglas el de mejor actor principal. En las interpretaciones femeninas, apuesto a que Jessica Lange y su hermana Jude ganarán por American Horror Story: Asylum, aunque no descarto que Elisabeht Moss (Top of the lake) conquiste el Emmy que no ha ganado nunca con Mad Men.

7. A muchos. Es incomprensible que The Good Wife y Julianna Margulies no estén nominados. Sorprende que Downton Abbey siga acaparando tantas nominaciones en categorías principales. También echo de menos a Steve Buscemi como mejor actor por Boardwalk Empire, y me hubiera gustado que The Americans y Hannibal hubieran recibido alguna nominación.

Mar Guerrero (Series a la parrilla)

1. Si algo caracteriza a los Emmy es su inmovilismo, con nominaciones hechas con el piloto automático puesto, por lo que no veo una gran variación de nivel, en general. En el apartado de actores principales de drama, no obstante, sí hay más movimiento este año, con las entradas de Jeff Daniels, por The Newsroom, y Farmiga, por Bates Motel… Por supuesto, no me olvido de la nominación totalmente «chota» de Kerry Washington por Scandal. Eso sí que nadie se lo esperaba. Será muy divertido si gana.

2. Creo que no se van a salir del guión en actores principales de comedia y  ganarán Jim Parsons y Julie Louis-Dreyfus. En drama apuesto a caballo ganador también: Bryan Cranston. ¿Actriz dramática? Si soy seria me quedo con Claire Danes, pero es que Kerry Washington… Eso sería épico, amigo. En secundarios de comedia pienso que será territorio Modern Family, cualquiera de los nominados de la serie puede llevárselo. ¿Secundarios de drama? Peter Dinklage y Maggie Smith. hay que dejarle algo a los fenómenos de Game of Thrones y Downton Abbey.

Aaron3. Escojo Homeland en drama; la segunda temporada ha sido un sinvivir, y pienso que Breaking Bad tendrá su momento de gloria el año que viene.  En comedia no hay mucho que pensar, la categoría está a merced de Modern Family desde hace tiempo, salvo milagro de última hora.

4. Es el reconocimiento de un nuevo jugador en el panorama que está marcando camino en la forma de distribuir y ver series. Este año ha sido House of Cards, pero me pregunto cómo será en la próxima edición vista la gran acogida de Orange is the New Black.

5. Breaking Bad.

6. Salvo que suceda un «biblazo», Behind the Candelabra, con Michael Douglas como actor principal. Laura Linney tendría que llevárselo para terminar de cerrar The Big C, al igual que su compañero John Benjamin Hickey en la zona de secundarios. En las secundarias hay auténticos pesos pesados, difícil elegir, pero me decanto por Alfre Woodward.

7. Eso siempre. Por un lado, basta ya con el ninguneo a The Good Wife en mejor serie de drama. Entiendo que las cadenas de cable tengan su mafia montada en los Emmy, pero hay que reconocer al mejor producto de calidad producido por una network en estos momentos. Por otro lado, también está la batalla perdida de John Noble en mejor actor de drama, supongo que no es lo mismo trabajar en The Newsroom que en Fringe a ojos de los académicos…

Marina Such (Editora en Vaya Tele)

1. En drama puede decirse que sí. Homeland, Mad Men, Breaking Bad, House of Cards y Juego de tronos tienen todas opciones de llevarse algún que otro premio, todas son series que cuentan con un nutrido número de seguidores y han tenido buenas críticas, en general, así que será interesante ver si los premios se reparten o si Breaking Bad arrasa de un modo parecido a como hizo Homeland el año pasado.

2. Si yo pudiera elegir a los ganadores, en comedia les daría un último reconocimiento a Jane Krakowski, Tina Fey y Alec Baldwin por esa séptima temporada final, y genial, de 30 Rock. Y en drama, parece que Kevin Spacey es el gran favorito, pero estaría bien que alguno de los secundarios de Juego de tronos (Peter Dinklage o Emilia Clarke) se llevara algún premio para dar algo de diversidad a la ceremonia. O Vera Farmiga por Bates Motel, porque es de lo poco realmente salvable de esa serie.

3. En comedia están nominadas las de siempre, así que prefiero que gane 30 Rock. Y en drama, el Emmy a Juego de tronos sería una nota diferente en la tendencia habitual de estos premios. Jorah

4. Los nombres de David Fincher y Kevin Spacey han pesado mucho para que House of Cards haya entrado en los Emmy, sin ellos, Netflix lo habría tenido muy, muy difícil. Pero está claro que, una vez abierta esa puerta, el campo de posibles nominados se abre muchísimo. Otra cosa es que logren llamar la atención de los académicos, que para eso hace falta tener grandes nombres asociados al producto y gastarse mucho dinero en promoción. Pero el éxito de House of Cards sí puede lograr que más cineastas importantes de Hollywood prueben suerte en plataformas online tipo Netflix.

5. En drama, Breaking Bad y Homeland tienen unos capítulos realmente muy buenos y muy intensos nominados, yo diría que son los favoritos. En comedia, sigo con mi obsesión con 30 Rock, porque su final fue redondo.

6. Parece que Behind the candelabra va a arrasar en esas categorías, sobre todo aprovechando los elogios que se ha llevado Michael Douglas, pero también estaría bien que Top of the lake rascara algún premio, porque los merece.

7. Siempre se echa de menos a gente, los Emmy siempre se olvidan a gente muy válida que no entra en su radar. Este año, por ejemplo, podrían haber entrado perfectamente Justified, The Americans, una eterna olvidada como Parks and Recreation o Tatiana Maslany, la protagonista de Orphan Black, que ha sido una de las revelaciones del año.

Jaime Domínguez y Sonia Martínez (TV Spoiler Alert)

1. J: Es el mismo. Se han añadido nuevos competidores, pero la estructura es básicamente la misma.

S: Creo que más o menos es igual, las grandes vienen a ser básicamente las mismas, sólo hay algunas más. El año que viene es probable que la cosa cambie porque se van algunas de las más fuertes.

2. En drama me quedo con Bryan Cranston (no hace falta decir el porqué), aunque creo que Kevin Spacey tiene las de ganar; y con Claire Danes, que sigue sin tener verdadera competidora aunque suena muy fuerte el nombre de Kerry Washington. En comedia, tiene las de ganar Julia Louis-Dreyfus y Louis C.K., pero creo que la Academia podría acabar premiando a Baldwin y Fey como obsequio de despedida.

Maslany2S: En cuanto a drama creo que Bryan Cranston y Claire Danes no tienen competidor ninguno. En la categoría de actor hay mucha más competencia entre el nivel de los nominados, pero en cuanto a actrices no cabe duda. Hablando de comedias, creo que debería ser el año de 30 Rock, así que voto por Tina Fey y Alec Baldwin.

3. J: Es complicado. Diría que Modern Family volvería a ganar el Emmy, pero ahí están 30 Rock diciendo adiós y Veep, que está acaparando una desmesurada atención este año. Si hablamos de dramas, es aún peor: Downton Abbey está fuera, Mad Men dudo que huela el premio y Game of Thrones sigue sin encajar en la categoría… pero podrían dar una sorpresa. La cosa está entre Breaking Bad, Homeland y House of Cards, y creo que será la de Netflix la que se lo lleve.

S: En drama la decisión es muy difícil. Yo se lo daría a Game Of Thrones porque la tercera temporada ha sido maravillosa y porque lo que cuenta de Breaking Bad no es la mitad de temporada actual sino la primera, pero House Of Cards ha pegado fuerte. En cuanto a comedias, aunque Veep tenga miradas en ella y Girls esté de moda, yo se lo plantaba a 30 Rock.

4. J: Significa reconocimiento, pero poco más. Hablando específicamente de House of Cards, tampoco me parece una hazaña teniendo en cuenta que ha sido diseñada cuidadosamente para colarse en premios de este estilo. La cuestión de cómo ha afectado a la industria, que de momento está por decidirse, no pasa por los premios… aunque si HOC gana todo lo ganable habrá que replantearse muchas cosas.

S: Me parece un avance importante para la industria de la televisión y todo un acierto, aunque las verdaderas consecuencias aún están por ver. De momento los experimentos de lanzamientos de series les han ido bien, y yo que me alegro.

5. J: En drama está muy complicado y creo que se lo podría llevar cualquiera, incluso Downton Abbey, que está de capa caída. Obviamente, al tener dos guiones nominados, Breaking Bad tiene más posibilidades, pero sería interesante que ganara el episodio de la ‘Boda Roja’ de Game of Thrones y así comprobar si su repercusión tuvo tanto poder. En comedia quiero creer que el premio es para la finale de The Office, y aunque estén ahí los últimos episodios de 30 Rock la comparación es indiscutible.Behind

S: La ‘Boda Roja’ debería llevárselo en drama y los demás resignarse, porque tiene unos puntos en los diálogos que son para aplaudir y no parar, incluso cómicos; aunque el capítulo de Homeland es magistral. En cuanto a comedia dudo entre 30 Rock y The Office, pero si de mí dependiera, se lo llevaban los oficinistas.

6. J: No he visto Behind the Candelabra, pero puedes dar por hecho que tanto la miniserie como Douglas se llevarán su premio. Luego está Asylum, que le dará el premio a Jessica Lange y a algún secundario. Los premios de miniserie siempre son aleatorios.

S: Hay mucho actor de cine en estas categorías así que la cosa está difícil. He leído (no la he visto) que Behind The Candelabra es una joya, así que es posible que se lo lleve, AHS no me ha encajado nunca en estos premios aunque Lange sea estupenda haga lo que haga. Si por mí fuera, yo le daba el galardón a The Bible sólo por tener las narices de hacer una miniserie religiosa, y en cuanto a actores, Benedict Cumberbatch y Jessica Lange (aunque me huele a Douglas y Mirren, o incluso Sigourney Weaver).

7. J: Tatiana Maslany de Orphan Black para quitar de la lista a Connie Britton, Julianna Margulies así como The Good Wife, Parks and Recreation, alguna mención a The Americans y nominación de consolación a Fringe (por ejemplo, a John Noble).

S: Orphan Black y Tatiana Maslany deberían tener su hueco en estos premios, así como algún actor de The Office. El papelón que tiene John Noble en Fringe se merece un reconocimiento porque lo clava y es una actorazo, incluso Anna Torv, ya que una nominación siempre ilusiona. Y por qué no, si han tenido las narices de meter algo de Nashville (vaya narices), ¿por qué no Smash? Si es igual de trash… Además, siempre mantendré mi opinión de que Robert Carlyle clava sus papeles de Once Upon a Time, me digan lo que me digan, ese hombre es muy bueno.

Camino a los Emmy: las series

La auténtica razón de ser de los Emmy protagoniza el post de hoy. Y es que esta edición es de las más disputadas. En años anteriores, al menos, se podía barruntar quién iba a ganar. Algo que no sucede en esta edición de los premios. En drama, la hegemonía de Mad Men, destronada el año pasado por Homeland, sentó las bases para un nuevo ciclo liderado por la serie de espías de Showtime. Pero nadie se atreve a asegurar que esto será así, dado el alto nivel de las aspirantes. En cuanto a las comedias, Modern Family sigue a la cabeza de las apuestas. Y ni aún así está claro su éxito el próximo domingo.

Haciendo honor a mi desabrido carácter, no veo por ahora las comedias nominadas (salvo The Big Bang Theory). Así que me centraré en los dramas. Seis series que están en boga. Cinco americanas y una británica. Vistas por millones de personas. Y cuyo entretenimiento es indiscutible; aunque echemos de menos en la lista a Boardwalk Empire.

HomelandHomeland. Nadie creía que el año pasado pudiese acabar con el dominio de los publicistas de Madison Avenue, a la que la etiqueta del “culto” no le sienta demasiado bien: es mucho más que eso. Pero lo hizo. Y aplastó al resto tras la victoria de sus dos actores protagonistas, dando inicio a un posible ciclo en el que la intriga y las conspiraciones sustituían a la sofisticación y las historias cotidianas en las preferencias del jurado. Su segunda entrega ha sido muy valiente. Los guionistas se han atrevido con tramas que en otras series serían de finales de cuarta temporada, no de cuarto capítulo de segunda. También ha sido interesante, con momentos en los que Brody, Carrie o Saul caían en espirales de destrucción inesperadas. Muy correcta en su argumento, además de sorprendente y explosiva, sobre todo por su último capítulo (tenía que hacer la broma, sí). ¿Pero tan heavy como sus doce primeros episodios de 2011? No lo creo así. Fue la mejor noticia en este mundillo de hace dos años, pero cuando te acostumbras a algo empiezas a minusvalorarlo.

Breaking Bad. En su penúltima incursión en los premios, parece que la criatura de Vince Gilligan deberá esperar otro año para Breakingalcanzar el ansiado reconocimiento de los Emmy. Sus dos actores protagonistas, Bryan Cranston y Aaron Paul, ya han resultado premiados en dos ocasiones cada uno. Pero el galardón por excelencia se les lleva escapando desde su primera nominación por culpa de Mad Men; y el año pasado, encima, se toparon con Homeland. Ahora, concurriendo con la primera parte de su temporada de despedida, muchos no entenderán que se quede a las puertas. Sus seguidores no pararon de flipar con cada episodio que emitió AMC, algo que siguen haciendo con la segunda parte de este verano, donde para muchos se ha emitido el mejor capítulo de la historia de la ficción, Ozzymandias. Yo soy de los que no he llegado aún hasta ese punto de la historia, a pesar de que me estoy dando prisa para llegar al día para su capítulo final del 29 de septiembre. Y con lo poco que he visto tengo claro que su mayor legado no estará en una dictadura de premios y reconocimientos, sino en que ha cambiado por completo nuestras expectativas en cuanto a series de televisión. Porque pone el listón tan alto que los guionistas del futuro tendrán que esforzarse mucho para satisfacer al público.

HouseHouse of Cards. Destrozó todas las quinielas de nominaciones. Estaba claro que entraría en éstas tras su espectacular primera temporada, con un Kevin Spacey ídem. El quid está en si ha logrado atrapar tanto al jurado como hizo Homeland hace dos años. Y yo creo que sí lo ha conseguido. La inteligencia de Frank Underwood, la rebeldía de su mujer Claire y las filtraciones periodísticas son redondas y la dotan de ritmo; pero si a todo esto le añadimos las conspiraciones y la perfidia del taimado Underwood es fácil definirla como obra maestra. Y si a esto le sumas nombres como el de David Fincher, a la vez que un reparto solvente, estás muy cerca de la piedra rosetta seriéfila. Unas cotas de calidad que tienen toda la pinta de seguir aumentando. Ganará.

Game of Thrones. Está nominada porque es la más vista en todo el mundo. Porque engancha y es una adaptación brillante. Sin Juegoolvidar que es de las pocas series corales en las que todos los personajes resultan imprescindibles. O eso nos hace creer George RR Martin, que se va cargando a aquel que menos te esperas en el momento menos propicio. Pero no tiene ninguna opción, aun con bestialidades como el capítulo 9 de la tercera temporada, The Rains of Castamere; la masacre de la boda roja pasará a la historia de los mejores minutos televisivos. Sinceramente, a GOT NO le hacen falta reconocimientos en forma de estatuillas: todos sabemos que es tremenda . Su presencia aquí es una muestra de respeto a lo bien hecha que está, e incluso una concesión a los espectadores. Parece complicado que salga en algún momento de las nominadas durante los próximos años.

MadMad Men. Se presenta con la que ha sido su mejor temporada hasta la fecha, quizá la más comercial de todas. Es decir, la más digerible para muchos que tras ver un par de capítulos la acusan de aburrida. Prefiero apostar por definirla como elegante e incomprendida; e incluso inteligente, al ser una de esas series que te hacen sentirte inteligente por poder seguirla sin problema. Su handicap es que ya ha perdido la estela de Homeland y House of Cards en la carrera para el premio. Y es que el pescado parece estar tan vendido que ya ni se cuenta con ella de antemano, como ocurría años atrás cuando Matthew Weiner acababa subiendo al escenario a pesar de los rumores del fin de su etapa.

Downton Abbey. Repite su nominación del año pasado, algo reclamado por toda la crítica internacional y sus millones de espectadores en todo el mundo. Lord Grantham, su familia y sus sirvientes conforman la ficción Downtonperfecta para seguir en familia. Una consecuencia de abarcar todos los géneros posibles, desde el drama emotivo al humor clasista y cautivador. El peso que ha ido ganando Maggie Smith, que al principio era la secundaria que ponía las chanzas, no le ha causado más que buenas noticias. Algo muy necesario en una tercera temporada que ha cargado con los hechos más trágicos que les ha tocado a vivir a los Crawley. Su victoria debe pagarse por 20 a 1, como poco, ya que sus posibilidades son escasas. Y eso que Julian Fellowes no para de dar en la tecla correcta.