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Siempre busco la manera de acabar una serie cuanto antes... para ponerme a ver otra.

Archivo de septiembre, 2014

La campaña de Antena 3 contra las descargas: ¿acierto o equivocación?

El grupo audiovisual de Antena 3 está contra las descargas de Internet. Este axioma no sería noticioso de no ser por la nueva campaña publicitaria que ha lanzado Atresmedia en todos sus canales (entre ellos laSexta), con el mensaje de «nada es gratis, siempre hay alguien lo paga» y con el eslogan «Crea Cultura«. El spot no tiene desperdicio.

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Cada uno tendrá su opinión al respecto. La mía es más que evidente: el anuncio me parece tramposo y viejuno. Lo que se extrae del mismo, aunque no tengo la certeza de que sea la intención última, es que los que descargamos contenidos para nuestro uso personal, sin ningún objetivo de lucrarnos, estamos mandando al paro a miles de personas.Sherlock4

La defensa de la propiedad intelectual es un derecho que tiene cualquiera que haya creado algo. El problema es cuando se utilizan los mismos argumentos de hace casi 10 años, y que recuerdan a los de la etapa más oscura de la SGAE. Creo sinceramente que Antena 3 se equivoca, y que erra el tiro de una manera alarmante. El usuario de internet puede actuar de mejor o peor manera, pero culparle si no ha subido esos contenidos que pertenecen a otra persona es para reprochárselo a la cadena de Planeta y a todo su grupo.

Está claro a quiénes se les puede achacar esas acciones: primero al que se apropia de esos contenidos y los sube sin permiso, y segundo al que permite que en sus redes se alojen esas series, películas o canciones (todos sabemos de quiénes estoy hablando). Por ahí apostaría en una campaña para convencer sobre que hay productos a nuestro alcance en internet que cuestan mucho dinero y por lo que nosotros no pagamos.

Tiempo3Aunque eso sí: alternativas para ver todo lo que queremos no existen por ahora. Esto es tan cierto como que Antena 3 tiene una plataforma donde sube todos sus contenidos propios de forma gratuita: Atresplayer. Por eso no entiendo por qué se mete en este berenjenal.

Como no soy un experto en el tema y considero que es un tema muy amplio donde caben todos los matices posibles, he pedido ayuda a colegas y amigos que tienen una opinión mucho más formada y profesional que la mía. ¿Tiene razón Atresmedia? ¿O se ha equivocado?

Ellos son Marilín Gonzalo, jefa de producto de eldiario.es; Antonio Delgado, periodista experto en tecnología; Borja Adsuara, profesor y exdirector de red.es; y Daniel González Aparicio, periodista de 20minutos. En cuanto a la versión de Atresmedia, el grupo me ha remitido a su campaña para resolver mis dudas. Su postura es bastante clara. Os la vuelvo a enlazar.Walking3

Lo primero que les he preguntado es si la primera fase del anuncio de la campaña de Antena 3 es cierta. Es decir, si «cada vez que alguien descarga contenidos sin pagar o sin permiso de sus creadores colabora en la desaparición de muchos puestos de trabajo». Antonio Delgado es categórico al respecto:

No, sobra el o. De hecho, en la propia web de Atresmedia tienes accesos a contenidos sin pagar.

Para Marilín Gonzalo, la cadena miente al apostar por dicha frase:

Es falso y es echar culpas sobre quien no las tiene. La forma de consumir cultura ha cambiado desde que existe internet y la economía digital no hace más que crecer, en países que la promueven, claro. Las empresas buscan nuevas formas de ofrecer a sus usuarios lo que piden, crecen y las que no, culpan a la piratería. Tú no eres responsable de que su modelo de negocio sea obsoleto. Culpar a tus posibles clientes de que no compran tu producto, además de equivocado, es patético.

Downton1Borja Adsuara pone el acento en la importancia del permiso del autor del contenido en este caso:

No es correcto, porque se pueden descargar contenidos sin pagar, pero CON permiso de los creadores o de los titulares de los derechos. Pero, en el caso de que se haga SIN autorización, estoy de acuerdo en que «se colabora» a la desaparición de muchos puestos de trabajo, aunque no es la principal causa.

Por último, Daniel González es de la idea de que las descargas pueden influir, pero no de una forma determinante:

El éxito de Windows se debe en buena parte al software pirateado, Sony se hizo líder de la industria del videojuegos gracias a que PlayStation se podía piratear muy fácilmente… Hay ocasiones en las que las descargas ayudan incluso a la promoción (incluso el CEO de Time Warner llegó a tomarse como un halago que Juego de Tronos fuera la serie más pirateada). Con esto no quiero decir que las descargas sean positivas para la cultura, pero tampoco son el demonio.

Sobre si el eslogan («nada es gratis: siempre hay alguien que lo paga») se corresponde con la realidad, Gonzalo lo niega:

Sí, pero algunas cosas son difíciles de medir y por eso no se tienen en cuenta. ¿Cuánto costaría para un artista hacerse conocer sin internet? ¿Cómo pondrías un precio a una comunidad que comparte tu obra y hace que tu nombre dé la vuelta al mundo? Nada es gratis, pero hay algunos costes que se han reducido drásticamente, y no puedes seguir cobrando lo mismo por lo mismo.

Adsuara apoya la misma tesis:

No es verdad. Puede estar en dominio público, o lo puede regalar el autor (licencias creative commons), o pagar un tercero, con anuncios o patrocinios (como la TV en abierto, Antena3, en la que se emite este spot) y ser gratis para los usuarios.

Dani González apunta un dato interesante sobre la cuestión, en relación con lo que habría hecho el usuario de no descargarlo:

Nadie se ha tomado la molestia de hacer un estudio sobre el impacto de la piratería en la cultura. El 90% de los informes al respecto parten de la premisa errónea de que una persona que se ha descargado una película de Internet, de no haberlo hecho, habría ido al cine a verla o se la habría comprado. Lo más probable es que no hubiese pagado por ello en ninguna otra circunstancia.

Big3Delgado, por su parte, rechaza por completo lo de «nada es gratis»:

Curiosamente yo veo Antena 3 sin pagar. ¿Cuál es el problema de ese modelo? ¿Están en contra de la televisión en abierto?

El término «pirata» no aparece en la campaña de Atresmedia, que se ha cuidado mucho de utilizar un lenguaje respetuoso y nada polémico. Pero su spot trae a la mente inevitablemente a la cabeza la «piratería» y el ‘gentilicio’ que corresponde a la misma. Pero, ¿se puede llamar «pirata» alguien que descarga contenidos de internet? ¿Es ilegal hacerlo? Responde el abogado Borja Adsuara:

La «piratería» es un delito, incluida en el Código Penal y sólo es «pirata» la copia con ánimo de lucro. Lo cual no quiere decir que siempre sea legal descargar. Pero una cosa es el (usuario) que descarga contenidos de internet y otra, el pirata que se lucra de dichas descargas.Como6

Dani González también recuerda la legislación sobre el tema:

Los términos «pirata» y «piratería» sirven para definir a los que descargan contenidos por vías no oficiales. En España, descargar contenidos no es ilegal. Desde que comenzó a gestarse la ley Sinde y hasta la actual regulación de la protección de la propiedad intelectual, los torpes Gobiernos del PSOE y el PP han sido inteligentes en una cosa: no tiene sentido criminalizar a los usuarios. Son las páginas de descargas y streaming (como Series Yonkis) las que tienen que preocuparse por una ley que en realidad no parece que haya empezado a funcionar.

Antonio Delgado incide en quién es el culpable según la ley:

El acto de comunicación pública, la infracción, la comete el que sube el contenido, no el que se lo baja.

Una postura en la que incide Marilín Gonzalo:Conteith2

En España no es ilegal descargar contenidos culturales para disfrute personal y sin fines de lucro. Lo que es ilegal es obtener beneficios de contenidos de los que no tienes derechos de propiedad intelectual.

Las opiniones sobre este apuesta de Atresmedia han vuelto a recordarnos a la que se suele señalar como la culpable de todo: la industria audiovisual. ¿Realmente sufre tanto con las descargas? ¿O sigue siendo culpa suya? Dani González cree lo siguiente:

Quizá sí, las descargas pueden llegar a ser un problema si se convierten en la única forma de acceso a la cultura por parte de los usuarios. Por fortuna, creo que aún no hemos llegado a ese punto (en la música quizá sí es más claro el efecto negativo).

Antonio Delgado alerta de que lo peor que podría pasarle a las compañías es que no tuviesen demanda ni por la vía de la descarga:Effy

Ojalá el gran problema de la industria cultural española fueran las descargas, porque eso significaría que hay demanda. Lo peor que le pueden pasar a algunos creadores y empresas culturales es que sus productos los consumidores y usuarios no lo quieran ni gratis. Ya está pasando y pueden mirar de refilón el caso U2.

Marilín Gonzalo cree que aún hay mucho que avanzar en la oferta al público:

Deberían estar felices de que les descarguen. Lamentablemente lo más descargado en las listas de torrents nunca son productos españoles. El problema hay que resolverlo dando un mejor producto y con más facilidades para los usuarios. Si la audiencia se multiplica y los costes de producción bajan, quizás ya se pueda llegar a ofrecer un mejor precio, por ejemplo.

Borja Adsuara incide en esto último, al considerarlo el gran problema:

Indudablemente las descargas «descontroladas» son un gran problema para la industria cultural, pero no es el más grave. En todo caso, es un síntoma del verdadero problema: la ausencia de modelos (generalizados) de negocio, de gestión y de cobro de contenidos y derechos.

Para acabar el debate, he preguntado a los invitados sobre lo que considero es la mayor equivocación de Antena 3: no centrarse en los que suben el contenido, cargando contra los que descargan. ¿Por qué siempre es así? Delgado ve una intención subrepticia de la cadena y su grupo en el lanzamiento de la campaña:1

Con la legislación actual ya se castiga las infracciones de copyright. Por tanto, lo que se persigue con este tipo de campañas es adoctrinar a menores y cambiar la percepción social para convertir a las descargas en un problema, cuando lo que hay que fomentar es que alguien te lea o te escuche. Fomentar las descargas.

Gonzalo es de la misma opinión, y es mucho más directa:

Son los mismos que llaman piratas a los que descargan música. Debe ser complicado entender internet cuando vienes de otro siglo.

Adsuara insiste en quién es el ‘malo’:

El problema no es tanto el que se baja contenidos, sino el que los sube a internet sin tener los derechos para realizar ese acto de comunicación pública o puesta a disposición. La «subida» a internet de un contenido sin autorización del titular es más grave que la «bajada».Velvet

Por último, Dani González recuerda que, por mucho que se hable, la ley solo castiga a uno:

Es lo más polémico y lo que da más pie a señalar culpables, pero en realidad, a nivel legal, a los que se persigue es a los que suben contenidos de forma masiva y no a los que los bajan (al menos hasta ahora).

Y vosotros, ¿qué opináis?

 

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Jon Hamm y Oona Chaplin protagonizarán el capítulo navideño de Black Mirror

Solo es un capítulo especial tras más de año y medio de espera, pero menos es nada. Black Mirror, la serie más estrambótica, enigmática e interesante que ha surgido en los últimos años regresará esta Navidad con un episodio de 90 minutos. Y lo hará con un elenco protagonista que logra aumentar aún más las expectativas: Jon Hamm (Mad Men), Oona Chaplin (Dates, Juego de Tronos) y Rafe Spall (Prometheus, Life of Pi).black-mirror

Estos nombres se han conocido este mismo martes, después de que la cadena británica Channel 4 los haya revelado en una nota de prensa, en la que también ha detallado de qué tratará el episodio y la fecha de comienzo del rodaje (esta misma semana).

El especial de Black Mirror, que ha salido una vez más de la cabeza de Charlie Brookermostrará tres historias entrelazadas a través de una sátira en un mundo de tecno-paranoia. Es decir, volverá a hacer una crítica al mundo moderno y a nuestra predilección por dejarnos absorber por la tecnología hasta niveles enfermizos.

Hamm será el protagonista principal de las tres historias, que según avance la trama se irán uniendo de forma inquietante, tal y como asegura la cadena en uno de los comunicados mejor recibidos en bastante tiempo. Y es que una serie tan esperada como Black Mirror se haga con dos de los actores más aclamados de la actualidad como Jon Hamm y Oona Chaplin es digno de aplaudir. Y es que nuestro hype no puede estar más elevado.

El festival de la venganza en la última temporada de Sons of Anarchy

Que en una misma etapa surja la que es para muchos «la mejor serie de la historia» significa que otra, de similar o igual nivel, tenga que conformarse con pasar mucho más desapercibida y no ocasionar el impacto mundial que esa que le hace sombra.1

Las razones para referirse a Breaking Bad como la mejor serie de la historia son múltiples. Las opiniones son como las gominolas, pero hay que ser muy bobo para negar que es normal que se la considere así. De la misma manera, sería absurdo no reconocer que Sons of Anarchy hubiera podido alcanzar el nivel mediático de la serie de Vince Gilligan si esta no hubiese sido tan buena. Que la historia de Walter White es tremenda es obvio; pero  la de Jax Teller y sus compañeros de club creo que está a ese nivel.

No hay que ser tan simplista y llevarlo todo al «estás diciendo que Breaking Bad no es tan buena» o al «dices que Sons of Anarchy es mejor». Mejor pensar que tenemos la suerte de poder semejantes maravillas. Y que la calidad de una ha ensombrecido a la otra. Nada más.

4Más allá de las comparaciones, Sons of Anarchy se marchará este año en el que se espera sea uno de los finales más épicos de la historia. Causar sorpresa y destrozar moralmente a los espectadores es la especialidad de la serie que lidera Kurt Sutter, que en siete temporada nunca ha emitido un capítulo aburrido y todas sus season finale se han caracterizado por cerrar tramas para abrir otras igual o más apasionantes.

La ‘tragedia shakesperiana’ del final de la sexta temporada va a provocar aún más desgracias entre los habitantes de Charming y todos aquellos que estén relacionados con Redwood Original. Y es que la sed de venganza de Jax Teller, que a lo largo de toda la historia ha perdido lo que más quería, no va a conocer límites tras lo ocurrido en el último episodio de 2013. Cualquiera puede caer ante su ira. Incluso él mismo.2

Lo que nos provoca Sons of Anarchy, como siempre, son muchas preguntas. ¿Qué pasará cuando Jax descubra lo que pasó realmente? ¿Qué hará con los que estuvieron implicados? ¿Les hará pagar con sus vidas? ¿O acabará con la suya propia? El festival de la venganza y la sangre que vamos a ver no puede ser más prometedor. No hay ni un personaje que no tengas razones suficientes matar a otro, y viceversa. Algo que puede ocasionar que el protagonista sea el que peor acabe de todos, directamente o no. ¿Y los nuevos protagonistas? ¿Aportará algo Ron Tully, el personaje de Marilyn Manson? ¿Cómo vivirán los hijos de Jax todo lo que está pasando?

Mientras vamos resolviendo esas dudas, las innumerables tramas paralelas también necesitan respuesta. La serie está en un momento en el que todo pasa por Jax, y todo lo que ocurrirá estará ocasionado por su influencia y le afectará de una manera u otra. Tal y como le pasó a Walter White.

3Que el personaje principal acabe escarmentando por todo su pasado es algo que nos enseñó muy bien, además de Breaking Bad, The Shield, donde estuvo involucrado Kurt Sutter. También puede ocurrir que los guionistas y el propio Sutter no acierten a darle el final que merece y no sean capaces de cerrar todo de forma redonda. Porque a Sons of Anarchy solo se le puede exigir un Y a despedida perfecta. Las expectativas están tan altas que ni por asomo puedo imaginar que todo se vaya a ir al traste en el último momento.

Seamos optimistas: lo que ha ido bien suele acabar muy bien. Breaking Bad tuvo un final perfecto. Y Sons of Anarchy le va a la zaga en calidad. Sus actores tampoco son tontos: qué listo fue Charlie Hunnam al rechazar el papel protagonista de 50 sombras de Grey.

Broadchurch: lo mejor que puedes ver en la televisión española actual

Las dificultades para ver en España en abierto las series que se emiten en el resto del mundo continúan a pesar del ingente número de productos interesantes que se estrenan desde hace varios años. El modelo anquilosado de la dramedia familiar, que lamentablemente sigue contando con el privilegio de copar las parrillas en prime time de las 22.00h, ha impedido que mucha gente descubra ficciones magníficas y que han encontrado en Internet su mejor escaparate internacional. Podría poner decenas de ejemplos, pero el de Breaking Bad es lo suficientemente representativo.6

El género que aún se suele colar en las teles españolas en el horario de máxima audiencia es el del suspense. Las series que tengan como punto de partida un asesinato rodeado de circunstancias extrañas y cuyo fin principal sea descubrir quién es el autor son las que tienen todos los rasgos necesarios para triunfar. Broadchurch cumplía los requisitos anteriores, y su calidad la hacía aún más atractiva para cualquier cadena.

3Antena 3 estrenó el miércoles de la semana pasada la serie británica que emitió la ITV en abril de 2013, y que entonces ya tuvo unos resultados espectaculares en todos los ámbitos. Y es que lo tenía todo para triunfar: un gran reparto encabezado por David Tennant, donde también destacan Olivia Colman y David Bradley (ambos ganadores de premios Bafta por sus papeles); escenarios bellos, que cumplen la función de mostrarnos ese lugar en el que nunca ocurre nada, tan agradable no te puedes creer que allí se vaya a cometer un crimen; y un argumento conciso, sobre el que giran todas las historias paralelas de unos personajes enigmáticos y que ocultan más de lo que se puede prever.

Los episodios de Broadchurch logran emocionar y descubrir lo mejor y lo peor de las personas cuando se enfrentan a una situación así, tan inesperada como traumática. De cómo de repente se pierde la perspectiva (quizás de forma irremediable) y se empieza a ver a todo el que te rodea como sospechoso de haber asesinado a Danny Latimer, el niño hallado muerto que da origen a la investigación de Alec Hardy y Ellie Miller.1

Pero lo más interesante de Broadchurch es su crítica a la prensa sensacionalista británica, esa que con las portadas ya condena a los sospechosos de haber cometido un crimen antes de que éstos incluso acudan sean imputados o declaren ante un juez. ¿Busca la serie denostar a la prensa y los periodistas? Para nada. Una crítica así es tan evidente que sería absurdo no hacerla, ya que cuando hay un suceso la mayoría de medios van como moscas a la mierda, para así esparcirla por todas las partes a las que llegan sus páginas de papel y enlaces.

El problema es que, con esta apuesta crítica tan válida, parece que se busca hacer un lavado de imagen a la policía, responsable del gran número de filtraciones que acaban con gente que ni ha podido defenderse en las primeras páginas de la mañana. Tampoco es cuestión de ponerse trascendentes, ya que esto no deja de ser ficción. Pero sí es cierto que aquí quedan como los buenos que siempre hacen lo correcto. No está de más hacer una crítica a cómo funcionan realmente algunas comisarías.

2Sus escarceos con el mundo de los médium y la gente que dice «ver cosas» es lo que suele descolocar más. Cierto es que no hay que juzgar a nadie por las apariencias, pero tampoco hay que creerse las afirmaciones de alguien que dice haber contactado con alguien muerto. Es simplemente una locura. ¿Por qué lo hace Broadchurch? Porque los guionistas saben que en todos los lugares hay personas así. E incluirlas en la historia le otorga aún más realismo a su trama.

La serie es lo mejor que se puede ver en la actualidad en la televisión. Muchos ya la habíamos visto por internet, dado que Antena 3 no se ha decidido a estrenarla hasta un año y medio después de haberla comprado a la ITV. Lo que sí os recomendaría a los que la veáis los miércoles por la noches es que renunciéis a la versión doblada. Decid NO a ese doblaje que acaba con la idiosincrasia de los actores. De hecho, en el propio guión hay referencias al acento escocés de David Tennant que con el doblaje quedan inservibles. Pero aunque queden absurdas, dichos diálogos sobre su acento entran en la versión española, aunque sea con calzador. Parece mentira que algo tan evidente no se tenga en cuenta.5

Aún con todo esto, y si es posible en VO con subtítulos, no os perdáis Broadchurch. Solo las interpretaciones lo merecen. Especialmente la de Tennant, que es el mejor actor de la actualidad junto a Benedict Cumberbatch e Idris Elba.

Por cierto, Antena 3, ¿qué fomenta más las descargas de internet? ¿Emitir una serie un año y medio tarde después de tenerla en el cajón todo ese tiempo? ¿O emitirla poco después que en su país de origen?

 

[Actualización 20:00: Me cuentan en Twitter que Antena 3 ayer dejó ayer sin emitir 15 minutos del cuarto episodio de la serie. O fallo técnico, o torpeza. Y si es lo segundo, esto pasa por querer poner en parrilla dos capítulos seguidos de una serie y no prever que se te puede ir la hora entre publicidad y otras historias. Aunque no es la primera vez que pasa en la tele en España: Cuatro ya lo hizo con episodios de Homeland. Luego se quejan de las descargas].

Colin Farrell y Vince Vaughn en True Detective: un grave error de la HBO

Error. Equivocación. Torpeza demencial. Movimiento desagradable. Maniobra nociva. Así, y de muchas maneras más, se puede llamar a la decisión que ha tomado la HBO de fichar a Colin Farrell y Vince Vaughn para protagonizar la segunda temporada de True Detective.ColinFarrell07TIFF

Que tras meses de rumores en los que sonaron todo tipo de nombres, incluso el de imposibles como Brad Pitt, al final se haya firmado a estos dos para una serie que recibe tanta atención y cuyo elenco está pensado para los actores de Hollywood es una decepción. Un fallo que nadie se esperaba y que resta mucho atractivo a una ficción que fue capaz de deslumbrarnos. Y es que la presencia de ambos provoca que surjan las dudas sobre si el argumento que adelanto Nic Pizzolatto, que volverá a estar al frente del guión, será el que ofrezca la serie o no.

Vayamos por partes: no hay que caer en la comparación de Farrell y Vaughn con McConaughey y Woody Harrelson. Los segundos son mucho mejores actores que los primeros, y lo han demostrado dentro y fuera de True Detective. No se les puede equiparar de ninguna manera. Sería tramposo, puesto que no tienen nada que ver. Hay que ir al fondo, y ahí es donde entra la cadena: la HBO o no ha querido o ha sido incapaz de mimar el que ya es su gran producto estrella junto a Juego de Tronos. Y lo ha rematado con el fichaje para dirigir los dos primeros episodios de Justin Lin, responsables de varias entregas de Fast & Furious. Esto último no es ninguna tontería: Cary Fukunaga hizo un trabajo excepcional en la primera temporada. Y Lin no es precisamente un director que enamore.

VaughnPero, ¿son malos actores Colin Farrell y Vince Vaughn? El primero no. Es capaz de lo mejor y de lo peor. Lo ha demostrado en películas como Escondidos en brujas, donde está muy bien y dejó claro que sabe poner cara de estar chalado. Más allá de cumplir ese requisito imprescindible para esta serie, el cómo desarrollará su interpretación es un enigma. Pero que se adelantase a la cadena al anunciar su fichaje ya indica que sigue igual de bocazas y poco profesional que siempre. Veremos cómo se comporta trabajando.

El problema principal es Vaughn, que no tiene pase alguno. Para empezar, que ni se ponga sobre la mesa que McConaughey venía de hacer comedias tontas como él. El nuevo protagonista de True Detective lo hacía mal hasta en esas mismas películas, y aún no comprendo que ese tipo haya seguido haciendo cine con lo limitado que es. Lo que nos vamos a encontrar es a un tipo de dos metros que carece de expresión corporal y facial, y que tampoco es un hacha con los diálogos, los cuales ejecuta sin gracia alguna. Un actor que es puro mármol, vamos.

A pesar de todo lo anterior, y como es obvio, no vamos a dejar de ver True Detective. Lo que muchos sí haremos es presentarnos ante ella con ciertas reticencias por la actuación de ambos, todo lo contrario que con Harrelson y sobre todo McConaughey, donde el sentimiento era de expectación. El tiro en el pie que se ha dado la HBO es evidente.Fast and Furious 6

Lo peor es que las decepciones pueden continuar: falta por conocerse el resto del elenco, y sobre todo una o dos protagonistas femeninas. Entre las que suenan, esperemos que las que mejoren este desastre sean Rosario Dawson, Oona Chaplin o Jessica Biel.

Los papeles de Vaughn y Farrell en la serie

Los roles de los nuevos actores principales de la serie ya fueron anunciados ayer por la HBO junto a la confirmación de sus nombres.

Así, Farrell interpretará a a Ray Velcoro, un detective tribulado y muy profesional aparentemente abrumado por la corrupción de sus superiores, que están bajo las órdenes de un mafioso.

Por otro lado, Vaughn dará vida a Frank Semyon, un criminal de toda la vida que decide pasar a la legalidad con sus negocios pero que en su objetivo tropezará con el asesinato de su socio principal.

Colin Farrell y Vince Vaughn protagonizarán la segunda temporada de True Detective

Ahora sí es oficial. Colin Farrell y Vince Vaughn serán los protagonistas de la segunda temporada de True Detective, según ha informado la cadena HBO.Vince_Vaughn

Farrell (Escondidos en Brujas, Alejandro Magno) y Vince Vaugh (De boda en boda) sustituyen así a Matthew MacCounaghey y Woody Harrelson como pareja principal de la serie de misterio.

12Colin Farrell será Ray Velcoro, un detective rodeado de la corrupción de sus superiores; Vince Vaughn, por su parte, encarnará a Frank Semyon, un criminal que se ve salpicado por la muerte de su socio.

El adiós prematuro de Boardwalk Empire

Son pocas las series que terminan cuando están en su mejor momento. Esto, que puede interpretarse como una ventaja al marcharse en su etapa de máximo apogeo para dejar el mejor recuerdo posible, también nos arrebata futuros capítulos que serían tan buenos como los que hayamos visto. Boardwalk Empire lleva solo dos capítulos de su quinta y última temporada, y solo con estos ha quedado bien claro que no era su momento para irse. Que la HBO se equivoca dejándola escapar de esta manera. Y que nos van a fastidiar por provocar su adiós.1

La serie ambientada en la etapa de la ley seca en Estados Unidos (1919-1933), y que se ha convertido en la mejor para conocer la evolución de varios gánsters míticos como Al Capone, Lucky Luciano o Meyer Lansky, llegó a nuestras vidas en 2010 para quedarse durante muchos años. No digo que hubiese hecho falta estirarla hasta las 10 o 12 temporadas. Pero es que ha sido de las pocas en superar la barrera psicológica de la tercera o cuarta temporada. Ahí es cuanto todas empiezan a flojear y a ofrecer signos evidentes de desgaste, ya sea porque las ideas escasean o las tramas no dan para más. Tim Van Patten, Terence Winter y todos los que están detrás saben que tienen un diamante en bruto, capaz de relatar decenas de historias bajo el mismo fondo gracias al componente histórico. Y lo han exprimido en estos años.

2¿Por qué se marcha Boardwalk Empire? La razón oficial es que hubo un acuerdo entre la cadena y los responsables de la serie para finalizarla un año antes de lo previsto, ya que todo apuntaba a que tendría seis temporadas. La oficiosa es que no se ha convertido en un súper producto con un impacto internacional que provocase conversaciones todas las semanas. La HBO quería que fuese la nueva Los Soprano, que se acercase al nivel mediático de la ficción creada por David Chase. Y pedirle eso a cualquier serie es como querer encontrar el monstruo del Lago Ness. Hay que estar muy loco para poner esa exigencia encima de la mesa.

Aún con el listón imposible que tenía, Steve Buscemi y el resto del reparto han realizado interpretaciones soberbias y cargadas de calidad, hasta el punto de dejar varias escenas para el baúl de lo mejor que se ha podido ver en televisión. Las decenas de secundarios que han ido pasando por sus capítulos han dejado huella a su manera. Sería difícil quedarse con solo uno en otras circunstancias, pero el Gyp Rosetti de Bobby Cannavale en la tercera temporada necesitó solamente 12 capítulos para ser uno de los mejores villanos de la televisión en estos últimos años. Que  ganase el Emmy era una cuestión de justicia, y que se esté haciendo un hueco en Hollywood, evidente.p191dfsoegh9k11p9ml11vqr1rof7

El caso de Cannavale caso no es único: en Boardwalk Empire solo participan bestias interpretativas. Ahí tenemos a Michael Shannon (Nelson Van Alden), Kelly Macdonald (Margaret Thompson), Vincent Piazza (Luciano), Stephen Graham (Capone), Michael Stuhlbarg (Arnold Rothstein), Patricia Arquette (Sally Wheet), Michael Kennet Williams (Chalky White) o Jack Huston (Richard Harrow). Solo se consiguen semejante elenco con un equipo de genios detrás de las cámaras, empezando por Terence Winter y acabando por Martin Scorsese y Mark Whalberg.

3Elegir 1931 para la despedida, cuando todas las cartas están sobre la mesa y la mayoría de los jóvenes aspirantes que hemos ido conociendo ya son unos criminales hechos y derechos ha sido el otro acierto. El primer episodio de esta quinta entrega, dirigido por Tim Van Patten (quién si no), es de esos que hay que venerar y poner cómo ejemplo de lo que es buena televisión. El poder de los personajes y su manera de ejecutar los guiones provocan una historia dramática en la que la acción aparece en su justa medida, sin romper con el ambiente que emociona y pone los pelos de punta. El segundo quizá no haya sido tan impactante, pero la dinámica de contarnos cómo creció Nucky Thompson y los hechos del presente indican que nos están preparando el terreno para algo muy fuerte. Vamos, que va a morir hasta el apuntador. Porque nadie puede discutir que los asesinatos y ajustes de cuentas de la serie son de los mejores que se han realizado.

No podemos hacer más que disfrutar de la que ha sido una de las mejores series de su generación. Que no se haya llevado premios no significa que sea peor que las que sí. Y quien piense que es una simple historia de mafiosos y violencia no tiene ni idea. La carga dramática de la mayoría de escenas es superior al 90% de lo que se emite actualmente. Lo malo es que al final el nivel mediático, que no las audiencias, acaba pesando. Lamentablemente, sospecho que Boardwalk Empire va a ser la nueva Deadwood: la gente se va a verla y a encumbrarla cuando ya haya muerto. Un reconocimiento merecido, pero tardío y triste.

Nueva temporada de series: despedidas, consolidaciones y estrenos que dan pereza

La nueva temporada seriéfila está más que comenzada. Las novedades del curso 2014/2015 ya han empezado a estrenarse, y las que series que ya conocíamos van regresando a cuentagotas. El interés en esta etapa televisiva lo podemos reducir a tres claves: la despedida de varias míticas, la consolidación o no de varios éxitos con solo un año de vida, y el estreno de ficciones que ya cuentan con antecedentes o reminiscencias.gotham-mckenzie-gordon-set1

Aparte de los tres grupos anteriores existe otro que hace no muchos años tenía más peso que cualquier otro: las que tenían argumentos inéditos. Algo que se ha ido perdiendo en favor de spin-offs, adaptaciones de otros países o en el trasvase de las historias (o ambientes) del cine para transformarlas en episodios. Si seleccionamos algunos ejemplos, esta tendencia no ha sido nociva, ya que nos ha traído grandes sorpresas como HannibalFargoPero creo que todos empezamos a extrañar en la televisión estadounidense argumentos rompedores y sorprendentes. Por suerte, aún nos quedan los británicos, que tienen material de sobra por el momento para deleitarnos.

Con todo lo anterior, repasemos lo que nos encontraremos este año:

Las que se van

1En este apartado hay dos protagonistas indiscutibles: Boardwalk Empire y Sons of Anarchy. La primera porque la HBO ha decidido acabar con ella en su quinta temporada de forma sorprendente, y la segunda se marcha tras cumplir el ciclo de siete años que su creador, Kurt Sutter, dispuso desde el principio.

Lamentablemente, en España no somos conscientes de lo que supone el fin de ambas. Es el fin de dos de las mejores series de los últimos 10 años, y que en otra época habrían entrado en el club de las mejores de la historia. Ahora, con tanta competencia en Estados Unidos y en otros países, en el resto del mundo han pasado demasiado desapercibidas para lo que merecen.

Escribiré un post de cada una en estos días, por eso no me quiero extender demasiado en lo que supondrá su adiós para la televisión. Y si no las habéis visto nunca, tardáis. No os arrepentiréis.

Ah, tambíen acaba The Newsroom. Sí, le han regalado una temporada de despedida.

A consolidarse2

En los tres meses y medio que quedan de 2014 hay tres ficciones que estrenan su segunda temporada y que tienen en su mano meterse en la lista de imprescindibles de cualquiera.

En comedia, la que destaca es Brooklyn 99. Quizá fue la mejor comedia larga de estreno que pudimos ver la temporada pasada. Andy Samberg y todos sus compañeros de reparto están muy divertidos y logran un ambiente ideal para entretener y divertir en 20 minutos.

Las otras dos son británicas. La primera es Peaky Blinders. Reconozco que me aburrí, pero sería idiota si no reconociese lo bien hecha que está y la calidad de su reparto. Simplemente la trama no supo engancharme. ¿Por qué la incluyo, a pesar de que no me acabó de convencer? Pues porque le voy a dar una segunda oportunidad. No conozco a nadie que tuviese la misma experiencia que yo con ella. A lo mejor me pilló en mal momento, vete tu a saber.

The FallLa otra sí supo captar mi atención, y de qué manera. La culpa la tuvieron sus dos magnéticos protagonistas. Sí, hablo de The Fall y de Gillian Anderson y Jamie Dornan. Stella Gibson y Paul Spector lograron ser la pareja de antagonistas más atractiva del año, y la caza de una al otro enganchó como pocas. Es cierto que la serie es muy lenta, y que se echa en falta algo de ritmo hasta en las escenas de crimen. Pero es que todo están tan bien hecho, contado de la manera más elegante y a la vez cruda posible, que es imposible dejar de mirar. Además, con esto de Dornan sea Christian Grey en las películas basadas en el bet-seller de E.L. James, su audiencia va a aumentar de forma espectacular. Espero que esto no distraiga a los guionistas del camino que iniciaron.

Faltan otras sobre las que no se sabe nada: Dates The Wrong Mans. Y me fastidia desconocer si tendrán segunda temporada o no, y si es así, cuándo. Que no nos las quiten.

Novedades: del interés contenido a la pereza máxima

En estos meses no habrá grandes estrenos que nos provoquen un hype desaforado. Lo único que me llama la atención es Gotham, que relata los años de infancia de Bruce Wayne tras el asesinato de sus padres y los acontecimientos que marcaron su vida antes de convertirse en Batman. Creo que muchos estamos interesados en ella por culpa de la trilogía de Christopher Nolan.4

Por lo demás, todo lo que sale de Reino Unido es lo que me resulta más atractivo sobre el papel y los teasers. Así, voy a ver Cilla, una especie de biopic de la presentadora Cilla Black, y que protagoniza la diosa Sheridan Smith; Glue, que trata sobre el asesinato de un niño en un pueblo pequeño, a lo Broadchurch; Our Girl, con Lacey Turner y Iwan Rheon en un drama de una chica que decide buscarse el futuro en el ejército británico; y The Driver, con David Morrissey como un taxista que se mete en problemas.

5El resto de estrenos, a falta de que salga algo que me devuelva la fe, me dan bastante pereza. Empezando por las adaptaciones americanas de Pulseras Rojas Los Misterios de Laura, siguiendo con Gracepoint (remake de Broadchurch), lo nuevo de Shonda Rimes (How to get away with murder) , el regreso de Katherine Heigl en State of Affairs, la Stalker de Dylan McDermott, hasta la nueva de zombis llamada Z Nation. Llamadme hater, pero es que me cansa ver siempre lo mismo. Por vosotros me las tragaré, por supuesto.

Os toca a vosotros: ¿qué queréis ver / estáis viendo en este inicio de temporada?

 

P.D. Perdón por la ausencia. Me estoy adecuando a nuevos horarios de trabajo, y el tiempo de escribir me lo quita ver series, y viceversa 🙂

VÍDEO: El final alternativo de Cómo conocí a vuestra madre

¿A que Cómo conocí a vuestra madre hubiese sido mejor con este cierre?

True Blood o cómo desangrarse hasta la vergüenza ajena

Hace unas semanas, publiqué un post en el que apostaba por ver True Blood hasta el final. Sabía que había entrado en decadencia, que ya no era la serie divertida y con la que pasabas una hora de desconexión total por haberse empeñado en buscar una profundidad que nunca podía tener, y que hasta la premisa del guión había dado un giro de 180 grados provocando que perdiésemos el interés. 1

Lo bueno que tenían los vampiros y demás freaks de Bon Temps era que lograban que nunca te aburrieses. Pasabas los capítulos sin mirar el reloj, y mucho menos se te ocurría pausarla. Todo ocurría a un ritmo adecuado, y en cualquier momento podía aparecer una nueva locura argumental que nos continuaría atrapando para los próximos episodios. Así ocurrió en las cuatro primeras temporadas, sobre todo gracias a los misterios y villanos que surgían en cada entrega.

2Todo eso cambió en la quinta temporada, cuando apareció en pantalla la famosa Autoridad Vampírica en su máximo esplendor. Fue en este momento, en el que se apostó por figuras divinas y libros proféticos, cuando True Blood comenzó a decaer. Al menos, los 12 episodios de aquel 2012 no aburrieron y aún entretenían. Pero todos sabíamos que ya no era lo mismo. La serie estaba empezando a colapsar, y muchos sospechábamos que debería haber acabado tras cinco años de emisión. La razón: Alan Ball, su creador y responsable principal, se marchaba, dejando en manos de otros la sexta y séptima temporada. 4

La salida del showrunner que logra que una serie llegue a lo más alto suele provocar en ésta un bajón considerable y una pérdida de calidad notable. Como a True Blood, le pasó a Dexter, y esperemos que no ocurra lo mismo con Ray Donovan, que será la siguiente en sustituir a su productor ejecutivo. El caso de los vampiros es aún más lacerante, dado que todos sus protagonistas continuaban y no se habían producido bajas importantes en los cinco años que llevaba.

La sexta entrega fue un despropósito que aún lograba embaucarnos y llamar nuestra atención. Y eso que Bill Compton como un dios y la incipiente relación entre Sookie Stackhouse y Eric Northman no colaban ni de broma. A pesar de ello, ahí estuvimos, con la esperanza de que la séptima y última fuese la del desquite y la catarsis.

6Tal recompensa no ha llegado: la séptima temporada de True Blood ha sido la peor de todas. Nunca pensé que podría aburrirme viéndola. Que iba a pasar tanto de ella, dejándola aparcada y solo retomándola por pura costumbre.

Las razones anteriores podrían ser suficientes para explicar su desgracia, pero puede haber más. Por ejemplo, que la serie empezase a tomarse en serio cuando lo que ha ofrecido siempre, y que le sirvió para engancharnos, ha sido su locura y ritmo. La ambición por convertirse en un producto que podía tocar palos como la política, aunque sea entre los vampiros, fue la estaca que provocó que se desangrase hasta la vergüenza ajena y la true dead de su final. Y es una pena.5

True Blood ha sido la única serie que me ha dado por ver en una pantalla grande. Me encantaba hacerlo. Disfrutaba como un niño con villanos como Russell Edginton o con las bobadas de Jason Stackhouse. El último capítulo de su historia lo vi en un portátil antiguo.