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París, 42 años después

EFE/Ian Langsdon

Entre estas dos imágenes han transcurrido 42 años. La primera está tomada durante las revueltas parisinas de mayo de 1968; la segunda, hace una semana, en la capital francesa. Ambas retratan un sentimiento común entre la juventud de entonces y la de ahora. Aquellos manifestantes podrían ser los abuelos y las abuelas de los jóvenes que protestan ahora, pero  hay una energía que los une: el inconformismo, el no estar satisfechos de cómo se están haciendo las cosas, de cómo se gobierna y de cómo se gestiona el futuro, su futuro.

Ideología aparte, que es materia de tertulianos y no de este blog, ambas fotos son la imagen viva del transcurso de los tiempos, de la moda, sí; y de las formas, también. Ahora se ven pelos más largos, frente a los tupés de antaño, pero ni una chaqueta, ni una corbata, que pasaron a la historia hace tiempo entre los estudiantes. Los jerséis de cuello vuelto han sido sustituidos por camisetas, negras, rojas, de manga larga, con escote o sin él. ¿Existían entonces las pegatinas? ¿Conocían las pinturas lavables para escribir NO en el rostro?

Fijaos en los bolsos, en el de la chica de camiseta roja que levantaba sus brazos y gritaba con energía hace unos días. Ahora, buscad el de la joven de peinado pizpireto de hace casi medio siglo, abajo, a la izquierda. Ese asa muñequero imposible comparado con el de hombro de nuestra coetánea. Ese reducido habitáculo frente al enorme espacio que se intuye en el moderno. Y debe pesar, por la forma en que se le hunde en el hombro a la chica: ¿llevará el portátil, el ebook, la cámara de fotos digital? No lo sabemos, pero entonces lo fliparían con los pedazos de cámaras digitales (dos) que se aprecian en la fotografía más actual. Pixels, megapixels, zoom ópticos, memorias que les harían perder la memoria… Las pulseras, los collares, la bisutería de mercadillo se impone hoy en día, frente a la austeridad de entonces. Lo mismo que las banderas: más ahora, y más coloridas, mejor manufacturadas.

Las mismas calles, los mismos impulsos, las mismas ganas de que las cosas sean de otra manera. En el año 2050 nuestros nietos posiblemente tendrán otra foto que podrán comparar con éstas. ¿Qué verán en ella? ¿Se habrá puesto de moda la corbata otra vez, o el jersei de cuello vuelto? ¿Pensarán que todo sigue igual, que todos los esfuerzos son vanos? ¿Querrán cambiar el mundo?

Sí, seguro que sí, los jóvenes querrán cambiar el mundo ahora y siempre.


11 comentarios

  1. Dice ser Sancheski

    Bravo por los sindicatos franceses, tanto de trabajadores como de estudiantes. Son un ejemplo para países que como España andan adormilados y acobardados. Luego pasa lo que pasa. Por cierto, cuando Sarkozy cogió el poder decía que el mayo del 68 fue innecesario, para innecesario el.

    28 octubre 2010 | 23:35

  2. Dice ser uno de dos

    ESTA DEMOSTRADO QUE MAYO DEL 68 NO FUE NADA, QUE CASI TODO ESTA ORQUESTADO.

    ES UN MITO DE LA NADA, NO CAMBIARON NADA.

    28 octubre 2010 | 23:56

  3. Dice ser uno de dos

    Pues como muchos jovenes cambiaran el mundo a su manera, aun estaria peor.

    ¿LOS NINIS Y CHELIS CAMBIANDO EL MUNDO?

    Anda y vete a peder fuerte.

    28 octubre 2010 | 23:58

  4. Dice ser Bruno

    Vivan los revolucionarios que los conservadores solo quieren conservar la injusticia.

    29 octubre 2010 | 0:59

  5. Dice ser Una de tres

    Fuera neoliberales.

    29 octubre 2010 | 1:00

  6. Dice ser Fósil Viviente

    Antes al menos se tenian ganas de hacer cosas y como han comentado estarán las banderas mejor manufacturadas ahora pero las verdaderas banderas son trapos improvisados pintados de colores como los de esa foto del 68.

    –Las banderas de mi casa son la ropa tendía.
    En mi casa, las banderas son los pájaros sin amo,
    y una chica, qué ligera, salta del bus a la acera.
    En mi casa, las banderas son de todos los colores:
    son el amor y la lluvia en noches de luna lunera.
    En mi casa, las banderas están hechas de agua pura;
    son los duendes del parque, que registran las basuras.
    Las banderas de mi casa son la ropa tendía.–

    29 octubre 2010 | 1:25

  7. Dice ser sicologo del castin de GH

    a la morena del brazo en alto le echaba 68 polvos para celebrar la efemerides.

    29 octubre 2010 | 1:42

  8. Dice ser Jorge

    Primera foto: blancos imbecilizados por el marxismo y la progresía campantes en las aulas.

    Segunda foto: mestizos imbecilizados y bastardizados por los errores de sus padres, la televisión, la castración y la impotencia inoculadas en toda Europa.

    De mal en peor. Menos mal que una juventud resiste y aflora, pese a todo y a todos, y el movimiento vuelve a resurgir.

    Algún día, no muy lejano, volverá a triunfar, y sus banderas ondearán de nuevo, trayendo una nueva primavera europea.

    29 octubre 2010 | 2:28

  9. Dice ser Sin animo de ofender

    Jorge eres un reaccionario. El marxismo no se, pero el neoliberalismo hace estragos en algunos. No se que entenderás tu por una juventud que resiste según lo primero que dices, supongo que una juventud como la de democracia nacional me temo. Que sepas que cuando se tienen esas ideas nunca se es joven.

    29 octubre 2010 | 4:12

  10. Dice ser Angel

    Desgraciadamente el sindicalismo y la respuesta ciudadana española tiene mucho que aprender todavía de la implicación social francesa, referente mundial.

    29 octubre 2010 | 9:06

  11. Dice ser Jorge

    A Sinanimodeofender: el neoliberalismo se ha cargado el mundo…con la inestimable ayuda (inconsciente) de estas generaciones de «Mayo del 68».

    Todos querían sueños y playas debajo de las piedras, y no había más que televisores y plásticos con los que contaminar el mundo y tirarlo por la borda en menos de 40 años.

    El mundo antiguo lo habéis cambiado alegremente por adosados para los afortunados, y bidonvilles hasta donde se pierde la vista, y océanos llenos de plástico, literalmente.

    Os felicito.

    Ezra Pound también felicitaba a Mussolini por no haber industrializado Italia.

    29 octubre 2010 | 11:23

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