Se acerca el Mundial y buena parte de los dispositivos tecnológicos que se presentan estos días utilizan ese gancho para intentar elevar su volumen de ventas (estén o no directamente relacionados con el tema).
Una servidora que no sólo no entiende nada de fútbol sino que a fuerza de presionar ha desarrollado una cierta alergia al tema, asiste asombrada a la cantidad de cosas que intentan aprovechar el Mundial de Alemania para ser mucho más vendidas.
Podríamos dividir estos dispositivos en dos grupos: por un lado, los que al menos tienen que ver con televisión, como los descodificadores de TDT. De un mes a esta parte, si alguien quiere venderte un desco te habla del Mundial de fútbol. Conceptos como EPG, doble sintonizador, time-shift, conexión de red, WiFi, salidas USB o grabación digital (lo que realmente importa, vamos) pierden sentido porque parece que lo único que tiene sentido es que sea capaz de sintonizar la Sexta.
También están los televisores LCD. Ahora resulta que si no tienes un televisor LCD no estás preparado para ver el mundial. Y no es que me parezca mal; si gracias al mundial la tecnología se extiende a buena parte de los hogares, bienvenida sea.
Por otro lado tenemos los cacharros que nada tienen que ver con el Mundial: ratones y webcams con el diseño de un balón de fútbol, pegatinas con las banderas de los participantes para pegarlas en el móvil o en el manos libres, e incluso una frontal intercambiable para Xbox 360, un alarde de originalidad.
Todo en los últimos días está relacionado de una u otra forma con el mundial, y el mundo de la tecnología, como era de esperar, tampoco se libra.
bueno, tiene sentido en cierto modo. la tecnología está ligada al marketing promocional y este a su vez es incapaz de despegarse de grandes eventos cercanos al perfil del comercial (hombre de entre treinta y cuarenta años, todo el día con el traje, futbolero, fumador y bebedor, abrumadoramente cafre y desinhibido, a menudo enfermo con dolencias de desarrollo lento que tienden a ser crónicas). por supuesto, los deportes mandan en el marketing en general y en el promocional en particular. muchos de estos artículos se venden a través de la vieja técnica orientada a producto, ya que las grandes marcas han optado por el autobombo, a menudo interrumpido por la falta de sinergia que provoca la presencia de los molestos «productos». todo evento masivo es exprimido para vender prosáicas «unidades» de lo que sea en el cotidiano y poco emocionante canal de ventas. curiosamente, el canal sostiene todo el proceso del marketing, pero eso a los consumidores finales nos importa más bien poco. más bien vemos «mundial por todas partes», desde la lencería barata hasta los televisores de plasma en los que puedes dejarte el sueldo completo de un par de meses o tres.la tecnología es muy dependiente del mundo comercial que habita prácticamente en el canal de distribución y que huele a tabaco, vino, colonia barata e indigestión provocada por una serie de úlceras estomacales incipientes.
26 mayo 2006 | 14:02
Tienes toda la razón del mundo, pero sugiero dejarse llevar por la corriente y aprovecharse de ella. Yo estoy planteándome «comprar» un televisor de 42″ el día que comience el Mundial, para devolverlo a los 15 días por «insatisfactorio», como me permite la ley. ¡Viva la alta tecnología a coste cero!
29 mayo 2006 | 14:57
OWEN AFUERA DEL MUNDIAL BOLUUUUDOJAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAABIEN HECHO POR HIJO De MIL PUTA!
21 junio 2006 | 20:16