Nuestro cuerpo es como una máquina. Hay que engrasarla, revisarla, meterle un buen carburante... Sólo tenemos una, y nunca es tarde para empezar a cuidarla

Entradas etiquetadas como ‘beneficios’

Los beneficios de ejercitarse en el agua

No es nada nuevo, pero sí de relativo reciente desarrollo. En la Grecia clásica ya se realizaban caminatas en el agua para fortalecer las piernas pero, desde hace algo menos de una década, practicar deporte en la piscina está de moda. Eso sí, antes se empleó con bastante éxito en tratamientos de recuperación (fisioterapia) y en la preparación de deportistas de alto rendimiento.

Realizar ejercicios en el medio acuático permite mejorar todas las cualidades físicas (fuerza, resistencia, velocidad, flexibilidad, control del cuerpo), la coordinación, el equilibrio, el ritmo, la agilidad y, por si fuera poco, nos ayuda a relajarnos y reduce el nivel de estrés.

Está técnica acuática permite ejercitar todos los músculos del cuerpo ya que, al suspenderte en el agua y traccionar para desplazarte, se pone en marcha toda la musculatura. El gasto calórico es también mayor en el agua.

Además, el deporte en el agua puede practicarse con cualquier edad y condición física, ya que en el agua el peso de nuestro cuerpo disminuye y, con ello, se reduce el impacto que ciertos ejercicios pueden causar en las articulaciones (por ejemplo, en la gente con sobrepeso).

También, y gracias a la resistencia del agua, en menos tiempo somos capaces de realizar más ejercicio, sin prácticamente riesgo de lesionarnos.

Pero eso no es todo. El agua ofrece otras ventajas ya que, como el peso de todo el cuerpo es menor, la gente con problemas en la espalda ve favorecida su movilidad (además, ayuda a corregir su posición). También ayuda a liberar tensiones y, además, proporciona un suave masaje que estimula la circulación sanguínea.

¿Te gusta hacer ejercicios en el agua, además de nadar? ¿Has probado alguna clase de aquafitness?

¿Por qué es bueno correr?

Correr es uno de los deportes aeróbicos por excelencia. Es una actividad sencilla y económica a la que prácticamente todo el mundo puede tener acceso, adaptándola a nuestra edad y condición física.

Además, correr aporta muchos beneficios a nuestro organismo, uno de los secretos de su éxito.

A nivel articular, y partiendo de la base de que las nuestras están en buenas condiciones (siempre, antes de empezar a realizar un ejercicio, hay que pasarse por el médico, que es quien nos debe dar luz verde para seguir adelante), correr lubricará y hará más flexibles nuestras articulaciones, siempre que lo hagamos de manera habitual y con moderación (los excesos de casi todas las cosas pueden ser negativos), y que al finalizar realicemos correctamente ejercicios de estiramientos.

El trabajo aeróbico produce una mejora de la circulación sanguínea y de la oxigenación de la sangre. También amplía la capacidad de quemar grasas acumuladas.

Para la gente que tenga problemas de coordinación o de equilibrio, correr puede ser una buena forma de mejorar poco a poco estos sentidos.

Por otro lado, un estudio publicado en marzo de 2009 por la revista Medicine & Science in Sports & Exercise, afirma que correr distancias largas sería especialmente efectivo para prevenir la hipertensión, el aumento del colesterol y la diabetes.

El estudio, realizado a más de 100.000 corredores masculinos y femeninos, reveló que los que corrían maratones eran menos propensos a usar fármacos para la hipertensión, el colesterol o la diabetes.

¿En qué te beneficia a ti correr? ¿Lo haces por mejorar tu salud física, mental, porque te gusta…?

Cómo preparar el té verde

Hace unos días colgué un post sobre los beneficios del té verde, y muchos de los que lo leyeron me preguntaron cómo se prepara.

Yo soy una ferviente bebedora de infusiones (ahora mismo, mientras preparo éste, me estoy tomando una llamada Golden Flowers, de Pure Tea), pero tampoco me considero una experta en tiempos de cocción, de reposo, por lo que he buscado en distintos lugares información sobre cómo se prepara adecuadamente un té verde. Espero que a lo interesados os sirva de ayuda.

1. La primera fuente en la que he buscado ha sido el libro Anti Cáncer, del Dr. David Servan-Schreiber quien, tras hablar de los beneficios de esta hierba, nos explica cómo sacarle el máximo provecho: «Dejar en infusión 2 g. de té verde durante diez minutos en una tetera, y beber no más tarde de una hora. Tomar seis tazas al día. No guardar el té verde para después, ya que en cuestión de un par de horas ha perdido todos sus beneficiosos polifenoles».

2. También he encontrado un interesante análisis del té verde en la revista Consumer, en la que recomienda, lo siguiente: «Las catequinas del té verde son solubles en agua, y el grado de extracción de éstas depende del tiempo de contacto de las hojas en agua. Por eso, para aprovechar al máximo las propiedades de cualquier té lo mejor es hacer una infusión larga, de cinco o diez minutos».

Recomienda usar agua mineral, y que ésta no llegue a hervir, ya que la infusión saldría demasiado amarga: «Debe verterse el té en la tetera con las hojas justo antes de empezar a hervir, o en caso de que haya llegado al punto de ebullición, se ha de dejar enfriar un instante antes de verterlas».

Recomienda también unos 2 gramos por taza y dejarlos reposar en agua entre 1 y 3 minutos como mínimo para que se desplieguen los aromas, aunque pueden dejarse en infusión hasta 5 minutos. Eso sí, hay que tener en cuenta que «cuanto más tiempo se dejen reposar, más pronunciado será el sabor amargo».

3. Si tu interés es aprender a hacer un buen té verde japonés, aquí te dejo el enlace a la web tetere.com, en la que explica muy bien los pasos a seguir, con imágenes y todo.

Si eres de los que no les gusta el sabor del té verde (aunque dentro de este tipo de té, hay muchas variedades, con sabores más o menos intensos), puedes añadirle un poco de azúcar, miel, agave, limón o un chorrito de leche.

De todas formas, cuanto menos tiempo lo dejes reposar, más suave será su sabor.

Y a ti ¿te gusta el té verde? ¿Por qué lo consumes? ¿Cómo lo preparas?

¿Qué beneficios conseguiré si practico cardio kick boxing?

Hay algunos aspectos del CKB que son universales, aunque hay otros que van en la interpretación y en el deseo de cada uno. Lo que está claro, es que en las sesiones de esta disciplinas conseguirás quemar muchas calorias (se gastan unas 800 por sesión, frente a las aproximadamente 500 que gastas en una de aeróbic).

Por el tipo de ejercicio que es, también definirás tus músculos en general. La zona que más se trabaja es prácticamente la abdominal, que se podría decir que está la mayor parte de la clase contraída.

El CKB te ayudará a incrementar fuerza y resistencia cardiopulmonar. Conforme avances en este aspecto, podrás realizar clase smás intensas, pero hay que tener cuidado con eso. Siempre que te apuntes a realizar un ejercicio, y más de este tipo, deberías consultar con tu médico (especialmente si tienes problemas coronarios, presión alta, diabetes o colesterol alto).

El cardio kick box también potencia la coordinación y la velocidad de reacción.

Aumentarás tu autoestima… aunque este es un principio aplicable a prácticamente cualquier deporte que practiques.

Ayer, una lectora apuntaba también que, desde que practicaba esta disciplina, se sentía más segura, porque sentía que aprendía defensa personal… fueron varios los lectores que ya le contestaron que esto no es defensa personal, y que es peligroso defenderse cuando te atacan, y más con estos conocimientos… otro día abordaremos esta cuestión.

¿Qué te aporta a ti el CBK? ¿Cómo ha mejorado tu vida, tu cuerpo o tu mente? Si eres de los que no te gusta… ¿qué te hace renegar de esta disciplina?

¿Para qué es bueno patinar?

Todos los deportes tienen alguna parte del cuerpo donde inciden más. En el caso del patinaje, las piernas, las caderas y los glúteos son los más beneficiados, aunque todo el cuerpo mejora su tono muscular, ya que también se trabajan abdominales, cintura, espalda, brazos y hombros.

Además, patinar quema muchas calorías, fortalece el sistema cardiovascular, mejora la resistencia física y el equilibrio, sirve para reducir el nivel de estrés, aumenta la capacidad motriz y, lo que es mejor, resulta un deporte de lo más divertido (en la imagen de abajo, unos niños sevillanos aprenden a patinar).

Patinar durante media hora, a una velocidad constante y moderada, puede quemar en torno a las 300 calorías, mientras que a un ritmo intenso llega casi a duplicarse la cantidad.

Algunos estudios demuestran que, a nivel aeróbico, ofrece los mismos beneficios que correr, con el plus de que no tiene el impacto de este último.

Además, es el propio patinador el que puede elegir la intensidad a la que lo practica, ya que patinar puede ser, desde un deporte relajante a uno de riesgo.

¿Te gusta patinar? ¿Has aprendido de manera autodidacta o con monitores? ¿Lo consideras un buen ejercicio?