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Poner un pie delante de otro nunca tuvo tanta trascendencia.

Feria, feria, vaya pedazo de caseta que…

Lo cantaban  los de las sevillanas y lo hipan los españoles que la oyen, sea en un altavoz en plena feria de su pueblo o sea dentro del coche, que es donde todo español prueba y templa sus posibilidades como en un ataúd insonorizado. Bueno, aparcad la comparación del coche con el cofre del muerto. Dejadlo en campana hermética de grabación y reproducción y fumadero privado. De momento.

Esto de Feria, para gente que no somos de sitios feriales ni de trajes de volantes, se nos presenta más como las imágenes de mercado de ganado a los que sí acudían nuestros antepasados. Con posterioridad y para borrar todo rastro de no deseado ruralismo, que ahora somos clase media, convertimos las ferias en cosas de la maquinaria agrícola. Luego las ferias pasaron a ser encuentro de los emigrados de las áreas metropolitanas, donde todo cristo plantaba la caseta de su asociación, casa regional o xuntanza, a repartir. Fueron los 80 muy del final, los que trajeron una nueva feria: la feria del corredor.

De pequeños íbamos acompañando a nuestros padres corredores a aquellos sitios donde te hinchabas a recolectar pegatinas de marcas deportivas, a ver fotos de participantes con barba y bigotes y camisetas de ellese o de karhu o de le coq sportief, hoy desterradas y substituídas por los nuevos operadores. Se anunciaban los de la SD Correcaminos, los de NY y cuatro más. Con el tiempo aquellos inventos fueron ampliándose y, hoy día, incluso la media maratón de Madrid tiene su recogedero de dorsales y explosión comercial. Fue el otro fin de semana.

El próximo día 14 comenzará la próxima feria. A esta la tienen etiquetada como ExpoDepor. Es la correspondiente a la maratón de Madrid, ella, cuarentona con problemas de identidad y que ve cómo las jóvenes se la están merendando, en cierto sentido. En cualquier caso, los responsables siguen montando variados stands, atracciones varias y hasta coloquios en los que poder sentarse a escuchar un ratejo a los primeros espadas o los expertos en la materia.

Así, los chicos del chándal y el estómago encogido, o sea, los participantes, pueden ir a echarse unos bailes con el escenario, mostrar lo bien que le quedan las nuevas zapas de paseo, o recibir los elogios de los compañeros de entrenamientos en la famosa exposición de barba de dos días y sienes afeitadas donde, a más flaco, más admiración mutua. Allí se sueltan los nervios, allí se encuentra uno en una burbuja en la que ni los compañeros de trabajo aparecen para preguntar a cuánto llegas del primero, ni hay que explicar qué sentido tiene hacer 4×2000 a R3, porque todo el mundo sabe de qué va el meollo. Va de merendarse a la bicha. Llegar a meta después de 42km y luego contarlo.

Pues bien, el jueves 14 por la tarde la Universidad Camilo J Cela organiza un coloquio al que el organizador se le ha ocurrido que yo puedo aportar algo. Nos juntaremos unos pocos ponentes bajo el epígrafe de dudosa utilidad ‘Blogs de Corredores’. Fruto de la mente retorcida de un forero y amigote histórico, seremos tercer o cuarto toro en la feria del próximo jueves 14. El cómo y el dónde y detalles de mucha más utilidad, en breve en la página de la misma feria. De momento, cómo llegar y algo más en este enlace.

De 2010, la UCJC guarda las conclusiones de los coloquios y demás charlas de la expo en su enlace.

Fotitos.

1 comentario

  1. Dice ser Dani

    Espero que esté mínimamente mejor que la feria de la Media… La verdad es que parecíamos sardinas en lata, pero la lata……. una mierda oiga. Cuatro stands mal puestos y con penoso gusto. Por lo menos ésta se celebra en un pabellón como es debido.

    Si me paso será solo por saludarte y ver lo que te has preparado, que me intriga.

    05 abril 2011 | 07:28

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