Runstorming Runstorming

Poner un pie delante de otro nunca tuvo tanta trascendencia.

Krusty Krahe

Goedemorgen, gentes. El debate del día anda tan ocupado por la lista de la selección de futboleros que solamente los más dedicados a la defensa de la fe y las maneras están que trinan por el asunto de la demanda contra el cantautor Javier Krahe y aquel vídeo en el que satirizaba una receta de cocina utilizando un crucifijo con un pollo de granja. Sí, el centro jurídico Tomas Moro se ha lanzado a recuperar la defensa de las ofensas contra la cosa católica y, como informa el sesgado diario Público, han logrado la reapertura de un caso sobreseído en 2007 por el Juzgado de Colmenar Viejo (Madrid) y el juicio oral contra el cantante.

Mira que yo paso por ácido anticlerical, furibunda miasma que odia sin igual la ignorancia y superstición y, si nos diéramos de hostias para ver quién aborrece más las sotanas de colores, sería top five como los Jackson.

Pero (altijd er is een ‘maar’) el asunto de la sátira es complicado, la raya de la que habla algún colega en el debate diario del amigo Manolo Saco o la defensa de los principios estéticos fundamentales es tan fácilmente movible hacia un lado u otro, hacia la fina ironía o el sarcasmo de morro grueso, que muchas veces incurrimos en guisotes que no tienen tanta gracia como se pretendía. Durante bastantes años he sido parte de una revista satírica bastante irreverente, Cibercerdo, y la práctica me ha enseñado que siempre hay que quedarse por detrás de la evidencia del chiste; de otro lado nunca has de tener en cuenta la capacidad del lector/oyente para ajustarte a sus requisitos de acidez. Un día te sorprendes queriendo entender al que adoraba tus azagayas contra los nacionalismos y que ahora te pide que respetes su derecho de autodeterminación. Otro, defendiéndote sobre tu chiste contra los iletrados porque te acusan de burla hacia los menos favorecidos.
Así pues, independencia creativa pero también un filtro previo. ¿Autocensura? En la denuncia de hechos no debe haber censura, la sociedad agradece la misma. En la información, menos aún, ya que todos deseamos el máximo de detalle y análisis. Pero cuando estamos metidos en la creación artística nadie nos obliga a cercenar la obra, pero se quedarán al desnudo las carencias de la misma ya que está sujeta a la percepción sensible del ‘homo iletradus’, a menudo confundido y no preparado para ello. Y en la creación existen mil giros posibles para sorprender y adornar, usémoslos.

Cocinar un estofado usando un madero con restos de mamífero adherido puede ser una buena idea hasta que te cuentan que el personal que se reía contigo ahora te rodea por cristófago. Una línea delicadísima, ya ves.

Yo habría dejado hacerse a Cristo al baño, evidentemente, María.

2 comentarios

  1. Dice ser nacho

    O al ast, recortando un poco el madero transversal para que pudiera girar sin riesgo de trabarse.

    21 mayo 2010 | 10:29

  2. spanjaard

    O thou filthy publican!!! Si es que solo opinais para hacer daño…

    21 mayo 2010 | 10:42

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