… Pero al revés. Hoy he recuperado dignamente del fiasco físico de ayer. He dejado el coche en un extremo de uno de esos recintos donde la gente berrea y se da patadas, 11 contra 11, y he agarrado la Cañada Real Segoviana para disfrutar de aproximadamente 14km en progresión, de 4.40 a 4.09, contra el viento y el agua que se nos ha colado en la sierra madrileña.
Hala, que luego decís que no cuento nada de mi diario de entrenamientos. Exigentes de los cojones. Dejaremos la literatura para el Lunes, así como el repaso de las actividades del fin de semana en el que me espera el Alcampo y una de bicis infantiles en el campiri. Toma, entrenamientos, parte meteorológico y vida familiar en una entradilla. Espléndidos que estamos.
Esos son los entrenamientos buenos… no los de dar vueltas a un cuasi-óvalo cual hamster. De las series hablamos otro día
19 agosto 2006 | 10:04