¡Oh dios mío! Justin Bieber quiere ponerse petado, musculoso, hinchado, ciclarse… Tal y como lo estáis escuchando. El ídolo de adolescentes ha podido al fin conocer a su ídolo, porque las estrellas también tienen ídolos: Arnold Schwarzenegger y le ha pedido consejo para quitarse ese cuerpecito de adolescente flojito y ponerse como un toro. Arnold (mira a quién le ha ido a preguntar) le ha dado además un par de contactos para que se ponga manos a la obra. ¿Se imaginan a Bieber con cuerpo de musculitos de gimnasio? Yo la verdad es que no me hago idea, le faltaría cabeza. ¿No?. Yo siempre pensé que tenía la cabecita muy chica, pero si lo ciclas, apaga y vámonos.
La cosa está en que Justin Bieber nos está perdiendo un poco la cabeza. Su propia madre ha reconocido en una entrevista de televisión que es una edad complicada y una situación compleja la de su hijo, llegando a reconocer que rezaba por él cada día. ¡Reza, reza…! Al parecer las fiestas y las compañías desafortunadas están marcando los últimos meses del chico. Tanto es así que las fotos en las que hemos podido verlo visitando a su ex Selena Gómez, no era más que un día de bajón después de una fiesta. Quería un poco de cariño y apoyo.
El último escándalo protagonizado por el joven ha sido con sus vecinos. Al parecer, éstos están hartos de las fiestas que Bieber monta en su casa. En la última, a la que invitó a más de ochenta personas, un vecino se presentó para dar quejas del escándalo y Bieber lo echo de su casa y le escupió. Esta la cosa como para que recemos todos un poco por él.