Me he dado cuenta en el Rapeadero que hemos hecho muchas cosas mal: nosotros, los periodistas; y todos los que leemos sin atención crítica. Las galletas me vienen esta vez por partida doble.
Todo el día asociando, hablando de bandas, de Ñetas, criminalidad, de leyes oscuras y catacumbas sociales, barrios chungos, marginación, peña chunga, inmigración, cosas chungas, mafias, bla, bla, bla…
Últimas noticias en El País de los chungos, El Mundo de los chungos, La Razón de los chungos, 20 chunguitos… Titulares y más titulares con el único objetivo de esteriotipar, o en su defecto vender periódicos, cargar el muerto a otro para después, una vez leída la noticia, girar la cara hacia otro lado en el que haya mejores vistas.
«No es un problema de ecuatorianos, es un problema de un sistema de miedo y violencia social. Tenemos que involucrarnos. Son situaciones de violencia que se van heredando», dice Ernesto, del Rapeadero.
Y le doy la razón. En realidad, a ninguno, propios y extraños, nos ha salido del forro dedicar un segundo a pensar en que piensa la gente que tenemos alrededor. El marroquí, el dominicano, el bengalí, el nigeriano, nuestro vecino, ese españolito de a pie, de allí en la esquina… A nadie se le para la cabeza en pensar que los problemas de barrio han existido toda la vida, como me recordó Ernesto. Y creo que le contesté que en mis tiempos, cuando era chavalito, en la Cataluña que me acogió, los chungos eran los adolescentes murcianos («los charnegos o castellanots», les llamaban, expresiones no mucho más finas que moro o sudaca). Eran los que iban en “bandas”, y te atracaban, según el esteriotipo social.
Creemos saber que el mundo está lleno de nuevos problemas y violencias; palabrita de Bin Laden. Pero desconocemos que todos somos participes de ello, la violencia la mamamos y la hacemos mamar, desde la casa al colegio y a la televisión, pasando por el trabajo-sí: principalmente en los trabajos o en las ausencia de.., en las calles golpeadas por la violencia económica- para después satanizar a unos chavales o a unos colectivos, a quien sea, a todos, menos a nosotros mismos. Tenemos el mismo comportamiento estanco de la tribu que ellos. Sólo que ellos cantan, escriben canciones, cuentan lo que les pasa, pintan paredes, y hacen música; joder, diría que son unos artistas. Quizá nosotros, eso sí, canalicemos la violencia de un modo más democrático.
Cuando Abdellah me invitó a visitar la escuela de dj’ing, como él la llama, no sabía que me iba a encontrar. Y encontré chavales de barrio, ni más ni menos, con sus movidas, como todo el mundo, tragándose con patatas fritas del McDonald’s mucha mierda que no les corresponde. Después de todo, eso sí, titular es fácil.
Javier Rada
Pues yo os doy las gracias porque reportajes como el vuestro me ayudan a encontrar argumentos en las tertulias familiares, con amigos entre copas, cuando ellos dicen que los inmigrantes son maleantes y ya no sabes cómo explicarles y recordarles a algunos, que ellos también lo fueron.Me llena de esperanza ver que la juventud que nos enseñan en la tele no es sólo violencia, botellón e incultura, es mucho más y no debe serles nada fácil salir adelante, aunque mejor solos que mal acompañados.Mi enhorabuena.
30 noviembre -0001 | 0:00
Repito y hago mío el comentario de una compañera-ayer tarde, en el portal de los fumadores-chungos del diario-:»Javi es como la música de los caballitos».(Y no dejes que nadie te convenza de que el reportaje es un tocho. Tocha es la tristeza)
10 mayo 2006 | 10:45
buenísimo…
10 mayo 2006 | 10:55
Bueno, hombre, tampoco te fustigues. Supongo que la sociedad actual nos obliga a crearnos opiniones y visiones de todo sin antes conocerlo.
10 mayo 2006 | 11:22
eso es, muy buena.rap desde los campos de algodon hasta nuestra era.
10 mayo 2006 | 14:32
Me importa una mierda lo que piensa el capullo que me roba el reloj. Sois asquerosamente progres. Cuando yo sea rico y tenga la vida resuelta y me paguen por decir tonterías politicamente correctas también diré cosas así. seré de los vuestros.
10 mayo 2006 | 20:33
Todas las explicaciones, como decia Cortazar, estan en un basural. Si esto te vale para lavarte las manos, la cara, quedarte tan a gusto, y a la vez subirte un poco el ego con lo que te dicen de caballitos y música tus amigos, pues ole con ole por ti. Pero lo nocivo y venenoso de tu parrafo:Por fin representando; rollo puro Public Enemy. Ahora que las cosas andan calientes por Lavapiés. La semana pasada un joven ecuatoriano que frecuentaba el Casino de la Reina murió acuchillado en un enfrentamiento.Eso sigue ahi, sigue viendolo toda persona que entre en el portal y sigue creando ideas erroneas con respecto a estos chicos y al proyecto. Proyecto que auna el esfuerzo diario de muchas personas que con un parrafo se va al carajo. Llevo dos semanas enviandoos correos respecto a esa noticia. A vuestras no respuestas las llamo yo COMUNICAR. Ole con ole. Como dicen en algunas tierras del sur. ¿Yo?, yo argentino.Cuando hablais de verdad se os llena la boca.Ah por cierto, os escribo como representante de prensa del Rapeadero de Lavapiés.Un cordial saludo.
01 agosto 2006 | 11:29
A nuestra ausencia de respuestas se llama vacaciones. Y las cosas como son Carlos, o como eran en ese momento. No hay nada nocivo en ese párrafo. Public Enemy se enfrentó a la marginalidad que se vivía en determinadas calles e hicieron arte con todo ello. Nunca llueve a gusto de todos. Si eres el representante de prensa del Rapeadero y hablas en nombre de todo el grupo acepto gustoso tus críticas: te aseguro que se podía haber hecho más sensacionalista el reportaje… De todos modos habla con Abdellah, le cuentas las críticas y ya me las contará él a mí. No había mala intención. Y no tiene nada que ver con el ego, tampoco caigas tú en los esteriotipos que pesan sobre los periodistas.un cordial saludo
07 agosto 2006 | 13:10
Me alegro que tengas vacaciones Javi, te agradezco la respuesta. Lo nocivo de ese parrafo que tu dices que no es tal, no está en los Public Enemy, está en el asociar la noticia del Rapeadero con el asesinato de un chaval.No tengo que hablar con Abdellah para comunicar contigo, puedo dirigirme a ti directamente, si te molesta lo lamento, pero es un derecho que tengo para ejercer. Te vuelvo a repetir lo mismo de antes, mucho esfuerzo hay en ese proyecto.No me gustan las generalidades ni los estereotipos, llevan a la confusión. De todas maneras los periodistas se lo han ganado a pulso. En el imaginario colectivo se crean una serie de ideas muy erroneas de lo que sucede en el mundo. Evidentemente, no cabe en 20 minutos.Evidentemente tambien todo es relativo, podría el reportaje haber sido más sensacionalista, podría haberlo sido menos.Kuma en mandinga es la palabra por excelencia. Aquella que no miente ni tergiversa. Kuma es gesto constructor y acto recreador.muchas gracias por tu tiempo.
07 agosto 2006 | 16:02
Entiendo lo que quieres decir. Y no me molesta en absoluto que ejerzas tu derecho, llámalo conversación si quieres, yo lo prefiero.En ningún momento está asociado el rapeadero con el asesinato de ese chaval en el reportaje. El párrafo es descriptivo, no asociativo. El chaval frecuentaba el casino de la reina (el parque), y ocurrió una semana antes de la publicación de la noticia. Es la violencia que se ve en la calle, concretamente, en ocasiones, en ese mismo parque, es uno de lo motivos (a mi juicio) por lo que es tan importante una labor como la vuestra. ¿Qué sentido tendría un rapeadero en Serrano? El reportaje habla de personas que en un ambiente conflictivo sacan lo mejor de ellos mismos y se rebelan contra lo que les ha tocado vivir: si acaso es ingenuo o romántico, más que amarillo. En ese momento, les tocó vivir eso. De eso se hablaba. Eso ocurría en el barrio: tanto para los chavales con flow que soltaban sus rimas en el interior del edificio, como para la vecina del quinto que les pone mala cara al verlos pasar. Ninguno de ellos estaba relacionados con ese suceso y sin embargo a todos les tocó vivirlo de cerca.Mira, al hacer el reportaje sabía que nadie acabaría contento. Unos, por ser demasiado amarillo, otros por ser demasiado gris. Es un tema muy difícil. Tu queja puedo compartirla: porque me consta que hay mucha ilusión y empeño en ese proyecto, y estoy convencido de que tirará adelante. Lo único que te puedo decir es que lo hice con toda la honestidad que me permite mi cabeza y mis prejuicios, y lo pelee a mí manera. Tú lanzas los fuegos contra mí por un párrafo, cuando un párrafo no es nada sin su conjunto, cuando una pieza no construye nada sin el resto. El periodismo en sí muchas veces ni miente ni tergiversa (la teoría de la conspiración sólo ocurre a veces), simplemente enfoca y a veces el enfoque es el equivocado o se enfoca realidades que nos gustaría que no se vieran relacionadas. No es la verdad, es un punto de vista. Y sería ingenuo buscar en él la kuma, la baraka o el revelación celestial. Sirve para lo que sirve… no voy a ser yo el que lo defienda como un ideal de conocimiento. Como bien dices, nos lo hemos ganado a pulso. Y como bien dijo Cortázar toda explicación está en un basural.saludos Carlos y gracias por escribir
07 agosto 2006 | 19:24
También yo prefiero conversación Javier, evidentemente creo que estamos deacuerdo en muchos puntos.No digo que el párrafo sea todo, ni que directamente la gente vaya a entender eso. Pero en mi opinión, según está escrito es dificil saber de que se trata y quizá invita a pensar que los chavales del rapeadero son los responsables. A eso me referia. Por ponerte un ejemplo, una compañera tambien periodista, que tambien estaba trabajando un reportaje sobre el rapeadero, trás leer la noticia dudaba acerca de quienes habían sido los responsables del asesinato del joven ecuatoriano.No hay que atar las cosas con palabras, hay que dejarlas mecerse como canta en un poema Yese Amorý.Lamento las confusiones que hayamos podido tener. No tengo nada contra ti Javier, de hecho me gusta como escribes y si en algún momento te sentiste ofendido te pido mis más humildes disculpas. También me alegro que hayas hecho tú el reportaje (aunque tengamos diferencias al respecto).Solamente queria comunicar que hay personas del entorno que han resultado perjudicadas por el tratamiento que ha recibido en los medios la noticia.Kuma no es una palabra sagrada, es una actitud de vida, al menos asi lo entiendo yo.Gracias por tu atención Javier, nuevamente te pido disculpas por los fuegos de artificio y espero que esta interesante conversación continue.un saludo
08 agosto 2006 | 13:22